27
Los Kim estaba bajando a la zona del laboratorio, era un lugar subterráneo que estaba protegido con puertas y paredes de acero en su mayoría, al estar cerrado el lugar se convertía en una base totalmente hermética y solo Howie les podía abrir la puerta que ellos necesitaban para ingresar y cumplir con su ataque, se les abrió la entrada principal y entonces se encontraron con hombres que intentaban atacarlos pero ellos estaban más preparados y los aniquilaron a todos, el truco era no dejar que ellos reaccionarán antes y tampoco sentir alguna emoción al disparar, los tres eran iguales, máquinas de destrucción que en esos momentos no conocían la compasión. Fue así hasta que se encontraron cara a cara con Chuy, quién permanecía encerrado en el laboratorio especializado para drogas, específicamente en el proyecto dominación como él lo llamaba, estaba frente al Narco, derrotado, no había escapatoria, todos sus hombres estaban vencidos y muertos para ese momento.
─No hemos encontrado a Kai por ninguna parte, eso solo significa que sabías que te íbamos atacar, por eso lo ocultaste, debes haberlo enviado lejos para que no fuera atacado, proteges a tu hijo para buscar lastimar al mío, esto es tan irónico... ─expresó Jin mientras llegaba hasta la pared de cristal reforzado.
─Tu hijo debería sentirse afortunado de haber sido tratado como a uno de los míos, Kai está lejos, es verdad sabía que tarde o temprano iban a atacar aunque no pensé que lo hicieran aquí primero pero volviendo al tema, Taehyung fue traído aquí y llevado bajo las mejores condiciones médicas para que saliera del coma, tenía que ser educado por eso Kai lo trató así, también porque jamás dio información sobre ustedes. Mi hijo tuvo que ablandarlo para que se quedara tranquilo... ─dijo Chuy sabiendo que haría enojar a los Kim con aquellas palabras, estaba vencido, lo sabía, lo único que hacía sentir bien era saber que le había hecho demasiado daño al hijo del que sería su verdugo.
─Mi hijo es fuerte y volverá a ser el mismo con una dura experiencia, se va encargar de Kai el personalmente porque me lo pidió y se lo voy a conceder. Pero volviendo a ti, tengo algo más preparado, es tu final Chuy, en este momento nuestros hombres están sacando de circulación a tu gente y entregando los locales a los japoneses, destruiste lo poco que quedaba de la tríada, Chuy, con tus acciones me llevaste a conseguir tu destrucción y te juro que no me arrepiento, porque nadie que sea tan vil o demente como tu merece tener un ápice de poder ─habló el Narco con esas palabras que a Jin le salieron del alma, lo había enfurecido el solo pensar en todo lo que Taehyung vivió.
─No creo que lo logre, recuerda que está contaminado por grandes cantidades de mi suero, tuvo hemorragias muy fuertes la última vez que se lo pusimos, el daño cerebral es permanente y sin los medicamentos que le suministramos para mantenerlo no va a vivir mucho tiempo porque su cerebro lo necesita, el suero era una mezcla de escopolamina, heroína y azaspironas, esto le crea una gran dependencia, lo estuve medicado desde que estaba bajo tus alas, en el hospital en Liverpool, amenace a su médico. Taehyung está por vivir un colapso nervioso que puede inflamar sus vasos sanguíneos cerebrales, sabes lo que eso significa, dolor intenso y hemorragia, gradualmente será llevado a la muerte entre un sufrimiento horrible porque así lo programé, sé que vas a matarme, pero me llevaré a tu amado hijo conmigo, a lo mejor que una vez los Kim tuvieron, luego de matarme será mejor que vuelvas con él y disfrutes cada momento que él viva, porque podrá ser el último... ─alegó Chuy sin mostrarles temor, había venido preparando aquel contraataque desde hacía mucho tiempo y ahora la cara de su enemigo que denotaba angustia era lo mejor que podía llevarse a la tumba.
Los Kim escucharon aquello y de verdad sintieron rabia, impotencia y ganas de sacarles las entrañas a todos los que ahí estaban, pero Jin parecía no reaccionar, su procesión estaba en el interior, no le iba a dar el gusto a Chuy de verlo mal, solo dio la orden. ─ ¡Howie, enciéndelo!.. ─vociferó al comunicador, pronto y después de su orden, los rociadores contra incendios empezaron a liberar un líquido que al tener contacto con la piel les quemaba a los científicos que estaban atrapados con Chuy, trataban de salir mientras gritaban pero no podían.
─Ácido, ingenioso, pero demasiado tarde, eso no retrocede el tiempo, sabes que me lo llevare tarde o temprano ─retaba Chuy mientras sentía su piel arder, no buscaba huir simplemente estaba listo aceptando su destino. Permanecía firme sin importarle el dolor.
─Señor, el combustible está mezclado, solo necesitan una chispa para que el fuego inicie ─habló Howie al oído de Jin a través del comunicador.
─Junho, está listo, puedes hacerlo... ─había en una de las puertas una pequeña hendidura por la que el mencionado colocó su rifle, tenía un pequeño explosivo que enviar al interior del laboratorio para incendiarlo, quería ver a Chuy quemarse. Fue en cuestión de segundos que Junho lo hizo y las llamas empezaron a expandirse por el lugar, Chuy vio directo a los ojos a Jin antes de que las llamas lo alcanzarán, Nam y Jin vieron como aquel hombre intentaba apagar lo que su ropa quemaba, trataba de huir pero era inevitable, su piel ahora ya no se quemaba por el ácido sino que por el fuego, los gritos de horror y dolor de Chuy se mezclaban con los de los demás que estaban muriendo con él, pronto lo vieron caer quizá agonizando en medio de aquel infierno.
─Está muerto... ─dijo Nam viendo el cuerpo calcinándose entre las llamas, no sentían pena por él, solo odio y querían lo mismo para Kai pero era tan cobarde que estaba huyendo.
─Quiero que destruyan este lugar, hay suficiente TNT para dejar un cráter, no quiero que Kai tenga donde llegar, los japoneses deben sacarlo de donde sea que busque asilo ─Jin sabía que aquel joven buscaría vengarse y si lo que Chuy había de Taehyung era verdad, este no estaría en condiciones de enfrentarlo y sería su trabajo hacerlo.
Tal como el Narco lo había ordenado, el explosivo fue instalado, ellos salieron y todo voló en mil pedazos cuando estuvieron a una distancia prudente, el lugar de martirio de Taehyung no existía más, ahora solo era ruinas y cuerpos calcinados. Los tres Kim veían desde una pequeña colina aquella explosión y sentían una extraña tranquilidad permaneciendo en silencio.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro