Celo
— Yoongi-i, los bebés — dije sintiendo a Yoongi caer sobre mí
— Mi-mi celo —
— Espera — dije agarrando del brazo a Yoongi, no podíamos hacerlo aquí
Con prisa lo llevé al cuarto de al lado, lo senté en la cama y me fui al baño a buscar unos condónes, ni bien los encontré corrí al cuarto. Al llegar rápidamente sentí mi cuerpo caer sobre el colchón.
— Ho-hoseok — gimió cerca de mi rostro
— Primero necesito ponerme el condón — dije viendo como se apartó de mí, yo por mi parte me bajé el cierre del pantalón y el polo
Él también hizo lo mismo, ambos estábamos desesperados. Al principio quise guardar la calma, pero el olor de Yoongi me sofocaba mucho, mi respiración era más irregular con el pasar de los minutos.
— No puedo esperar más — dijo tirándose encima mío
Sin poder controlarlo y sin querer que se detenga nos unimos, ambos quedando sin aire al sentir tanto placer.
— ¡Ahg! — gimió empezando a saltar encima mío
No habíamos podido tener un momento así desde hace meses, no es que solo pensara en el placer, no es que esto sea lo único en lo que pienso, pero no se compara nada a esto. Porque sentir su piel impactar contra la mía es lo mejor que pude experimentar, sentir sus gemidos, sentir su interior retorcerse me vuelve loco.
— Yoongi, amor... — dije sentándome con él aún saltando encima mío — te amo — pasé mis manos por su espalda, sintiendo lo húmeda que estaba por el sudor, sintiendo como temblaba lleno de placer — eres lindo — dije jalándole de la cola
— ¡UHG! — gimió arqueándose
— Te amo —
— Yo... también — dijo sonriendo
Los minutos pasaban y el crujir de la cama cada vez era más notorio, no era un problema eso, no había nadie más aparte de los bebés.
— Aún está abultado, un poco... — dije tocando su vientre
— ¡Ahg! —
— Me voy a venir — gruñí sintiendo como sus movimientos los hacía más rápidos
— Yo-o también — gimió con la lengua afuera
— Yoongi-i —
— ¡AHG! — gritó fuerte al venirse
Lo abracé, sintiendo como yo también me liberaba en el condón, tenía mi rostro a la altura de su hombro, me separé un poco y pude notar rápidamente como su pecho estaba mojado, de sus pezones caían gotas de leche.
— Hoseok... — sentí las manos de Yoongi en mi cabeza cuando me metí uno de sus rosados pezones a la boca, sintiendo rápidamente el dulce sabor de su leche
— Exquisito — dije separándome, haciendo un plop al despegar mi boca de su pecho, viendo como salía más leche — muévete — dije agarrándolo de las caderas
— Se-se siente muy bie... —
— ¡AHHH! — se escuchó de pronto un fuerte llanto que nos detuvo
— Yo iré — dije sonriendo ligeramente, quería seguir, pero mi hijo me necesitaba
○●○●⊙●○●○
— Quiero al maldito gato —
— Solo es un gato, aquí tenemos muchos —
— ¡NO COMO ÉL! —
— Je-jefe no se preocupe, un chico nos llamó, dice que sabe en donde está ese híbrido —
— Entonces traelo, trae a ese gato —
○●○●⊙●○●○
(Dos días después)
— A-ah — gemí sintiendo como Hoseok se hundía en mí — hu-humm —
— Shh — dijo pasando su mano por mi pecho
— Se-se acaban de dormir — gemí al sentir como ponía la punta de su pene en mi agujero
— Sí, ya les diste su leche a ellos, ahora debes de dármela a mí —
— ¡A-ah! — gemí sosteniéndome de la pared
— Shh, no hagas bulla o los niños se van a despertar —
Todas las noches apenas Hoseok llegaba del trabajo y los bebés se dormían nosotros nos íbamos al pasillo para hacer esto.
