MADISON

Mamá se encarga de llevarme al lugar en donde quedé en juntarme con los chicos para el viaje y me encargué de llevar conmigo las gafas. Nunca me había parecido tanto a Elena como ahora, me siento totalmente protegida usándolas. Y lo más importante: me veo digna, claro... hasta que los vea y la vergüenza aparezca.

-¿Sabes? No puedo creer que tu hermana se vaya a casar.-Dice mamá una vez que estaciona el auto.

-Yo tampoco, es decir, sabía que en algún momento lo haría, pero no creí que se casaría con Nate.

-Sólo quiero que sea feliz, Bella lo merece y espero que enserio Nate haga las cosas bien con ella. Creo que me siento algo mayor.-El tono con el que lo dice me causa gracia

-Bueno, joven no eres.-Digo para molestarla.

-¡Oye! Más respeto con tu madre.-Me mira divertida- ¿Puedes explicarme porque vas al viaje con esas gafas? ¿Acaso ocurrió algo que no me quieras decir?

-No, para nada. Me gusta cómo me veo eso es todo. Elena dijo que me veía bien

-No sé porque no te creo del todo... Bueno, supongo que ya debes irte. Bella se casará y tú te vas de casa por una semana y creo que ya estoy algo sensible.-Con una sonrisa por lo dramática que suena le doy un fuerte abrazo y le prometo que la llamaré.

Me bajo del auto junto a mi bolso y una mochila y me dirijo al edificio.

Observo que hay dos autobuses en el estacionamiento y yo me ubico en unos sillones a la entrada, veré muchas películas cuando esté en la habitación en la que me quedaré. Es el mejor panorama que tendré esta semana lejos de mi casa.

Ayer hablé con los chicos por ese grupo que creó Connor, pero la vergüenza aún no se va y no creo que lo haga, así que prefiero estar sola.

Luego pienso en el mensaje que me envió Kyle, por una parte estoy algo más tranquila cuando me disculpe con él hoy, pero por otra ¿quién sabe qué cosas le dije esa noche? Eso es lo que más me tortura. No saber lo que ocurrió.

Y luego está sobre lo que Drew quiere hablar, aún no recuerdo lo que le dije.

¿Cuántas estupideces puedo cometer por beber un poco? Jamás lo sabré

Derek y Thomas me enviaron mensajes para desearme suerte, puede que haga alguna video llamada con Thomas más tarde, siempre logra hacerme reír, lo cual agradezco, además de que aún no le he contado nada de lo que pasó en la fiesta de la familia Wright y dudo que lo haga a esta altura, no quiero revivir eso de nuevo.

La primera persona a la que veo es a Aiden, lleva una mochila y me sonríe en cuanto me ve.

Esta es la primera prueba, puedo con esto. Me tranquiliza que él sea el más tranquilo de los cuatro.

-Hola, ¿te sientes mejor?-Pregunta tomando asiento a mi lado.

-Sí, estoy mucho mejor. Tú luces muy bien.-Miro alrededor para ver si están los demás y me tranquilizo cuando no los veo.

-Gracias, por un momento temí que no vendrías.

-Créeme que lo pensé, pero mis hermanas prácticamente me obligaron a venir. Son muy lindas tus pulseras.-Digo señalándolas.

-Oh, sí. Jamás creí que sería de los que usan pulseras, pero estás no me gusta quitármelas. Supongo que son mis favoritas, una me la regaló Phoebe y otra mi mamá.

Ambas pulseras son gruesas y tienen muchos colores, casi como un arcoíris y están demasiado ajustadas en sus muñecas.

-Son muy bonitas, ¿y cuánto tiempo llevas con Phoebe?-Si no me equivoco es modelo, sé que su nombre me suena de alguna parte

-Llevamos más de un año saliendo, ella es genial. Ambos viajamos a menudo, pero encontramos cómo hacer que lo nuestro funcione.

-Me alegra oírlo, ¿sabes? Eres el que más me agrada hasta el momento.-Mi confesión parece causarle mucha risa, pero no me ofendo, al contrario me gusta haberlo hecho reír, casi siempre se mantiene en silencio o está en su celular y hablar con él es agradable.

-Me siento honrado, aunque lo más probable es que sea el segundo en agradarte. Y créeme Jesse y Connor son muy idiotas, pero te terminas acostumbrando a ellos.

-Eso veo, si no se rieran tanto de mí, me agradarían más. Son muy payasos

-No pudiste haberlo dicho mejor, son payasos. Se me ocurre un juego mientras los esperamos, yo te hago una pregunta y tú me dices quién crees que tiene más probabilidad de que lo haga.

-Ay me gusta ese juego, pregunta.

-¿Quién crees que se desvelaría mirando una serie?

-¿Kyle?-Aunque no se ve como el tipo de chico que se obsesionaría tanto con una serie como para dejar de dormir por verla.

-Es Jesse, eso le pasó con la serie Glee. ¿Quién crees que es más probable que discuta con un niño?

-Connor.-La respuesta sale en automático, porque se ve que le gusta tener la razón, así que puedo imaginarlo discutiendo con algún niño pequeño.

-Muy bien, esta es una más difícil. ¿Quién crees que se haría un tatuaje estando ebrio?

-Jesse.-Aunque no estoy muy segura.

-No, es Kyle.

-¿Enserio? No me lo imagino con tatuajes y menos tomando esa decisión estando ebrio.

-Esa es una de las mejores historias, sobre todo porque no es propio de él, incluso a nosotros nos sorprendió, pero ya era mayor de edad, así que no le pusieron muchas objeciones cuando fue a la tienda.

-Bien, lo tendré en cuenta. Tal vez en algún momento se lo pregunte.

-Seguro que sí.-Dice divertido.

-Vaya, pero si es Madie Montana o ¿el hada del bosque?-Pregunta Jesse divertido llegando hasta nosotros.

Si, agradezco haber traído estas gafas, realmente son mis salvadoras.

-Ninguna de las anteriores, sólo Madison.-Le respondo con una sonrisa o al menos eso pretendo. Estaba muy tranquila conversando con Aiden y ahora que llegó uno de los "payasos" ya no me siento así.

Lo que pasó en casa de los Wright, se queda ahí. Ese será mi nuevo lema de vida.

-Hola Madie.-Mierda, Kyle llegó antes de lo esperado.

Miro en su dirección y lo saludo con un simple gesto de cabeza.

-Bien, yo venía a buscar a Aidencito para que me ayude a hacer algo. Los dejamos solos.-Dice el idiota de Jesse, dejándome a solas con Kyle.

-Si me llamas Aiden tal vez te acompañe.

-Bien... Aiden, ¿me acompañas?

Aiden me dedica una última mirada y se levanta. Es un traidor, como si no supiera que lo hicieron para dejarme a solas con Kyle. Aunque al menos así me puedo disculpar rápido.

-Lo siento Kyle.-Digo mirando en su dirección.

-Creí que te había dicho que no necesito que te disculpes...

-Pero debía hacerlo, ahora me siento un poco mejor.

-No hiciste nada raro o al menos no tan raro teniendo en cuenta tu estado.

-Vaya eso me hace sentir mejor... ¿enserio...? ¿Enserio tienes un tatuaje?-No puedo evitar preguntar.

-¿Así que de eso estaban hablando?

-¡No! Es decir, sí pero no. Era un juego.-Digo arrepentida por hablar del tema.

-Sí, me hice un tatuaje. Y no recuerdo nada de ese día, sólo que a la mañana siguiente lo tenía.

-Vaya, no pareces un tipo de tatuajes.-Ahora solo falta que encuentre algún secreto de él realmente oscuro con pasado trágico y estaría frente a un protagonista de los libros de Bella en la vida real.

-Porque no me gustan mucho.

-¿Alguno de tus padres ha muerto?-Y una vez más mi discreción me abandona

-¿Y esa pregunta?-Dice algo confuso.-No mis padres están vivos, de hecho casi toda mi familia más cercana está viva, ¿por...?

-Oh, nada.-Entonces descarto la muerte de algún familiar.-Seguro tienes un pasado trágico.-Digo en voz baja.

Me quedo en silencio analizando las otras posibilidades hasta que escucho los pasos de alguien acercarse.

-Llegó por quien lloraban.-Ah, es Connor.- ¿De que hablaba la parejita?

-Nada que pueda ser de tu interés ricitos.-Digo dándome cuenta de que Kyle parece observarme con interés, aunque claro luego de las preguntas que le hice... Cualquiera pensaría que estoy loca.

Para mi fortuna, a los minutos aparece Jazmín indicándonos que el bus en el que haremos el trayecto se encuentra listo para que podamos subir.

Iremos a grabar a una playa que se encuentra a unas dos horas de distancia de Toronto

Así que sin siquiera pensarlo dejo a Connor y a Kyle y salgo fuera en donde está el bus, necesito estar sola y lo más alejada posible de ellos, sobre todo de Kyle.

Aunque seguro que él ya piensa que estoy loca y así es como se aleja a un chico.

Me siento en la tercera fila de asientos y rápidamente saco mis auriculares para ir escuchando música.

Eso siempre logra desconectarme.

Luego de un momento veo pasar a los chicos a los asientos traseros y Aiden me invita a sentarme con ellos, pero le indico que estoy bien.

Incluso llevan una jaula con el cachorro de Jesse, el pequeño Brownie.

-¿Segura que no quieres venir con nosotros?-Me sobresalto cuando veo a Kyle tomar asiento al lado mío.

-No, gracias. Aquí estoy bien.-Respondo sujetando bien mi mochila contra mí.

-¿No quieres seguir haciéndome preguntas?

-Dudo que quieras escucharlas, mi mente es algo peculiar en ocasiones.

-Lo noté, por eso tengo curiosidad sobre qué más quieres saber.

-Tal vez en otra ocasión. Ahora dormiré.

Finalmente Kyle se da por vencido y se va con los chicos, entonces por fin estoy tranquila.

Saco mi celular y juego Candy crush, mientras escucho mis canciones favoritas.

Unos minutos más tarde, cuando el bus se pone en marcha escucho que los chicos se ponen hacer un karaoke. Así que escucho música demasiado variada, mientras que yo escucho mi playlist de canciones de películas de Disney.

Y de repente suena una de las mejores canciones que han creado y yo empiezo a cantar, olvidando que estoy sola.

Observo a mí alrededor y veo que hay varias personas mirándome, además de los chicos y Jazmín. Lucen divertidos por verme pasar vergüenza, otra vez.

Otro motivo más para seguir con estas amadas gafas.

-¿Era una canción de Disney?-Pregunta Jesse desde su asiento.

Sólo soy capaz de asentir con la cabeza, porque me vuelvo a sentir demasiado avergonzada como para hablarles.

-No lo hacías tan mal.-Opina Aiden.

-Bromeas, ¿cierto? Parecía el cacareo de alguna gallina. Y una de las canciones más románticas que he escuchado, eso sí. ¿Aún crees en príncipes, Madie?-El tono de Connor es tan burlón que me dan ganas de pegarle.

Genial, y yo que tenía pensado que no pasaría más vergüenza y que con lo de mi borrachera ya tenía suficiente...

Y sí, aun creo en príncipes, sé que no existen, pero la idea me gusta. Con soñar no lastimo a nadie, pero mis expectativas están demasiado altas. Supongo que no me queda de otra que seguir mirando las mismas películas de siempre y enamorarme de los mismos personajes una y otra vez.

-Bueno, no todos tenemos una voz privilegiada como la de ustedes. Y respondiendo a tu otra pregunta sé que los príncipes no existen, pero me gustan los de las películas.-Digo decepcionada con la vida.

Aprovechando que estoy con gafas me atrevo a mirar a Kyle, quien es el único que se ha mantenido en silencio. Pareciera estar divirtiéndose, pero no sabría decir si es por mi horrible canto o por la discusión que estoy teniendo con Connor. Tal vez sean ambas.

-Entonces Madie, ¿te unes a nuestro karaoke?-Pregunta Jesse.

-No, gracias. Paso por esta vez.

Me doy la vuelta y miro por la ventana. Tendré que hacer mi concierto en mi mente.

Me quedo dormida escuchando música y cuando despierto ya hemos llegado. O más bien me despiertan.

Veo a Kyle, quien decía mi nombre. Ya decía que era raro haber soñado con él.

Al mirar alrededor compruebo que ya se bajaron todos, así que esa es mi señal para salir de ahí.

