30 {FINAL}
Taehyung despertó en una habitación donde el color blanco era el protagonista, traía puesta su pijama favorito, al analizar el lugar pudo ver a Lyna que arreglaba unas bellas flores, ella pareció saber que su amado había despertado porque giró su mirada con una sonrisa hasta él. ─Señor mío, me alegra verte una vez más... ─dijo Lyna mientras se acercaba hasta él, mostrando esa sonrisa sincera que solo era para su señor.
─ ¡Amor! ¡Creí que no volvería a verte nunca!... creo que por fin acabe con mi vida ¿verdad? ─preguntó Taehyung abrazándose a la cintura de la joven, amaba hacer eso, de cierto modo dejo de lado el detalle de que pudo haber muerto, la emoción de ver a la mujer que lo cuidó día con día, su alma se sentía llena.
─No necesariamente, mi señor, yo solo pedí verte para pedirte que seas feliz, yo lo fui mientras estuvimos juntos a pesar de todo lo que vivíamos a diario, te amé. Pero me duele ahora ver que sufres por mi culpa, ya no lo hagas porque así yo jamás podré tener paz, piensa que siempre viviré en tu corazón, en tu mente pero solo como un recuerdo, porque tienes una hermosa vida por delante, en este momento hay alguien que está dando todo por ti, que mientras trata de hacerte volver sus mejillas se humedecen por las lágrimas porque te ama, se enoja contigo porque se preocupa. Por favor, vuelve y llénala de amor y caricias, ella las merece porque es buena y yo entonces podré descansar sabiendo que estas a salvo, siempre te amaré, mi señor... 一 finalizó Lyna y entonces lo besó, algo nostálgico y lleno de melancolía lleno la habitación.
Entonces Taehyung empezó a sentir que sus pulmones necesitaban oxígeno, que su garganta necesitaba ser liberada y abrió los ojos en medio de un ataque de tos sintiendo el sabor salado quemándole las fosas nasales, había agua que quería salir y logró sacarla, vio a Ivy que parecía asustada y llorosa tal y como se lo había dicho Lyna, comprendió su mensaje entonces. ─Niña... Tonta... ─dijo cansado y con trabajo mientras la veía desde la arena donde estaba acostado ─ven acá... ─la atrajo sobre él para abrazarla y quedar ambos frente a frente mirándose por un segundo ─también te amo... Quiero hacerte feliz, lo haré, te lo prometo ─Ivanna no podía hablar porque el miedo de perderlo podía más y descontrolaba sus ganas de llorar pero al sentir sus labios aprisionando los suyos supo que estaba en casa.
─Imbécil... Siempre me asustas, no quiero perderte, pensé que no ibas a despertar, estaba tan asustada... ─expresó Ivy al interrumpir el beso.
Ambos se fundieron en un abrazo tan fuerte, Taehyung entonces no pudo evitar que sus ojos también se humedecieran porque entendía que Lyna se había despedido de él para siempre pero le había dejado a esa niña tonta que ahora solo podía amar con la misma intensidad que a ella pero de una forma diferente.
El momento fue interrumpido por un carraspeo de garganta de alguien que estaba detrás de ellos, al volver la mirada se dieron cuenta que se trataba de Jin, los había estado observando seguramente quién sabe desde hace cuánto. ─Padre... ¿Qué haces aquí? ─cuestionó Taehyung moviéndose para tratar de ponerse en pie.
─Ivanna nos llamó, no dijo dónde estaban y recién llegamos pero no esperaba que hubieras hecho tanto desastre ─Habló Jin ayudando a su hijo a pararse.
Después de eso volvieron a casa antes de que la policía los vinculará con lo ocurrido, habían triunfado y todos los temores del joven Kim ahora se habían disipado, volvió a ver a su amada familia, necesitaba ayuda médica pero nada grave, también les explicó todo sobre Sao y lo que habían vivido.
De ese modo pasaron dos semanas, en las que las heridas sanaron pero que el joven Cheng tomó decisiones sobre su vida, así es como se encontraron en la terraza de la segunda planta de la casa hablando sobre lo que se vendría. ─ ¿Qué harás ahora?, tienes toda la fortuna de los Cheng para ti solo... ─preguntó Taehyung mientras llevaba un cigarrillo a su boca.
─Me quedaré en Corea, cambiaré mi nacionalidad porque no quiero nada de China, es como un infierno y no quiero vivir lleno de malos recuerdos... pronto seré Cheng Sohyung... ─respondió con una sonrisa al final y bebió de su cerveza.
─ ¿Hyung?, ¿acaso querías ser Tae Hyung? ─cuestionó con burla ─Tus hombres están intactos y puedes disponer de ellos cuando quieras, también tengo esto ─sacó un juego de llaves y se lo ofreció ─compré un edificio de condominio cuando era tú, Shun sabe su ubicación... ─explicó Taehyung sabiendo que para él era necesario empezar desde cero.
─Tú fuiste yo, yo podría ser tú, no somos hermanos pero parecemos, gracias por tu apoyo y por permitir que me salvarán, de verdad que fuiste el mejor compañero de infierno... ─agregó Sao con tono tranquilo.
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─Vamos a decirles ahora... quiero que sepan que nos amamos, no compartimos la misma sangre, ya no me quiero ocultar 一 insistía Taehyung ante la negativa de Ivanna.
─Está bien, pero igual temo su reacción... ─respondió Ivanna mientras dejaba que Taehyung le tomara la mano y comenzaron a caminar a la sala donde todos estaban reunidos.
Al verlos llegar, sabían que algo iban a decir y guardaron silencio a la espera de lo que dirían.
─Padres, madres.. Familia en general, Ivanna y yo queremos decirles que llevamos tiempo frecuentándonos, no como hermanos, si no como pareja... ─Taehyung fue interrumpido por varios de sus familiares.
─Al fin, pensé que nunca lo iban a decir... ─respondió Jin desde su gran sillón en el centro de la sala.
─Ustedes ¿lo sabían? ─preguntó Ivanna con una expresión de sorpresa.
Taehyung no dijo más y se limitó a asimilar que era obvio que lo supieran, eran mafiosos que estudiaban a sus enemigos, cómo no iban a saber que ellos se amaban en silencio.
Las chicas volvieron a la universidad después de todo lo ocurrido, ninguna iba a contraer nupcias antes de la universidad pero eso no impedía que vivieran una relación sana y llena de amor, Taehyung volvió a ser el Ceo más importante de Corea y RockB el gánster más poderoso en Asia, los Kim controlaban libremente los tres continentes, la mansión Park volvió a levantarse gloriosa como antes y ahora resguardada a los jóvenes Park, Any y Jimin pero también a dos hermosos gemelitos fruto del amor entre el Dragón azul y Jade.
Para Taehyung las cosas eran diferentes y su familia estaba a salvo, Jin podía ver a su hijo realizarse y él volvió a su vida tranquila pero ahora llevando las precauciones necesarias para que nadie nunca volviera a ponerle las manos encima a su adorado hijo, dentro de los Narcos también había bondad y amor, solo debemos conocer bien a las personas antes de juzgar.
Quiero agradecer a todos los que se tomaron el tiempo de leer esta saga, recuerden que debemos amarlos a todos por igual.
También quiero invitarles a que se unan al grupo de WhatsApp que mis amigas y yo hemos creado, por todo gracias.
ATTE: TAEFAN229
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