En aquella zona donde sus habitantes eran de escasos recursos, los rumores de una joven desaparecida empezaron a esparcirse pero no contaban con que uno de los que ahí residía la tuviera en su poder, simplemente entendían que al ser una niña rica los peligros la acechaban y debía tener más cuidado, además que andaba haciendo alguien de la alta sociedad por aquellos lugares.

Pero en el pequeño apartamento la joven lesionada empezaba a despertar, recorrió con la mirada todo el lugar que le pareció totalmente desconocido, aun no reaccionaba lo suficiente para estar asustada, sus pensamientos pronto la llevaron a recordar lo que había ocurrido antes de despertar en ese lugar.

─Por fin despiertas... me tenías preocupado... ¿te puedes levantar? ─ pregunto Jeon en un tono serio.

─ ¿Dónde estoy? ─ fue la respuesta de la chica con una voz rasposa y forzada.

─En mi casa, te encontré herida y quise ayudarte... ─ las respuestas del mayor eran tan obsoletas y forzadas, incluso un poco enfadadas.

─ ¿Por qué no me llevaste a un hospital? ─ insistió la chica reaccionando un poco más.

─Escúchame niña, soy una persona pobre que no tiene un centavo partido por la mitad y andaba por la calle en la noche luego de departir con mis amigos, te encontré y en medio de una calle desierta ¿y querías que te llevará a un centro médico?, ¿para qué?, ¿para qué me acusaran de haberle hecho daño a una niña rica?, ¿para qué me hicieran preguntas que yo no sabría contestar?... ─ se sentó en la cama frustrado, en realidad estaba preocupado porque ya se sabía del secuestro y que nadie le iba a creer que todo había sido un accidente y más cuando supieran que había sido él quien la había arrollado.

Anyhan lo pensó por un momento y entendió lo que ese muchacho le decía pero lo empezó a ver preocupado y no molesto, entonces sintió que quizá no había nada que temer ahí y solo debía llamar a su casa para que la fueran a recoger y de ese modo podrían darle una buena recompensa a quien la había ayudado, con esfuerzo se sentó sobre la cama y entonces la habló.

─Escúchame, mi familia te puede ayudar, llévame a casa y yo les diré lo que has hecho por mí y les pediré que te recompensen por ello... ─ la voz de ella se escuchó más clara que segundos atrás, también parecía más despierta para ese momento.

─ ¿Eres Park Anyhan? ─ preguntó girando un poco la mirada para verla a la cara, de cierto modo tenía la esperanza que no fuera ella la chica que la policía buscaba desesperadamente.

─Sí, soy yo... ¿encontraste mis documentos? ─ fue ella quien esta vez tenía sus dudas porque no había visto su cartera por ninguna parte, tampoco su celular.

─No, cuando te encontré no tenías nada contigo, solo estabas tú... el problema es Anyhan que la policía te está buscando porque piensan que fuiste secuestrada luego que encontraran tu vehículo con todas tus pertenencias en él, por eso no puedo llevarte a tu casa o llamar para que vengan por ti, las personas como nosotros no tenemos privilegios ante la sociedad, dirán que te secuestre y que luego me arrepentí... ─ explicó Jeon demostrando el porqué de su preocupación.

─ ¿Secuestro?, pero si no le has pedido nada a mi familia no tiene por qué creer eso... ─habló la chica comprendiendo en qué problema se había metido aquel hombre que la había salvado. ─déjame llamar a mi casa, ellos entenderán si yo les explico... ─ insistió la chica.

─Está bien, pero no lo harás desde mi teléfono, no quiero correr un riesgo innecesario, saldré un momento para conseguir uno desechable que no puedan rastrear, por ahora come... ─ se puso en pie y se colocó su chaqueta dispuesto a salir.

─Oye, ¿tienes nombre? ─ preguntó Anyhan antes que este saliera.

─Puedes llamarme Kook... ─ respondió justo antes de salir.

Mientras Jeon buscaba una salida viable a su problema, el antes mencionado Rock Bison había enviado ya a uno de sus hombres a buscarlo para hacerle saber lo que su jefe quería, al que llevaba implícito condiciones y consecuencias en caso de este se negara, Jungkook justo estaba llegando al taller de su amigo Hobi, en el cual había alguien esperándolo precisamente para eso.

─ ¡Jeon! ─ dijo G-Dragon antes que el nombrado entrara al taller pero cuya acción no había pasado desapercibida por Hobi quién de inmediato alertó a los demás que ahí se encontraban.

─ ¿Qué quieres, G? ─ dijo Jungkook con algo de irritabilidad ante la interrupción ─ ¿a qué te ha enviado tu amo y señor esta vez? ─ continuó ahora agregando una risa sarcástica.

─Mi señor, como tu bien dices... me enviado a informarte que te espera esta noche en la avenida, tendrás el honor de enfrentarte a él directamente, algo que no pasa todos los días, habrá mucho dinero de por medio y los equipos, ¿imaginas ganar CB125R Custom? ─ habló aquel hombre de cabello verde con aires de grandeza.

─Lo siento pero paso, además puedo comprarme una de esas con lo que gano en una apuesta con gente decente, dile a tu jefe que declino, no es mi culpa que TOP haya sido un incompetente y haya perdido una Forza misma que ya vendí y no va a recuperar... así que con tu permiso... ─ terminó y se proponía a entrar cuando de nuevo fue interrumpido.

─No te conviene enojar a RockB, sabes lo difícil que es... ─insistió el mensajero.

─No es mi culpa que tengan por jefe a un niño malcriado que no sabe controlar su carácter... ─ se abrió paso haciendo a un lado al sujeto y ya no vio atrás.

El visitante lo vio entrar y puso expresión de frustración pues sabía que las cosas se habían complicado para ellos a partir de ese momento, su jefe no aceptaba negativas. Pero Jungkook tampoco era de esas personas que se dejaban manipular, no tenía familia con la que lo amenazaran, prácticamente no tenía nada que perder y eso por una parte lo calmaba, tenía la libertad que siempre quiso, ahora lo que preocupaba era resolver el asunto del supuesto secuestro.