Me han dicho muchas cosas de ti, Kang Daniel, pero preferi no creer ninguna. Preferi creer en tus palabras, a las que verdaderamente querían lo mejor para mi.

Ahí estaba en tu cuenta de IG, justo con un sticker de una cara sonriente.

"Un 7, he estado con mejores. XD @ParkPark2 sigues siendo un 10 por tu boca.

Pero para ser todo virgen (ya no tanto, me encargue de quitar eso). Me atrevo a decir que estuvo excelente para ser su primera vez y tal vez para los siguientes que pasen por su culo lo encuentren un 9.

No tiene mucho culo pero lo compensa.

#ElDelMes #7 #OngSeongwuLoChupaBien"

Yo sabía que en esa cuenta eras tu, yo sabía que no podía hacer nada al ser tu padre dueño de una empresa multimillonaria. Iría a un juicio solo para decir que yo acepte ir contigo y era cierto, yo confíe en ti.

Una sonrisa encantadora y palabras bonitas, esperarme hasta la salida e invitarme a comer varias veces; sentí como un click, sentí como si fuera sido química y creí en tus palabras de que querias ser un nuevo tu. Caí demasiado rápido y cedí demasiado rápido a tus peticiones.

Sentía nauseas mientras caminaba por los pasillos llenos de murmurós, sobre mi, sobre mi boca y sobre el 7 que estaba pintado en mi casillero. Podía escuchar eso de todos lados.

Puta, perra, fácil, estupido.

Paso una semana y todo parecía ir peor, el acoso aumentaba cada segundo más hasta que sentía que no podía respirar.

Solo tome aire y abrí mi casillero para agarrar mis libros. Todo empeoró cuando sentí una mano en mi trasero apretandolo con fuerza.

—Tiene razón, no es mucho culo. Pero creo que yo puedo trabajar con eso, Kang nunca se equivoca con los número. Si dice que puedes ser un 9 llamame — Dijó entre risas Jaehwan y yo estaba pálido.

Esa tarde Jaehwan hizó algo que no olvidaré jamás a mi cuerpo después de la salida.

— Realmente eres un 9, después de todo tenía razón — susurró mientras se acomodaba sus pantalones y por fin sus amigos soltaron mis manos. Ya no luchaba.

Quería morir. No, no quería hacerlo. Tal vez fue ahí que encendio la llama de la furia, no sería como todos los demás y eso te lo dije.

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De: 7

Daniel, mis padres no están en la casa. Creo que me gustaría otra clasificación.

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Kang Daniel tocó la puerta de la casa de Ong Seongwu con una sonrisa, sabía que el chico estaba loquito por él, por eso tardo tan poco en abrirle las piernas. Fue demasiado fácil, tal vez por eso le puso un 7, el que fuera tan fácil le frustró un poco.

Seongwu abrió la puerta con una sonrisa y ropa que casi deja sin habla a Daniel. Pantalones que ajustan justo donde debian y una camisa blanca sin abrochar unos botones, muy sexy y además su cara preciosa combinaba perfectamente.

— Te estaba esperando, Dani. No me quería divertir sin ti — Dijó pasando su lengua por su labio y dejando pasar al chico.

— No podía dejar que eso pase — Dijó con una sonrisa entrando en la casa para caminar directo al cuarto del mayor que cerraba la puerta con seguro atrás de él. — No pensé que fueras así Seongwu, un chico malo.

— Me gustó probar este lado, supongo que me prende un poco — dijo caminando atrás de Daniel

— A mi también, no te imaginas cuando. — Dijó deteniéndose mientras lo miraba con deseo.

— Vamos hacerlo más interesante, podemos beber del licor de mi padre. No creo que le moleste que le robe un poco de su whisky — Seongwu hablaba con encanto mientras iba por la botella.

— Por supuesto que no

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Daniel sintió todo como un parpadeo, en un momento estaba bebiendo whisky con Seongwu y al otro estaba atado en la cama de este que estaba sobre sus caderas con una  sonrisa encantadora. Aquello le prendía tanto, excepto que volvió en sí cuando vio a Seongwu con un teléfono grabandolo y con la otra mano colocaba un cuchillo en su estómago.

— Vamos, Bad boy. Dinos ¿Qué se siente ser un zero? ¿Qué se siente ser un asqueroso cerdo que abusa de todos con su maldito sistema de números? — preguntó con una sonrisa y precionando el cuchillo a su estómago.

— Ya Seongwu, deja de jugar. — aquello ya no me parecía divertido.

— ¿Crees que estoy jugando? — preguntó molesto y llevo el cuchillo a su cuello y corto su respiración del miedo — Acabaste con la vida de muchos, yo fácilmente podria hacer lo mismo ahora. ¿Dime qué se siente jugar con tantos corazones y exponer tus asquerosidades?

— Seongwu, por favor no cometas una locura — suplicó el menor — hablemos sobre esto sin objetos filosos de por medio.

— Vamos Daniel, estamos en un Live de Instagram. Todos queremos escuchar tus disculpas, todos y cada uno de ellos — Dijó el chico molesto — Vamos hacer algo, voy a mencionar los nombres de todos los que creyeron en ti y tu al final destruiste su corazón con tu asqueroso sistema de clasificación, pero cada vez que diga un nombre presionare el cuchillo. Yo me detendre cuando digas tus crímenes y des una buena respuesta, Bad boy...

— Espera ¿Qué? — Ni siquiera estaba pensado bien del todo, estaba seguro que le puso algo en la bebida.

— Jeon Somi — empezó a presionar suave — Bae Jinyoung, Choi Yoojung, Lee Daehwi, Park Jihoon...

Iba presionando de apoco y Daniel podía sentir como iba empezar a abrir su piel por el filo.

— ¡Está bien! — gritó casi en lágrimas — si fui un cerdo, los engañe a todos para tener sexo y algunos los obligue. También los puse en números diciendo quien era mejor. Si lo siento mucho y en serio me arrepiento mucho — Dijó llorando y el cuchillo se alejó de su cuello — Ninguno es lo que yo dije, en serio lo siento tanto.

— Ves, no costaba tanto. Gracias por estar todos presentes — Seongwu dejó su teléfono a un lado.

— Te vas a podrír en la cárcel, mi padre se encargara de ello — Dijó furico entre lágrimas Daniel mientras veía a Seongwu que seguía sentado en su cadera con una sonrisa, en otra situación fuera considerado eso sexy.

— Lo se, pero tu ahora vivirás el infierno que todos pasamos. Ya el mundo sabe que eres un maldito cerdo. — Seongwu se acerco y dejó un beso en sus labios — Tenias que caer Bad boy, como todos lo hicimos por ti.

— Voy acabar contigo, no dejaré nada de ti — Daniel trataba de soltar sus manos de la cuerda que amarraba sus brazos a la cabecera.

— Tu ya acabaste conmigo, no lo recuerdas. — habló mirando a Seongwu quien agarraba el Cuchillo — Todo mi infierno comenzó contigo, tal vez es por eso que puse veneno esta tarde en la bebida de los chicos del equipo de fútbol, solo de Jaehwan, Minhyun y Sungwoon. Ya deben estar en el hospital todos, no los matara. Pero hoy era un partido importante, además que el veneno afectará su sistema por un buen tiempo. Me la pase investigando sobre venenos, no quería matarlos, quería que sufrieran lentamente como yo lo hice. Arruine su vida con ellos la mía.

— Seongwu... ¿Qué te hicieron?....

— ¿Sabes qué es lo peor? , que no me dolió tanto como lo que hiciste tu. Eso lo pensaba mientas Guanlin y Sungwoon me sostenían mientras Jaehwan abusaba de mi, puedo sentirlo adentro todavía, no importa cuanto me bañe, puedo olerlo en mi — Seongwu agarró el cuchillo con fuerza y alzo su brazo derecho cortado sus venas siguendola, destrozandola por completo para después caer el pecho de Daniel que estaba horrorizado, mientras respiraba con fuerza y temblaba — Te dije que seria alguien que ibas a recordar para siempre.

El mayor llenaba de Sangre a Daniel que luchaba con  fuerza para soltarse y detener el sangrado, quería salvar a Seongwu, quería hacerlo con tanta fuerza que se lastima las muñecas con la cuerda pero no le importaba. Menos cuando veía esa sonrisa temerosa en los labios de Seongwu sobre su pecho mientras lloraba hasta que en un momento su cuerpo dejó de moverse y la sangre dejó de salir.

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Tal vez piense hacer un One Shot cada mes