🧋┆TIᗰᗴ
How 'bout we take a little bit of time away?
¿Qué tal si nos tomamos un poco de tiempo?
『 ... 』
Ellos estuvieron en silencio durante todo el camino al departamento, porque ninguno de los dos estaba seguro de lo que quería o debía decir y fue hasta que estuvieron dentro del departamento cuando Jimin fue el primero en hablar.
- Así que... ¿Estás enamorado de mi? - habló Jimin, sin mirar al rizado tratando de procesar todo lo que habían vivido y dicho en las últimas horas.
Jungkook tragó en seco, nervioso y asintió aunque el castaño no vio eso.
- Si, Minnie. - respondió acercándose al castaño. - Quizás no sea un buen momento para hablar de esto. - dijo notando como Jimin desviaba la mirada de él.
El castaño se quedó callado un par de segundos, antes de dirigir su mirada al rizado, mirando sus ojos jade, esperando alguna respuesta de su parte.
- No Jungkook. - habló de nuevo. - Si es el momento para hablar de esto, creo que ninguno de los puede seguir guardando lo que siente. - dijo seguro dando un paso más cerca de Jungkook.
El rizado pasó saliva con dificultad otra vez por la cercanía entre ellos.
- Yo también estoy enamorado de ti, Kook. - confesó el ojiazul. - Acepte lo de los vídeos principalmente por mi madre y mis hermanas, pero tal vez en el fondo igual lo hice para poder tener algo contigo, aunque fuera sexo me conformaba, supongo. - explicó mirando al más alto en todo momento.
- Así que todo este tiempo hemos estado enamorados. - afirmó Jungkook sintiendose más tranquilo de alguna manera.
- Si, eso parece. - respondió Jimin soltando una pequeña risa.
- ¿Y qué es lo vamos hacer con eso? - preguntó el más alto.
- No lo sé, pero creo que por el momento podrías besarme, ¿Qué tal? - propuso el castaño con emoción.
- Puedo hacer eso. - respondió el rizado con una linda sonrisa en su rostro, encogiéndose de hombros antes de acercarse a los labios del más bajo.
- Hazlo. - murmuró Jimin contra sus labios, colocando sus manos en el pecho del más alto para sostenerse firmemente.
Jungkook no demoró ni un segundo más en unir sus labios en un beso, uno diferente a los que ya se habían dado anteriormente, tal vez del hecho de saber que sus sentimientos eran correspondidos influía en la manera en la que se sentían en ese preciso instante.
Siguieron besándose por un largo tiempo, en donde ninguno de los dos se dio cuenta en que momento terminaron sentados en el sofá con Jimin sentando a horcajadas sobre el rizado.
- kook. - murmuró Jimin buscando su propio aliento, separando sus labios de los del más alto, con sus manos en sus mejillas. - ¿Crees que esos tipos nos hagan algo? - preguntó preocupado pegando su frente a la de Jungkook.
- Lo más que nos pueden hacer es eliminar nuestra página y publicar ese video que hicimos para ellos. - respondió Jungkook colocando sus manos en la espalda del castaño para sostenerlo.
- ¿Si?, ¿Solo crees que hagan eso? - dijo Jimin inseguro e impaciente, sintiéndose angustiado.
- Minnie, ¿Qué es lo que te preocupa? - cuestionó el rizado mirando al chico con preocupación.
- No lo sé. - murmuró el castaño desviando la mirada de la jade de su amante. - Solamente que no confío en esa gente, no me dan una buena vibra. - dijo dejándose abrazar por el contrario.
- No creo que ellos pierdan el tiempo en nosotros. - comentó Jungkook un poco más tranquilo que el castaño. - Deben tener otras mas importantes que hacer.
Jimin torció sus labios y suspiró, dejándose sentir seguro en los brazos de Jungkook.
- Vamos a estar bien. - comentó Jungkook casi sintiendo el miedo del castaño.
