1O
De repente, la cabeza de Jungkook da vueltas y sus ojos buscan a los de Jimin. Aquello le ha dejado desconcertado.
"¿Perdona?, no entiendo a lo que te refieres..." Está seguro que recordaría a su Omega o al menos al que fue su omega.
No podría ser tan imbécil como para olvidar algo tan importante.
Parecía que Jimin no tenía siquiera una marca, ¿Cómo es eso posible?
Mientras Jimin se aleja un poco para buscar los recipientes y evitar la mirada que le da el hombre que parece ser Jungkook, comienza a hablar más fuerte de lo que debería.
Porque al parecer le falta por superar un par de cosas.
"¿Te gustaría saber la historia larga o la corta?, sólo elige".
El lindo Omega sonaba tan triste que algo dentro suyo se revolvió. Quizás fue una pista para saber que no mentía.
"La historia larga, no...no entiendo nada. No recuerdo absolutamente nada y necesito saber bien las cosas si es que soy o era tu alfa". La personalidad de Jungkook no es la misma que Jimin conoció alguna vez. Este hombre actuaba distinto a su- a Jungkook.
Jimin sonrió algo dulce cuando comenzó a servir el té y se sentó frente al Alfa, pretendía sentir valentía pero era una situación en la que no estaba preparado.
Pensaba que el alfa estaba muy lejos de él. Lo suficiente para olvidarle por completo.
"Por favor..." Suplica para que empiece. Sus manos pican por algo que aún no reconoce. Agradece por haberle entregado la bebida caliente y se acomoda.
Jimin carraspea.
"La luna nos asignó como pareja, pero las cosas no se dieron...Discutimos, discutimos porque ibas a casarte y querías que fuera tu amante o algo así. Habías dicho que tu esposa lo entendería, pero no estaba dispuesto a humillarme, ni a ser más denigrado por la manada, así que huí lo más pronto que pude. Estaba Serás el líder de la manada y la de ella. No te veía desde hace casi un año porque deberías estar en su manada en este momento..." Bebe del té. Busca alguna expresión en Jungkook pero no hay nada, así que continúa. "No deberías estar aquí, deberías estar con ella y los tuyos".
Jungkook bebe del té caliente de un sorbo y poco le importa quemarse la lengua, la impotencia contra sí mismo quema por dentro. Es una sensación bastante extraña, pero ahora todo es nuevo para él.
Intenta tener la misma calma que el Omega parece tener pero no lo logra. Está enojadado. Le gustaría saber controlarlo mejor.
"¿Puedo...Puedo preguntar?" Jimin asiente. Hay algo en esa tranquilidad que le aturde. ¿Cómo era posible decir algo así sin desgarrarse por dentro. Los pocos conocimientos que recordaba tener o que por instinto sabía, era que separarse de la pareja que la luna asignaba podría ser lo peor que podría pasar. Era un enlace, estaban destinados a amarse y simplemente...se había quebrado. "¿Decías que ellos- que la manada te denigraba?, quieres decir que te gritaban o..."
"Recibí golpes e insultos más veces de las que algún Omega o algún lobo decente merecía". Espera esto pueda aclarar un poco, no quiere indagar más sobre la violencia a la que fue sometido por aquellas personas.
"Oh-Dios. ¿Estás-Estás bien?, ¿al menos te defendía?, ¿Qué pasó?"
"Ahora lo estoy". Termina la bebida. "Lo hacías cuando podías, pero no estabas muy presente. Digamos que...eras bastante misterioso".
Así que parecía guardar un secreto. "¿Misterioso?" No puede dejar de preguntar. Esta vez nota algo de tristeza en la mirada de Jimin, pero no puede detenerse. Necesita saber. Su cabeza ha dejado de doler y parece que ha hecho un buen efecto el té.
"Desaparecías y volvías con eh, ciertos golpes. Hablaba de más contigo frente a la gente y solías asentir y escucharme, probablemente era muy irritante". Bromea, pero Jungkook no lo toma como tal.
El Omega parecía todo menos irritante.
Incluso se encontraba más calmado. Se pregunta que tanto mal le ha hecho y la culpa llena su cuerpo.
"No deberíamos hablar más de eso por el momento". Finaliza la conversación y estira la mano para tomar su recipiente vacío. Evita tocarlo y Jungkook parece comprender.
"Vale" Asiente. "¿Tú... estás bien?"
Se atreve a preguntar cuando han pasado quizás veinte minutos en que ninguno se atreve a hacer nada más que acomodarse cerca al fuego.
El Alfa lo pregunta, pues nota algo de vacío en la mirada del rubio, quien responde sin titubeos. "Sí".
Pero aunque Jungkook no era el mismo, reconocía a la perfección la mentira.
Aquella noche fingió no escuchar el llanto que hacía el Omega e intentó acurrucarse para dormir, pero el sonido no le permitió hacerlo.
Quería acercarse y tenerlo entre sus brazos, pero se sentía demasiado imprudente y vil de su parte, porque después de haber sabido el daño que le había hecho, no pudo con su propio ser.
maratón 1/3
en el mini subirán dos capítulos esta noche y mañana el siguiente, lamento lo tarde :(
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