-Madie... Tus gafas.-Dice Kyle entregándomelas. Se me tienen que haber caído mientras dormía. Sólo espero no haber roncado.

Las tomo y me las vuelvo a poner.

-Gracias.-Digo antes de salir del autobús con mis cosas.

-¿Ahora serás la bella durmiente? Kyle, ¿tuviste que besarla para que se despertara?-Dice Connor, quien cada vez agota más mi paciencia y eso que tengo mucha porque Elena es igual de molestosa que él.

-De hecho me desperté sola, gracias por tu preocupación ricitos de oro.-Le digo irónica al idiota de Connor.

Al menos Kyle no me contradice, ambos sabemos que él me despertó. Porque si por mí hubiera sido dormiría una rato más.

-Bueno, ahora hay que ir a la recepción del hotel, registrarse y por lo que queda de tarde pueden descansar.-Dice Jazmín indicándonos el camino.

Una vez que todos tenemos la llave de nuestra habitación, me voy enseguida a encerrar. Dormiré y veré alguna de mis películas favoritas. O quizás llame a Thomas.

La habitación es grande y tiene una vista muy linda a la playa, en donde supongo que se grabara el vídeo.

Le envío un mensaje a mamá y ella me responde a los segundos, me hace reír cuando dice que ya me extraña.

Ordeno un poco mis cosas en la habitación y luego me acuesto en la cama, me vendrá muy bien continuar con la siesta en la que estaba hace unos minutos atrás.

(...)

Me obligo a despertarme porque escucho unos ruidos provenientes de la puerta, ¿quién viene a molestarme ahora?

Abro la puerta aun adormilada por venirme despertando, pero lo reconozco enseguida: una vez más es Kyle

-Hola, ¿interrumpo algo?-Pregunta analizando mi nuevo look de dormir

-Sólo mi siesta de belleza.-Respondo seguido de un bostezo.

-Entonces veo que te funcionó, aunque déjame decirte que dudo que necesites dormir para ser hermosa.-Gran parte de mi sueño desaparece con el comentario

-Vaya gracias por el cumplido, pero sé que ahora mismo debo de tener mi cabello hecho un asco y ni hablar de mi aliento. Creo que la palabra para definirme en estos momentos es todo menos hermosa.

-Por si te lo preguntas, estoy aquí para que bajemos a comer algo. Yo igual hice una siesta y los chicos me dijeron que igual faltabas tú.

-Creo que dormí más de lo que tenía planeado. Gracias por avisarme, debo ir al baño.-Digo dejándole la puerta abierta. No sé si entre o no, pero me pareció de mala educación cerrarle la puerta en la cara. Así que dejaré que él decida.

Entro al baño y me lavo los dientes y luego me cepillo el cabello. Y sí, lo tenía con muchos nudos. No estoy para nada hermosa como dijo Kyle.

Luego de hacer mis otras necesidades, vuelvo a la habitación y descubro que Kyle está exactamente en el mismo lugar en el que lo dejé cuando fui al baño.

-No sabía si te gustaría que entre, así que me quedé aquí.

-Eso puedo notar

-¿Qué canción estabas cantando en el viaje?

-¿Enserio no la reconoces?

-No, pero me dio curiosidad. Parecías muy entusiasmada cantándola. Te veías adorable

-Creo que lo di todo de mí en esa canción y a cambio sólo recibí las burlas de Connor. Y respondiendo a tu pregunta es de una película de Disney.

-¿El programa dedicado a niños?

-No son para niños, son para mayores de doce años, incluso algunos para mayores de catorce.-Digo a la defensiva.

-Muy bien, para mayores de catorce. Creo que mi hermana más de una vez vio Disney.

-Todo el mundo tiene que ver esas películas y series, algunas son realmente hermosas y creo que te dejan mensajes muy buenos.-Cuando mi modo fan Disney se activa hay pocas cosas que me pueden callar.

-Eso veo, se nota que te gusta mucho. Supongo que podría ver alguna ¿Cuál me recomiendas para empezar?

-¿Hablas enserio?

-Sí, si te gustan tanto dudo que sean malas y si tienen música mejor.-Me dice con una sonrisa.

-Muy bien, te haré una lista.-Digo entusiasmada.