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𝟭𝟮 | Pelea

CAPÍTULO 12

𝐍𝐀𝐈𝐀
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—Todo va a estar bien... Todo va a estar bien... —me repito una y otra vez. Mi respiración es errática y siento que dentro de este cubículo de baño me está faltando el aire.

Abro una vez más esa foto que un número desconocido me envió. Era una foto de mí tomando el autobús de hoy.

La idea de que uno de ellos otra vez me esté acosando luego de haber soñado con esa noche, simplemente me parecía un mal chiste. ¿Cómo se supone que deba de reaccionar a esto? Si ellos ya saben qué autobús tomo y hacia dónde me dirijo todos los días, no habrá que esperar mucho para que me los encuentre algún día saliendo de la universidad, de noche para variar.

—¡¿Naia?! —escucho a Lisa entrar a los baños—. ¡¿Naia, estás aquí?!

Intento regular mi respiración para salir de mi escondite. Por el momento le doy una respuesta afirmativa a Lisa para que no se preocupe, tartamudeo al hacerlo y me doy un golpe en la frente internamente por haber sonado así. Doy una última bocanada de aire antes de salir y caminar hacia los lavabos, ahí estaba la pelinaranja con su semblante de preocupación.

—Oye, ¿estás bien? —me pregunta—. Saliste corriendo así de repente.

—Estoy bien —le contesto mientras me voy lavando las manos y luego agarro un poco de agua para lanzármelo a la cara—. Solo me urgía bastante ir al baño.

—No es verdad. —Protesta. Le doy una mirada burlando por el espejo antes de seguir con lo mío—. Te fuiste así como si quisieras esconderte de alguien... Viste tu teléfono y corriste.

—No fue nada. Lo juro.

Lisa se cansa de preguntarme y al final acepta creer en mi mentira. Después, ambas salimos del baño para dirigirnos a la cafetería, en donde supongo que nos encontraríamos con las otras chicas y Jungkook.

Y tal vez también esté Joo-hwan.

Durante el camino, Lisa y yo fuimos hablando sobre la pequeña disputa que se haría entre Kyung-joo y yo para ver quién se queda con la categoría de Solo Femenino. De paso, Lisa me estuvo contando lo encaprichada que la chica de pelo platinado era con esta parte de la competencia, puesto que ella ha sido mayormente la representante del equipo; sin embargo, nunca ha logrado ganar esta categoría ya que, en palabras de Lisa, sus coreografías siempre suelen ser muy flojas y extensas. También me contó que las únicas veces que han podido pasar a la siguiente ronda por haber ganado en esta categoría fue porque ella o Sooyoung han representado al equipo.

En pocas palabras, Kyung-joo parece estar obsesionada con el hecho de ganar en la categoría de Solo Femenino.

Llegando a la cafetería de siempre, buscamos entre todas las mesas a nuestros amigos; pero nadie estaba aún. Lisa fue apartando una mesa mientras que yo me iba a calentar los panqueques que Soomin me había preparado. Esta vez sí se esmeró mucho.

Para iniciar, utilizó el último táper que se compró solo para mis desayunos. En la parte de las orejas habían unos recipientes pequeños con mermelada, dulce de leche, leche condensada y mi favorito, Nutella; después, la cara del oso estaba dividida en cuatro partes, como si fuese una pizza. En el lado izquierdo superior estaban los mini panqueques que me había hecho —supongo que de avena—, a su derecha habían fresas picadas en rodajas, en la parte inferior derecho había un poco de huevo revuelto y a su izquierda habían uvas verdes y moradas cortadas a la mitad.

Lo bueno de este táper es que estas cuatro divisiones se podían quitar, así que saqué la de los panqueques y lo metí al microondas para calentarlos unos veinte segundos como máximo. A parte de ello, también saqué la botella térmica de mi lonchera. Supuse, y estoy casi segura, de que Soomin me ha servido té para que digiera mejor la comida.

Ya sé qué es en lo que sufriré para tomar.

No es que odie tomar infusiones, simplemente no es mi bebida favorita. He amado con toda mi vida el café para que pueda gustarme los tés; luego de que me diagnosticaron anemia, Soomin ha sido la primera en encargarse de no verme tomando nunca más café. Hasta prohibió a mi tía de comprarlo.

Si tan solo supieran las veces en las que le he desobedecido.

Veinte segundos después, el microondas suena y sacó rápidamente mis panqueques para dejarlos en su lugar. Agarro todas las cosas que traje y voy buscando a Lisa por toda la cafetería, las mesas comenzaban a llenarse al igual que el lugar y la tarea de encontrar a Lisa se hacía cada vez más difícil en este mar de gente.

Finalmente la veo sentada en su asiento mientras que va tomando agua en su termo de ejercicios. También veo que Jungkook ya ha aparecido y está perdiendo su tiempo mirando su celular.

No obstante, la mirada de ambos se anclan en lo que estoy sosteniendo entre mis manos como si fuese unos animales hambrientos. Lisa es la primera en meter su mano y robarme una rodaja de fresa, luego Jungkook toma un panqueque; pero lo termina soltando cuando se da cuenta de lo caliente que está.

—Déjame adivinar —habla Lisa antes de agarrarse otra rodaja de fresa—: Te lo preparó Soomin.

Esbozo una sonrisa como respuesta antes de buscar en la lonchera los palitos de ositos de colores que Soomin ha puesto para mí. Reparto uno a Jungkook y a Lisa antes de abrir los pequeños potes de mermelada, Nutella, dulce de leche y leche condensada.

—Me fui de casa sin desayunar —explico—; así que Soomin quiso hacerme esto.

—Tu prima es tan linda —comenta Jungkook mientras va embarrando el panqueque que agarró en dulce de leche—. Ya me gustaría que Lisa me hiciera algo así.

—Para que te lo haga primero es necesario que te quiera —responde gélida la pelinaranja.

Jungkook se queda triste por las palabras de Lisa mientras continúa robándome mi desayuno, es decir, sí les invité, pero para que probaran un poco, ahora él me está dejando sin panqueques y sin dulce de leche. Le quito el palito de osito y lo guardo de nuevo en mi lonchera.

Tiempo después aparecen Sooyoung y Kyung-joo. Esta última evita mirarme y dirigirme la palabra, Lisa y Jungkook lo notan; pero al igual que yo, le restan importancia.

Sooyoung se apodera del silencio que hay en la mesa para empezar a hablarnos a todos de su carrera de derecho. Ella y Kyung-joo estudiaban lo mismo, por eso es que ellas son más cercanas. Son alho así como lo somos Lisa y yo.

Casi cuando estamos a mitad de la hora punta para el almuerzo, Joo-hwan y sus amigos —menos Taehyung— se acercaron a la mesa con bandejas de comida. Al parecer el menú de hoy es Tteokbokki con guarniciones como gimbap de atún, kimchi, dedos de pescado y arroz blanco.

Lisa le empieza a robar comida a su chico mientras que entre todos nos vamos acoplando en el tema de conversación de Sooyoung y Kyung-joo.

—¿Y su otro amigo? —Sooyoung deja de hablar de sus maestros para preguntar con curiosidad por Taehyung a los chicos.

—¿Quién? ¿Taehyung? —Pregunta Yoongi.

—No sé cómo se llame. Pero es un chico de cabello negro y que últimamente ha estado juntándose con Naia —me señala con su dedo índice.

—Él es Taehyung —vuelve a decir su nombre—. Se ha ido a comer con su papá.

Así que el chico con problemas paternales se ha ido a almorzar con la persona que más estima en este mundo.

Ni las chicas, ni Jungkook ni yo volvemos a mencionar el nombre del chico azabache. Por otro lado, sus amigos se esforzaban cada vez más en nombrarlo para ver si aquello provocaba algo en mí.

Lo bueno de todo esta junta entre "amigos" fue que pude conocer mejor a Min Yoongi y a Joo-hwan. Min Yoongi está en su último año de carrera de Producción musical, tiene veintiún años y es un chico que he podido notar que no habla más de la cuenta; se mantiene al margen de todos y solo se centra en escuchar. Por otro lado, Joo-hwan es alguien que le encanta hablar y meter a todos en la conversación; asimismo, una característica que comparte con Taehyung es que ambos chicos son vanidosos, uno igual o peor que el otro, aún no lo descifro bien.

Ambos chicos que estaban sentados con nosotros parecían ser los extremos de la personalidad de Taehyung. Aunque falta el otro chico que siempre se sienta con Kim, puedo asegurar lo anterior.

—¿Cuántos amigos son en su grupo? —Pregunta Sooyoung.

—Somos cuatro. Nosotros dos con Taehyung y otro chico llamado Park Bogum —contesta Joo-hwan—. Este último es un comelibros, por lo que luego de clases se va a estudiar a la biblioteca. Casi nunca camina con nosotros.

—No por nada es el primer puesto en nuestro salón —añade Lisa mientras apoya su cabeza en el hombro de Joo-hwan.

Es increíble lo que las buenas compañías pueden hacer en el estado emocional de una persona. Hace minutos me encontraba entrando en pánico y ahora estaba riéndome de las cosas que Joo-hwan y mis otros amigos contaban como anécdotas.

De un momento a otro, Sooyoung y Joo-hwan comprometieron a sus grupos de amigos para ir a comer un día de estos, para ser más exactos luego de parciales. Así de rápido se puede congeniar con otras personas.

—Oye Naia —Jungkook pica mi brazo con su dedo índice para que le preste atención—, ¿te puedo acompañar a tu casa hoy?

—¿Por qué? —Fue lo primero que se me vino a la mente—. Es la primera vez que te ofreces a hacerlo.

—Porque quiero saber dónde vives —levanto mis cejas luego de escucharlo. Sinceramente eso no sonó nada bien; y segundos después, Jungkook también lo notó—. ¡No! ¡No quise decir eso! O sea, sí pero no. No lo tomes por la parte acosadora es solo que...

Jungkook comienza a hacer bastantes ademanes con sus manos a la misma vez que las palabras no le salen de su boca y solo tartamudea.

—¿Es solo que qué? —pregunto.

—Es que...

—A Jungkook le gusta Soomin —se entromete Lisa a nuestra conversación. Vuelvo a ver a Jungkook y él se encuentra matando con la mirada a la pelinaranja.

¿Me sorprende? No, porque notaba bastante interés de Jungkook en mi prima. Sin contar que de la nada la halagaba cuando la mencionaba.

—No puedo decir que me gusta —intenta aclarar—. Es linda, eso sí; pero quiero conocerla mejor y en la fiesta me olvidé de pedirle su número. Así que...

—Me quieres usar como medio para acercarte a ella —completo su idea.

—Sí. —Responde con un poco de vergüenza.

Mi mano ligeramente golpea la nuca de Jungkook mientras me muerdo el labio inferior. Esto me daba tanta gracia, nunca antes alguien me había utilizado para acercarse a Soomin y ahora está Jeon queriendo hacerlo.

Termino aceptando que me acompañe a casa. Los dos volvemos a escuchar a los otros chicos que ya están hablando de otro tema relacionado a sus maestros y compañeros de salón.

***

Terminadas la última clase del día, Lisa se va antes que yo debido a que su padre ya había venido por ella y la estaba esperando. Por otro lado, yo todavía seguía en la universidad esperando a que Jungkook acabara sus clases; me había jurado que terminaba a la misma hora que nosotras, pero minutos antes de que se acabara mi clase, él me envió un mensaje para decirme que lo esperara un poco más porque su maestro demoraría más. Así que lo que hice fue sentarme en los pasillos del edificio mientras que repasaba la clase de hoy.

Poco después me acuerdo de un pequeño detalle, el cual era avisarle a Miyeon de que llevaría a alguien a la casa. Lo más probable es que Jungkook cene con nosotras; y lo más probable es que cenemos pollo frito con soda, o cerveza, según lo que se le antoje a mi tía.

—¿Todavía sigues aquí? —Escucho a un chico hablarme. Miro hacia la dirección de donde proviene la voz y me encuentro con Taehyung.

—Hola. —Le respondo sin darle importancia.

Taehyung se acerca más a donde estoy yo, toma asiento justo a mi lado y arrima un poco más su cabeza a la mía para ver lo que estaba haciendo.

—Oye, ¿dónde quedó mi espacio personal? —Tae vuelve a mirarme sus ojos estaban la altura de mi nariz, se percata del acercamiento y se va alejando de a pocos—. Gracias.

—¿Qué haces?

—Estudiar.

—Pero acabamos de salir de clases —replica—. ¿Por qué no descansas un poco?

—Porque así me siento más cómoda, y ya deja de hacerme preguntas —finalmente me canso y le respondo de manera irritada—. ¿Tú por qué no te vas de aquí?

—Estoy esperando a mi padre —responde—. Tampoco tienes que ser tan grosera.

Tuerzo mis ojos antes de seguir con lo mío y dejar a Taehyung hacer lo suyo. No me vuelve a hablar pero siento su mirada sobre mí, aun así no lo reparo en él.

—En la mañana te vi algo...

—No comentes nada de eso —interrumpo de manera tajante—. Sé que me viste, pero te pido como persona que quiere que respeten sus asuntos personales que no me preguntes nada relacionado a eso o que lo andes diciendo por ahí si no te incumbe. Gracias.

—Iba a decirte si todo estaba bien —Taehyung recoje sus piernas a la altura de su pecho mientras que sus brazos se encargan de abrazarlas—. He visto que eres muy reservada y me pareció raro verte de ese modo.

—Ya te lo dije, si no te incumbe, no preguntes —digo sin mirarle a los ojos. Taehyung bufa a mi costado para otra vez callarse.

Pasan los minutos y mi celular recibe otra notificación de mensajes. Esta era de Jungkook para decirme que ya estaba en camino a mi facultad y que me esperaba en el primer piso. Es entonces que empiezo a guardar mis cosas en mi mochila para luego levantarme del suelo.

—¿Ya te vas?

—¿Tú qué crees? —pregunto con ironía—. ¿Acaso me seguirás?

Veo a Tae abultar sus labios a la misma vez que sus cejas se juntan y en su frente se forman unas arrugas. Él también se levanta del suelo para limpiarse la parte trasera de su pantalón holgado.

—Ahora la que parece que tiene un problema de ira eres tú —dice así de la nada antes de marcharse por donde lo vi llegar—. Solo quise ser amable —es lo último que dice antes de girar a la izquierda del pasillo.

Okey. Admito que Taehyung no hizo nada malo esta vez para que yo reaccionara como lo hice, pero de cierto modo esa era mi única forma para evitar que él me recordara lo de esta mañana. Igualmente no me funcionó porque al final terminó diciéndole. Y sé que no fue su intención, ya que él no sabe todo el contexto de mi alteración; pero... Ya voy diciendo muchos "peros". Está bien, la próxima vez que lo vea me disculparé con él por mi forma de actuar.

Sin más que decir, bajo por las escaleras hasta el primer piso para esperar a Jungkook. Él llega pocos minutos después y vamos caminando a la par hasta la parada de autobús que siempre tomo; mientras tanto vamos hablando de diversas cosas, entre risas y chistes nos vamos conociendo mejor.

Llegamos mi casa a eso de las siete con diez de la noche. Saco las llaves de mi casa y abro la puerta para que Jungkook entre primero, sin embargo, él me da paso a mí para que yo lo hiciera primero; así que quito la llave de la cerradura para pasar y luego dejar entrar a mi invitación.

—Voy diciendo que si en algún momento notas que mi tía te está observando mucho, es porque te está analizando —Jungkook asiente sin entender mucho y me sigue los pasos—. Es psicóloga, le gusta saber más de lo debido.

—Está bien, entiendo.

Cierro la puerta principal y llevo a Jungkook a la cocina para encontrarnos con Soomin terminando de preparar un pedido.

—Soomin, ¿te acuerdas de Jungkook? —la rubia alza su mirada en dirección a Jungkook. Ella asiente y vuelve a su postre.

Jungkook no sabe cómo reaccionar ante el rechazo que le acaba de dar mi prima. Lo mejor es que nos vayamos a la sala y dejemos en paz a Soomin, cuando se trata de sus postres no quiere que nadie la moleste.

Poco después, Miyeon baja por las escaleras vistiendo su pijama de seda blanca. Le da la bienvenida a Jungkook y lo invita a comer con nosotras, como era de esperarse. El chico acepta y, junto conmigo, va arreglando la mesa para servir la comida.

Al final no era pollo frito lo que comeríamos, sino pizza de carne y otra pizza con piña... ¿Jungkook será del team pizza con piña o sin piña?

Si es sin piña, entonces tendremos graves problemas luego de esta cena.

Miyeon luego se acercó a mí para pedirme que fuera a comprar unas sodas o alguna otra bebida al minimarket que estaba a unas cuantas cuadras de la casa. Jungkook escuchó su pedido y se ofreció a acompañar; asimismo, quiso invitar a Soomin a la salida, pero esta se había ido a bañar luego de haber terminado con su postre.

Con el ánimo por los suelo, saco a Jungkook de la casa y empezamos a caminar para ir a comprar.

—Ahora siento que fue una mala idea —Jungkook se burla de sí mismo mientras va arrastrando sus pies.

—Tranquilo, en la cena podrás conversar con ella. Al final Soomin es una chica bastante agradable —lo animo. Jungkook sonríe de lado, ocultando sus manos en los bolsillos de su chaqueta, me mira.

—¿Así como tú? —Pregunta de manera sugestiva y con cierto tono de voz que alteró la química de mi cerebro.

—Oye, oye, mide tus palabras —le advierto—. Sé karate.

—Y yo taekwondo —Jungkook empieza a hacer movimientos característicos de esta arte marcial para presumirlo—. ¿Cuándo quieres que peleemos?

Suelto una carcajada por su broma. Jungkook también sonríe, entrecerrando sus ojos y arrugando su nariz. Ambos entrelazados nuestros brazos y seguimos caminando, coincidiendo en el movimiento del pie.

Cuando ya habíamos llegado al minimarket, Jungkook se ofreció a pagar las sodas. Yo me quedé afuera del lugar esperándolo. Había una cantidad regular de personas pasando por aquí, a las ocho de la noche parece ser la hora más movida después de la hora punta en las mañanas. Algunos regresan de clases y otros de sus trabajos.

Vuelvo a mirar por los paneles de vidrio de la tienda para saber si Jungkook ya saldría o se demoraría más. Él ya se encontraba en la caja pagando lo que escogió y rápido salió de la tienda para darme el alcance.

—Compré Coca-Cola, ¿estará bien? —Asiento sin darle mucha importancia—. Mira, también compré papitas.

Jungkook saca de la bolsa una lata de Pringles para abrirla, tomar dos y llevárselas a la boca. Luego me extiende la lata que yo también agarrara.

—¿Quieres? —Pregunta con la boca llena.

Saco de la lata una papita para irla comiendo de a pocos. En frente de nosotros se aproximan un grupo de tres chicos que parecen ser mayores que nosotros, uno de ellos estaba fumando mientras que otro bebía una lata de cerveza.

Jungkook no se da cuenta de ellos y continúa hablándome de no-sé-qué. No obstante, todo cambia cuando uno de esos muchachos me habla de manera obscena mientras que el que estaba más cerca de mí me nalguea.

Inmediatamente reacciono y agarro al chico que me tocó de su cabello para girarlo y darle una bofetada. Jungkook rápidamente se mete y me aleja de ese hombre.

—¡No se les ocurra tocarme ni hablarme! —Digo alterada.

—Naia, Naia, tranquilízate —Jungkook me dice en voz baja. Repara en ese grupo que ya se estaba yendo entre carcajadas, luego me mira a mí y sos orbes van de un lado a otro sobre mi rostro—. Espérame aquí.

—Jungkook...

El chico me ignora por completo y camina en dirección a ese grupo para detener al que me había agredido y empujarlo contra un portón metálico de una tienda cerrada. Luego, el otro chico que me dirigió la palabra se mete para defender a su amigo y empuja también a Jungkook, casi logrando que este caiga al suelo.

Los tres chicos se enciman sobre Jungkook para levantarlo y empezar a empujarlo para ahuyentarlo. Sin embargo, Jungkook saca sus conocimientos de taekwondo y va golpeando a los chicos uno por uno. Claramente los otros no se quedan atrás y dos de ellos intentan sujetarlo para que el restante lo golpee.

Empiezo a alterarme por la pelea que están provocando y decido acercarme a ellos para llevarme a Jungkook lejos de aquí. Mi desesperación aumenta cuando el chico que me había tocado acorraló a Jungkook contra el portón de metal de antes para luego proporcionarle un golpe en la cabeza con su rodilla y dejarlo medio inconsciente en el suelo.

Los otros comienzan a reírse a la misma vez que lo van pateando en el abdomen. Jungkook ya no se levanta, solo se queda retorciéndose de dolor en ese mismo lugar.

Cuando estoy a punto de intervenir, una patrulla de serenazgo aparece por la calle y se estaciona para socorrer a Jungkook. Al parecer alguien más había estado viendo la pelea y los llamó.

—¡Malditos animales! —les grito con rabia a los chicos mientras los alejo de Jungkook.

—¡Bien que te gustó que te tocáramos! —responde el chico que antes tenía una cerveza en mano—. Naia.

Este chico que me llama, se quita la gorra blanca que traía puesta, misma que le ocultaba sus ojos, y veo que se trata de uno de esos chicos que abusó de mí esa noche.

Parpadeo varias veces mientras que veo al serenazgo llevárselos y meterlos en el auto. Fue tan rápido que no me dio tiempo de al menos hablarle a esas autoridades sobre lo que él me había hecho.

—Señor, uno de ellos agredió a mi amiga... —dice Jungkook entre jadeos.

Mientras que el pelinegro se encargaba de hablarle a los del serenazgo lo que había pasado, yo no dejaba de mirar a ese chico que ahora se encontraba dentro del auto. Lo recordaba con el pelo castaño, ahora lo tiene platinado y ha ganado un poco de peso; pero igualmente puedo decir que se ve en forma. También se ha tatuado y se ha hecho algunos piercings.

Poco después, Jungkook logra ponerse en pie y alejarme de ese lugar cuando los del serenazgo nos permitieron marcharnos.

—¿Por qué te ves así? —me pregunta Jungkook—. Tienes la mirada perdida.

—No es... No es nada —intento sonreír, pero la boca me tiembla y él se da cuenta.

—¿Estás segura? —Jungkook conecta su mirada con la mía. Estaba preocupando, su cara estaba haciendo ese gesto que no me gustaba—. Naia...

—¡Basta de mirarme así! —él frunce su ceño y se aleja de mí—. ¡No me mires con pena! ¡Lo odio! ¡Y-Yo... Yo estoy bien!

—Naia... Cálmate.

Mi respiración se vuelve errática. No hago caso a las palabras de Jeon y retomo la caminata, pero un poco más apresurada y dejando al pelinegro muy atrás.

Este me alcanza luego de un par de segundos. Evita que me mueva y su semblante se vuelve serio.

—Vas a decirme lo que te pasa —demanda—. Dime qué es lo que te pasa. Me preocupas.

—Jungkook, no te metas, son mis cosas. —Rezongo a la misma vez que mis manos tiemblan por soltarse de su agarre—. Te lo advierto, no te metas o sino...

—¡¿O sino qué?! —me alza la voz.

Me relamo los labios mientras que mis ojos tiemblan y miran los ojos de Jungkook.

—O te puedes olvidar de que alguna vez me conociste. —Le amenazo.

Jungkook suelta un suspiro de manera abrupta. No deja de agarrarme en todo momento y niega con la cabeza repetidas veces.

—Solo estoy preocupado por ti, Naia... —Jungkook se toma su tiempo para volver a hablar—. Uno de esos chicos te llamó por tu nombre, ¿ya lo conocías?

—Jungkook, no te impo...

—¡Sí me importa porque quiero entenderte! —Vuelve a gritarme.

La presión en mi pecho aumenta. Mis lágrimas salen como cascada, empapando otra vez mi rostro.

Jungkook vuelve a preocuparse pero espera pacientemente a que yo diga algo. Al final hablo y se lo termino contando todo con mi voz temblorosa.

Jungkook se vuelve la primera persona en saberlo.

Luego de terminar con toda la explicación de cómo es que conocía a ese chico, miro a Jungkook y él se encontraba también derramando unas cuantas lágrimas. No me dice nada, solo me abraza y acaricia mi cabello para reconfortarme.

—No le digas nada a Soomin ni a mi tía, por favor. Ellas no lo saben —Jungkook intenta hablar, pero lo detengo—. Tú eres la primera persona que lo sabe; así que, por favor, no traiciones mi confianza.

Jungkook asiente rápidamente. Se aleja de mí para solo dejar uno de sus brazos alrededor de mis hombros y seguir caminando a casa.

Llegando, lo primero que mi tía pregunta es si todo estaba bien con nosotros dos al ver nuestras caras largas. Jungkook le miente diciéndole que intentó detener una pelea de borrachos y que él también terminó recibiendo algunos golpes.

Soomin y mi tía comenzaron a curar a Jungkook en los lugares donde tenía pequeños hematomas de color morado en su cara. También le pusieron una crema para que redujera la hinchazón de los labios de Jungkook y luego ponerle una curita transparente en su labio, en donde tenía una herida abierta.

Luego de curarlo, Soomin y mi tía se dirigieron a la cocina. Una para guardar el botiquín y otra para servir las pizzas.

—Gracias —al estar sentada a su costado, me recuesto en el hombro de Jungkook y abrazo su brazo derecho.

Jungkook apoya su cabeza con la mía a la misma vez que suelta un resoplido cuando sonríe.

—Mientras que me tengas a tu lado, nadie te volverá a hacer daño —susurra cerca de mi oreja.

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No sé si ya lo he dicho antes, pero ya le estoy empezando a tomar cariño a esta historia. Lo cual significa que estaré actualizando más seguido 😍✌🏻

Pd. Quiero un amigo como Jungkook ;c

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