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ᥒᥱᥱძ s᥆mᥱᑲ᥆ძᥡ, gіmmᥱ s᥆mᥱ𝗍һіᥒg і ᥴᥲᥒ 𝖿ᥱᥱᥣ (ᥡᥱᥲһ)
ᥒᥱᥴᥱsі𝗍᥆ ᥲ ᥲᥣgᥙіᥱᥒ, ძᥲmᥱ ᥲᥣg᥆ 𝗊ᥙᥱ ⍴ᥙᥱძᥲ sᥱᥒ𝗍іr (sі)
『 ... 』
Había algo en el ambiente, no era tensión ni tampoco incomodidad, era algo que ninguno de los dos podía explicar, algo abrumador que hacía sentir nerviosos a ambos.
Jimin se sentía ansioso, desesperado por tener a Jungkook cerca todo el tiempo, sabía que estaba mal, que no debería de sentirse así por su mejor amigo, pero ya es demasiado tarde para arrepentirse.
Habían pasado un par de días desde esa vez que estuvieron juntos y ambos querían más, no había necesidad de decirlo, ambos podían sentirlo.
Ambos necesitan sentirlo de nuevo.
- ¿En qué piensas Minnie? - preguntó el rizado mirando al castaño con la mirada fija en el piso.
- En nada. - mintió.
- ¿Seguro? Te noto muy distraído.
"Pienso en estar contigo de nuevo, ¿Eso es tan malo?", pensó.
- Estoy bien kook. - respondió.
- De acuerdo. - susurró el ojiverde no muy convencido por la respuesta del castaño.
Jungkook caminó y se sentó junto a Jimin en el sofá, Jimin se tenso un poco en su lugar, podía sentir el aroma varonil de su amigo y su cuerpo grande a su lado.
Sin poder evitarlo sus ojos terminaron en el perfil de Jungkook, admirando, tragando en seco cuando llegó a su labios.
Quería besarlo.
Jimin no tenía control sobre su cuerpo y sus ojos analizaron todo el cuerpo del contrario, hasta llegar a su entrepierna.
"¿Qué rayos me está pasando?", se preguntó.
- kook, ¿Te han montado? - preguntó Jimin sin pensarlo.
El de ojos verdes lo miró sorprendido y confundido a la vez.
¿Jimin realmente había preguntado eso?
- ¿Qué? - preguntó el rizado riendo nervioso.
- ¿Te han montado?, ya sabes... - repitió Jimin nervioso y con las mejillas sonrojadas por la vergüenza, ¿Como se había atrevido a preguntar eso?
- Mhm. - tarareo el rizado. - Creo que no. ¿Por qué?, ¿Quieres hacerlo tú? - preguntó divertido pasando su brazo por los hombros del castaño.
Jimin lo miro a los ojos.
- Podría intentarlo. - respondió en un susurro.
Jungkook tragó en seco, su cuerpo comenzó a sentir calor de tan solo imaginar a Jimin montandolo.
- ¿Quieres que traiga la cámara? - preguntó el rizado nervioso.
La cámara, casi olvida eso Jimin.
Esa vez que lo hicieron sin la cámara de por miedo se había sentido tan bien, tan real que Jimin había olvidado aquel trato con su compañero, pero la realidad lo golpeó.
No quería ser grabado, no lo disfrutaba y él realmente quería disfrutar su tiempo con Jungkook.
- ¿Qué tal si hacemos esto como una prueba más?, la próxima será con la cámara. - propuso Jimin.
El rizado se quedó callado, meditando la propuesta de su amigo.
Jimin quería tener sexo con él sin cámara de por miedo, ¿Como alguien podría rechazar algo así?
- Está bien. - aceptó el rizado.
Jimin sonrió complacido.
- Dejame hacerme cargo a mi esta vez. - susurró Jimin levantándose del sofá.
Jungkook iba a levantarse igual, pero el castaño lo regresó a su lugar.
- Lo haremos aquí. - habló Jimin.
El rizado hubiera protestado por ello, pero pronto vio a Jimin arrodillarse y colocarse entre sus piernas y todo en su mente desapareció.
Jimin mordía su labio inferior mientras sus pequeñas manos desabrochaba el cinturón de Jungkook y bajaba la bragueta del pantalón.
- Minnie... - suspiró el ojiverde.
- Me haré cargo de ti. - susurro Jimin. - Levanta tus caderas para quitarte los jeans. - ordeno.
Jungkook obedeció.
Jimin quitó los pantalones y los boxers del rizado ganado un jadeo de parte del chico.
Tener a Jimin de rodillas frente a él lo estaba matando.
- Si no estuviera tan necesitado podría ir a la habitación por lubricante, pero no lo haré, así que tendré que improvisar. - habló Jimin tomando el miembro del rizado entre sus manos.
Jungkook gimió por el toque.
- ¿Quieres mi boca kook? - preguntó.
- Si joder, hazlo. - respondió el rizado ansioso.
Jimin sonrió coqueto, sabía lo que podía provocar en Jungkook e iba usarlo a su favor.
