Stiles apenas había estacionado su camioneta cuando Cora salió disparada.

Estaban frente a un viejo bloque de apartamentos de cemento en las afueras del pueblo. Baby saltó y siguió a los demás mientras entraban apresurados.

Todo el lugar olía a Lobo.

Los fuertes olores de los alfas impregnaban el aire tan densamente que Baby quería vomitar. Vació lo que quedaba de su sangre y arrojó la copa a un lado mientras seguía a Stiles.

—Baby, ve arriba. Tal vez puedas ayudar.— ordenó Cora.

Baby le hizo una mueca. —¿Por qué haría eso? No les debo nada a ninguno de ustedes, ni tampoco tengo deseos de morir, muchas gracias.— ella gruñó.

—Mi hermano puede estar muriendo, ¡ve!

—Como dije, no les debo nada a ustedes, Lobos. De hecho, ustedes me deben a mí por evitar que mataran a ese maestro la última luna llena.—respondió desafiante.

—Aquí está la sala de energía.— gritó Stiles más adelante.

Baby y Cora se mostraron los dientes mientras corrían tras Stiles. Los cuatro golpearon la puerta apresuradamente para abrirla.

—Bien, ¿qué hacemos?— preguntó Stiles mientras miraban la enorme pared de interruptores.

—Los activamos— respondió Lydia. —Los activamos todos.

Todos se abalanzaron sobre los interruptores, accionándolos y presionando botones.

—Baby, ve arriba y adviérteles que la energía volverá de repente— dijo.

—Pero...— protestó Baby.

—¡Ahora!— gritó Stiles.

Baby suspiró y rodó los ojos antes de salir de la habitación.

No fue difícil encontrar el piso en el que estaban todos los Lobos.

Cuando llegó, se encontró con una escena dramática. El suelo estaba cubierto de agua.

Una mujer alfa de piel oscura estaba en combate contra un hombre al que Baby reconoció como el alfa al que había salvado.

Ese debe ser Derek.

Boyd e Isaac estaban al otro lado de la habitación. Boyd medio derrumbado contra la pared e Isaac junto a la puerta.

En la entrada, Ethan y Aidan estaban con la figura familiar de la señorita Blake atrapada entre ellos.

—La electricidad está a punto de activarse. ¡Todos muévanse!— gritó Baby mientras corría y le daba una patada a Aiden en la espalda. Baby pensó por unos segundos que a Danny le habría molestado que Baby pateara a su novio. La fuerza envió volando al alfa, perdiendo su agarre en la señorita Blake mientras caía pesadamente al agua.

Isaac se movió, lanzándose por la puerta para hacer lo mismo con Ethan.

Los gemelos alfa no tuvieron tiempo de reaccionar antes de que la electricidad hiciera chisporrotear el agua al encenderse.

La mujer alfa, Derek, los gemelos y Boyd aullaron de dolor mientras la electricidad los recorría.

Isaac rodeó a la señorita Blake con sus brazos para evitar que corriera hacia adentro.

Ella gritó y Baby le siseó: —Cállate.

Su grito se redujo a un gemido y lo miró con ojos llorosos. Baby pensó que percibió un rastro de ceniza de monte y muérdago adherido a su figura. Dejó esa idea de lado para después.

Derek y Boyd estaban derribados, pero la mujer y los gemelos luchaban por ponerse de pie.

—¡Agárrenlo!— ordenó ella. Ethan y Aiden se tambalearon para levantar a Derek y sujetarlo entre ellos.

—Maldita sea— suspiró Baby derrotado. Sus ojos brillaban plateados y sus colmillos asomaban. —Me deben algo por esto.

La mujer agarró a Boyd inconsciente y lo levantó, pero Baby se abalanzó sobre ella.

El impacto los hizo resbalar por el agua, y Boyd cayó al suelo detrás de ellos.

La loba alfa gruñó de dolor cuando chocaron contra la pared. Baby rápidamente se levantó y la inmovilizó en el suelo. Clavó sus uñas en la piel de sus muñecas, dejando que el veneno se infiltrara en sus arterias y fluyera por su torrente sanguíneo.

—Vampiro— gruñó ella. —Pensamos que olíamos a uno de tu especie. ¿Por qué estás ayudándoles? Esta no es tu pelea.

—Porque la presencia de tu manada casi mata a mi amigo. Además, Stiles sigue fastidiándome— se inclinó y le gruñó. Sus ojos brillaban y sus venas negras se destacaban en su piel mientras clavaba más profundamente sus garras. La mujer aulló.

»—Además...— Baby sonrió —Derek me debe algo y no podrá devolvérmelo si lo matas. Después de esto, me deberá el doble y eso me beneficia.

Ella gruñó. —Elegiste el bando equivocado para hacer tus apuestas, chupasangre.

—Oh, confío en que tu líder sabe lo que es lidiar con un vampiro.— retorció su muñeca y esta se rompió como una ramita en sus manos, luego rompió la otra.

Ella gritó y él le dio un puñetazo en la cara. Su cabeza rebotó contra el cemento con el golpe.

—¿Qué le hiciste a Cali?— preguntó Aidan mientras Baby se ponía de pie.

Cali inconsciente en el suelo.

—Sólo la dejé fuera de combate.— Baby sonrió con autosuficiencia a los lobos. Todos lo miraban con los ojos abiertos.

»—Ethan, me caes bien porque haces feliz a Danny. Así que les ofrezco a ti y a tu hermano una elección. Pueden pelear conmigo ahora y mantener su orgullo. O...— mostró sus colmillos al adoptar una postura de combate —Pueden llevarse a su amiga y marcharse, vivir para luchar otro día. ¿Qué van a hacer?

Aidan gruñó y avanzó, pero Ethan lo detuvo con una mano en el pecho.

—Necesitamos reagruparnos. Un vampiro cambia las cosas. Tenemos que informar a Deucalion.

Aidan fulminó a su hermano con la mirada pero obedientemente se calmó.

Baby sonrió y asintió. —Buena elección.

Agarró a la mujer lobo, Cali, por la pierna y la arrastró por el agua hasta los gemelos. La entregó a Aiden. Los gemelos asintieron antes de cargar con ella. Se voltearon y se dirigieron hacia la puerta.

—Déjalos ir.— Derek le dijo a Isaac, quien se apartó para que pudieran pasar.

Una vez que los alfas se marcharon, Derek luchó para ponerse de pie. Se acercó para ayudar a levantar a Boyd, el beta aún tembloroso por la electricidad. Solo entonces miró a Baby.

—Gracias... Es la segunda vez que me ayudas.

—Ahora me debes dos favores.— Baby sonrió con malicia. —Espero que, cuando llegue el momento, cumplas con ellos, Derek Hale.

—He conocido a otros vampiros en mi vida.— dijo Derek —No muchos, pero sé la importancia que tienen los tratos para tu especie. No los romperé.

—No...— Baby negó con la cabeza —Júralo por tu manada. De esa manera, si mueres o si otro alfa toma el mando, mi acuerdo seguirá en pie.

—No deberíamos confiar en él.— murmuró Boyd. Se apoyaba pesadamente en el costado de Derek mientras sus heridas sanaban.

—Mi intervención salvó tu vida dos veces, Boyd. Así que te aguantas.— Baby gruñó entre dientes.

—Tu veneno me dejó con resaca.— murmuró Boyd en respuesta.

Derek observaba a Baby como si no supiera qué pensar de él. Baby sabía que recibía esa mirada con frecuencia.

Finalmente Derek asintió, inclinando la cabeza en señal de respeto y Baby hizo lo mismo. —Juro por mi manada que tienes derecho a pedir dos favores a cambio de las dos vidas que salvaste.

El estruendo de pasos los interrumpió cuando Cora irrumpió por las puertas, seguida rápidamente por Stiles y Lydia.

Cora corrió inmediatamente hacia Derek.

—¿Qué pasó?

***

Recuerden votar y comentar !!

A partir de este momento habrá actualizaciones cuando se llegue a la meta -secreta- de comentarios, así que si no hay actualización, ya saben! A comentar más ♡⁠