— Es-es... Hoseok — gemí sintiendo como se movía
— El día fue duro para ambos amor, solo disfruta —
Cuidar de los bebés para mí no era un problema, lloraban y a veces no sabía si estaba haciendo bien las cosas, pero estuve aprendiendo gracias a los vídeos y llamadas de Jungkook. Mi celo lo controlaba con pastillas durante el día, pero de noche Hoseok se encargaba de mí.
— ¡AHH! —
— Mierda, se está chorreando — gruñó apretando mis pechos
— Ho-hoseok~ — gemí recostándo mi cara en la pared, me sentía muy caliente y mareado — Hoseok... me-me vengo —
— Yo igual, ¡Humm! —
— ¡UHG! — gemí sintiendo como jaló de mi cola
— Vamos a comer... — dijo con la respiración agitada, yo solo asentí
Bajamos con cuidado, me puse solo su camisa y bajé junto a él, él solo traía su pantalón mal puesto.
— ¿Cómo estuvo tu día? — pregunté sentándome encima de él
— Muy bien, estaba pensando en trabajar más horas... pero aún no es tiempo de hablar de eso — dijo agarrándome de las caderas, ambos estábamos frotando nuestros miembros desnudos — ¿Y el tuyo? —
— Muy bien, aunque me duelen los pezones, me intentan morder aunque no tengan dientes — me quejé mientras pasaba mis manos por su cabello suavemente
— ¿En serio?... sí, están algo hinchados — dijo pasando sus dedos fríos
— Además de eso tú también los apretas mucho — dije sintiendo como la leche salía de a poco, la camisa de Hoseok la había dejado algo mojada a la altura del pecho, creo que mañana tendrá que ir con otra
— Sí... es que quiero un poco —
— ¡Hmm! — gemí sintiendo como empezaba a succionar de mi pezón, como retorcía su lengua y empezaba a hundirse en mí — ¡Hoseo-ok! — gemí sintiendo como me mordió
— ¿Me creerías si digo que me siento muy caliente?, ¿Me creerías si te dijera que por mí me quedaría todo la noche haciéndolo? — preguntó moviendo mis caderas con fuerza
— Tu-tu celo —
— Sí-í, creo que puede ser eso —
— ¡Humm! —
Menos mal los bebés tienen sueño pesado y duermen mucho tiempo.
— ¡MIERDA! — gruñó poniéndose de pie para tirarme en la mesa — quería comer, pero mejor te como a tí —
— ¡A-ah!, sí-í, cómeme — gemí gustoso
— Esto es tan bueno, o-oh — gruñó para de pronto parar — voy a tomar mis pastillas... tú deberías de hacerlo también —
— Pe-pero — me quejé al sentir como salió de mí
— Mañana tengo trabajo, de hecho ya agarré el turno del domingo, lunes y miércoles vendré más tarde y saldré más temprano, saldré a las cuatro y media para venir a las doce y media, los sábados también vendré algo tarde — dijo dirigiéndose a la cocina — no puedo faltar ni nada, necesito el dinero... necesitamos —
— Lo lamento — dije sentándome en la mesa — si no fuera por nosotr... —
— No, ustedes no son el problema — negó de inmediato — yo quiero trabajar para poder darles algo mejor, además en cuestión de un año debemos mudarnos... debo de empezar a ahorrar mucho — dijo lo último en voz baja — lo solucionaremos, ya verás Yoongi, solo debes de ayudarme aquí en casa —
— Sí, voy a ayudar — dije sonriendo cuando él me extendió un vaso de agua y luego la pastilla
— Le preguntaré a Jungkook si puede venir a ayudarte los domingos —
— No — dije borrando mi sonrisa
— Yoongi, ellos no se van a llevar a los bebés —
— Lo sé, pero no quiero que mis bebés tenga olor a extraños — dije molesto — son solo de Hoseok y de mí —
— Él solo vendrá para hacerte compañía, le diré que no cargue a los bebés si eso te tiene más tranquilo —
— Bien... — me rendí, sabía que Hoseok lo llamaría de todos modos
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro