El restaurante Golden es un lugar lujoso con una decoración elegante y moderna. Las paredes son de un color oscuro y brillante, y el suelo es de madera oscura. Hay grandes ventanas que ofrecen una vista impresionante de la ciudad. Las mesas están cubiertas con un mantel blanco y servilletas de tela. En el centro de cada mesa hay un arreglo floral verde. Este restaurante era muy conocido por transmitir una atmósfera tranquila y sofisticada, perfecta para una cena romántica o una reunión de negocios.

Jungwon sabía que este restaurante era uno de los favoritos de su madre. Además que su madre tenía una estrecha confianza con los dueños de ese restaurante. Él tampoco se quedaba atrás, aunque no era cercano a los dueños y ejecutivos de ese lugar, se llevaba bien con los empleados. Pero eso era algo que a su madre no le gustaría saber.

Había llegado temprano. Su madre le había dicho que la familia de Park Sunghoon había retrasado el encuentro para las doce y media del mediodía. Por ello, Jungwon había citado a Jay a las doce del mediodía.

Ese lugar estaba vacío porque su madre lo había reservado exclusivamente para ellos. Sin embargo, Jungwon les había pedido a los empleados que dejaran pasar a cierto chico de nombre Park JongSeong.

Miró su celular en la muñeca de su mano mientras en su otra mano tenía una copa con vino.

Escuchó unos pisadas detrás de él. Jungwon no tuvo la necesidad de girarse para mirar hacía atrás porque a través de la ventana pudo ver la silueta del DJ de Luminiscencia, quién se acercó a él y se paró a su lado izquierdo.

— Hola, Jungwon.

— Saludas de manera muy informal a tu jefe - Jungwon comentó y bebió un pequeño sorbo de su vino mientras guardaba su celular.

— Pensé que podríamos dejar las formalidades en este momento. Además, estamos solos - Jay miró a su alrededor —. Pensé que este lugar estaría lleno de personas.

— Este lugar está reservado por dos horas.

— ¿Lo reservaste para estar solos? - Jay preguntó y volvió su mirada a Jungwon —. Está bien. Puedo pagar la reserva del restaurante y—

— No es necesario, eso está pagado por mi madre.

— ¿Tu madre? - «¿HeeSeung no dijo que la madre de Jungwon es el mismo diablo en persona? Parece que ya me gané a mi futura suegra» pensó Jay.

— Sí - Jungwon apartó su mirada de la ventana para ver a Jay. Lo analizó de pies a cabeza.

Jay vestía zapatos negros, pantalones negros y una camisa negra. Lo que más resaltaba de él era su collar bañado en oro y las cadenas de oro que tenía alrededor de las muñecas de sus manos. Su cabello estaba perfectamente peinado y caía ligeramente por su frente.

— ¿Qué tal me veo? - Jay preguntó.

— Demasiado negro.

— Lo siento, quizás—

— Sin embargo, te ves bien - Jungwon volvió a mirar a través de la ventana y nuevamente bebió un poco de vino.

— Tú te ves hermoso.

— Es extraño. Eso sonó cómo si lo dijeras con sinceridad.

— ¿Crees que estoy mintiendo?

— Todos mienten - Jungwon sonrió con ironía.

— No todos.

El silencio que instaló en ellos. Jay miraba a su alrededor y luego su vista se desvió a Jungwon. Empezó a analizar detalladamente su figura mientras trataba de memorizarse cada pequeño detalle. Jungwon era simplemente bellísimo.

Mientras tanto, Jungwon podía notar la intensa mirada de Jay en él, y era extraño que no se sintiera incómodo por ello. Estaba acostumbrado a que lo miraran con tal intensidad y eso le generaba incomodidad, sin embargo, con Jay era distinto. Se sentía orgulloso de llamar su atención. Pero no podía seguir sosteniendo eso durante mucho tiempo. Su madre y Sungmin no tardaban en llegar.

— ¿Ya terminaste de mirarme?

— Lo siento - Jay se disculpó inmediatamente y miró hacía al frente —. Creo que no deberías beber más vino porque terminarás ebrio. Aún no haz almorzado.

— Es curioso que no me gusten las bebidas alcohólicas, sin embargo recurro a ellas cuando quiero armarme de valor u olvidar todo.

— ¿Te sientes nervioso por mi presencia? - Jay volvió a mirar a Jungwon.

— Eres tonto - Jungwon sonrió y terminó de beber todo el vino en su copa —. ¿Qué quieres lograr con todo esto, Park?

— No he dejado de escuchar esa misma pregunta desde las seis de la mañana.

— ¿Y ya tienes una respuesta?

— He tenido mi respuesta desde el primer momento en que te ví.

— ¿Cuál es?

— Quiero conocerte más. Sé que suena extraño y quizás me hace parecer como alguien muy intenso, pero me gustaría conocerte más. Me interesas.

Jungwon giró su rostro para mirar a Jay.

— ¿Y qué más? ¿Piensas sacarme a citas románticas y luego hacer una declaración de amor? Eso es absurdo.

— ¿Por qué?

— Llevamos vidas completamente distintas y yo no me involucro de esa manera con mis empleados.

— Podría hacerte cambiar de opinión.

— Eres bastante perseverante - Jungwon sonrió ligeramente —. Seré sincero contigo. No me interesas, Park JongSeong. Deja de insistir en acercarte a mí y deja de usar a mis amigos para conseguir mi información personal. No lograrás nada.

— Eso último también lo vengo escuchando desde las seis de la mañana, y aún así, no quiero rendirme. Tú mismo lo dijiste, soy alguien perseverante.

Jungwon agachó su mirada para ver la copa vacía que tenía entre sus manos.

— La alta sociedad es un banquete donde todos beben de copas de cristal vacías, llenas de promesas falsas y ambiciones sin fondo. Ellos se alimentan de la desesperación de otros, vaciando sus almas hasta que sólo queda un eco de lo que fueron - Jungwon alzó su mirada —. Este mundo es cómo un juego de espejos, donde todos se miran a sí mismos en copas vacías, admirando su propia imagen, pero sin ver el vacío que los consume - Jungwon pasó ligeramente los dedos de su mano sobre la tela de la camisa negra que Jay vestía, justo encima de dónde se ubicaba su corazón —. Alguien sincero cómo tú no sobrevivirá. La ambición es un fuego que nos devora lentamente, dejando solo cenizas. No te contagies de ese fuego. La compasión es un lujo que no puede permitirse, porque la crueldad es el único camino hacía el poder.

Jungwon apartó su mano y apretó con sus manos la copa vacía que tenía en sus manos.

— Es momento de que te vayas antes de que sea muy tarde.

— ¿Irme? - Jay frunció ligeramente el ceño —. Pero aún no hemos almorzado y—

— Y no vamos almorzar. Al menos yo no almorzare contigo.

— Jungwon, sólo dame una oportunidad. Quizás no esté lleno de tantos lujos cómo tus pretendientes pero te puedo dar sinceridad, apoyo y amor - Jay agarró la mano de Jungwon y la apartó de la copa —. No sigas apretando esa copa porque puedes lastimarte.

— No necesito que alguien cuide de mí - Jungwon se soltó del agarre de Jay —. Vete.

— No me iré. Dijiste que este lugar estaba reservado durante dos horas así que me quedaré aquí. Además, tú madre reservó este lugar para nosotros.

Jungwon sonrió con ironía.

— Tú no eres el invitado de este almuerzo, Jay.

— ¿Qué?

Se escuchó el sonido de unas pisadas y las voces de unas personas. Las puertas fueron abiertas y una familia ingresó por la puerta.

— Ellos son los invitados principales - Jungwon susurró.

Jay se giró a ver a la familia. Por cómo vestían y su simple presencia imponente hacía obvio que eran personas de la alta sociedad. De cierta manera, se sintió alguien pequeño. En especial cuando las miradas de esa familia se posaron en Jungwon y él.

— ¿Jóven Yang?

— Buenas tardes, señor Park Dongjun - Jungwon hizo una breve reverencia —. Los meseros los guiarán a la mesa que ha sido preparada para nosotros. Denme un momento para arreglar unos asuntos con mi empleado, por favor.

— No se preocupe - Park Dongjun respondió y los meseros se acercaron a esa familia para guiarlos a la mesa que ya estaba servida.

— Por cierto - Jungwon volvió a mirar a Jay —. Ellos podrían ser mi futura familia porque el hijo menor de esa familia está a punto de convertirse en mi prometido.

— ¿Prometido? - Jay miró con tristeza a Jungwon.

— Sí, es muy guapo y tiene bastante dinero. Su familia es bastante reconocida. El hijo mayor es dueño de un reconocido bufet de abogados y tiene contactos cona fiscalía. Tú no tienes nada valioso que ofrecerme. ¿Sólo tienes sentimientos? Eso no vale ni sirve para nada en este mundo. Vé y busca a alguien más.

Un mesero se acercó a ellos.

— La familia Park ya está acomodada en la mesa.

— Perfecto - Jungwon sonrió —. Ya terminé de hablar con mi empleado así que guienlo hacía la salida, por favor.

Jungwon se alejó de ellos y caminó hacía la mesa en dónde lo esperaba la familia Park. Mientras tanto, el mesero guío a Jay hasta la salida de ese restaurante.

Jay se sentía destrozado y de cierta forma, sentía que Jungwon había querido dejar bien en claro la única relación que había entre ellos: Empleador y empleado.

— Jungwon a veces puede ser un poquito cruel - el mesero le habló en voz a Jay —. Pero creeme, él es una buena persona a pesar de toda esa fachada de personalidad que ha creado.

El mesero agarró el brazo de Jay y lo jaló hacía un pasadizo. Mientras que por el pasadizo principal que conectaba con la puerta principal de ese restaurante, caminaba una señora junto a un jóven que Jay reconoció inmediatamente.

— Creo que no te vieron - el chico susurró y salió de su escondite junto a Jay —. Es mejor que te vayas de una vez. Es peligroso que sigas aquí.

— ¿Por qué?

— Porque no creo que quieras ganarte problemas con la señora Yang Hyesun.

Jay salió del restaurante y la puerta fué cerrada detrás de él. Se sentía tan vacío.

Por otro lado, Hyesun junto a Sungmin llegaron hasta las mesas del restaurante. Los meseros los guiaron hacía la amplia mesa que había sido preparada para ellos. Sungmin se apresuró en alejar la silla para que su tía tomara asiento.

— Es un placer conocerla personalmente, señora Yang Hyesun - Park Dongjun fué el primero en hablar.

— Muchas gracias - Hyesun sonrió —. Veo que mi hijo ya estaba aquí con ustedes.

— Llegué un poco más temprano - Jungwon le respondió a su madre.

— Les presento a mi familia - Dongjun acarició la mano de la mujer que estaba a su lado derecho —. Ella es mi esposa Park Haewon. A mi lado izquierdo tenemos a mi hijo mayor Park Seungho y al lado derecho de mi esposa está mi hijo menor Park Sunghoon.

— Sus hijos tienen una imponente presencia - Hyesun comentó.

— Al igual que su hijo - Park Haewon le sonrió a Jungwon y luego golpeó sutilmente con su pie el pie de su hijo menor para que alzara la mirada y también viera a Jungwon. Ambos jóvenes estaban sentados frente a frente.

Jungwon miró a Park Sunghoon. Podría considerar que era el chico más guapo entre todos sus pretendientes. Pero se veía bastante tímido a diferencia de sus otros pretendientes. Jungwon tenía curiosidad por indagar en mayor profundidad la personalidad de Sunghoon.

— Bueno, es un placer finalmente tener la oportunidad de reunirnos. Había escuchado maravillas sobre su empresa de cosméticos. Es impresionante lo que han logrado en tan poco tiempo - Hyesun comentó.

— Muchas gracias. Es un esfuerzo de años, pero debo decir que también admiro el éxito de Jungwon. Manejar clubes nocturnos y una licorería de tanto prestigio no es tarea fácil, especialmente a su edad - Haewon respondió y Jungwon la miró detalladamente.

— Gracias, aunque creo que todavía me falta mucho por aprender - Jungwon forzó una sonrisa en sus labios.

— Yo creo que Jungwon tiene un talento natural para los negocios. Es algo que lleva en la sangre, después de todo. Estoy segura de que, con el tiempo, expandirá aún más su imperio. Pero, claro, los negocios son solo una parte de la vida - Haewon nuevamente miró a Sunghoon con una sonrisa —.  También es importante rodearse de personas que compartan nuestras ambiciones y valores.

Sunghoon asintió. Jungwon se sentía cohibido por el aire de seguridad que transmitía Sunghoon cuando se notaba un leve nerviosismo y timidez. Seungho observaba la escena con una sonrisa entretenida, mientras su padre se mantenía sereno.

— Eso es muy cierto - Dongjun intervino en la conversación —. Las conexiones personales son tan importantes como las profesionales. Y, en nuestro caso, siempre hemos creído en la importancia de construir relaciones sólidas entre familias con objetivos similares.

— Exactamente - Hyesun sonrió —. En estos tiempos, uno debe ser estratégico en todos los aspectos de la vida, incluidas las relaciones personales. Por eso pensé que sería una buena idea que nuestras familias se conocieran mejor - Hyesun hace una breve pausa, mirando significativamente a Sunghoon y Jungwon —. Después de todo, nunca se sabe qué podría surgir cuando dos personas tan prometedoras comparten el mismo entorno.

Jungwon, incómodo pero manteniendo la compostura, bebió un sorbo de la copa de vino que le habían servido mientras sentía la presión de las miradas. Sunghoon, por su parte, le sonrió amablemente, tratando de romper la tensión. Algo que llamó bastante la atención del jóven Yang.

— Quizás podríamos conocernos mejor - Sunghoon se atrevió a hablar —. Parece que ambos compartimos un gusto por los negocios, aunque en industrias diferentes.

— Claro, sería interesante intercambiar ideas - Jungwon respondió.

— ¡Eso suena perfecto! - Haewon habló entusiasmada —. Creo que sería bueno que pasaran más tiempo juntos, sin presiones. Después de todo, las mejores relaciones surgen de una conexión genuina.

— Estoy de acuerdo - Hyesun miró a Jungwon —. Dejemos que el tiempo haga su trabajo. Si hay algo que he aprendido en los negocios, es que las mejores asociaciones nacen de una base sólida y bien planificada.

Ambas familias sonrieron con complicidad, dejando en claro que esta reunión era más que un simple almuerzo. Jungwon, sintiendo que las expectativas se cernían sobre él, mantuvo la compostura, mientras pensaba en lo que realmente quería para su futuro.

Sungmin también miró de reojo a Jungwon. Era increíble cómo su primo podía soportar esto.

Dr13a.

Tenían razón. Jungwon lo rechazó 😔

Gracias por leer y votar 💙