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𝐂𝐚𝐩𝐢́𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐜𝐚𝐭𝐨𝐫𝐜𝐞

"Quiero que tú estés bien"

Esas palabras no dejan de repetirse en mi cabeza. En la ventana del avión sólo veo las nubes bajo nosotros, el sol se encuentra brillando aquí arriba, a simple vista luce como un paisaje positivo, suspiro girando la cabeza encontrando a Jimin dormido en el asiento, hace un puchero mientras duerme, ¿Cómo es posible que su familia también esté metida en esto? JungKook come lentamente y con aire distraído, lo miro ladeando mi cabeza, ahora caigo en cuenta que él se fue de Busan huyendo de sus padres y su negocio.

— ¿Estás molesto con Jimin?—mi pregunta lo trae de regreso a la realidad.

—Más o menos.

—Es un buen chico, no lo odies por sacarme una sonrisa siempre.

—No pensé que los chicos como él te gustaran—comenta burlonamente.

—Dijiste que Lalisa fue tu primera cliente—indico. Su rostro se vuelve serio, ya sabe por donde voy— ¿No estabas nervioso?

JungKook traga bebiendo algo para pasar el bocado, vuelve a mirarme con una pequeña sonrisa honesta.

—Lo estaba, no por ser mi primera vez, sino por no saber como hacer lo que ella quisiera.

— ¿Eras tímido?—ahora yo me burlo. Él se quejó de mí en el segundo encuentro donde ni siquiera pude quitarme la camisa frente a él.

—Hay muchas chicas locas por allí—se limita a decir—Por eso tengo ciertas preferencias con mis clientes.

— ¿Te gustan las jóvenes?

—Prefiero las que son mayores que yo.

—Oh—no esperé eso.

— ¿Qué?—sonríe divertido.

—Creí que te gustaba ser dominante.

—Me gusta serlo y lo hago de cierta manera, una vez que digo mis términos o reglas ya estoy teniendo poder sobre esa persona, si acepta será bienvenida, pero sino...no conseguirá nada—explica casi con orgullo.

—Así que...¿No tiene nada ver con el...sexo el hecho de ser dominante?

—No uses tu mente de psicóloga conmigo.

—No lo hago, al menos lo intento—digo— ¿Qué debo decir a mis padres?, ¿Qué debo esperar de los tuyos?, sigo sin entender porque terminé con una bala en mi pierna.

—TaeHyung cree que trabajan para Lalisa, YoonGi dice que tal vez está algo celosa...

— ¿Tus amigos saben lo que pasó?

—Por supuesto, confío en ellos—deja los cubiertos en el plato llamando a una de las aeromozas, una vez recogen todo la conversación sigue—No creo que Lalisa tenga algo contra ti, lo nuestro está más que enterrado.

—Pero según YoonGi no te ha olvidado.

El chico sonríe maliciosamente y yo me arrepiento de mis palabras, me he delatado terrible.

—Escuchaste ese día—bajo la vista—Escucha, Lalisa maneja el negocio que dejó su padre, allí hay drogas, armas, dinero sucio y tratos sucios en el mercado negro—explica. Lo escucho atentamente—Mis padres se centran más en vender...a las chicas como tú por una buena cantidad de dinero, generalmente eliminan a la familia primero...—abro mis ojos como platos mirándolo asustada—Tranquila, los tuyos estarán bien, si mis padres no han lastimado a tus padres significa que tienen otros planes, debe haber algo en tu padre que le ha gustado...además de ti.

— ¿Por qué tu hermano no vive contigo? Sé que es menor de edad, pero...¿No crees que estaría mejor a tu lado?

—JungHyun se hubiera venido conmigo, créeme que sí, pero el problema no soy yo, es Park JiHyun.

Miro a Jimin y luego a él.

— ¿El hermano de Jimin?

—Sí, mi hermano no quiso irse a Seúl porque JiHyun no quiere irse de Busan—hago una O con mi boca comprendiendo—A veces quiero golpearlo por lo enamorado que está.

