Capítulo 25: Bien entre tanto mal
Estaba manejando mi coche hacia el cementerio, iria a visitar a Jackson ya que anoche había soñado que el me decía que me extrañaba.
Luego de caminar unos diez minutos por tumbas llegue a la de Jack. Estaba lloviendo así que no había nadie.
Me arrodille y empecé a sentir el nudo en la garganta.
-Hola mi amor.-Comencé a decir. Siempre que venía hablaba en voz alta, así sentía el que me escuchaba.-No te das una idea cuanto te extrañó.-Dije con las lágrimas cayendo.-Los chicos también te extrañan mucho. Te acuerdas que te había contado que ya no corria con el auto desde que te fuiste? Bueno, comencé de nuevo. Se que es lo que te hubiera gustado. El primer lugar siempre lleva mi nombre, como vos me enseñaste.-Suspire.-Me haces mucha falta Jack, hay días en los que me siento tan sola, me duele el pecho al recordar que no te volveré a ver... que no podré compartir contigo ni un momento más, y me pasa por la mente que no te pude aprovechar. Los años siguen pasando y aún no caigo. Perdóname, si tan sólo yo hubiera..-Dije y mi llanto no me dejo seguir hablando.
Nose cuanto tiempo había pasado aquí, pero ya estaba oscureciendo asi que decidí ya irme a mi casa. Este no era un lugar lindo de noche.
Comencé a caminar pero estaba perdida, ya había olvidado donde estaba la salida. Siempre me sucedía lo mismo, me perdia a la hora de irme.
Mientras caminaba sentia que alguien me observaba. Voltee varias veces pero no veía a nadie.
En un momento veo a un tipo acercándose de frente a mi, se veía raro así que decido doblar a mi derecha pero ahí veo a otro tipo, miro hacia el otro lado y había otro.
Rayos. Los tres avanzaban hacia mi. Pegue un grito y comencé a correr, fue lo mejor que se me ocurrió hacer en ese momento pero uno de los tipos logró alcanzarme. Grité nuevamente pero luego el tapó mi boca.
-Tranquila nena.-Dijo.
Tenía una voz gruesa. Podía ver como se acercaban los otros dos tipos.
-Hola muñeca.-Dijo otro de los tipos, era alto y estaba en sus 40 años masomenos.
Sus manos fueron a mi cara acariciando mis mejillas suavemente. Otro de los tipos me sujetaba de atrás apoyandome en el. Que asco.
-Si te quedas calladita no te haremos daño.-Dijo el otro.-Eres muy bonita.-Dijo jugando con mi pelo.
En ese momento se me ocurria una grandiosa pero estúpida idea. Mordi la mano que tapaba mi boca y aproveché esos segundos para gritar lo más fuerte que pude.
Uno de los tipos golpeó mi cara con fuerza.
-Dije que te calles muñeca.-Dijo algo enojado.
Las manos de los tres tipos estaban sobre mi cuerpo, mis lágrimas caían sin parar. Porque debía pasarme esto? Cerré los ojos aceptando lo que estaba por pasar pero en ese momento dejó de sentir las manos sobre mi cuerpo.
Abro mis ojos y veo a Zayn y Ares golpeando a los tres tipos.
Yo aun estaba en shock.
-Aliss, estas bien?-Pregunto Ares acercándose a mi mientras me miraba de pie a cabeza.
No podía hablar así que sólo hundi mi cabeza en su pecho mientras las lagrimas caían. El me abrazó con fuerza.
-Ya está Zayn, dejalos. Llama a la policia.-Escuche que decía Ares aún abrazandome.
Zayn seguía golpeando a los tipos sin parar. Estaba totalmente descontrolado.
-Zayn.-Grito Ares y Zayn lo miró.
-Tu sabes lo que iban a hacerle a Aliss estos degenerados si no llegábamos nosotros.-Dijo Zayn furioso.
-Pero llegamos y ya les diste su merecido, ahora llama a la policia y ven con tu chica.-Le ordenó Ares.
Yo seguia sin poder hablar. Zayn se acercó a mi y agarró mi cara suavemente para que lo mirara ya que estaba hundida en el pecho de Ares.
-Ven.-Dijo extendiendo sus brazos y yo fui hacia el.
Y ese momento me sentí segura, sabía que nada malo me iba a suceder si estaba con el.
-Gracias.-Dije luego de unos minutos.
-Toma mi camisa.-Dijo sacandosela.
-Por que?-Pregunté confundida cuando note que la mía estaba toda rota, así que se me veía todo.
Esos malditos habían roto mi blusa.
Tomé la camisa de Zayn y me la puse.
Luego de declarar lo que había sucedido en la comisaría, Zayn me llevo a su casa.
Estábamos sentados en el sillón cuando veo que Liam baja las escaleras.
-Oh Aliss.-Dijo contento saludandome.-Que les ha pasado?-Dijo al verme a mi y a los puños de Zayn y Ares.
Zayn y Ares me miraron a mi.
-Cuenten si quieren.-Dije acurrucandome en Zayn.
- Unos degenerados agarraron a Aliss en el cementerio y si no fuera porque Ares y yo la oímos gritar, nose que hubiera pasado.-Dijo Zayn cerrando los puños con fuerza.
-Y sabes como es tu hermano, casi los mata a golpes a los tres.-Dijo Ares.
-Veo que tu también les pegaste.-Dijo viendo los nudillos de Ares.
-Por supuesto que si, pero tengo mis límites y cuando vi que ya habían recibido suficiente fui a ver como estaba Aliss.-Dijo Ares.
-Y tu como estas?-Pregunto Liam sentándose a mi lado.
-Bien, gracias a ellos dos.- Dije mirando a los chicos.
-Que hacías ahí tan tarde?-Pregunto.
-Fui a ver a un viejo amigo y no controle la hora.-Dije encogiendome de hombros.
-Quieren tomar algo chicos?-Pregunto Liam.
-Yo ya debo irme.-Dije.
-Quédate esta noche.-Pidió Zayn.
-Oh no, ya me haz ayudado bastante.-Dije.
-Por favor, quiero que te quedes.-Dijo él mirándome a los ojos.
-Bueno.-Acepté finalmente.
Estaba acostada en la cama con Zayn a mi lado, ambos mirábamos el techo.
-Que hacías tu con Ares en el cementerio?-Pregunté.
-Oh nada.-Dijo el algo nervioso.
Me pareció raro pero no quize preguntar más.
-Y quien era tu amigo?-Pregunto luego de un rato.
-Jackson. Corria carrera de autos también, fue el que me enseñó todo.-Dije sonriendo mientras recordaba la primera vez que me enseñó a manejar.
*Flashback*
-Despacio despacio.-Decia Jack cada vez que arrancaba el auto.
-Tranquilo, ya le tome la mano.-Dije yo riendo cuando pum, un árbol se atravesó en mi camino.
Ups.
*Fin de flashback*
-Y que le paso?-Pregunto.
Y ahí fue cuando le conté toda la historia.
-Oh lo siento mucho.-Dijo el abrazandome.-Sabes que no fue tu culpa, no?
-Ajá.-Mentí.
Siempre me había culpado de la muerte de Jackson, si tan sólo no hubiéramos discutido antes el no hubiera manejado como loco y nada hubiera pasado.
-Aliss.-Dijo mirándome a los ojos.-Créeme cuando te digo que no fue tu culpa.-Dijo.
-Gracias.-Dije apoyando mi frente a la suya.
Y en ese preciso instante me di cuenta que lo queria más de lo que podía admitir. Y como podia dejar de querer algo que comencé a querer sin querer. Todo un trabalengua. Zayn me hacía tan bien. Una vez había escuchando una frase que decía "Nunca seremos tal para cuál pero podemos hacernos bien entre tanto mal" y eso me recordaba tanto a Zayn.
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