La mesa estaba repleta de comida, fruta, pavo, pescado, pan, vino, agua, postres extravagantes... Tantas cosas le hicieron recordar a su hogar, pero no estaba dispuesta a recordarlo a detalle, _________ tenía hambre y al mismo tiempo comenzaba a temer de su presencia en el reino, lo que le inquietaba era el hecho de que, el símbolo del reino de Len le parecía familiar.

El salón era acompañado de gigantescos ventanales que daban vista hacia el océano de Nabriok, encima de sus cabezas el techo yacía pintado con imágenes de querubines, arcángeles, y toda imagen religiosa, todo iluminado por lámparas que colgaban de cadenas de oro y en el suelo yacía la imagen que representaba el reino de Len remarcado con bordes de oro, el pianista tocaba su canción tranquila y ambientaba el lugar cual paraíso

-¿Te gusta?-preguntó una voz detrás de ella 

_______ se giró sobre sus talones y vio al príncipe, cuyo cabello lo llevaba amarrado en una media cola, una capa roja y un traje negro con bordados de oro, botas para montar, igualmente negras. La castaña le recorrió con la mirada el fino rostro, los labios carnosos con el corazon ligeramente marcado, el marco de su cara... y finalmente sus ojos, esos ojos celestes, fríos y que sin duda, lograban ver a través de ella. Una pequeña risa de complicidad la saco de su mundo, Len habia reído casi con ironía.

-Toma asiento por favor.-le dijo con una voz profunda 

La chica se encaminó hacia la mesa, ella inhaló tratando de apaciguar sus latidos, los sirvientes principales de esa área se acercaron para recorrerle la silla y brindarle los servicios necesarios para la cena, servilleta, copa, los tiempos de cada comida. 

-Majestad, ¿prefiere comer en habitación separada o desea hacerlo aquí?-cuestiono una chica 

Len se había sentado hasta el otro extremo de la mesa, ________ se cuestionó mentalmente sobre esa pregunta, es decir, EL la había invitado a cenar en cierta forma, ¿Por que no compartirían la cena?

El rubio pareció sopesar su respuesta, entonces miró a ________, la joven sintió el calor en sus mejillas y prefirió desviar la vista, ¡Carajo, la intimidaba demasiado! Prefirió centrarse en las pinturas que habían al rededor de todo el salón hasta que por el rabillo del ojo vió que Len murmuraba algo al oído de la chica, ella pareció sorprendida y sus orejas se habían enrojecido, ella hizo una reverencia y después lo único que escucho fueron los pasos apresurados de la sirvienta, que se alejaban hasta que los dejo solos con la música.

________, se perdió en una pintura que asomaba tímidamente pero del lado que se alcanzaba a percibir, lograba ver que era algo relacionado al Barroco

-Veo que le llama mucho la atención el arte.-comentó entonces Len-Espero que no sea alérgica a ningún platillo que va a ser servido.

Llegaron a servir el vino, cuando se fueron _______  movió la copa ligeramente, de manera que su contenido ondeara ligeramente, se tomó su tiempo para preparar su vino, olvidándose por completo del príncipe que tenía frente a ella. Lo paso por su nariz de forma efímera y el aroma era fuerte... hasta que su voz le dio escalofríos.

—No sabía que una bruja fuese tan buena en ver el vino tinto.—señaló Len

La copa de ella, no había cambiado de color en ningún instante, su copa no tenía ningún veneno, pero la de el... Si había cambiado de los bordes plateados que tenía