Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Sólo ellos dos

La fiesta había terminado muy animada a pesar de todo; los chicos habían amado la coreografía que hicieron y los felicitaron hasta cansarse...

Luego Camus había seguido bailando, deleitándolos con su gracia, mientras los gemelos hablaban y se reían y disfrutaban de estar juntos, bien y felices...

El menor los había visto con dulzura mientras bailaba y le guiñaba el ojo a Milo, cómplice...

Saga llevaba a Milo a su casa, iban en silencio.

El gemelo miraba de reojo al menor de vez en cuando pero no se animaba a hablarle, aún se sentía culpable por todo lo acontecido en la fiesta...

Nunca pensó que era capaz de reaccionar tan brutalmente y luego, cuando Camus le dijo que había sentido miedo, él se dio cuenta de lo que había estado a punto de hacer...

Su mente se había puesto en blanco, veía todo negro, sólo sentía furia por Camus ...

Él no era así, jamás había sido un chico violento...

Sus ojos se nublaron por las lágrimas que volvían, rebeldes, y un suspiro se escuchó a su lado.

-Detente Saga... hablemos... por favor...

Milo tomó su mano y la apretó suavemente.

-Allá hay un hotel, paremos allí, tú no puedes manejar así y yo bebí demasiado para hacerlo...

Pagaron una habitación y subieron en silencio...

Saga estaba sumido en sus miserias y Milo que ya se estaba preocupando por su novio... 

El día que Camus bailaría para Kanon, Saga había estado muy nervioso por su gemelo...

Desde que estaba postrado, jamás lo había dejado solo.

¿Y si tenía un episodio de falta de oxígeno? si se le aceleraba el corazón o sus riñones no aguantaban por estar sentado después de tanto tiempo?

Había caminado de un lugar a otro como gato encerrado y Milo, que en lugar de molestarse, sólo podía ver el gigantesco amor que el gemelo tenía por su hermano.

Sintió mucha pena, él no tenía hermanos que lo protegieran o a quién proteger... había encontrado en Dita, Mask y Aioria los amigos que reemplazaban un hermano.

Aioria lo había defraudado de la peor manera pero la parejita se había convertido en parte de su vida, eran sus hermanos mayores...

Ver a Saga sufrir de tal manera, le hizo ver que debía ayudarlo de alguna manera; le había abrazado y contenido...

Lo había mirado a los ojos y se había perdido en esas esmeraldas tristes pero hermosas...

Saga lo había mirado fijo, sus ojos se encontraron y no hizo falta nada más... sellaron el momento con un beso. 

A partir de allí se habían dedicado a conocerse, saber de sus gustos, todo de cada uno...

Milo veía con alegría, que el gemelo estaba haciéndose paso en su corazón, que su tristeza por no ser correspondido por Camus se desvanecía y daba lugar a un nuevo posible amor...

Pero ahora estaban allí, callados, tristes... Saga se alejaba lentamente, su mente estaba muy lejos de Milo...

-Ven aquí Saga, siéntate junto a mí...

Ya estaban en la habitación y Milo se situó en el gran sofá que allí había; el mayor lo siguió callado y en cuanto apoyó su cabeza sobre el hombro del chico, comenzó a llorar...

Milo lo recostó sobre su regazo y con mucha ternura le acariciaba el largo pelo, mientras le hablaba suavemente

-Ya déjalo ir, Saga, ya pasó; todo está bien... 

-Si le hubiese hecho daño a Camus... si lo hubiese lastimado o peor... me hubieses perdonado? sé lo mucho que lo amas, me hubieses perdonado? y Kanon? me hubiese odiado hasta el último día de nuestras vidas...

-Pero no lo hiciste... te detuviste, te disculpaste y ellos entendieron... déjalo ir ya...

-Y tú? me perdonarás por intentar lastimar a Camus?

Su voz era apenas un susurro... había miedo en sus palabras, pero miedo a qué? a perder a Milo?

-Yo... no tengo nada que perdonarte; tus emociones y amor por Kanon hablaron por ti y es lógico...

Yo no soy quién para juzgarte... sólo quiero que estés bien, que estemos bien...

-Pero tú amas a Camus... yo no podré reemplazar nunca ese amor tuyo por él...

-No... tienes razón... un amor no se reemplaza con otro; mi amor por Camus siempre estuvo desde que lo conocí, pero él nunca me dio esperanzas y yo terminé siendo su súper mejor amigo y sí, lo amo terriblemente... como amigo...

Ahora bien, en cuanto a ti, yo no estoy reemplazando a nadie contigo; lo que siento por ti no lo he sentido por nadie, es una fuerza que me empuja a querer estar siempre juntos, contenerte, ayudarte, abrazarte... amarte y saber, que de alguna manera, voy a recibir lo mismo a cambio...

Milo estaba ruborizado y su rostro se tornó a color tomate cuando vio el rostro de Saga, que lo miraba como queriendo comérselo vivo.

-Eso... lo que acabas de decir... todo eso, es lo más hermoso que alguien me ha dicho en la vida...

Saga se incorporó y lo tomó entre sus brazos, besándolo suavemente, acariciando su rostro y espalda.

Milo abrió la boca y el mayor profundizó el beso sacando un suspiro de placer en el chico...

Las caricias se hicieron más atrevidas, los cuerpos buscaban más contacto y la ropa ya les molestaba... sólo se oían gemidos y suspiros en la habitación.

Saga levantó a Milo del sofá y sin dejar de besarse, se fueron quitando la ropa en el camino hacia la cama, mientras trataban de poner oxígeno en sus pulmones...

Cayeron uno sobre otro, riendo, Milo encima; de pronto se puso serio, lo miraba a los ojos, directo, tenía fuego en la mirada, quería todo lo que el gemelo pudiera darle y lo quería en ese instante.

Se quitó lo que le quedaba de ropa y chocó su boca contra la de Saga, chocaban los dientes, las lenguas...

Terminó de desnudar a su amante y sólo esperó a que el otro diera el paso final.

-Yo... quiero todo contigo... ahora... Saga...

Milo tenía la respiración entrecortada y Saga tomó la iniciativa esta vez.

Cambiaron de posición y ya estando arriba besó y acarició todo de aquel bello chico que tenía a su lado, el mismo que le había declarado su amor momentos antes...

Le daría todo el placer que pudiese y lo haría feliz, él mismo se daría la oportunidad de ser feliz...

Se seguían besando y acariciando y de a poco Saga lo fue preparando, tomándose el tiempo que el menor necesitaba porque era su primera vez y aunque estaba muy excitado, también estaba nervioso...

-Sólo relájate amor... tomaremos el tiempo que necesites...

Saga seguía abriéndolo para él y cuando Milo le aseguró que estaba listo, lo penetró despacio para no lastimarlo...

Una vez dentro, empezó a moverse con delicadeza, acariciando el vientre del menor y sonriéndole todo el tiempo.

Milo se adaptó rápido a la intrusión en su cuerpo y comenzó a mover sus caderas, buscando mayor fricción entre ellos.

-Muévete Saga... más...

Milo jadeaba y se revolvía entre las sábanas mientras su amante lo embestía cada vez más fuerte y profundo

-si... más... así...

Saga rozó su próstata y el menor lanzó un grito de placer para delicia del gemelo...

-otra vez... por favor...

Saga no podía negarle eso y más, era la gloria escucharlo gemir así por él, así que doblegó sus esfuerzos y en cada estocada, tocaba su punto herógeno haciendo que el chico se desarmara por completo hasta llegar a un orgasmo increíble, gritando el nombre de Saga...

Con la contracción de sus músculos arrastró a su amante a un orgasmo igual de maravilloso...

Saga lo besaba apasionadamente, aún dentro suyo y el menor que no sacaba sus piernas de su cintura...

-Te amo, bebé... te amo, Milo!

Lo miraba a los ojos, esos zafiros que lo volvían loco y que le hablaban de amor y promesas de futuro...

Hicieron el amor hasta quedar rendidos, abrazados y alejados de todo, en un pequeño mundo de dos...  

--------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Decidí este capítulo para homenajear a las dos personas que hicieron posible la felicidad de sus dos seres más amados.

 Ellos merecían un capítulo aparte en la historia. Espero que les haya gustado porque no soy muy experta en escenas de sexo. La foto, supongamos que tienen el cabello como en el animé.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro