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Veintiocho

"Developpés y touchdowns"

Me miro en el espejo ¿Es demasiado para un partido de fútbol? Estaré en las gradas y lo más probable es que Jungkook ni siquiera me vea, pero si hay posibilidad de que sus ojos me capten por una fracción de segundo debería tomar la precaución.

-¿Vas a salir a alguna parte? -Pregunta Zua, si no la hubiera querido en mi habitación habría mantenido la puerta cerrada, pero la verdad es que deseo una segunda opinión-

-Así es, iré al partido de la escuela ¿Crees que voy demasiado arreglada? -Zua se encoge de hombros antes de sentarse en mi cama-

-Para mí irías demasiado arreglada, pero te ves bonita, además es bueno llamar la atención de las personas ¿No es lo que quieres?

-En realidad no estoy segura de eso.

Era totalmente una indecisa, pero debido a que había sido Jia dos y no yo quien había decidido alejarse de Jungkook creo que era obvio que era a mi a quien le iba a costar mantener distancia.

-Extraño a Jungkook -Dije con un suspiro dejando caer mis manos a los lados-

-Pero lo verás como en dos horas, y estoy segura que a penas lo viste hace unos días.

-Lo sé.

Sonaría patética para mi hermana menor pero ella no tenía idea, extrañaba a Jungkook como mi novio, extrañaba tener a alguien de mi lado de manera permanente, extrañaba como el siempre era la única constante, lo que nunca cambiaba en absoluto, lo extrañaba de una manera que no le podría explicar a nadie más.

-Entonces iré tal como estoy -Digo asintiendo- ¿Tu que harás? Te bañaste un sábado -Zua suspira-

-Namjoon insistió en llevarme a una convención de harry potter.

-¿Y por qué suenas tan disgustada?

-La gente dice que soy genial pero ese concepto sobre mi desaparecerá tan pronto como me vean llegar de la mano de mi hermano mayor ¡Se rehúsa a soltarme si estamos en la calle! Dice que el mundo está lleno de peligros y un montón de cosas más -Sonrío, sin duda suena como Namjoon-

-Deberías apreciarlo, no todo el mundo tiene la suerte de tener un hermano como Namjoon.

-Lo sé, así que, ahora que me asegure de que estás bien -Grita mirando hacia la puerta y frunzo el ceño- Me voy.

Sale de la habitación y unos segundos después entra Namjoon con un suspiro.

-Le dije que fuera discreta -Sonrío, ambos sabemos que ese no es el fuerte de Zua- Entonces estás bien, solo quería asegurarme de eso antes de irme.

-Estoy totalmente bien, iré al partido de fútbol y volveré para la cena, aunque depende de si Gia y Lia me permiten volver.

Había hablado con ellas en el grupo y aunque habían mencionado el ir a comer nunca habíamos concretado nada.

-Está bien -Se acerca a mi- Tenía esto, es tuyo y no sé como termino en la oficina de papá -Extiende la mano hacia mi y en ella veo el reloj dorado con el que llevo una relación mayormente de odio-

-Me pregunto como habrá llegado hasta allí -En realidad no me importa, pero es lo único que se me ocurre decir antes de tomarlo de sus manos- ¿Has escuchado algo sobre el divorcio?

-Al parecer papá se está negando, pero tu madre tiene pruebas de algo que no ha querido mencionar, entre nosotros sospecho que se trata de infidelidad, así que lo más probable es que terminen divorciándose incluso si el se hace el duro.

-Bueno, por primera vez algo no le sale como quiere -Me encojo de hombros- Debe ser difícil de aceptar.

-Probablemente.

-¡Nam, llegaremos tarde! -Grita Zua desde algún lugar de la casa, Namjoon sonríe-

-Voy a irme, tampoco se le da muy bien lo de ser paciente -Asiento- Te veré en la noche.

Se va y me siento rara por un momento, como si tuviera que haberle dicho algo más y aunque repaso toda la situación en mi cabeza no hay nada que recuerde así que simplemente lo dejo pasar y le envío un mensaje a Taehyung avisándole que estaré allí pronto.














Subo las gradas, no puedo creer que haya tanta gente, pero considerando que son dos preparatorias diferentes tiene sentido, obviamente estoy sentada con todos los de mi escuela, los que apoyan al equipo de Jungkook.

La última vez que estuve en el campo de fútbol fue después de enterarme que mi novio me estaba evitando porque no sabía como decirme que había recibido una beca al otro lado del mundo, lo que es ciertamente curioso, en esta línea del tiempo Jia quería animarlo a solicitar una beca para que estuviera lejos de ella y yo solo podía pensar en estar cerca de Jungkook.

Taehyung se sienta junto a mi y yo observo el campo, hay varias personas en el campo pero ningún jugador aún.

-¡Vamos secundaria Haeyang! -Frunzo el ceño con su grito- ¡A ganar!

-No sabía que te gustaba el fútbol -Digo una vez se tranquiliza-

-No me gusta, pero tu novio está en el equipo así que es normal que lo apoye, tu también deberías gritar.

-Jungkook no es mi novio -Digo molesta, pero más por el hecho de que mis palabras sean reales a porque esté molesta con Taehyung-

-Lo es en la otra realidad y aquí, allá ¿No es básicamente lo mismo? -Dice encogiéndose de hombros y yo entrecierro los ojos porque eso para mi no tiene sentido-

-En ambas realidades nos separamos, así que no, estás equivocado -El suspira-

-Aguafiestas.

Ruedo los ojos y me concentro en el campo cuando veo que los jugadores están entrando.

-Oh, ahí está el -Dice Taehyung señalando a algún punto en medio del campo-

Aunque tal vez debería decirle que no era necesario que me lo dijera, podría reconocerlo entre cientos de personas, era como si iluminara cada lugar en el que estuviera.

Lo veo trotar con una sonrisa, llega a la mitad del campo y todo el equipo forma un circulo, no tengo ni idea de lo que dicen pero al final les da animo con su voz fuerte. Luego desvía su mirada del campo en dirección a las gradas y mientras sus ojos vagan entre la multitud presiento que me está buscando. Mi corazón se acelera cuando su mirada y la mía conectan, me sonríe y levanta la mano sacudiéndola en mi dirección.

-Creí que habías terminado definitivamente con el -Ladeo la cabeza devolviéndole el saludo-

-Entre nosotros eso no podría ser definitivo.

Y ahora me concentro en el partido, aunque tal vez debería decir que me concentro en Jungkook, igual que hago siempre que voy a sus encuentros y me doy cuenta de que este es el momento más parecido a mi vida que he tenido nunca, un momento en el que soy completamente yo y es realmente tranquilizante.

Sé que Jungkook hace un par de pases, algo así como un touchdown y algo a lo que Taehyung llamó "Anotación de dos puntos" Para no gustarle el fútbol sabía demasiado, al menos más que yo. El es el encargado de decirme que ya han pasado dos cuartos, es entonces cuando los jugadores se toman un descanso.

-Deberías ir a hablar con el -Frunzo el ceño, está loco- ¿Qué? ¿No te das cuenta de como te está mirando? Es como en la fiesta en la que quería bailar contigo, era fácil suponerlo viendo como te miraba y ahora es fácil suponer que se muere porque le dirijas la palabra.

-Eso es estúpido, si Jungkook quisiera que le hablara me llamaría ¿Por qué empezar con tontas miradas? -Taehyung rueda los ojos-

-Tal vez porque le dejaste bastante claro que no vas a tener nada con el en un futuro cercano, que te vas a internar y que lo mejor es que continúe con su vida, no lo sé, si a mi me dijeran algo así también dudaría en ser quien se acerca.

-Bien ¿Pero que podría decirle? No se me ocurre nada en este momento.

-No lo sé ¿Tal vez felicitarlo por lo bien que ha jugado? -Dice con obviedad- No pierdas la cabeza Jia.

Suspiro y me pongo de pie.

-Si esto sale mal es totalmente tu culpa -El sonríe con animo y yo bajo las gradas en dirección a Jungkook, se encuentra en las bancas hidratándose-

Tomo una respiración profunda mientras avanzo, los jugadores que están con el se van luego de que el diga algo, así que para cuando llego allí está solo.

-Vaya, ha sido un gran juego -Es lo primero que digo y me recrimino porque creo que soné tonta-

-¿De verdad? -Pregunta y yo asiento-

-Ese touchdown, no creo que vuelva a ver algo igual alguna vez -El se ríe-

-Te estás esforzando, supongo que así me escuchaba cuando quería elogiar tus developpés y tus grand jete, aunque tu eres tierna intentando hacerlo.

Supongo que me he sonrojado, de hecho estoy segura de que me he sonrojado, me aclaro la garganta.

-De cualquier forma, haz estado increíble.

-Eso significa mucho para mi viniendo de ti Jia, de verdad.

El silbato suena y Jungkook lleva su mirada a la mitad del campo en donde el arbitro es el responsable de hacerlo sonar.

-Tengo que volver -Asiento- Iré a comer con los chicos luego del partido y me preguntaba si sería demasiado...

-Estaré ahí -Digo sonriendo- Tenemos que celebrar tu triunfo.

-Aún no hemos ganado -Dice con una sonrisa sacudiendo la cabeza-

-Ambos sabemos que van a hacerlo -El silbato suena de nuevo- Ahora vete, la única manera de que no ganen es que no estés en el campo.

Jungkook sonríe antes de ponerse su casco y entonces se va trotando hasta el campo.

No me doy cuenta de que sigo sonriendo hasta que encuentro una razón para detenerme.

Del otro lado del campo, con un uniforme rojo brillante tan llamativo al menos para mi, se encuentra mi peor pesadilla.

Creo que Maia lleva mucho tiempo mirándonos, en su rostro se plasma el enojo y me doy cuenta que quiere que la siga por el pequeño movimiento que hace con su cabeza antes de empezar a caminar hacia los vestidores.

Miro hacia todos lados, nadie parece haber visto lo que yo, incluso Taehyung ya ha vuelto a enfrascarse en el partido y aunque no estoy segura de que tan buena idea sea la sigo, el corazón me palpita rápido y tengo que admitir que tengo algo de miedo.

Los vestidores están oscuros, lo que solo hace esto más siniestro, mis pasos son lentos y cuidadosos, aguanto la respiración cuando la veo en una de las filas, tal vez no debería sorprenderme que esté de pie frente al casillero de Jungkook, me quedo a unos cuantos pasos de ella por precaución.

-Muy bien, supiste seguir las migas de pan gretel -Ladea la cabeza con una sonrisa- ¿Podemos llamar a esto nuestra primera cita oficial? Viendo como te arreglaste me hace sentir un poco mal por no haberme preparado más para ti. -Dice haciendo alusión a su uniforme de la pizzería-

-¿A que viniste?

-¿No es obvio? Tenía muchas ganas de verte, lo creas o no eres lo más parecido a una amiga para mi -Niego con la cabeza de inmediato-

-No soy tu amiga ni nada que se le parezca y según pude darme cuenta me llevas viendo más tiempo del que he sido consciente, así que ya deberías irte -Se ve genuinamente confundida-

-¿Tan repentinamente? Aún tenemos que ir a celebrar el futuro triunfe del idiota que está enamorado de ti.

-Jungkook no es un idiota, no hables así de el -Digo frunciendo el ceño, ella solo sonríe-

-Hablas de el como si no hubiera estado involucrado en destruir la vida de mi hermano, en destruir a mi familia -Entonces toma algo del casillero de Jungkook, una de sus camisas del equipo con el número 01 en la espalda- ¿Vas a fingir que no sabes todo lo que tu noviecito hizo?

Sus palabras me aterran pero aún así no voy a dejar que se salga con la suya así que me apresuro a negar todo.

-No es necesario fingir, no tengo idea de que me estás hablando, así que deberías ser más clara.

-Hizo que lo despidieran, hizo que no le fuera posible encontrar ningún trabajo, a cada lugar que iba solo tenía que decir su nombre para que le negaran la oportunidad.

De inmediato recordé algo de lo que había leído en el diario «Solo necesito saber su nombre».

-No veo como Jungkook podría estar involucrado en ello -Dije aún así, no iba a darle la razón a la villana de la historia-

Aún así a mi cabeza vinieron esas palabras del diario las palabras que había pronunciado «Solo dime lo que necesitas y yo encontrare la manera de arreglarlo para ti» preguntándome si Jungkook en realidad había estado involucrado, tal vez debí imaginarlo, aunque supongo que subestime lo que yo significaba para Jungkook, más bien lo que Jia significaba y por primera vez era completamente mi Jungkook, en realidad él no dudaría en hacer algo así.

-El se aseguró de crearle una reputación, ni siquiera sé como lo hizo pero sé que fue el y tu deberías dejar de fingir que no haría algo como eso -Suspiré-

«Sabes que haría lo que fuera por ti» suspiro, seguramente muchos no considerarían normal que esto tenga un tinte romántico para mí.

-¿Y debería fingir entonces que pienso que lo que hizo está mal? Me parece grandioso que tu hermano nunca hubiera podido estar el tiempo suficiente en algún lugar como para hacerle daño a otra chica.

-No hables así de el -Dijo con tono duro-

-Entonces no me lleves a hablar de el en absoluto, terminemos con esto de una vez Maia, no vamos a llegar a ninguna parte así -Dije negando con la cabeza y dirigiéndome a la salida-

-Sé que en realidad no fuiste tu quien lo mató -Dijo haciendo que me detuviera- Y no voy a dudar en contárselo a la policía si con eso logro destruirte.

Me gire a mirarla, ella no debía tener muchos más años que yo.

-¿Tienes prueba alguna de lo que dices? -Digo alzando una ceja y levanto el teléfono en mis manos- Porque aquí tengo pruebas, fotos de como llevas meses acosándome y enviándome amenazas y eso es un delito -Ella sonríe, como si le diera exactamente lo mismo-

-¿Crees que me da miedo ir a la cárcel? -Se encogió de hombros- Estaré bien siempre y cuando pueda llevarme conmigo a ti y al tonto futbolista -Fruncí el ceño-

-¿Sabes algo? Hasta hace unos minutos sentía pena por ti, solo eres una niña, no tienes idea y eres inocente, era lo que me repetía en mi cabeza para no culparte por nada ¿Pero que es lo que espero encontrar? Eres su hermana y aunque pensé que eso no te haría mala persona, veo que también tienes una parte de ti podrida.

Puedo ver como mi comentario empieza a subirse su cabeza antes de que intente acercarse a mi, sinceramente me da algo de miedo.

-Adelante, demuestra mi punto.

Y aunque por fuera no lo parezca, en realidad estoy aliviada de que mis palabras la hagan detenerse.

-No dejare que hables así de alguien muerto y mucho menos si es mi hermano.

Que curioso, si supiera en donde está iría a escupir sobre su tumba.

-Supongo que puedo entender que pienses cosas buenas de el, después de todo no soy capaz de ver defectos en Namjoon, pero la prueba está frente a tus ojos, si crees que soy una chica que aleatoriamente caminaba por el callejón y aleatoriamente se encontró a tu hermano y entonces aleatoriamente decidió asesinarlo, adelante, no voy a detenerte, pero si vuelvo a recibir una amenaza más de tu parte no voy a detenerme -Digo negando con la cabeza- Porque he trabajado lo suficientemente duro para mantenerme estable como para que alguien intente derrumbarme.

-No tienes vergüenza -Murmuró con rencor y no creí que tres simples palabras acabaran con mi paciencia más rápido que su patético discurso sobre la hermandad-

-¡Era un violador! ¿Por que no puedes entenderlo? -Dije gritándole sin contenerme- Intento violarme Maia, estaba sola en un callejón oscuro y el estaba borracho, intento violarme y yo solo me defendí, y tal vez si dejarás de poner la carga de culpa sobre mis hombros te darías cuenta de lo que realmente está mal en eso.

El momento era un poco extraño, no estaba segura de si era Jia dos quien hablaba o era yo pero no se sentía como si fuera yo quien tuviera el completo control, aunque tampoco era como si lo hubiera perdido.

En el momento en que vi las lagrimas rodar por sus mejillas no me sentí satisfecha, porque no buscaba herirla, solo quería que entrara en razón.

-El no intentó violarte -Negó con la voz quebrada- El solo estaba borracho, ¿Cómo puedes decir que fue su culpa?

-¿Entonces quien tiene la culpa? -Pregunte entornando los ojos-

-No debiste haberte cruzado en su camino, el solo pierde el control cuando está borracho.

Sabía que así era la sociedad, siempre encontraban la manera de que la culpa recayera sobre la mujer, si no era culpa de la ropa que eligió para vestirse entonces era culpa de haber decidido salir tan tarde, si era de día cuando sucedía, entonces era su culpa por caminar sola, si el abusador era su marido, era su culpa por no dejarlo y por no haber notado su comportamiento antes y si ella era muy joven para ser culpada entonces era culpa de su madre.

Había visto montones de casos en los que le echaban la culpa a la mujer de una asquerosa manera u otra, pero creo que ninguna era tan repugnante como una mujer culpando a otra mujer.

Analice su frase de nuevo y fruncí el ceño.

-¿Pierde el control? -Pregunto dando un paso atrás- No deberías hablar de él como si estuviera vivo Maia, no es sano.

En realidad estaba aterrada, no quería ni pensar en la posibilidad...

-La policía no podía revelar tu nombre, decían que era información personal -Dice sacudiendo la cabeza, sus lágrimas cesaron- ¿Quién crees que me dio toda tu información? ¿Cómo crees que pude encontrarte?

Niego sacudiendo la cabeza, esto no es posible.

-Solo estoy haciendo lo que él me pide.

Y sentí ese apretón en el pecho que me decía que algo estaba mal, mis manos apretaron en teléfono en mis manos con fuerza y me trague el nudo en mi garganta sin permitirme soltar alguna otra palabra, retrocedo lentamente mientras Maia me mira con una pequeña sonrisa hasta que soy capaz de salir del vestuario, capaz de salir de la escuela y conducir a casa mientras las lágrimas se deslizan por mi rostro.

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