Se fumaron un cigarro.
Keith, sentado en la cama, absorbía y tiraba el humo por la boca.
Con música de fondo, Lance acariciaba su muslo con sus yemas.

-¿Te duele? - Lance se incorporó y asintió. Aun así tumbado, está vez bocarriba, agradeció el cigarro del azabache. Soltó el humo y tras toser de forma desagradable le miró.

-Un poco.

-Mucho.

- Si.

-Pero dímelo. -dijo riendo. El azabache buscó algo en su cajón.

-Es que quedaría muy triste admitir que me duele mucho. -dió otra calada. Antes de soltar el humo observó como Keith sacaba del cajón una caja celeste y blanca. Dentro tenía una crema aparentemente transparente.

-Cállate y gira anda.

-¿Que es?

-Crema fría. Mano de santo para después de follar.

-O sea que...

- Si Lance. Es normal que después de que te rompan el culo te duela. -rió y se giró. Aún bocabajo, siguió fumandose el cigarro.
Keith se colocó en sus piernas y separó ambas nalgas sin mucha vergüenza. A Lance parecía incluso darle igual. Sintió el tacto frío y gimió en voz baja.

-Joder.

-Frío eh.

-Si, joder. -dijo riendo. Soltó una cámara lenta y se preguntó. -¿Eres gay oficial no?

-Que yo sepa, si.

-¿Es verdad eso de que a veces comeis el culo? - Keith suspiró decepcionado al por tal tontería. -Es curiosidad.

-Pues vaya curiosidades tienes tú. -rió en voz baja y volvió a taparle y sentarse a su lado. Observó como fumaba. -Si, es verdad. -el moreno abrió la boca. sorprendido. -Yo no lo he hecho. Creo que puedes llevarte sorpresas. - Lance se echó a reír y terminó tosiendo como anteriormente.

El coreano se tumbó a su lado, y sin decir nada, empezó a fumarse el cigarro contra la boca de Lance, soltando allí las caladas. Se había vuelto adictivo hacer aquello. Era jodidamente erótico y sexy. Le acarició los pómulos, esos que tan remarcados tenía. Sonrío y pegó sus labios a los ajenos.

-¿Te hace dormir?

-Si. - el cubano sonrió y se abrazó al coreano. Ahora quien era la cuchara grande era irónicamente Lance. Sigo irónicamente por el hecho de que había sido pasivo y follado por el azabache.
Aunque bueno, ellos no tenían la etiqueta de pasivo o activo. Ellos eran Keith y Lance. Lance y Keith. Versátiles.
Más divertido.

Se despertó tarde.
Las 2 de la tarde.
A tomar por culo el horario decente y humano.
Se removió y a su lado vio la espalda de Lance, llena de pequeñas pecas. Toda bronceada y apetecible.
El coreano sonrió y dejó varios besos.

-Pero que regalazo tengo en mi cama. -dijo sonriendo. Lance sonrió, aún de espaldas a él.
Keith dejó varios besos por sus hombros y un último en su mejilla.

Keith se levantó tras ponerse los boxers. Cogió otro cigarro, como no, y se salió al pequeño balcón de su habitación.
Tras un minuto largo con el cigarro en los labios y la mirada en el cielo nublado, sintió calor en su espalda. Era Lance.
Abrazó su cintura y besó su nuca.

-Haberme avisado... -susurró el contrario en un tonto cansado. Keith sonrió y le miró.

-Estabas muy mono dormido.

-Soy mono hasta meando. - Keith bufó y rió. Giró su cara y esperó un beso del contrario. Obvio que llegó.

-¿Te duele el culo? -negó. -Genial. Lance colocó su cabeza en su hombro.
Keith vivía en un primero con vistas a un descampado y a la carretera. Al horizonte que, en aquel momento, estaba nublado. Lance escondió su cara en su cuello.
Keith se apoyó en sus brazos y dejó su peso caer hacía adelante.
Lance se pegó a él. Y por ende su entrepierna, cubierta únicamente por el pantalón de chándal y el boxer, se arrimó a su culo.
Lance dejó varios besos en su cuello.
Tiró la colilla del cigarro y miró a Keith de reojo, sin moverse ni un centímetro.
-¿Has follado en público?

-En coches contigo, casi en un baño y... no se... puede que en la playa un poco.

-¿Me explicas como se folla un poco? -Lance se echó a reír.

-Vale, ambos nos corrimos.

-Ah, que era un tío. -Lance se echó a reír de nuevo. Besó su mandíbula. -Entonces si.

-Si.

-¿Te hace uno mañanero?

-Anda que no. - Keith sonrió al sentir sus manos en sus caderas. Sintió sus pulgares pasar bajo la goma del boxer.
Se pegó a su trasero y Keith se mordió el labio al sentir eso que tenía de monstruo en su culo.

-No tenía ETS ¿no? -Lance canturreó en su oído un suave ah-ah en tono negativo. No, no tenía. Keith sintió los dientes de Lance en el arco de su oreja. Eso se la ponía muy dura. -Pues a pelo.