el sonido que indicaba que el celular de aquel chico de pelo castaño se estaba quedando sin batería lo sacó de sus pensamientos, volteó a todos lados para ver si había un cargador pero no tuvo suerte.

se levantó rápidamente de la cama antes de que su celular terminara de morir. salió de su habitación y dió unos cuantos pasos para llegar a la habitación de su mejor amigo, doyoung, abrió la puerta rápidamente sin tan siquiera avisar, su celular ya tenía el aviso de que estaba a punto de apagarse. al entrar lo primero que pudo visualizar fue a un tierno doyoung con un libro seguramente leyendo envuelto en sus sábanas. en ese momento taeyong se olvidó que a que iba.

— ¿vienes por tu cargador, verdad? — dijo aquel chico de una manera indiferente.

— oh, ¡sí! — dijo taeyong acercándose al escritorio enfrente de la cama del contrario para tomar su cargador, intentó prender el celular pero ya se le había acabado la batería. <<¿cómo se pudo haber acabado si hace un segundo que entré acá?>> pensó taeyong, realmente cuando estaba con doyoung el tiempo pasaba muy rápido, al pensar en esto el coreano se sonrojó un poco.

realmente el mayor no podía irse de donde estaba doyoung sin antes molestarlo aunque sea un poco, entonces este se acercó lentamente a la cama del menor para con su dedo tocar los labios de este, siempre hacía esto para molestarlo y él siempre levantaba su brazo en forma de amenaza, pero esta vez doyoung sólo levantó la vista de su libro y lo miró.

— te ves lindo cuando haces eso, ¿sabes? — dijo el mayor apreciando los ojos contrarios.

— no es cierto. — dijo volviendo la vista a su libro para cortar el contacto visual.

— ¿por qué crees eso? a mí me gusta, te hace ver tierno. — dijo el peli castaño.

— ¿que no venías por tu cargador?

— ah, sí, siempre que estoy contigo se me olvida todo, lo siento. — contestó indiferente.

— es porque te gusto. — dijo el menor volteando la hoja de su libro sin la mínima intención de hacer contacto visual.

— sí... — dijo taeyong sin pensar mucho en sus palabras es como si hubiera olvidado que estaba hablando con él, simplemente dijo lo que su menté le pidió decir, sin saber que él mismo se habría expuesto. — ¿ESPERA QUÉ? O SEA, NO, NO DIJE ESO, O SEA, NO, O SEA, SI PERO NO, PERO, O SEA- —

— sabes, ya me voy. — dijo con su cara completamente roja igualándose a un campo de rosas rojas.

doyoung sólo respondió con una risa, mientras taeyong corría para poder salir rápidamente de ahí. el mayor se posó una última vez en el marco de la puerta para poder hacer contacto visual con su menor, doyoung se dió cuenta y lo volteó a ver.

— ya lo sabía. — respondió el menor de forma burlesca.

esto hizo que el peli castaño se decidiera a salir corriendo de la habitación ajena, escuchando las risas del contrario de fondo.

y así fue como lee taeyong se expuso a sí mismo por querer halagar a su lindo amigo.