— ¿Estás seguro de que sus familias no saben de su relación?

—No, han sido muy cuidadosos.

— ¿Él sabe lo que realmente haces?—asiente acomodando su cabello— ¿Y qué te dice sobre eso?

—Me pidió consejos—ríe un poco negando con la cabeza—Incluso Jimin tuvo que darle consejos a su hermano, ninguno de los dos tenía idea de qué hacer en la intimidad—recuerdo sus indicaciones en la primera vez.

—Unos se apresuran más que otros.

— ¿Eso que tiene?

—Es incómodo cuando debes escuchar a otros hablar del tema y sólo quedarte callado. ¿Cuántos años tienen?

—El hermano de Jimin tiene mi edad.

— ¿Y tu hermano?

—Diecisiete.

— ¿Debo suponer que a los hermanos Jeon les encanta los mayores? Lástima, quería entrar en tu rango—bromeo. (Tal vez no mucho)

— ¿Qué te hace pensar que no estás allí?—susurra en mi oído. Me enderezo en el asiento viendo como su mano juega con el cinturón de mi pantalón, mi respiración se acelera un poco y él succiona mi cuello provocándome. Trago con dificultad deteniéndolo, sus ojos brillan con ese aire pícaro que conozco.

—No estamos...solos—susurro más bajo de lo normal. Increíble como me complica las cosas en segundos, JungKook acaricia mi labio inferior con su pulgar, inconscientemente muerdo mi labio ocasionando una sonrisita triunfadora en él.

—Si no fuera por la pierna...te demostraría que eres mi favorita.

La excitación pasa a segundo plano cuando dice eso. ¿Por qué sigue confundiéndome?, ¿Por qué es así conmigo? Me alejo despacio teniendo distancia de él.

—No digas eso.

— ¿Decir qué?

—No soy tu favorita.

—Ella...

—No digas nada más, por favor.

▪︎▪︎▪︎

Los chicos sólo llevan un bolso grande, esperamos un taxi fuera del aeropuerto, tengo muchas emociones atacándome ahora mismo y me frustra saber que de repente no puedo describir lo que JungKook me hace sentir, ¿Qué está pasándome? Jimin se acerca a mí con una pequeña y dulce sonrisa.

— ¿Preocupada o molesta?

—No quiero hablar.

El chico rodea mis hombros acariciando mi brazo.

—Las cosas saldrán bien, confía en mí.

Quiero confiar pero no lo creo.

—Te equivocaste, JungKook no siente nada por mí, Jimin—finjo una sonrisa—Olvida esa posibilidad.

JungKook consigue el taxi, subimos nuestras cosas atrás, Jimin va junto al conductor mientras que el pelinegro se encuentra a mi lado. Mi teléfono vibra, tengo un mensaje.

Sook:
No sé que estás haciendo o qué sucede, pero...ten cuidado por favor, eres mi amiga, te considero como una hermana menor, cuando todo esté tranquilo, escríbeme.

Lo leo una y otra vez, no quise ser dura con ella, enserio no pretendía serlo, tampoco quería tenerla allí...

—Luego le escribirás—miro al chico junto a mí por segundos. Bloqueo la pantalla de mi teléfono—Lo importante ahora son tus padres.

—Sook te escuchó, Kumi también.

— ¿Te escucharon?—Jimin voltea a vernos. JungKook rueda los ojos y asegura explicarlo luego.

—Escucha, Ella—noto claramente como acerca su mano para tomar la mía pero luego parece arrepentirse—Te llevaremos a casa, Jimin y yo intentaremos averiguar un poco más sobre lo sucedido, ¿De acuerdo?

—No creo que sea buena idea dejarme sola...

—Iremos por ti en la mañana, empaca todo lo que tengas, ¿De acuerdo?—repite. Sus ojos brillan como si quisiera decirme algo más, típico de él que no lo hace. En fin, lo importante ahora son mis padres.

—Promete que vas a volver.

Sonríe apenas asintiendo.

