Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

10 - ♡

Desde la última vez.
Takemichi recuerda el rostro de Chifuyu con un rastro de decepción cuando la mujer le rechazó, pero el joven al final se disculpó y pidió que la amistad de ambos siguiera intacta.

Takemichi pensó que podría arrepentirse de no haber correspondido los sentimientos de la única persona que logró enamorarse en todo este tiempo pero ciertamente, después de que las vacaciones de verano comenzaran, el dejar a un lado el estrés de la preparatoria y ocupaciones de proyectos, su mente se relajó, los recuerdos de lo ocurrido del pasado no fueron tormentosos si se trababa de Chifuyu.
La pelinegra quería mucho a Chifuyu, no iba a negar de eso, tal vez el hecho que el hombre joven era muy apuesto y gentil pudiera ser que estuviera confundiendo el gustar de alguien y el hecho de sentir amor por una persona.

La atracción y el amor son cosas diferentes pero al mismo tiempo si se mezclan, pueden ser una sola cosa.

Takemichi lo pensó demasiado durante la mitad de la segunda semana de vacaciones.

La joven pese a que estaba descansando de la preparatoria seguía estudiando por las noches por su cuenta temas de medicina. A la pelinegra le apasionaba mucho el poder dedicarse al área médica, aunque sabiendo que esa era una carrera bastante difícil, ella quería ofrecer lo mejor de su persona para alcanzar su objetivo.
Sin embargo, Takemichi es de ese tipo de personas que les encanta estar ocupadas en otras cosas, tal vez porque así puede distraer su mente de confusas sensaciones.

La chica había conseguido un trabajo de medio tiempo para estas semanas, era sencillo. Ser mesera en una cafetería y repostería. La verdad es que trabajar en un sitio de este tipo era muy agradable, además que podría usar un lindo delantal de corazones junto a la falda rosa pomposa que resaltaba de sus lindas piernas, una blusa de del mismo color. Lo único que le molestaba a Takemichi era el hecho de usar tacones rojos de punta, no eran muy altos pero si incómodos después de un rato.
Pero su jefa, Yuhuza, había insistido con portar el este inusual uniforme, el local de la cafetería no seguía alguna temática tierna y linda, aunque si tenía sus toques femeninos como flores, pintura lila en las paredes, posters de idols y música de moda.

Takemichi suspira mientras acomodaba del lazo blanco que tenía amarrado alrededor de la pequeña coletita del izquierdo que había hecho con su corto cabello.
Ya portaba de su ropa de trabajo, así que solamente echó una rápida mirada a través del ventanal del local para ver que solamente estaba una mesa ocupada por clientes.

La joven toma de su libreta para anotar las futuras órdenes y se dirige hacia la mesa redonda que era ocupada por cinco personas.

一 ¿Nos puedes recordar la razón por la que estamos aquí contigo? 一preguntó el hombre grande y bronceado a su amigo de años.

El tipo de cicatriz en el ojo, chasqueó de sus labios con fastidio y resignación.
一 Ya les dije, es el cumpleaños de Senju. 一explicó mientras sus manos tomaban de los hombros de la chica cabello rosado pálido que estaba sentada junto a su hermano.

一 Yo entiendo, y estoy contento de celebrar el cumpleaños de Senju-chan pero ¿Era necesario venir aquí? 一esta vez habló Wakasa mientras apoyaba su mejilla contra la palma de su mano.

El hombre de cabello bicolor estaba sentado a un lado de Benkei, frente a ellos estaban los hermanos Akashi e alguien más.

一 ¡Pero este lugar es muy lindo! Ya le había dicho a Takeomi-nii quería venir aquí para mi cumpleaños. 一dijo la chica que recién cumplía los catorce años, sacó de su lengua a los amigos de su hermano en forma de burla.

一 Bueno, yo apoyo a Senju, el lugar es muy lindo. 一el pelinegro habló siendo el único adulto que estaba disfrutando de la situación.

Senju ya estaba mirando de la cartilla del menú para decidir por su postre de cumpleaños, al igual que Shinichiro ayudaba a la niña recomendando pastelillos de estética bonita, como cupcakes de gatitos y de ositos, mientras que el resto del grupo se fastidiaban escuchando la música un tanto molesta al no ser de su estilo, así que se obligaron a soportar.

一 Voy a pedir este pastel de chocolate y menta, se ve muy rico. 一dijo la chica moviendo sus largas pestañas al momento de parpadear con emoción.

一 Lo que sea, pero que sea uno. 一Takeomi habló mirando a su hermana menor, sabiendo que la chica podría ser capaz de comerse una gran cantidad de pasteles.

一 ¡Uno para cada uno! ¡Y tres para mi!

El grupo continuó en lo suyo, mientras que una joven pelinegra de cabellos cortos se acercaba a la mesa para comenzar con su trabajo.
La joven se colocó a un lado al mismo tiempo que acomodaba su cuerpo, luciendo con porte. En sus manos tenía un lapicero y la pequeña libreta de órdenes.

一 Bienvenidos a la cafetería Shiba, espero tengan una agradable tarde con nosotros. ¿Ya saben que ordenarán? 一Takemichi repitió lo que siempre decía a cada cliente, siendo amable y usando un tono de voz dulce.

La falda de la chica se movió con gracia, ofreciendo una bonita sonrisa.
También se esforzaba de vez en cuando por una que otra propina extra.

Senju fue la primera en ver a la mesera pero su reacción fue la que provocó que todos en la mesa se pusieran un poco locos.

一 ¡Wahhhh! ¡Qué chica más bonita! 一gritó Senju levantándose de su silla, queriendo casi abalanzarse sobre la pelinegra pero lo único que logró fue alcanzar las manos de la contraria.

La ojiazul reaccionó levemente asustada por el comportamiento de la otra chica, sus manos fueron tomadas por ella con tanta rapidez mientras le miraba maravillada. Takemichi incluso podía notar los destellos en los ojos de la menor.

一 ¿¡Takemichi!? 一los hombres adultos dijeron al mismo tiempo elevando un poco del volumen de sus voces.

Nadie se esperaba ver a la chica en este lugar.

Shinichiro estaba sorprendido de ver la joven Hanagaki, así que igual que Senju se levantó de su asiento.

一 ¿La conocen? 一preguntó la chica de largas pestañas.

Wakasa y Benkei movieron arriba y a bajo de sus cabezas como respuesta, por otra parte Takeomi estaba tratando de lograr que su hermana vuelva a sentarse ya que la menor de los Akashi ya había comenzado a dar vueltas alrededor de Takemichi para mirar por completo cada parte de la chica.
Senju incluso quería mirar por debajo de la falda de la mesera, cuando ya estaba por levantar la tela. Takemichi tuvo que empujar su cuerpo hacia atrás y detener a la joven.

一 N-no hagas eso por favor.一pidió Takemichi con las mejillas un tanto avergonzadas.

Senju parpadeó antes de sonreírle一 Lo siento, pero es que estoy asombrada que alguien como tú exista. ¡Eres muy bonita! En lugar de trabajar aquí deberías ser modelo.

Rápidamente Hanagaki negó de la idea. No era la primera vez que alguien le dice algo relacionado con su imagen pero ciertamente la pelinegra no se veía a ella misma como una super modelo. Ella suspira y agradece los halagos de la otra joven.

一 Ehh... ¿Ya saben que ordenarán? 一preguntó Takemichi tratando de calmar la situación y a la vez intentar dejar a Shinichiro. La chica no quería incomodar con su presencia por lo ocurrido con el mayor de los Sano.

Senju al escuchar a la mujer, tomó la cartilla del menú para señalar después los postres y malteadas que quería pedir.
Takemichi fue anotando de cada pedido en su pequeña libreta, les informó que pronto tendrían sus postres listos. Solo así Senju pudo volver a su silla mientras esperaba feliz que la mesera regrese con su pastelillo de chocolate y menta.

Sin embargo, Shinichiro estando aún de pie, sabía que tenía algo pendiente con Hanagaki.

[...]

Takeomi estaba por terminar su malteada de fresa, el hombre de cicatriz en el rostro era el único que faltaba para terminar de su bebida.
Por otra parte, Wakasa y Benkei tuvieron que irse luego de terminar de cantarle a Senju por su cumpleaños, felicitaron a la menor deseándole lo mejor.

Después de un rato, Senju ya estaba en la barra de la cafetería charlando alegremente con la mesera en sus ratos libres donde no habían clientes.

一 Al parecer Senju le agradó mucho Takemichi. 一dijo Takeomi comiendo la fresa de su malteada.

Shinichiro, siendo el único que acompañaba al otro hombre, estuvo de acuerdo con su comentario.

一 Parece que ella tiene algo que encanta a todos. 一responde el pelinegro mirando la escena de ambas chicas.

Takeomi hace lo mismo por un momento, pero después toma de su teléfono celular para mirar la hora, tararea un poco y después se pone de pie mientras saca de su billetera.一 Bueno, ya hora de irnos.

El hombre deja el dinero sobre la mesa de cada cosa que habían ordenado para comer, además de agregar propina extra. Chasqueó de su lengua cuando al final Senju se salió con la suya de ordenar varios pasteles.

一 Senju, ya nos vamos. 一avisa el hermano mayor a su pequeña hermana. La mencionada hace un puchero ante la idea de despedirse de su nueva amiga.

Senju suspira con tristeza, pero de igual manera toma de la libreta de la mesera para escribir en una parte del papel su número telefónico. 一 ¡Takemichi este es mi número, por favor háblame y quedemos para ir juntas de compras! 一Senju sonrió mientras se volvía con su hermano.

一 Oh, c-claro Senju-chan, ¡ah-h y Feliz cumpleaños!

La mencionada siguió sonriendo despidiéndose a la vez de la mesera con un movimiento de manos.

一 ¿Vienes con nosotros, Shin? 一pregunta Takeomi a su amigo.

El pelinegro antes de responder, alcanza a mirar la pantalla de su teléfono donde tenía un mensaje de Wakasa con el texto "Disculpate"

Shinichiro sabía lo que debía de hacer一 No, yo me quedaré un rato más.

Ante la respuesta, el hombre de cicatriz asiente para después salir junto a su hermana de la cafetería.

Shinichiro permanece en la mesa, así que Takemichi para cumplir con su trabajo, se acerca al lugar para comenzar a recoger de los platos y vasos ocupados, además de tomar del pago.
Shinichiro en silencio observa lo que hace la mujer.
La mesa después de un rato ya estaba nuevamente limpia.

Takemichi duda un poco pero habla. 一 Eh... Shinichiro-san ¿Va a ordenar algo más?

El pelinegro da una rápida mirada a su alrededor, notando que ahora no habían más clientes.

一 Sí, sí, Take-chan, me gustaría pedir un poco de tu tiempo para hablar.

Ante la petición, Takemichi de igual manera mira a su alrededor, una vez sabiendo que podría ofrecer su tiempo a Shinichiro, ella aceptó.
La joven no se sentó en alguna silla, pero se mantenía de pie mirando al hombre ojos negros.

El hombre sonríe un poco para después acomodarse y ordenar las palabras que quería decir.

一 Takemichi, lo siento, por lo que pasó hace unas semanas 一el pelinegro comenzó su disculpa一 Ese día dije cosas que no debí decir, además de ser grosero contigo. Creé problemas entre Manjiro y tú, fui el culpable de separarlos.

El corazón de Takemichi se sacudió al escuchar el nombre de Mikey-kun.

一 Yo- Shinichiro-san, no tiene que disculparse, usted no hizo nada malo a decir verdad, tal vez la situación de ese día se salió demasiado de control pero nadie tiene culpa... creo. 一Takemichi habló con un poco de preocupación al saber que el hombre mayor se sentía culpable.

El pelinegro sonrió suavemente. 一 De igual manera, acepta mis disculpas, por favor.

Hanagaki después de pensarlo un poco, sin remedio aceptó de la disculpa del hombre, aunque muy en el fondo negaba culparle.

Sea como sea que hayan pasado las cosas, nadie debería sentir culpa, todo lo que pasó fue un suceso imprevisto donde las emociones y enojos que salieron a flote, Takemichi sabía que Shinichiro estaba preocupado por su hermano menor, y también sabía que Mikey estaba molesto de como el mayor fue imprudente pero al final de todo, nadie es una joya para no hacer errores. Es más certero que la única culpable sea la propia Takemichi al ser el motivo de la discusión.

一 Ya me he disculpado con Manjiro, estamos bien pero sé que él te extraña demasiado.

Shinichiro soltó como una aguja rompiendo los pensamientos de la mente de Takemichi.
Las mejillas blancas de la chica, se pintan en un suave rojo, inquieta por la sensación extraña que comenzaba a sentir después de la confirmación de Shinichiro al decir que el joven rubio le echaba de menos, le provocó algo que no era capaz de explicarse.

La joven muerde uno de sus belfos, desvía un poco de su mirada cielo pero después de unos segundos ella vuelve a mirar al hombre.
一 Yo... igual extraño de Mikey-kun... 一admite mientras mueve un poco de la punta de su tacón contra el suelo.

Shinichiro lo sabía, de alguna manera ambos se sentían así, al final de todo, Takemichi complementaba de Mikey, eso era algo que supo desde que conoció a la mujer.

El hombre suspira para luego levantarse de su silla.
一 Muy bien, ahora vamos. 一dijo Shinichiro a la pelinegra.

一 ¿Eh? ¿Vamos? ¿Dónde? 一preguntó la joven sin entender a lo que se refería el hombre mayor.

Shinichiro se dirige y camina un poco ignorando las preguntas de la chica de ojos azules.

一 ¿Ya estás por terminar tu turno? 一preguntó directamente.

Takemichi sin comprender lo que decía el hombre, pero por naturaleza respondió a lo que se le preguntó.

Rápidamente dio una mirada al reloj de forma de corazón de la pared que indicaba la hora.一 Ya he terminado...

一 Perfecto, entonces vamos ya.

一 Pero Shinichiro-san, ¿A qué se refiere? 一preguntó la joven mientras tomaba de la hoja de libreta donde Senju había anotado de su número.

一 Te llevaré con Manjiro. 一simple. Explicó sonriendo.

La sorpresa de Takemichi fue mayor que cuando Senju casi le ataca con halagos, Takemichi soltó del delantal de corazones que recién se quitaba después de oír la respuesta de Shinichiro.

一 ¿Q-qué? Pero no-

一 Anda, anda, no hay que perder tiempo. 一dijo Shinichiro alcanzando la mano de la joven para salir de una vez de la cafetería.

Takemichi no pudo ni ser capaz se negarse ya que ahora ya estaba sobre la nueva moto de Shinichiro, con un casco en su cabeza. La chica ni cambiar sus ropas pudo así que sentía tonta por estar usando su informe de trabajo y lucir así, pero al menos agradecía haberse quitado el delantal de corazones.
La chica le mandó un mensaje de texto a su jefa a través de su teléfono para disculparse y avisar que había olvidado cerrar de la cafetería.

Realmente Shinichiro no quería perder tiempo, la tarde ya estaba dándole paso a la noche así que, ahora conduciendo la motocicleta se apuró en acelerar el motor para ir más rápido entre las calles de Tokio.
Si iba a arreglar las cosas con su hermano menor y Takemichi debía hacerlo bien.

Poco a poco, ante la clara oscuridad de la noche se alcanzó a ver el templo Musashi, la base de reuniones de ToMan.

La motocicleta del mayor paró cerca, apagando del motor momentáneamente.
Takemichi estaba un tanto nerviosa, pero aún así bajó de la moto, quitandose igual el casco, la joven se lo iba a regresar a Shinichiro pero el pelinegro le rechazó el acto.

一 Creo que lo necesitarás después. 一dijo el hombre para luego gira la llave, volviendo a encender el motor一 Ah y ten esto.

Takemichi parpadeó moviendo sus pestañas negras mientras recibía una bolsa de papel un poco pesada por el contenido, el hombre mayor había comprado de ella para el rubio una vez que estuviera en casa.

一 Son dorayakis, dáselas al tonto de mi hermanito.

一 ¡Espere! ¿Shinichiro-san no vendrá conmigo? 一preguntó la chica al ver como el hombre acomodaba de su casco.

Shinichiro negó al mismo tiempo que habló. 一 No, lo mejor es que ustedes hablen sin que un bocón como yo diga algo estúpido.

Takemichi frunció un poco el ceño.

Al verle, Shinichiro no pudo evitar reír. 一 Es broma, Take-chan, pero si pienso que es mejor que hablen y resuelvan las cosas. Sé que eres una buena chica, y Manjiro un tanto torpe pero... 一Shinichiro suspira.

Shinichiro pausa sus palabras pero Takemichi cree entender.

一 Gracias Shinichiro-san. 一dijo la pelinegra con una pequeña sonrisa en su bonito rostro.

El hombre mayor asiente, dándole una última mirada a la chica para luego hacer sonar el motor de su motocicleta y empezar a alejarse del lugar.
Takemichi le observa irse entre las calles hasta que desaparece por completo de su campo de visión.

La pelinegra espera un poco hasta armarse de valor.

Camina haciendo sonar los tacones de sus zapatos rojos a dirección de la entrada del templo.
Cuando ya estaba lo suficientemente cerca puede notar que había alguien haciendo guardia en la zona.

Esta persona vestía el uniforme de ToMan, su cabello era blanco y largo, además de tenerlo suelto haciéndolo lucir bastante llamativo. Portaba un cubrebocas negros que únicamente permitía verle la parte superior del rostro, siendo sus ojos azules de color marino, mas las pestañas largas y blancas.

Takemichi no recuerda verle antes durante las veces que había asistido a las reuniones de la pandilla.
Tal vez era un nuevo miembro, aunque bien podria ser uno antiguo ya que Takemichi no conocía de todos los miembros de ToMan, solo alguno que otro.

La chica se acerca y saluda temerosa. 一 Hola... ¿La reunión no ha terminado aún? ¿Es posible que pueda ver a Mikey-kun?

El chico de cabellos largos escucha la voz de la mujer y al verle, inmediatamente su rostro se pinta en un sonrojo. La verdad es que, ver a una chica como Takemichi vestida con un atuendo bonito era una imagen que cautiva el corazón de cualquiera.
La mejillas sonrojadas no fueron notadas por Takemichi, así que la chica pensó que tal vez estaba siendo molesta.

一 ... Perdón, tal vez lo mejor será que espere. 一Takemichi si era honesta, debía admitir que no quisiera hacer enojar a ningún miembro de la pandilla y menos a alguien que no conocía.

El chico no dijo nada, pero sus cejas se contrajeron por un momento. De la nada el joven de largo cabello blanco se movió para irse del lugar.
Mientras tanto Takemichi permaneció en el sitio.

A un par de metros el chico detuvo sus pasos para voltear a mirar a Takemichi. La pelinegra al ver aquello, luego de unos segundos comprendió.

Él quería que ella le siguiera.

一 ¡Oh, oh ya! ¡Gracias! 一dijo Takemichi mientras sostenía el casco con fuerza y comenzaba a seguir al tipo de cubrebocas.

[...]

La reunión de ToMan ya estaba por terminar, Mikey estaba sobre la plataforma de piedra que le servía como escenario para poder dirigirse a sus miembros de pandilla. En el mismo lugar estaba Draken estando de pie con firmeza.

Los demás escuchaban a su comandante hablando de los temas de la Tokyo Manji que debían resolver.

一 Y bueno, sobre Valhalla, no han dado ningún tipo de enfrentamiento contra ToMan así que no creo que sea necesario tenerlos en cuenta, al menos no por ahora.

Mikey habló mirando al frente, a todos los integrantes de la pandilla.

Era fascinante ver al rubio con su uniforme de ToMan, a la vez que la autoridad que tenía al ser el comandante de la mejor pandilla actual.

一 Ahora con lo de- 一la voz queda atascada.

En ese momento Mikey no pudo seguir hablando cuando su mirada oscura se distrajo con la imagen de una hermosa y conocida mujer caminando cerca, siguiendo los pasos de Sanzu.

Esa era Takemichi... ¿Por qué estaba aquí?

Draken notó también que Takemichi estaba entre la multitud. El alto de trenza supo inmediatamente lo que debía de hacer.

一 ¡Bien, eso es todo, la reunión terminó! ¡Nos veremos para la siguiente reunión! 一Draken habló con fuerza, interviniendo ante el panorama. El resto de miembros de la pandilla respondieron con un muy fuerte 'Sí' para luego comenzar a retirarse.

Kazutora junto a Baji también estaban por irse hasta que vieron a Takemichi estando de pie en un lado de la zona.

一 ¡Oh! Takemichi, por fin te vuelvo a ver 一Kazutora habló feliz mientras miraba a la chica一 Te ves muy linda.

一 ¿Vienes a ver a Mikey? ¿Eh? 一esta vez Baji dijo con una risa dejando expuesto su colmillo.

Takemichi estaba por responder pero un chico de cabellos lila quien también portaba el uniforme de ToMan caminó empujando los cuerpos de Kazutora y Baji.

一 ¿No escucharon? La reunión terminó, ahora largo.

Mitsuya estaba prácticamente echando de los miembros cuando también notó de que Takemichi estaba aquí, pensó que lo mejor era evacuar de la gente para que así su comandante y la chica pudieran hablar sin ser molestados por la parejita.

一 ¡Ouh! Mitsuya espera, quiero seguir hablando con Takemichi. 一dijo Kazutora con un puchero, siendo obligado de irse del lugar.

一 ¡Qué no! 一Mitsuya no se detuvo, pero si miró a Takemichi para sonreírle como saludo y después irse también con el resto de chicos.

Poco a poco los miembros de ToMan fueron desapareciendo junto a sus motocicletas, yéndose del templo cuando la reunión finalizó. Inclusive el chico que había guiado de Takemichi. Sanzu, ya se había ido sin que la mujer se diera cuenta.

Los únicos que quedaron eran Takemichi, Draken y Mikey.

Pero el hombre de trenza sabía que también debía de salir de la escena. Si Takemichi había venido aquí lo más probable es que fuera para hablar con el comandante, conociendo perfectamente la historia de ambos protagonistas.

一 Suerte, Mikey. 一Draken soltó, bajando de las escaleras de piedra para caminar e irse también.

Ahora, Mikey, se mantuvo en su lugar. Sin dejar de mirar a Takemichi.
Observó como la chica estaba vistiendo unas ropas bastante bonitas, aunque sabía que en ella todo se vería bien, simplemente cualquier cosa de Takemichi lograba enamorar de Mikey.

El corazón del rubio se agitó cuando recordó el rechazo de Takemichi, así que rápidamente apartó su mirada de la imagen.

Por su parte, Takemichi caminó lentamente haciendo sonar sus pasos gracias a los tacones de punta. Se dirigió hacia el área donde los miembros de la pandilla estaban reunidos anteriormente.
Al igual, el corazón de la pelinegra se sentía pesado ante estar nuevamente con el chico de cabellos rubios.

Ninguno de los dos se dijeron algo, el silencio permaneció siendo incómodo en el ambiente del lugar.
Era muy triste que ahora no pudieran hablar como antes solían hacerlo.

A Takemichi le dolió eso, así que se tomó mucho aire y un tanto de coraje, miró al chico rubio sobre la plataforma de piedra del templo, e hizo sonar la bolsa de papel.

一 ¡Mikey-kun, te traje dorayakis, pero solo puedes comerlos si hablas conmigo!

Takemichi elevó de la bolsa de dorayakis calientes, para que el rubio desde la parte superior, pudiera verle.
Solo así, el joven se permitió mirar la hermosa chica de falda rosa y tacones rojos.

En la distancia, Mikey estando sobre en su lugar de autoridad como comandante de ToMan, y Takemichi estando por el final de las escaleras de roca.

El negro se volvió a conectar con el azul.
Y si los colores pudieran hablar, serían capaces de confesar lo mucho que se habían extrañado.

Ando feliz por la noticia de la segunda temporada
de Tokyo Revengers.
Y las nuevas imágenes de Kokonui ♡

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro