Salir por su primer aniversario había sido buena idea, Yoko estaba contenta de festejar su primer año de matrimonio junto a Faye. Mas ahora, mientras busca en su armario, no cree ser capaz de verse especialmente bien para la noche. Sus inseguridades causan que toda su ropa de repente se vea fea.

Está parada frente a sus vestidos y ninguno le llama la atención. Frustrada, ella suspira y se apoya contra la pared.

Faye aparece en ese momento, terminando de colocarse el reloj en la muñeca, viendo como su esposa está enojada y cruzada de brazos. Ella sonríe porque la conoce, Yoko siempre busca la forma de ser totalmente perfecta y noches como esta la ponen aún más exigente con su apariencia. Desde la semana pasada, Faye ya sabía que esta situación se haría presente.

─Dejame elegir el vestido que usarás─murmura dandole un beso en la sien, Yoko asiente.

Yoko adora que Faye tenga tan buen gusto en todo, ella elegirá algo que no está viendo y la hará sentir a la altura.

Faye está usando pantalones de vestir y blazer color crema, mientras que su camisa es roja. Eso parece planeado cuando aparece frente a Yoko con un vestido nuevo, tan hermoso que la menor abre sus ojos asombrada, de un tono casi identico al rojo de su camisa.

─Sabía que esto pasaría─explica Faye─. Pasaste la última semana mirando vidrieras y no te decidías, así que ayer despues del trabajo pasé por la tienda que te gusta y me pareció perfecto.

Yoko toma el vestido, es abierto en la espalda y se ve ajustado. Ella sonríe. Faye ama cuando usa ropa así.

─Mujer que resuelve, me gusta─Yoko deja un besito en los labios de la mujer y corre hasta el baño.

─¿De verdad? Te he visto hasta el alma, Yoko─ríe la pelirroja.

─¡Cállate!