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𝐨𝐢𝐢. forever the name on my lips





02. FOREVER THE NAME ON MY LIPS
real                      life











Los Ángeles, California.
DIC 18, 2017

             EL AIRE FRIO DE DICIEMBRE ENVOLVÍA LA CIUDAD, LAS LUCES COLGANDO AQUÍ Y ALLÁ DECORRABAN LAS DIFERENTES TIENDAS CREANDO UN AMBIENTE MÁGICO QUE ANUNCIABA LA LLEGADA DE LA NAVIDAD. Emma se encontraba en el corazón del centro comercial más cercano a su departamento, apesar de que había intentado mantenerse en las sombras luego de todo el escandalo del evento de caridad, no podía permitirse encerrarse para siempre. Las últimas compras navideñas habían sido la excusa perfecta para abandonar la comodidad de su cama apesar del ambiente lluvioso. Sus pasos resonaban en el suelo mientras avanzaba con determinación hacia la tienda de regalos. La melodiosa voz de Mariah Carey llenaba el ambiente, entonando su clásico "All I Want for Christmas Is You", y Emma no pudo evitar sonreír mientras su espíritu navideño se elevaba.

Desde que tenía memoria, esta época se había convertido en la favorita de Emma, no sólo por la alegría que parecía impregnarse en cada persona, sino también por los aromas, el frio acogedor, era una mezcla de sensaciones que no podía poner en palabras. La decoración del centro comercial era impresionante. Luces titilantes colgaban de cada poste, y enormes árboles de Navidad adornados con bolas de colores y lazos brillantes se alzaban majestuosos en cada esquina. La gente iba y venía, todos ocupados con la búsqueda de los regalos perfectos para sus seres queridos y Emma no era la excepción. 

La idea de compartir la magia de las fiestas en compañía de Nick era algo que hacia que su corazón diera un vuelco cada vez que lo imaginaba. No era la primera navidad que pasaban juntos, pero era la primera que compartían siendo solamente ellos en su hogar. Emma tenía en mente un regalo especial para Nick, no era simplemente un regalo que pusiera una sonrisa en su rostro, sino que también buscaba agradecerle por su compañía en los momentos más difíciles. Con su lista de compras en la mano, se adentró en las tiendas, cada una decorada de manera diferente pero igualmente festiva. Detrás de los cristales, los escaparates lucían llenos de productos tentadores: abrigos de lana suave, bufandas de colores vibrantes y juguetes para los más pequeños. Después de explorar varias tiendas y sopesar diferentes opciones, Emma finalmente encontró el regalo perfecto para Nick: un elegante reloj de pulsera que ella sabía que le encantaría.

Mientras la vendedora envolvía el regalo con cuidado en un papel de color rojo con dorado y lo adornaba con un lazo brillante, el celular de Emma comenzó a sonar. Con una sonrisa amable, tomó la bolsa con el obsequio antes de rebuscar en el bolsillo de su abrigo su celular al mismo tiempo que abandonaba la tienda.

──Hola, mamá. ¿Cómo estás? ──la joven dejó el celular en el hueco de su cuello sosteniéndolo con su hombro cerca de su oído mientras acomodaba las bolsas en sus manos.

──Hola, cariño. Todo bien, bueno... dentro de lo que se puede ──una risa amarga se escuchó del otro lado de la línea. La preocupación invadió a Emma, a veces deseaba poder hacer más por su madre y su hermana.

──¿Siguieron los problemas?

──Tu padre, Emma, Sigue adelante con su decisión de apoyar a Richards a pesar de todos nuestros esfuerzos por hacerlo entrar en razón ──Emma suspiró, mirando las decoraciones navideñas con nostalgia.

──Lo imaginaba. Esperaba que las cosas se calmaran antes de las fiestas. Hablé con Álex hace unos días, para él también ha sido difícil ──Emma se dirigió a la plaza central del centro comercial. La fragancia dulce de las galletas recién horneadas flotaba en el aire, atrayendo a los visitantes hacia la cafetería más cercana. La castaña tomó asiento en una de las mesas antes de hacer una pausa en la llamada para realizar su pedido.

──Lo sé, cariño. Es difícil para todos.

──Es realmente frustrante que no se de cuenta, que ni siquiera le importe. Todo fue tan repentino ──respondió Emma con enojo antes de agregar:──. ¿Jamás te dijo nada respecto a esto?

Leslie suspiró al otro lado de la línea.

──Él cree que esto es lo correcto.

──Veo que no le importa si nos afecta o no realmente ──su madre no respondió, parecía haberse resignado ante la situación, pero Emma sentía que había otro motivo por detrás de sus palabras.

──¿Estás con las compras navideñas? ──Emma sonrió amargamente cuando su madre cambió de tema. Sin embargo, decidió seguirle la conversación para aliviar la preocupación de ambas.

──Sí, unas compras de último minuto. Estamos ocupados con Nick organizando nuestra primera Navidad juntos ──bajo el resplandor de las luces parpadeantes, tomó un sorbo de su café caliente y observó a la gente que pasaba a su alrededor. 

──Eso suena encantador, cariño. ¿Cómo va todo con Nicholas? ──Emma sonríe, sus ojos brillantes de amor cuando su madre menciona el nombre del castaño.

──Las cosas con Nick van bien, mamá. Es increíble y ha sido de ayuda para mantenerme enfocada en cosas más positivas. Es sólo que... ──esta vez, fue Emma la que suspiró, las palabras apagadas en su propia voz.

──¿Es sólo que...? ──repitió su madre en forma de pregunta. Emma observó las bolsas de regalos a un lado de ella, su café humeante esperando en la mesa por otro sorbo.

──Tengo miedo de que en algún momento todo esto de la difamación en redes hacia nosotros nos afecte de alguna manera. No quiero que a Nicholas le afecte por estar conmigo.

──Emma, escucha A veces, la gente puede ser cruel, pero solo tú sabes qué es lo correcto para ti ──su madre hizo una pausa, su voz sonaba comprensiva pero Emma sabía también que estaba lista para rectificarle sus propias palabras──. Nicholas te ama, y eso es lo que realmente importa. 

Emma asintió casi que por inercia, apesar de que su madre no podía verla. Sintiendo como en sus ojos se acumulaban algunas lágrimas que amenazan con bajar por sus mejillas. A lo lejos, el bullicio del centro comercial no era más que voces ajenas de conversaciones que Emma no capta con claridad. Puede imaginar la sonrisa amable de su madre al otro lado de la línea, y por un instante, ninguna respuesta es necesaria. Emma sabe que su madre está siendo sincera, que el amor que ella y Nick se tienen es real. Su pecho se estruja en angustia y una lágrima rebelde termina bajando por su mejilla. No comprende porqué la idea de amar a Nick con intensidad le duele de esa forma.



             EL CÁLIDO AIRE DE LA CALEFACCIÓN ES LO PRIMERO QUE EMMA SIENTE CUANDO INGRESA AL DEPARTAMENTO. El contraste con el frio exterior le da un escalofrío, pero también un momento para relajarse cuando se ve invadida por la comodidad de su hogar. Dejando las llaves en el cuenco de cerámica cerca de la puerta, Emma deja las bolsas de las compras en el suelo un momento antes de quitarse el abrigo y colgarlo en el perchero junto a su bolso. El departamento está iluminado por los últimos rayos de luz del exterior que ingresan por los ventanales. El pequeño árbol de Navidad que compraron con Nick tiene las luces encendidas que generan un hipnotizante baile mientras cambian de color. A lo lejos, se escucha una suave melodia proveniente de la cocina y por encima, logra distinguir como alguien canta pequeños fragmentos de la canción.

──¿Nick? ──pregunta alzando un poco la voz, pero no recibe ninguna respuesta. Dejando los regalos en su lugar, Emma camina en dirección a la cocina. Las luces están encendidas, mientras que la música se escucha cada vez más fuerte.

Una sonrisa se dibuja en sus labios cuando ve a Nicholas completamente concentrado mientras divide su atención en la receta que está intentando no arruinar y la canción que suena de fondo. Emma se queda en su lugar observándolo completamente absorto de su presencia, hasta que una risa se escapa de sus labios cuando Nick empieza a bailar al ritmo de Shake It Off mientras se aleja de la mesada limpiándose las manos con un repasador. La sonrisa se contagia a los labios de Nicholas cuando su mirada se encuentra con la de Emma.

──Tendría que haberlo grabado para Mary ──Emma se acerca a la mesada con una sonrisa pasando su mirada por el desorden de platos y utensilios.

──Puedes preguntarle si no necesita más bailarines para su próxima gira ──Nick toma su celular para bajarle el volumen a la música. Sin embargo, Emma reconoce la voz de Mary nuevamente en el parlante cuando la canción anterior termina.

──¿Tienes acaso una playlist completa de ella y no me has dicho? ──bromea la castaña haciendo a Nicholas sonreír mientras vuelve a poner su atención en ella. Se encoge de hombros divertido.

──Está en aleatorio, no es mi culpa que tu amiga haga buena música ──Emma sonríe y Nick se acerca para dejar un beso en sus labios──. ¿Cómo estuvieron las compras? ¿Ya tienes mi regalo?

──¿Cómo sabes que no lo tenía antes? Quizá lo escondí mejor esta esta vez ──Emma lo mira con gesto divertido, los brazos de Nick abrazan su cintura.

──Porque sé que siempre dejas las compras a último momento ──Emma rodó los ojos haciendo a Nick soltar una leve carcajada aún abrazándola.

──Era un regalo especial y tenía que tomarme mi tiempo ──se defendió la castaña, no era del todo una mentira después de todo, no quería un regalo ordinario.

──Dudo mucho que supere mi regalo ──una sonrisa de superioridad se abrió paso en los labios de Nick. Los brazos de Emma pasaron con cuidado por los hombros de Nick hasta abrazarlo un poco del cuello.

──¿Y qué regalo es ese?

──Es uno muy, muy especial ──Nick se acercó lentamente a los labios de Emma, dejando la respuesta en un susurro y sin dejar que ella siquiera respondiera, volvió a besarla. El agarre en la cintura de Emma la obligó a acercarse más al cuerpo de Nick mientras el beso poco a poco comenzaba a ser más apasionado. Sin embargo, un fuerte olor obligó a Emma a separarse.

──Nick... Me parece que hay algo que se está quemando ──ambos se separaron confundidos buscando el origen de aquel aroma, sólo para que Emma dejara escapar una risa cuando un insultó abandonó los labios de Nick antes de apartarse para apagar el horno. Emma apoyó su mano en el hombro de Nick de manera comprensiva y con una sonrisa amable.

──Tal vez podamos pedir algo por esta vez.



             LA LUZ DE LA TELEVISIÓN ILUMINA LA SALA MIENTRAS AMBOS TERMINAN DE CENAR JUNTOS. Los restos del pedido quedan sobre el mantel improvisado en la mesita de café frente al sillón. Emma sabe que debería estar disfrutando de ese momento, el hombre que ama a su lado, la serie que ambos aman reproduciéndose en la pantalla, los restos de la comida del lugar que ambos aman frente a ellos. Pero algo se siente diferente, es un sentimiento agridulce que le genera un vuelco en el corazón a Emma cada vez que repasa la escena. Y todo se resume a un simple instante en medio de la cena.

Nicholas tiene una oportunidad de trabajo en Londres, lo que implica que deberá viajar de regreso en un par de semanas. Emma sabe que es bienvenida en ese viaje, ambos tiene otro hogar en Londres donde dividen también su tiempo para no estar siempre en la casa de los padres de Nick. No sería la primera vez que viajan por trabajo, pero Emma sabe que hay algo diferente y es que esta vez, no está segura de poder acompañarlo. Sólo entonces, la conversación previa con su madre resuena en su mente y todo hace sentido. Su mirada se posa en Nick, completamente absorto en la serie proyectada en la televisión. Emma sabe lo valioso que es como persona, el talento que lleva dentro y el crecimiento que ha tenido en los últimos años y que le espera en un futuro. Un futuro que ella no quiere arruinar.

──Amor... ──la voz de Nick la trae nuevamente al presente y Emma siente algunas lágrimas acumulándose en sus ojos. No sabe cuanto tiempo ha estado absorta en sus propios pensamientos cuando Nick apaga la televisión y la observa ──. Em, ¿está todo bien?

──Estaba pensando... ──hace una pausa antes de secar algunas lágrimas de su rostro, un nudo haciéndose cada vez más fuerte en su garganta──. Estaba pensando que quizá esta oportunidad de trabajo llegó en buen momento ──sus ojos se posan en los de Nick, quien la observa confundido y preocupado──. Porque... porque creo que es mejor si no voy contigo esta vez.

──Amor, eso esta bien ──él la mira comprensivo──. No tienes que venir si no quieres, claro que me gustaría que estuvieras pero si tienes otras cosas...

Emma niega interrumpiéndolo.

──Nick creo que... ──ella toma una bocanada de aire, su voz sale de sus labios entrecortada y angustiada──. Creo que deberíamos terminar...

──¿Qué...? ¿Terminar? ──la expresión en el rostro de Nick cambia instantáneamente, de la compresión a la confusión y la tristeza──. Emma, ¿por qué...? ──Emma no responde, las lágrimas comienzan a bajar por sus mejillas mientras que Nick se levanta lentamente del sillón, sus ojos llenos de desesperación──. Si esto es por la difamación, puedo enfrentarla contigo. Podemos superarlo juntos.

──No, Nick, no entiendes. No es solo eso ──Emma se quitó la manta de encima para ponerse de pie frente a Nick. Él la mira fijamente, desesperado por comprender.

──¿Entonces qué es Emma? ¿Ya no me amas?

──Nick... ──Emma aparta la mirada, sintiendo la angustia palpable en su pecho y su corazón estrujándose con cada palabra dolida de Nick.

──No Emma, si esto termina aquí al menos merezco saber porqué ──Emma baja la mirada y suspira intentando encontrar las palabras adecuadas. Nick suspira y se acerca tomando la mano de Emma con suavidad. Emma lucha por contener las lágrimas mientras aprieta la mano de Nick──. Por favor...

──No puedo... ──su voz salió en un susurro casi imperceptible, su mirada fija en el suelo con temor de ver la mirada dolida de Nick.

──Entonces, mirame a los ojos y dime que ya no me amas, Emma. Solo eso, y me iré ──Emma cierra los ojos ante la voz suplicante de Nick, no necesita mirarlo para saber que está llorando y tampoco quiere hacerlo porque las palabras que arden en su boca le queman hasta el corazón. 

No obstante, finalmente alza la vista, su mirada cargada de dolor y lágrimas se encuentra con la mirada angustiada de Nick. El silencio se adueña de la habitación mientras Emma intenta encontrar la fuerza necesaria para dar el siguiente paso. Podía ver perfectamente como Nick intentaba encontrar la razón lógica para lo que estaba sucediendo, y por un instante, la culpa la consumió por completo. Nick la amaba y ella estaba dejándolo ir.

──Perdón... ──susurró, tomando una bocanada de aire agregó:──. Yo... ya no te amo Nick.

Las palabras caen como un puñal en el corazón de Nick y Emma puede ver como éste se hace añicos frente a sus ojos. Nick asiente lentamente, una lágrima se desliza por su mejilla mientras se aleja de ella sin decir una palabra más. Sus manos se separan y es ahí donde muere la última caricia. Aún en completo silencio, Emma ve a Nick marcharse del departamento y cuando la puerta se cierra detrás de él es cuando ella cae rendida al suelo dejando que la angustia y la tristeza la abracen en la oscuridad de la sala.



              LA LUZ DEL DÍA COMIENZA A ABRISE PASO POR LOS VENTANALES, MÁS EMMA NO HA PEGADO UN OJO EN TODA LA NOCHE. Ya no tiene lágrimas que llorar, pero su corazón sigue estrujado en su pecho. No sabe cuanto tiempo ha pasado con exactitud, lo único que sabe es que aquella soledad no era un sentimiento que le gustara y repasar la conversación en su mente sólo hace que su corazón de un vuelco que vuelve a angustiarla. El sol comienza a entrar en el departamento mientras Emma se queda inmóvil en el suelo de la habitación, su espalda apoyada contra el colchón y vestida con una camisa de color celeste. 

Su mirada se posa en el estuche de terciopelo en el suelo el cual recoge con manos temblorosas. Aquella pequeña cajita que había caído del armario de Nick cuando ella buscaba la camisa que ahora usaba se encontraba frente a sus ojos. Algo en ella le aseguraba que no debía abrirlo, sin embargo, sólo podía significar una cosa. Lentamente, Emma abre el estuche en sus manos y tal como se temía, frente a su mirada se revela un hermoso anillo de compromiso, brillando bajo la luz del día.

Conteniendo un sollozo mientras las lágrimas comienzan a caer. Emma siente un nudo en la garganta mientras observa la joyería y deja el estuche a un costado. La habitación se llena de un silencio triste mientras Emma solloza mirando el anillo de compromiso ahora en su dedo anular con el corazón hecho añicos. Sólo que esta vez, no había nadie cerca para enmendar el dolor.












━━━━ GIULY'S NOTE !! *les deja la cajita con pañuelitos y desaparece* Bueno... por algo sabemos que el titulo del fic es Back To December ¿Verdad? Igual me duele, no saben las vueltas que di para escribir este capítulo y evitar que mi corazón se rompiera con el de Nick y Emma. No sé si es correcto decir que espero que les haya gustado a este punto jsjsjsjsjs

¿Se viene lo chido? Confirmo. ¿Van a seguir existiendo momentos tristes? Confirmo. Aún así, espero que la historia les este gustando amores, gracias por todo el apoyo que le han dado a esta historia apesar de su corta estadía en la plataforma ♥


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