- ¿Me lo prometes? - cuestionó el castaño sonriendo un poco, sabiendo que Jungkook no podía prometerle algo así, porque no estaba en sus manos, pero aún si quería escucharlo.
- Te lo prometo. - respondió el rizado con una sonrisa.
Jimin lo miró a los ojos una vez más, y el ver esos ojos verdes lo hizo sentir más seguro que cualquier promesa que pudiera escuchar.
- Te quiero. - susurró con un pequeño suspiro justo antes de besar al rizado una vez más, pegándose a él más, hundiéndose en sus brazos, en su cuerpo.
『 ... 』
Pasaron unas semanas, en las que la vida de ambos marchaba como siempre, de manera normal y apesar que ambos habían declarado sus sentimientos hacia el otro, aún no tenían una relación formal.
Mientras que Jungkook se sentía un poco más relajado, con un peso menos encima cuando por fin encontró un empleo digno, no era muy remunerado, pero era algo que le gustaba hacer y esta feliz y satisfecho con ello.
Aún recuerda el día que recibió el empleo, lo feliz que sintio y sobre todo recuerda la reacción de Jimin cuando le dio la noticia; ambos festejaron alegres y se besaron un por un largo tiempo, pasando la noche juntos.
Y aunque ellos tan solo habían pasado de mejores amigos a personas que se besan cada dia sin problema, pero sin alguna etiqueta formal, eso por los menos por el momento.
- Buenos días Jimin. - habló uno de sus compañeros del trabajo, Yeonjun con una sonrisa que no le transmitió a Jimin nada más que incomodidad.
- Hola Choi. - se limitó a responder sin sonreír.
- Dime Yeonjun, ¿Qué haces después del trabajo? - preguntó el chico sin dejar de sonreír, hablando coquetetamente.
Jimin frunció el ceño y no se reprimió más y le dedicó una mirada de confusión e incomodidad al chico.
- Nada que te importe. - respondió un poco molesto.
- Mhm.. yo creo que si me importa. - susurró Yeonjun con un tono de voz coqueto, mirando sin descaro el cuerpo del castaño.
- ¿Si?, lo dudo mucho. - dijo Jimin sintiendose más molesto e incómodo que antes. - Aléjate de mi, no eres mi tipo. - se limitó a decir antes de dar la media vuelta e irse de ahí.
Mientras Choi lo miró una última vez y comenzó a reír, con una idea cruzando su mente.
Jimin pensó que eso sería lo único extraño que le podía sucederle en el día, pero definitivamente se equivoco al pensar eso. Y se dio cuenta de eso cuando llegó al departamento y casi de inmediato recibió una llamada de su hermana Rosé.
- Hola, ¿Qué pasa Rosé? - preguntó respondió la llamada.
- Louis, mamá quiere hablar contigo. - dijo la chica en un tono de voz totalmente diferente, haciendo que el castaño frunciera el ceño y se sintiera confundido.
- ¿Todo está bien hermana? - cuestionó un poco angustiado por el tono de voz de su hermana.
Rosé no respondió aquella pregunta, haciendo que la angustia del castaño creciera en su pecho.
Después de unos segundos en línea sin escuchar nada, la voz de soyeon llegó a los oídos de Jimin y sonrió, porque realmente había extraño mucho esa voz.
- Jimin, ¿Eres tú? - se escuchó la voz de soyeon.
- Si mamá, soy yo. - respondió un poco más tranquilo.
- ¿Estás con Jungkook? - preguntó la mujer.
- No, él salió. Esta trabajando. - dijo el castaño, preguntándose el porqué su madre preguntaba eso, cuando nunca antes lo había hecho.
- Oh, ahora sí está trabajando. - comentó la mujer en un tono particular de voz.
- ¿A qué te refieres mamá? - preguntó Jimin confundido por la forma en la que habló su madre.
- Tú sabes a que me refiero. - habló soyeon.
- No, creo que no lo sé. - dijo el castaño la defensiva.
- Estoy decepcionada de ti. - fue lo único que dijo la mujer en respuesta. - Nunca en mi vida me imaginé que tú harías algo como esto. - siguió hablando sin dejar que el castaño dijera algo. - Quiero que vengas a darme una explicación. - exigió. - Y ven solo, no quiero ver a Jungkook en estos momentos, no hasta escuchar lo que tienes que decir tú al respecto y que me lo digas a la cara, mirando el rostro de la mujer que te dio la vida. - agregó firme.
- Mamá. - susurró Jimin confuso.
- Ya te lo dije Jimin. Quiero que vengas. - ordenó con sus voz molesta.
Jimin tragó en seco y pensó en lo peor en ese instante para que su madre estuviera actuando de esa manera con él.
- ¿Y bien?, ¿Cuándo vendrás? - preguntó soyeon al no escuchar ninguna de respuesta de parte del castaño.
- Yo... estaré en casa en unos días. - murmuró inseguro.
- Bien. Te esperaré. - fue lo único que dijo la mujer antes de colgar sin esperar alguna otra palabra de parte de Jimin y eso le dolió al chico sin duda alguna, con una presión en el pecho y estando seguro que algo malo definitivamente había pasado para que su madre lo hubiera tratado de esa manera tan molesta y cortante.
Jimin se quedó pensando en eso por mucho tiempo, tratando de buscar una solución o una explicación que no fuera la él creía desde el momento en que su madre preguntó por Jungkook.
¿Es posible que su madre se hubiera enterado de los vídeos que hicieron?
- Hola Minnie. - habló Jungkook entrando al departamento, sacándolo de sus pensamientos, acercándose a él para darle un beso como usualmente lo hacen.
Jimin correspondio al beso aún con el dilema en su mente y nudo en su garganta por la angustia que lo consumía.
- ¿Sucede algo que deba saber? - preguntó el rizado, notando el cambio de actitud del castaño.
- Jungkook, creo que... ¿Estoy en problemas? - dijo confundido sin saber que decir exactamente.
- ¿Qué sucede? - cuestionó preocupado.
- Mamá quiere que vaya a verla, pero su voz sonó tan molesta y decepcionada que no sé que pensar. - dijo suspirando pesadamente.
- Minnie, tal vez no estaba de humor o...
- Creo que sabe lo nuestro. Los vídeos... quizás ya se enteró sobre eso. - interrumpió el castaño angustiado.
- No creo que sea eso. - negó Jungkook.
- Yo si, algo me dice que es eso. Su actitud fue tan distinta. - murmuró Jimin.
Jungkook torcio los labios y sintió culpable de alguna manera, porque todo eso de los vídeos fue idea suya y tal vez si nunca lo hubiera comentado a Jimin o si quiera hubiera cruzado la idea por su mente, Jimin estaría tan preocupado y angustiado como esta en esos momentos.
- Jungkook, no sé que somos exactamente en estos momentos, pero creo que lo mejor es que nos demos uno tiempo. - habló Jimin llamando la atención del rizado.
- ¿Eso es lo que quieres?, ¿Un tiempo? - dijo Jungkook un poco alterado.
- Si, creo que es lo mejor en estos momentos, por lo menos en lo que arreglo lo que esta sucediendo con mi madre. Solo es un poco de tiempo.
- Un poco de tiempo. - repitió Jungkook haciendo una mueca con sus labios. - ¿Qué se significa exactamente? - preguntó.
- No lo sé Jungkook. - murmuró el castaño sinceramente.
- Bien. Lo entiendo. - dijo el ojiverde asintiendo.
- Aún estoy enamorado de ti Jungkook, no lo dudes. - dijo Jimin mirando al más alto a los ojos.
- Yo también estoy enamorado de ti. - respondió Jungkook con una sonrisa.
Quizas un tiempo era exactamente lo que necesitaban ambos.
Jungkook solo espera que esto no sea otra mala idea.
『 ... 』
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro