─Lo único que me importa es que yo te amo, porque lo que hemos vivido juntos simplemente borra todo lo que hayamos hecho y más si fue sin querer─ decía Any mientras permanecía sentada sobre Jungkook con el rostro oculto en el cuello de este.

─Esto es el sueño más hermoso que pude haber tenido en la vida, la mujer más hermosa ante mis ojos ahora me dice que me ama y yo te adoro vida mía─ respondía Jungkook recorriendo las piernas de su chica.

Los besos volvieron a llenarse a de calor, lentamente las manos de Jungkook desataron el pequeño nudo en la camiseta de Any y lograron entrar bajo la blusa para subirla y dejar a la vista un delicado sostén liso blanco, que protegían unos seductores pechos que no dudo en tocar por encima de la prenda, mientras sus labios seguían unidos.

De nuevo bajo con sus labios hasta el cuello blanco de la joven mientras que sus manos liberaban el sostén que cayó de un momento a otro en el piso, para que el joven pudiera disfrutar de aquellos delicados senos que ahora haría suyos suavemente y sin presiones, con amor.

Pronto se movió para colocar a la joven sobre su espalda en el sofá para después recorrer su cuerpo sobre la piel al descubierto, las manos de este viajaron hasta el pantalón de la chica para comenzar a sacarlo también, pudo ver entonces que traía un lindo conjunto blanco, eso lo hizo sentir bien porque cuando había llevado antes a una chica a la cama había sido por necesidad y está siempre usaba ropa para seducir, pero Any era diferente, estaba enamorada y aunque sabía que no era virgen, había algo de inocencia en ella y aquellas prendas lo demostraban, ella era todo lo que siempre esperó.

la observó por un momento y vio en ella una dulce sonrisa, se movió para sacar su propia camisa, luego volvió a bajar hasta los labios de su amada quién lo recibió con tanta ternura que él solo pudo recorrer su cuerpo con las manos pero sentía que eso no era suficiente porque esa joven lo tentaba más a cada segundo, sus labios fueron bajando por aquel lienzo blanco que tenía para dejar su huella, una marca de amor que hacía tiempo necesitaba poner en alguien como ella, justo como ella, estaba totalmente enamorado de la mujer que menos llegó a imaginar.

Llegó de ese modo hasta el ombligo de Any donde jugó a hacer círculos para provocarla al máximo y le estaba funcionando pues la joven sentía como su cuerpo empezaba a ponerse ansioso y el deseo aumentaba cada toque, pero fue más cuando de un momento a otro el mayor se movió para sacar su pantalón para quedar en ropa interior también, ella admiró la anatomía bien trabajada de ese hombre que tanto la enamoraba y que ahora deseaba más que nada en el mundo, su cuerpo pedía a gritos ser suya por completo.

─Sí continuó ahora no podré detenerme después─ dijo Jungkook mientras besaba uno de los pechos de la joven y una de sus manos acariciaba la orilla del elástico listo para desalojarla del cuerpo de su amada.

─Por favor no te detengas... ─ dijo Any sintiendo como el deseo la invadía.

Entonces prosiguió a desnudarla por completo para luego también él hacerlo y quedar en igual de desnudez, entonces siguió justo donde se había quedado, bajando desde su ombligo lentamente hasta su monte de venus, donde pudo abrir las piernas de la chica para besar la parte interior de estas y luego hacer un camino hasta su entrepierna donde su prodigiosa lengua empezó a jugar con su clítoris.

La tortuosa felación estaba enloqueciendo a la joven que solo podía tomar fuertemente el cabello de aquel que la estaba haciendo suya en ese momento, lo gemidos de la delicada voz de Any solo hacían excitar aún más a Jungkook quién ahora buscaba la manera de llevarla al orgasmo y lo estaba haciendo muy bien pues por más resistencia que Any pusiera, sabía que en cualquier momento el clímax llegaría y no podría evitar correrse en la boca de ese hombre que la estaba haciendo sentir tantas emociones que antes no sintió.

Así fue, Any dejo salir su cálido órgasmo en la boca del mayor quién lo recibió gustoso, se movió para abrazarla fuertemente sintiendo como su cuerpo aún temblaba después de aquella desbordante y apasionada situación que acaba de vivir, pero no terminaba ahí pues mientras los labios de Jungkook ahora se adueñaban lentamente del cuello y oídos de la chica, los dedos de este estimulaban la intimidad de Any para hacerla humedecer nuevamente, quería que ambos disfrutaran por lo que a pesar de estar lubricada quería que fuera lo suficiente para que la penetración vaginal fuera placentera para ambos.

Y así fue, llegó ese momento en el que Kook se posicionó en el lugar justo para comenzar con la penetración lentamente, Any sentía que se estaba enloqueciendo por la pasión, se aferró fuerte a su espalda mientras que la desesperación la controlaba, lo deseaba más y más profundo, sus piernas se habían enredado en la cintura de su pareja y literalmente le daban la señal para que continuara de inmediato con las embestidas, la ansiedad y pasión eran lo único que la joven lograba reconocer y asimilar, Jungkook captó bien el mensaje y de inmediato comenzó a moverse de modo rítmico atendiendo la petición tácita de su ahora mujer.

Jungkook sentía como era él ahora el enloquecido, las uñas de Any se clavaban en su espalda mientras que él aumentaba cada vez más los movimientos, era apasionado y tortuoso, desesperación y deseo era lo único que había en aquella terraza donde nadie era testigo más que solo el ambiente, Kook iba avanzando cada vez más al mismo tiempo que Any , tanto que luego de varias de estas, los movimientos se volvieron más lentos y profundos y los gemidos de Any más desesperados al igual que los gruñidos provenientes de la voz de Jungkook. El orgasmo se hizo presente entre ambos, se aferraron al cuerpo del otro, hasta que pudieron reaccionar.

─Esto ha sido como tocar el cielo con las manos, Any te amo... ─ expresó Jeon tratando de controlar su respiración.

─Quiero ser tuya siempre, quiero que esto jamás se termine, te amo ─ respondió Any, se refugiaba entre los brazos sudorosos de ese hombre fuerte.

De ese modo la joven pareja sellaba el amor que tanto se profesaban.