—Lo prometo.

▪︎▪︎▪︎

Las luces de la casa están encendidas, miro el vecindario donde pocas personas ya caminan por allí a esta hora, la mayoría están en sus casas descansando de un duro día de trabajo. Suspiro tocando el timbre de casa, mamá abre sorprendiéndose de verme con mi equipaje, quise llorar pero no puedo, debo ser fuerte por ellos, no puedo asustarlos, deben irse conmigo ya.

—Mamá—la abrazo cuando me ayuda a entrar y cierra la puerta. Me rodea con sus brazos aún sorprendida, ni siquiera el calor de mi casa me hace sentir mejor.

—Cielo, ¿Qué haces aquí?

— ¿Dónde está papá?—me separo mirándola.

—En el restaurante, unos clientes importantes llegarían hoy...

—Mamá, escúchame—tomo sus hombros—Necesito que subas a la habitación, guarda todo lo que puedas y deja todo listo para mañana, ¿Sí?

—Ella, ¿Qué está...?

—Te lo explicaré luego, por ahora debes hacerme caso, es urgente, por favor—suplico. Necesito avisar a JungKook de mi padre, apuesto que esos clientes son amigos del señor Jeon—Confía en mí, si vine aquí es porque es importante.

Por unos segundos luce dudosa, cuando la veo subir las escaleras tomo mi teléfono, marco el número correspondiente escuchando su voz unos repiques luego.

—Está con él, mi padre está con ellos, debes sacarlo de allí, no quiero que esté cerca de ellos, por favor...

—Ella, respira—me interrumpe—Mi padre no actuará en público.

—Mi madre dice que tenía clientes importantes y apuesto que son amigos de tu padre...

—Probablemente, no lo sabré hasta que llegue a casa, mantén la calma. Entiendo que estés preocupada pero no pierdas el control.

Respiro profundo admitiendo que tiene razón. Paso mi mano por mi cabello.

—No quiero que lo lastimen.

—Y no lo harán, descuida—insiste—Te llamaré en unas horas.

—Está bien.

▪︎▪︎▪︎

He tomado un baño, estoy sentada en la cama con una toalla cubriendo mi desnudez, mamá coloca una venda en mi pierna, JungKook me dejó la bolsa de la farmacia de Seúl, sé que miles de preguntas se forman en la cabeza de la mujer que me trajo al mundo, una vez acaba de vendarme con cuidado comienzo a vestirme. Sus ojos están sobre mí, el silencio se hace incómodo, entonces se levanta de la cama deteniéndome.

— ¿Mamá?

— ¿Qué está pasando realmente?

—Es...complicado de explicar.

—Pues debes explicarme, jovencita, ¿Por qué apareciste así?, ¿Huyes de algo?

—Debo decir que sí—levanta sus cejas. Hago que tome asiento—La familia Jeon no es de fiar, los padres de JungKook piensan lastimarnos...

— ¿Y cómo te heriste la pierna?

—Ellos me lastimaron, debemos irnos de Busan, JungKook vendrá a buscarnos mañana, por favor necesito que confíes en mí, prometo explicarlo mejor cuando estemos tranquilos—la abrazo fuertemente—Vine por ustedes...

—Sigo sin entender...

No sé que decirle, no quiero mentirle, es mi madre. Entonces decido contarle todo, sin detalles ocultos, sus ojos se mantienen en mí poniéndome más nerviosa deseando saber que piensa, cuando acabo de hablar tomo sus manos sentándome a su lado.

— ¿Ahora me crees?

—Claro que sí—aquello me hace sentir aliviada.

—Quiero asegurarme de que estén bien.

—Pero sobre ese chico...no puedo creer que te hayas metido en eso, Ella—reprocha. Bajo la cabeza avergonzada—Nunca es bueno dejarse llevar por los amigos.

—Lo sé.

— ¿Estás segura que ese chico es de fiar?

—Lo es.

Ladea su cabeza sin creerme.

— ¿Hablas por ti o por tus sentimientos?

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