El castaño pasó su lengua por toda longitud del rizado, remarcando las venas, sintiendo el palpitar.
Jungkook echó su cabeza hacia atrás y jadeo ronco.
Jimin comenzó a chupar el glande, saboreando el sabor salado, sin llegar más lejos, pendiente de la reacción de Jungkook a sus movimientos.
- Vamos cariño, metela en tu boca. - rogó el rizado llevando sus manos a los cabellos del castaño.
Jimin sacó la glande de su boca y comenzó a dar pequeños lengüetazos a la punta, saboreando el líquido preseminal.
- No juegues. - rogó ronco Jungkook.
El castaño sonrió una vez más victorioso y volvió a meter el glande a su boca, chupando como una paleta y pronto comenzó a bajar lentamente.
Jungkook gimió ronco.
El rizado podía explicarlo y tampoco quería pensar demasiado en como Jimin podía tomarlo y chuparlo también, de manera profesional, él podría jurar que podía venirse con tan solo la boca de su amigo.
La cabeza de Jimin subía y bajaba en un ritmo que estaba volviendo loco a Jungkook, el sonido de la respiración cortada de Jimin y el sonido de como era succionado por el castaño lo estaba volviendo loco y sin dudas podría volverse su sonido favorito.
Jimin lo tomaba por completo y Jungkook quería que lo hiciera, se moría por sentirse completo dentro de aquella pequeña boca.
Jungkook comenzó a follar la boca del castaño, con sus manos en los cabellos castaños obligándolo a tomarlo por completo, escuchando como se le complicaba un poco a Jimin tomarlo pero no protesto.
- Se siente tan bien tu boca. - comentó el rizado ronco a punto de llegar, podía sentir.
Jimin lo miró con sus ojos llenos de lágrimas por el esfuerzo que estaba haciendo.
- Tu boca no puede tomarme por completo, pero tal vez tu trasero pueda hacerlo. - habló Jungkook ronco.
Jimin sacó el miembro de su boca, respirando con dificultad y mejillas rojas.
- ¿Quieres intentarlo? - preguntó Jimin atrevido.
Jungkook asintió.
Jimin se levantó y comenzó a quitarse la ropa con la mirada de su amigo fija en él.
Una vez que quedó sin ropa el castaño se subió a horcajadas en el regazo del rizado.
- Es muy grande. - murmuró Jimin tomando el miembro del rizado, comenzando a estimularlo un poco más antes de meterlo en su interior.
Jungkook soltó una risa por el comentario.
Jimin alineó el miembro del rizado a su entrada, iba a doler, lo sabía, pero lo deseaba tan mal.
Mordió su labio inferior para callar lo que quería salir de sus labios cuando por fin el miembro de Jungkook comenzó a entrar en él.
Las grandes manos de Jungkook fueron a su cadera, apretandolas, con la cabeza hacia atrás disfrutando la sensación de estar dentro de Jimin.
Jimin bajó por completo, soltando un jadeo de satisfacción cuando lo logró.
- Mhm... Kook. - jadeo moviendo sus caderas en círculos para acostumbrarse al tamaño.
Jimin miró a Jungkook a los labios y no dudó en besarlo.
El rizado correspondió el beso, uniendo sus labios a los de Jimin.
Sus labios juntos se sentían tan bien.
- Montame. - gruñó Jeon contra sus labios.
Jimin asintió, colocó sus manos en los hombros de Jungkook y comenzó a moverse, dando pequeños e irregulares saltos, gimiendo en cada movimiento.
Jungkook comenzó ayudarlo, moviendo sus caderas hacia arriba cada vez que Jimin bajaba, follándolo de una manera fuerte, creando el sonido de sus pieles chocando en cada encuentro.
- Jungkook. - gimió el castaño disfrutando la sensación de su amigo follandolo.
- Oh shit. - gruño el rizado aumentado sus propios movimientos y los de Jimin.
Los dos eran un desastre de gemidos y jadeos con cada embestida al cuerpo de Jimin, ambos estaban cercas, pero ninguno de los dos quería que terminara.
- Te llenaré. - gruñó Jeon cerrando los ojos.
Jimin jadeo y unió sus labios una vez más, desesperado, ansioso.
En el momento en que sus labios se unieron de nuevo, ambos llegaron a su anhelado orgasmo, Jimin manchando el abdomen de ambos y Jungkook en el interior del castaño, llenándolo por completo.
Jimin cayó rendido en el hombro del rizado, respirando con dificultad, sintiendo como Jungkook acariciaba sus espalda de manera suave con la punta de sus dedos.
Se sentía tan bien, cálido y en paz.
Ninguno de los dos pensó mucho cuando se volvieron a besar con más intensidad que antes.
Ambos estaban comenzando a desarrollar sentimientos más grandes de lo que deberían, pero ninguno planeaba detener eso.
Y siempre necesitan algo más que sentirse cercanos y tal vez terminaría en lo que ninguno de los quería...
Un error.
Una mala idea.
『 ... 』
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