Capítulo #1: "Regreso".
https://youtu.be/G7GdXtbuWPE
"Yo soy discreto pero igual te quiero..."
Inserten sus partes favoritas de la canción antes de leer <3
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一Nara Shikamaru, 15 años.一
"Yo me acordé de ti mientras estuve enamorado".
Le dio una calada a su cigarrillo mientras observaba las nubes desde el techo de su casa. Las ojeras alrededor de sus ojos eran muy notables, y su yo interno tenía un problema de bienestar consigo mismo. Traía consigo, un sentimiento de culpa, una que disfrutaban las sombras que habitaban dentro de él.
一Dejen de joder.一 dijo él hablando para las sombras que ahora vivían en su interior.一 No estoy de humor para lidiar con ustedes.一 dijo el Nara dejando salir el humo púrpura de sus labios.
Las siete sombras se burlaban de él. Shikamaru suspiró, y cerró los ojos para meditar. Si bien ya se había vengado de Hidan por matar a su maestro, todavía le quedaba un vacío interno. Un vacío que buscaba llenar con desesperación.
一¿Con quién hablas, eh?
一Sakura.
一No has respondido a mi pregunta.一 ella se sentó a su lado, dispuesto a observar lo que Shikamaru observaba con detenimiento y cuidado.一 No deberías seguir pensando en eso, y lo sabes.一Ella llevó con detenimiento sus mechones rosas hacia atrás de la oreja.一 Eres un gran shinobi, Shikamaru.
一¿Cuántas veces a la semana me dices lo mismo?一 respondió él dándole otra calada a su cigarrillo.一 No es de tu incumbencia, solo estoy esperando a que suceda lo inesperado.
一Lo inesperado, ¿eh?一 Sakura sonrió.一 ¿Tienes la esperanza que ella regresará?一 Shikamaru se quedó congelado por un momento, pero dejó salir el himno de sus labios.一 _____, ¿verdad?
一¿Y qué si es así?一 dijo el Nara levantándose de su asiento y dirigiéndose hacia el interior de su casa.一 No metas tus narices, es un fastidio que lo hagas, ¿de acuerdo?一 Sakura sonrió, él rodó los ojos.一 Está bien, ¿Qué haces aquí, mujer?
一Lady Tsunade quiere verte en su oficina en estos momentos, así que lamento haber hecho que pierdas tu tiempo.一 dijo ella entregándole unos papeles.一 Probablemente sea algo personal, ya que esta vez no e informó sobre el asunto. Prepárate.
Shikamaru hundió las cejas, eso era nuevo.
一De acuerdo, iré ahora mismo, gracias Sakura.一 iba a irse, pero se detuvo y miró a la pelirosa.一 Si ves a mi mamá, dile que he salido, y que lamento mucho no haberle avisado antes.
一¿No estás siendo un poco cruel con tu mamá?一 preguntó la pelirrosa desconcertado al azabache, él arqueó la ceja.
一Trabajo es trabajo.
一Y familia es familia, Shikamaru, tus ratos libres pásalos con tu mamá, ¿no?一 Shikamaru soltó un suspiro.
一No sé quién eres para decirme eso.一 Sakura no tardó en dibujar la sorpresa en su rostro.一 Creo que ya soy bastante consciente de eso, y no tienes por qué recalcarlo, es un fastidio.
一Shikamaru, eres irritante.
一Lo siento por ser yo.
Dicho eso, Shikamaru saltó del tejado de su casa, para luego saltar hacia el tejado vecino, dejando a Sakura con la indignación, pero eso a él no le importaba, "No tiene derecho a decirme eso, cuando ella es peor", pensó.
Las cosas habian cambiado desde que ella se había ido. Él no podía olvidar ese día, el día en que ella se fue, y él no fue a despedirse. Ese día se la pasó deprimido, sin querer comer, ni hablar, solo quería pensar.
¿Qué había pasado? Todo iba tan bien...
Hasta que ella colapsó, y minutos más tarde, se enteró de aquello que ella ocultaba, ocultaba una maldición, una maldición que le impedía amar a un Nara, al clan enemigo desde hace varias décadas. Shikamaru apretó los puños ante el recuerdo.
Suspiró. "Tal vez después deba disculparme con Sakura", frotó sus cabellos con la yema de sus dedos, y resoplido. Estaba agotado de tantas misiones, y cansado desde que Sasuke huyó de la aldea, eso le había marcado de por vida.
一¡Hey!¡Shikamaru!一 volteó a mirar hacia el suelo, allí se encontraba Uzumaki Naruto, con una gran sonrisa en sus labios. Shikamaru de un salto bajó a su encuentro.一 ¿Ya estás mejor?
一¿Mejor de qué?一 respondió el Nara mientras fruncía el ceño.
一Parecías deprimido hace un momento, dattebayo.一 dijo él rubio cruzándose de brazos.
一Yo estoy perfectamente, y...一 rápidamente Naruto hundió las cejas y acercó su nariz hacia la de Shikamaru con una rapidez increíble. El Nara no tuvo tiempo de reaccionar, pero esos ojos azules intensos de verdad buscaban algún indicio de depresión.一 Ah, Naruto...
一Ummmmm.一 Naruto lo miró un rato más y se separó.一 ¿De verdad no me mientes?
一¿Por qué te mentiría?
一Hum.
一Ahora, si me disculpas, debo ir a ver a Lady Tsunade, ¿quieres?一 Naruto mirándolo todavía seriamente, asintió.一 Bueno, entonces nos vemos después.
Dicho eso, Shikamaru comenzó a correr hacia la oficina de la Hokage con rapidez. Quería resolver el tema pronto, fuese lo que fuese, no quería más fastidios, al menos no por ahora.
Las personas a su alrededor lo observaba con pena, pero, ¿por qué no lo harían? Su sensei había muerto, y ahora él estaría dispuesto a proteger al heredero del clan Sarutobi, quien aún se encontraba creciendo dentro de Kurenai.
"______...", pensó mientras se detenía y miraba hacia las puertas de Konoha. ¿Cuántos días más tendría que esperar? Suspiró, ya no quería saber nada de nadie, solo quería estar solo durante una semana entera.
No quería trabajar, estaba mal psicologicamente hablando, y no sabía cómo es que debía tomar todo lo que había pasado. Siguió corriendo, no podía pensar en eso ahora, no ahora que seguramente se le había encomendado una nueva misión, era lo más probable.
一Shikamaru.一 no tardó en llegar. Lady Tsunade lo miraba con seriedad, tenía las cejas hundidas y lo miraba con detenimiento, repasando su bienestar físico.一 Te doy dos semanas de libertad. Estarás libre de misiones para que puedas superar lo que pasó.
一Lo he superado...
一Aunque lo hayas vengado, no es suficiente para ti.一 dijo ella entrelazando sus dedos.一 Necesitas tu espacio también, y te estoy permitiendo tenerlo. No me lo hagas más difícil, ¿quieres?
一Que fastidio.
一No te quiero ver en mi oficina durante dos semanas.一 suspiró.一 Vete ahora, antes de que me arrepienta, ¿sí? Quiero que...
Shikamaru se había ido, ni siquiera la había dejado terminar. Tsunade se llevó la mano al rostro con frustración y miró a Shizune buscando una especie de consuelo, a lo que Shizune se encogió de hombros.
一Entiendalo.一 intentó convencerla.一 Ya sabe como es Shikamaru. Es más sentimental de lo que parece, Lady Tsunade.
一Ya lo sé, Shizune.一 dijo la ojimiel mirando hacia la puerta.一 Ya lo sé...一 no tardó en enderezarse.一 Pero bueno, no hablemos más de él. Hablemos de Kakashi Hatake.
一Ups, ¿se notó mi presencia?一 preguntó una voz masculina de forma divertida. Se encontraba a espaldas de la ventana trasera.
一Cuando lees un libro erótico siempre te delatas, Kakashi.
El Hatake entró a la sala, y le sonrió a la Hokage, para luego mirar a través de la ventana, hacia el denso bosque que se asomaba detrás de las puertas de Konoha.
一Raito _____, 16 años一
"Acuérdate de mí, que yo por ti he sido un soldado".
Era extraño respirar el aire de la nación de la hoja nuevamente, se sentía muy diferente a la de la arena. Caminó por los bosques, aún se encontraba lejos de la entrada a Konoha.
Silbó un poco mientras notaba como los pájaros la imitaban. Sonrió ante aquello, su nuevo jutsu estaba dando resultado. Su nueva habilidad oculta por parte del clan de su madre, de la cual no se acordaba el nombre, estaba dando sus primeros frutos poco a poco.
一Eso es, si lo práctico un poco más, puede que finalmente lo manipule del todo.一 dijo orgullosa de sí misma, pero luego suspiró y hundió las cejas. Estiró sus brazos y se llevó las manos hacia la cintura.一 Me enteré que huíste, Sasuke Uchiha.一 rió un poco.一 prometo que no te reportaré con la aldea.
Tras decir eso, alguien salió con una katana de en medio de los arbustos sin previo aviso, a lo que ella contestó con su propia katana, dando comienzo a una pelea de espadas. El sonido de los choques y los rozes se hicieron presentes de manera que ahuyentaron a las aves y todo ser que se pudiera mover.
一¡Hey!一 dijo ella mientras esquivaba todo ataque que aquella persona le lanzaba.一 ¡Te estoy diciendo de forma pacífica que no diré que te vi!¡Idiota!
Los ataques no cesaron hasta que ella tomó de la muñeca al pelinegro y apuntó con su katana hacia la mandíbula de este. Ella pudo notar aquel brillo rojo en los ojos de esa persona.
一Hum, sharingan.一 dijo ella sonriendo.一 Ha pasado un tiempo desde que te vi, Sasuke, ¿tres años quizás?
一Ah, Raito.一 Bufó y guardó la katana. Observó hacia todos lados y fijó su mirada en ella. Ella sonrió, y él solo bufó.
一Primera vez que te veo después de tres años.一 dijo ella mientras observaba el aspecto del chico.一 Pensé que habías huido de Konoha, entonces, ¿qué haces tan cerca de la aldea, hm?
一Eso a ti no te incumbe.一 respondió mientras pasaba por su lado.一 finge que no me viste o te mataré.一 amenazó, a lo que ella solo soltó una sonrisa desconcertando al Uchiha.
一Está bien, ya te oí.一 se fue alejando de él.一 No creo que nos volvamos a ver a menos que Naruto quiera ir a buscarte.一 giró a verlo y le regaló una sonrisa.一 Estás advertido, Sasuke.
一No tienes por qué advertirme.一respondió el Uchiha mientras la señalaba con la punta de la katana.一 La advertida aquí eres tú, _____.一 ella no pudo evitar soltar una risa y llevarse una mano a los labios con picardía.
一Ay, Sasuke.一 dijo la chica llevándose las manos a la cintura.一 Creo que no estás a la altura para darme advertencias.一 suspiró.一 pero está bien, puede que me ganes con tus ojitos mágicos, así que no te provocaré.
一¡¿Disculpa?!
一¿Te ofendió lo de que no estás a la altura o los ojitos mágicos?
一Piérdete, Raito.
一Piérdete, Uchiha.
Ambos tomaron caminos separados. Ella caminaba con sigilo, pero una vez llegó a ver las puertas de Konoha, comenzó a avanzar más rápido, terminando así corriendo hacia la aldea con todo lo que le daban sus piernas.
Arriba, encima de su cabeza, apareció Pakkun en medio de humo.
一¡Hey! Deja de salir por tu cuenta.
一Kakashi me pidió que te cuidara.一 dijo lamiendo su pata.一 Tienes rotundamente prohibido acercarte al malagrecido que no tocó mis almohadillas.一 bufó.
一Oh, Pakkun, ya supéralo.一suspiró.一 ¿aunque sea no lo puedo ver de lejitos?一 preguntó.
一Creo que Kakashi fue muy claro, _____.一 respondió Pakkun.一 Pero mira el lado bueno, regresaste a casa, verdad?一 ella llegó a la entrada. Se detuvo y bajó la mirada.一 Pensé que te emocionarías más.
一¿De qué me sirve emocionarme si me prohiben verlo?一 dijo avanzado hacia la entrada.
Finalmente había llegado.
Todo se veía igual, nada había cambiado, y sonrió ante la posibilidad, aunque mus escasa, de verlo, quería verlo, probablemente eso la mataría con el tiempo, pero...¿por qué no podía amar con libertad?¿Qué importaba si él era un Nara?
¿Que importaba?
Era un amor prohibido...pero...
¿Importaba?
No eran Romeo y Julieta, ¿verdad?
Suspiró.
Alzó la mirada.
Allí.
Sonrió.
En la azotea de un edificio.
Que suerte.
Su mirada se depositó sobre el azabache que tanto quería. Se llevó la mano al pecho, y el corazón brincaba de alegría.
Había esperado tres años para verlo, y apenas entraba a la aldea, lo primero que veían sus ojos, era a esa persona tan especial.
Sus ojos recorrieron el nuevo aspecto de Shikamaru Nara. Llevaba el característico traje que representaba a un shinobi de la hoja. El resto seguía igual, su rostor, su cabello, todo, todo seguía igual, no pudo evitar sentir nostalgia, y las primeras lágrimas comenzaron a deslizar por sus mejillas.
Pakkun por su parte, la miró, y negó con la cabeza.
一_____...
一No, Pakkun...
一...
一Quiero verlo... y no desde aquí.
一Pero...
一No te meterás en problemas, te lo prometo.一 ella sonrió, y Pakkun, al verla tan vulnerable en esos instantes, ya no quizo protestar.一 Ya puedes irte, Pakkun.
一Escucha, _____.一 dijo Pakkun seriamente.一 Cuídate, o tendré que cumplir las órdenes de Kakashi al pie de la letra.一 ella asintió.一 Nos vemos.
Pakkun desapareció en una nube de humo.
Entonces, y solo entonces, volvió a mirarlo, pero esta vez, cruzaron miradas. Su corazón dio un vuelco. Shikamaru se quedó en su lugar, pero parecía atónito.
一Shikamaru...
No tardó en avanzar hacia donde él se encontraba.
De pronto, se vio corriendo.
Pero en un punto, Shikamaru se levanto de su asiento y le hizo un gesto antes de desaparecer de allí.
Ella entendió.
"Detente".
Pero le dolió, sin entender que él lo hacía para protegerla.
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