Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

UNDICI

[Pedri.]

Me despierto abrazado a alguien, Irene esta a mi lado dormida, su cara expresa una mueca de relajación, por muy loco que me tenga jamás admitiré que mi parte favorita de que ayer se quedase a dormir es que pueda verla dormida, tan tranquila, tan calmada.

Me levanto con cuidado de no despertarla, no tengo mucho tiempo, el entrenamiento es dentro de una hora y media y casi tardo la mitad de ese tiempo en llegar a la Ciutat Sportiva.

Paso por la habitación donde dejé dormido a Sergio, el cual, sorprendentemente está despierto y apoyado en el marco de la puerta.

— Ey, pequeño, ¿que haces despierto? Todavía es muy pronto para ti. - le doy un golpe suave en el pecho.

— No 'engo sueño.

— Vamos a comer algo, a ver si con la tripita llena nos entra el sueño. - extiendo mi mano para que la agarre.

— ¿Tú no tienes sueño?

— ¿Te cuento un secreto?

El pequeño asiente sonriente.

— Me muero de sueño, pero, tengo que ir a entrenar.

Sergio se ríe y yo le pongo enfrente un vaso de leche caliente, abro el armario y cojo el bote de Colacao, en esta casa no tomamos de esto, pero, lo compre por si Irene y Sergio venían alguna vez a casa y que el niño tuviese algo que beber.

Mezclo los polvos con la leche y se lo doy para que lo beba.

— ¿Está rico?

— Si, muy rico, grachias'

Me alegro, pequeñajo. - contesto revolviéndole el pelo.

En lo que Sergio se bebe su Colacao yo me preparo un café bien cargado, hoy toca entrenamiento doble ya que dentro de nada tenemos el próximo partido.

Sergio se acaba su vaso y yo lo meto en el lavavajillas.

— ¿Sigues sin tener sueño?

El pequeño asiente y yo hago una mueca, no puedo dejarle solo si está despierto, una idea fugaz cruza mi mente y antes de que me arrepienta, cojo al niño y lo llevo a que se cambie.

Una vez cambiado escribo una nota y la dejo pegada en el frigorífico para que Irene la vea cuando se levante.

— Puede que tu hermana me mate, pero, tú te vienes a entrenar conmigo campeón. - le cojo en brazos y ambos salimos por la puerta hacia el garaje.

Si no estuviese enamorado hasta las trancas de esa bailarina que duerme en mi cama, me parecería de alguien estúpido haber comprado una silla de niño solo para cuando Sergio vaya en mi coche.

Lo ato con el cinturón y pongo rumbo hacia las instalaciones.

Una vez allí, ayudó al pequeño a bajar de mi coche y le hago que agarre mi mano para no que no se pierda, saludo a todos los miembros del staff, llegamos relativamente pronto.

Entro al vestuario y veo que varios de mis compañeros están en el, todos de quedan mirándome cuando entre. Le digo a Sergio que se siente en el banco en lo que yo me cambio.

— ¿Irene sabe esto? - Ferran nos señala dudoso.

— La he dejado una nota en el frigo, espero que se de cuenta.

— En la vida la había visto tan confiada con su hermano con alguien. - Ferran me da unas palmaditas en la espalda.

— La pregunta es dónde se va a quedar mientras entrenamos, no quiero que se quede en otro sitio que no sea el campo, tengo que vigilarlo.

— Alguno de los entrenadores puede cuidarlo mientras.

Alzó mis hombros en señal de duda y asiento, una vez cambiado, agarro la mano de Sergio y lo llevo hacia las pistas.

— Son de las pistas chulas.

— A que molan, tú vas a jugar en uno de estos cuando seas mayor.

— ¿Cuando sea 'urbolista?

— Cuando seas el mejor futbolista del mundo entero, chiquitín.

Xavi nos mira confundido, me acerco a él.

— Es el hermano de Irene, no tenia sueño y no le iba a dejar solo en casa, lo siento mister.

— El hermano de Irene. - Xavi enfatiza en ese último nombre mientras me sonríe - Mateo lo cuidará por aquí, le echaré un vistazo de vez en cuando, tú vete a entrenar.

Asiento y le digo a Sergio que ese señor jugará con el un rato y que yo me tengo que ir a entrenar. Al pequeño no parece importarle así que se va tranquilamente con Mateo.

Me incorporo con mis compañeros,, Xavi nos felicita con la última victoria, nada más y nada menos que un Clásico, todos aplaudimos, tras la época tan dura que está pasando el club, nos reconforta de cierta manera esta victoria.

Inevitablemente pienso en Leo, él seguro que hubiese sido el primero en felicitarnos individualmente, él siempre hacía eso.

De vez en cuando intercambiamos algún que otro mensaje, es...raro, jamás creí haber podido jugar con él, jamás creí que el Barça no tendría a Messi entre sus jugadores.

El entrenamiento transcurre de una manera lúdica y bastante entretenida, Gavi bromea más de una vez con que a mi corta edad ya tenga un hijo, aunque sabe perfectamente que no es mi hijo.

Al final del entreno, se hace el mítico paseo de collejas, por mi reciente nominación al premio Golden Boy, quiero ese premio, pero, mi yo interno me dice que hay miles de jugadores promesas mejores que yo.

Recojo a Sergio de los brazos del entrenador y le agradezco el que haya cuidado de él, al final ha acabado dormido aunque le he visto intercambiar balones con Xavi de vez en cuando.

Ansu, me llama por detrás y yo me giro sorprendido.

— Adivina quien me han dicho que asistirá a la gala de los premios Balón D'or.

— Ilumíname.

— La novia de Kylian Mbappe. - contesta Ansu saliendo por la puerta de la Ciutat.

— ¿Y a mi qué con esa chica?

— Es Gabrielle, tío, estabas muy pegadito a ella el año pasado, ¿no era tu amiga?

Mi respiración se para de golpe, no me esperaba que fuese justamente Gabrielle, mi ex novia, la conocí en un evento que organizó el club, estuvimos saliendo por un año, sin duda el peor de mi vida.

Me utilizo, a mí y a mi fama, quizás fue que yo me hice el idiota, tal vez fue algo pasajero.

Pero yo tenía diecisiete años cuando ella acababa de cumplir los veintidós, en ese momento no me parecía tanto, pero, después del dolor que me produjo, esos cinco años se notaron.

Y, oh, dios mío, cuanto dolieron.

A lo lejos veo como Irene se acerca hacia nosotros sonriente, y es ahí mientras camina en nuestra dirección que me olvido de todo lo mencionado anteriormente.

Porque para mi Irene ha sido como un soplido de aire fresco, ese algo que me hacía falta para despertar de ese eterno letargo que es la monotonía del día a día.

Y estaba dispuesto a conservar eso.





















Relleno, relleno, relleno.

Este capítulo sí que es una basura, prometo que el siguiente trae cositas interesantes, hasta ese día nos leemos por mimotra historia, PHOTOGRAPH 🫶🏻🫶🏻🫶🏻

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro