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32. Aftercare.
Jiae se dejó caer sobre la cama, exhausta. Labios inflados, ojos hinchados y un rostro enrojecido. El dolor era intenso, pero por alguna razón, no sentía nada. Sus lágrimas caían con fluidez y su respiración era errada; todas y cada una de las palabras que quería decir, eran reemplazadas por sollozos o suspiros entrecortados.
No pasó mucho hasta que unos brazos colocaron una manta de color azul gruesa sobre sus pequeños hombros y la abrazaran como si estuviese apunto de romperse, como si fuese tan frágil que cualquier cosa podría dañarla.
Cerró sus ojos y jadeó, sin moverse un centímetro. En total tranquilidad y calma, siendo rodeada por los brazos de la única persona que quería en ese momento: — Creo que me emocioné un poco — él murmuró y le siguió una diminuta risa, haciendo que el estómago de la chica se contrajera y se estremeciera.
Su mente estaba en blanco, le dolía la cabeza, mucho, también. Sentía algo parecido a la fiebre.
El buen sentimiento de haber estado flotando en una nube se había desvanecido; era como salir de un deleitado trance, como volver a la realidad después de haber estado en un excitante sueño.
— Lo siento, — oyó la voz masculina disculparse, y sintió cómo sus manos acariciaban su cabello. Jiae siguió llorando, sin quiera entender porqué. ¿Qué le decía? La pequeña no podía entender ni una sola palabra; las escuchaba todas y cada una, pero por alguna razón, no comprendía las cosas que salían de su boca — Lo hiciste muy bien, — la alabó, y se separó sólo un poco de ella, rompiendo el abrazo, para tomar las manos de Jiae entre las suyas. Se sentían suaves y cálidas comparadas con sus manos frías y sudorosas, y sus meñiques rozaban tiernamente el dorso de su mano.
Todo estaba tan silencioso, sólo se podían escuchar los pequeños sollozos entrecortados de ella. Baekhyun se quedó unos momentos ahí, esperando a que sus sollozos parasen y sus lágrimas se detuviesen. La contempló ahí, en su cama, su piel siendo cubierta por la manta que le había provisto. Se veía tan frágil, tan débil, tan quebrantable; y él se sintió un poco culpable por haberla hecho excedido el límite.
Él mismo secó las lágrimas de la menor con sus propios dedos, con cuidado. Sonriéndole para tratar de hacerla sentir mejor. Y después de unos instantes, él la llevó a la tina, entrándose con ella en el agua tibia del baño.
La miraba de una forma tierna. Quizás era el alcohol, quizás pena. Pero hoy especialmente, la veía de una forma distinta. Tenía ganas de abrazarla y no soltarla, de protegerla de la forma fuese; se encontró a sí mismo extrañado, porque no recuerda haber hecho este tipo de cosas por nadie más. No eran muchas las chicas que había visto entrar a subspace, el drop las hacía reaccionar de una forma diferente. No había necesidad de ser tan dulce o tan considerado, no había necesidad de nada sentimental.
Si decía que Jiae era diferente al resto, sería una gran mentira. Era una chica bastante normal. No tenía nada extraordinario. No era muy inteligente por lo que él había visto, no se sabía expresar bien, actuaba por impulso, no venía de una familiar espectacular, tampoco era la chica más linda que había visto y mucho menos con el mejor cuerpo. Pero definitivamente había algo... Posiblemente era ella y su inocencia, su persistencia, su sencillez. La forma en la que pedía su atención con constancia y trataba de ocultarlo, sus sonrojos cuando él le sonría, su terquedad cuando trataba de llevarle la contraria. Todas esas pequeñas cosas, le parecían tiernas y bonitas, y él sabía que no sentía precisamente amor por ella, pero la apreciaba, y ahora se daba cuenta.
Y mientras pensaba en todo eso del otro lado de la bañera, echando las exageradas burbujas a un lado como distracción (la verdad, es que sí se había pasado de burbujas), la chica cerró sus ojos y apoyó su cabeza en uno de los lados de la bañera. Él sólo se sentó ahí a apreciarla en silencio, esperando un rato más para salir de la bañera con cuidado él primero, colocarse ropa y luego volver a sacarla, pero cuando intentó tomarla en sus brazos otra vez (porque bien, ella ni podía pararse), se dio cuenta de que no había estado durmiendo y la vio abrir sus ojos confundidos, pero otra vez, no había dicho nada.
La sentó en su cama, y la primera opción fue buscar su ropa, pero honestamente volverle a colocarle su uniforme, especialmente si iba a dormir era estúpido, así que optó por darle uno de sus tshirts, de esos que eran dos o tres tallas más que la suya y que si a él le quedaban enormes, imagínense a Jiae.
Con meticulosidad, le colocó sólo el gran tshirt que cubría la mayoría de su cuerpo ahora y observó cómo su cabello mojado, lo humedecía un poco. La cercanía que había entre ellos dos ese momento, se sentía bastante íntima, y se atrevería decir que incluso más íntima que la escena sexual que acababan de tener. Sus dedos palpaban los muslos de Jiae, sin la mínima gota de perversión, como siempre lo era cuando la tocaba; los ojos marrones de la chica estaban puestos en los suyos, se veía mucho mejor que hace unos minutos y aunque antes parecía que no podía emitir una palabra, ahora lo que su mirada daba a entender es que tenía algo que decir, pero no sabía decirlo.
Jiae no captaba la situación del todo, más bien, todo le parecía alguna especie de sueño en el cual no quería inferir. Los dedos de Baekhyun subían y bajaban por sus muslos, y la hicieron estremecerse, estaba demasiado sensible debido a toda la sobre estimulación.
Él le sonrió dulcemente y Jiae juraba que era un sueño, porque jamás lo había visto sonreírle de esa forma, tan sincera y genuina. Y creyó haber confirmado que era un sueño en el momento que él se había inclinado para poner sus labios en los de ella afablemente, en un lapso de tiempo muy corto, donde había sentido la respiración ajena sobre su piel con más intensidad de lo que lo había hecho con sus labios.
— ¿Tienes hambre? — él murmuró sobre sus labios, alejándose un poco de ella después y recobrando su postura. Jiae negó con su cabeza — ¿Sed? — otra vez la chica negó suavemente — ¿No quieres nada?
A él. Era lo único que quería, lo único que necesitaba en ese momento, y si de verdad era un sueño, no quería despertarse.
Pero ella no fue capaz de decirle nada, entonces él se dio la media vuelta y salió de la habitación, dejándola sentada en su cama. Unos segundos después, le habían dado ganas de llorar otra vez, y se percató de que estaba llorando de nuevo cuando una de sus lágrimas cayó sobre la palma de su mano. ¿Por qué diablos estaba tan sensible? Era lo que más se repetía a sí misma.
No obstante, Baekhyun no había durado mucho en volver con una caja rosa que parecía de juguetes y encontrarla llorando. No le preguntó nada, ni la abrazó otra vez, sólo colocó la caja rosa a su lado: — Está bien si quieres llorar, — lo escuchó decirle mientras le abría la caja — Recordé que esta caja estaba guardada en mi oficina, son cosas que la hija de una de mis primas dejó de usar hace unos meses y me pidió que las diera a alguien que de verdad las necesitase.
Jiae tildó su cabeza un poco para ver qué había en la caja, y sí, sabía que era una niñería, pero sus ojos había brillado cuando había visto unos bonitos stickers y unos cuantos peluches en la caja, todo estaba como nuevo, como si nunca los hubiesen usado.
Él imaginó que a ella le gustarían esas cosas, y si eso la hacía sentirse mejor o la hacía dejar de pensar en lo que sea que estuviese pensando, no tenía objeción en que las usase. La chica pasó su mirada de la caja, a Baekhyun, y era como si estuviese indecisa o pidiéndole permiso para sacar algo de la caja, lo cual él encontró adorable.
Al pasar de unos cuantos minutos, Jiae volvió a estar sola en la habitación de Baekhyun. Sostenía un elefante gris de peluche entre sus piernas y ya tenía unos cuantos stickers en forma de estrellas rosas brillantes en su rostro mientras veía un extraño programa de televisión del que no había oído nunca. Recostó su cabeza sobre una de las almohadas y entrecerró sus ojos tranquilamente, aunque su cabeza estaba hecha un total remolino. No sabía cómo se sentía ni qué era lo que tenía que pensar, lo único en lo que pensaba era en cada instante que miraba el reloj era dónde estaba Baekhyun y porqué aún no volvía a su cuarto. Se sentía increíblemente dependiente de él ahora y de alguna manera, eso se sentía bien. Probablemente cuando ella se despierte de ese sueño, tendría que ver al Baekhyun real ignorándola y diciéndole que no la quería. De esa manera, pensando en todas esas cosas sin sentido, se había quedado dormida de una manera muy incómoda.
🍼
Jiae se despertó en el medio de la noche, pero prefirió no levantarse. De repente, dejó de escuchar las voces en la televisión y en cambio, escuchó unos pasos suaves moviéndose por su habitación. Despacio, abrió sus ojos y se encontró a sí misma en total oscuridad. Removió la manta que estaba cubriéndola y que no recordaba habérsela puesto en ningún instante. Trató de acomodarse en la cama, pero ese intento le había provocado un punzón en la parte baja de su cuerpo y como reacción, dejó salir un quejido de sus labios.
— ¿Jiae?
Ella buscó al dueño de la voz con algo de desesperación al oírlo, y lo que encontró fue su silueta al otro lado de la cama acercándose a ella. Encendió la lamparita que estaba encima de una pequeña mesa, una luz tenue permitiéndole ver su rostro; Baekhyun ubicando su mano en su frente, como si estuviese verificando que no tuviese fiebre: — ¿Te sientes bien?
Escuchar su voz, tan suave y, contradictoriamente, a la vez gruesa, le había provocado un poco de calor en su cuerpo, probablemente un sonrojo. Ella asintió ligeramente y lo vio curvar sus labios en un diminuto puchero, algo que le pareció que nunca vería porque sí, pensaba que se veía increíblemente lindo haciéndolo. Pero lamentablemente, esa cercanía no había durado mucho, él se alejó de ella un poco y apagó la lámpara.
El corazón de Jiae latió con fuerza, como si le dijera que no lo dejase ir y con vehemencia, ella se inclinó un poco y con dos de sus dedos, sujetó una de las piezas de ropa del mayor, sin saber cual era y sin importarle; Baekhyun se detuvo y la miró, pero mucho antes de que él pudiera cuestionar sus acciones, ella ya había cuestionado las suyas: — ¿A dónde vas? — fue la primera oración que ella había dicho en mucho rato, y su voz se escuchaba un poco quebrada.
— ¿Mmh? ¿Te pasa alg–
— ¿Dónde vas? — ella le interrumpió, con persistencia — ¿A dónde?
— Creo que deberías seguir durmiendo, no te ves muy bien–
— ¿Por qué te vas...? — y aunque él no estuviese viendo su rostro, pudo notar por su voz, que había cambiado de un poco molesto a triste — ¿...Por qué siempre me dejas?
Baekhyun mantuvo el silencio por un rato, y Jiae lo soltó gradualmente. Lo pudo oír reír un poco antes de responderle: — ¿No crees que en vez de preguntarme porqué me voy, deberías decir "No te vayas"?
Otra vez estuvieron en silencio, y cuando él se había acercado un poco para sentarse a su lado en la cama, la escuchó sollozando otra vez. Ella misma no entendía porqué diablos estaba así, ni siquiera entendía la razón de los lloriqueos, quizá sólo quería llamar la atención de Baekhyun, lo cual sí había logrado porque él la había rodeado con sus brazos y había empezado a acariciar su espalda dulcemente en movimientos flemáticos y parsimoniosos; ella le correspondió, colocando su cabeza en el pequeño huequito entre su cuello y su hombro.
¿Por qué se sentía tan bien llorar en los brazos de su profesor? Se cuestionó a sí misma cerrando los ojos. De verdad, no explicaba la sensación se sentir la tibieza de su cuerpo junto al suyo y sus brazos alrededor de su cuerpo. Se sentía tan tranquila y resguardada, en completa paz.
Cuando él besó su mejilla, de la misma forma en la que la había besado hace unas horas; tan sutil que se sentía irreal, Jiae pudo oír, literalmente, su corazón retumbando en sus oídos junto con la respiración de Baekhyun, y en esos momentos se preguntaba si él también lo había escuchado. Luego volvió a besar su cuello y fue de esa forma como volvió a sentir que su estómago se revoloteaba; y con inseguridad, llevó una de sus manos al cabello de Baekhyun, tomando uno de sus mechones entre sus dedos y acariciándolos al sentir la suavidad de las hebras de su cabello; no mucho tiempo había pasado hasta que había cerrado sus ojos y se había quedado dormida otra vez.
🍼
Un zumbido y el sonido de un timbre despertaron a Jiae. El sonido era familiar y asumió que era su teléfono, así que estiró su brazo, aún con los ojos cerrados y lo que sus manos tocaron había sido una superficie metálica.
Abrió sus ojos con lentitud y se encontró con unas paredes que no eran de color rosa pastel, sino más bien blancas. Y ahí, todos y cada uno de los recuerdos de la noche pasada vinieron a su cabeza, especialmente cuando se había dado cuenta de que lo que había tocado eran unas esposas. Un hormigueo recorrió su cuerpo y sus mejillas recobraron otro color, movió su cabeza a un lado y para su sorpresa, él yacía ahí. Respiraba muy apaciblemente, con su cabello hecho un desastre y unos cuantos mechones en su cara, era de verdad una vista muy linda, no recuerda haberlo visto dormir tan plácidamente antes, incluso podría jurar que le causaba satisfacción.
Después de haber pasado unos instantes de mirarlo con ternura, recordó que lamentablemente tenía clases y no podía seguir ahí. Así que en el instante que iba a levantarse, lo hizo con tanta fuerza que cuando sintió otra vez el dolor en la parte baja de su espalda, terminó cayéndose al suelo.
Ay, Jiae. ¿Por qué eres tan torpe?
Los quejidos de Jiae y el gran ruido que había hecho al caerse, hicieron que Baekhyun se despertara con dificultad: — ¿Jiae? — lo escuchó preguntar luego de soltar un bostezo, con voz ronca. Ella no le respondió, lo que hizo que él la buscara por toda la habitación con la mirada, y finalmente, se levantara de la cama y la encontrase a un lado de ésta, en el suelo — ¿Te pasó algo? — sintió preocupación en su voz en el momento que él le había extendido su mano para ayudarla a levantar.
— Me caí, — ella respondió con vergüenza — Pero ahora, tengo que irme, tengo clases y-
— ¿De qué hablas? Son las 12.
Los ojos de Jiae se abrieron como dos platos y cuando volteó a ver el reloj de pared: él tenía razón, eran las 12:19pm: — ¿Qué? ¿Por qué no me dijiste nada? — dijo intranquila, haciendo una mueca al sentarse en la cama con ayuda de Baekhyun.
— Yo no soy tu papá, no tengo que levantarte para que vayas a estudiar, — Baekhyun le respondió como si fuese obvio, frunciendo el ceño al escucharla.
Jiae se quedó mirándolo en silencio. Sí, seguramente todo eso que había pasado anoche era un sueño, porque no había forma de que Baekhyun fuese tan dulce con ella. Ella suspiró y quitó su mirada de él: — Tuvo que haber sido un sueño — susurró, sin embargo, obviamente él la escuchó.
— ¿Qué fue un sueño? — cuestionó divertido — ¿Lo bien que la pasamos anoche?
Jiae lo fulminó con la mirada, sintiéndose indignada: — ¿Qué bien? — le mostró sus muñecas que aún tenían marcas y estaban adoloridas — ¿Esto significa que yo la pasé bien? — él la miró seriamente, riéndose con ironía después, haciendo que Jiae se molestara un poco más.
— Yo no te obligué a nada, Jiae, — él le recordó — Si querías pararlo, podrías haberlo hecho, pero yo no me detuve porque sé que lo disfrutaste bastante — con eso, él se dirigió al baño y cerró la puerta de un portazo.
Tenía razón. Ella no lo había detenido. Dejó escapar otro suspiro y cuando abrió sus piernas un poco, notó la frescura que sintió de momento, no traía ropa interior y que lo que traía puesto, en realidad no era suyo; entonces trató de buscar su celular, el cual estaba al lado de la cama y cuando vio su reflejo, vio unos cuantos stickers. Un escalofrío recorrió su cuerpo y se dio cuenta: nada de lo que había pasado había sido un sueño.
Ahora se sentía como una estúpida al recordar todo. Baekhyun la había cuidado toda la noche y así ella le estaba pagando, molestándose con él sin razón alguna.
🍼
Jiae observó a Baekhyun caminar de un lado a otro con sólo una toalla en su cintura y su cabello empapado, del cual salían gotas de agua que se resbalaban por su cuerpo, especialmente en la parte donde estaban sus abdominales e inconscientemente hizo un puchero, pensando que era una desgracia que fuese tan atractivo y ella tan corriente. Se veía normal, pero presentía que estaba molesto con ella porque no le dirigía la mirada o siquiera le hablaba.
— Lo siento — ella dijo de la nada. Baekhyun dejó de hacer lo que estaba haciendo y se volteó a verla, luciendo desconcertado — No debí haber dicho lo que dije.
— En realidad, Jiae, yo creo que lo mejor es que terminemos con esto.
— ¡¿Por qué haces estas cosas?! — ella exclamó de inmediato, siendo sorprendida por sus palabras — ¡Yo no te entiendo, Baekhyun! ¿Por qué, justo cuando estaba apunto de dejarte ir completamente, me hiciste esto?
Jiae lo había tomado totalmente desprevenido, haciendo que la mirara confundido: — ¿Hacer qué, Jiae?
— ¡Todo! Desde interrumpirme anoche con un beso hasta los mimos en la madrugada. Fue egoísta, me hace pensar que tú quieres que yo te quiera, pero no quieres quererme. También existo cuando no tienes ganas de acostarte con alguien o cuando no estás aburrido.
Él no tuvo mucho que decir. Para empezar, él no entendió muy lo que estaba haciendo; si es cierto que no estaba totalmente tomado anoche, pero por alguna razón quería actuar deliberadamente, sin pensar en consecuencias. Y probablemente la chica tenía razón, probablemente eso era lo que él quería.
Jiae tuvo ganas de llorar, otra vez, pero se las contuvo; mirándolo fijamente, esperando por una respuesta, pero él seguía mirándola como si no tuviese ninguna: — Baekhyun, — ella llamó su atención, sin pensarlo mucho, estaba dispuesta a arriesgarse — ¿Qué sientes por mí? Si vas a decir que no sientes nada, está bien. Dímelo. No quiero seguir siendo vista como una niña por ti. Actúas como si quisieras y al rato actúas como si no y complicas mucho las cosas que no son complicadas.
Él, antes de responder, negó varias veces con su cabeza: — Jiae, yo dejé de verte como una niña hace tiempo, pero ya no sé si siento algo por ti o no.
Ella se sintió feliz de repente. La verdad esperaba que le dijera otra vez no, no siento nada por ti; pero el hecho de que él estuviese indeciso de sus sentimientos cambiaba todo. Baekhyun, que vio el brillo en los ojos de Jiae, se sintió un poco culpable: — Mira, no puedo decir que te amo porque ese no es el caso, pero yo no sé cómo me siento hacia a ti. Y no puedo prometerte nada.
Quizás la única razón por la cual la estaba considerando era porque Seoyeon no le podía importar menos ya; Sí, ahora mantenían contacto pero no podía negar que mientras más cerca estaban, su corazón estaba más alejado del de ella. Sabía que sólo había venido a él por pena, porque lo había visto desboronarse poco a poco y ella, aunque no quería admitirlo, era una buena persona.
Y él no sabía mucho de amor. Pero sí sabía mucho de perder a las personas que él quería. Sabía lo que era amar a alguien tanto que las cosas malas parecían desaparecer y el mundo se veía distinto.
— Yo quiero intentarlo, — ella confesó, sacándolo de sus pensamiento — Lo que sea, aunque eso signifique perder muchas cosas en el camino, yo quiero intentarlo, si es contigo sí, — sus labios se entreabrieron al ver la determinación de la chica en sus palabras — Sé mis límites y sé ahora lo que merezco, pero aunque te ame tanto que duela, si el tipo de relación que quieres conmigo es sólo mi cuerpo, entonces no vale la pena que siga aquí.
— Jiae, acabo de decirte que no sé lo que siento por ti–
— Yo sí. Y si quieres intentarlo también, puedo hacerlo, — dijo, y él empezó a notar el cierto miedo que había escondido entre sus palabras — Pero no puedo quedarme aquí queriéndote tanto cuando tú no quieres quererme.
Baekhyun suspiró, acomodándose la toalla. Él estuvo pensando en las palabras de Jiae, y en lo tan serias y honestas que eran: — ¿Tienes idea de lo que me estás proponiendo?
🍼🍼🍼
a/n:
si a lo largo del capítulo se estuvieron preguntando qué era aftercare, subspace o drop, aquí están las respuestas a sus incógnitas, ya que realmente en toda mi vida nunca he visto un ff con smut que incluya aftercare ni hable de ello:
aftercare: es, simplemente, el tiempo que las parejas se dan después del acto sexual para recuperarse, ya que algunas prácticas pueden ser un poco intensas. también es importante para entender las necesidades físicas y emocionales del otro. hay muchos tipos de aftercare y cada uno de ellos es importante.
subspace: es un estado psicológico en el que puede entrar el sumiso/a de una relación donde hayan prácticas bdsm, y cada persona puede reaccionar diferente de acuerdo a la situación. es como un trance hipnótico, en el que las intensas experiencias de dolor y placer llevan a que el sistema nervioso responda de una forma en la que el cuerpo libere químicos naturales los cuales provocan los mismos efectos de una morfina.
drop: (sub-drop) es lo que pasa al salir de la subspace. (muy floja para explicar esto también, pero era básicamente lo que tenía Jiae en el transcurso del capítulo y por eso era que estaba tan sensible)
como una vaga explicación, el capítulo pasado iba a ser más largo pero no quería alargarlo más y bueno, corté toda la parte intensa, la cual no creo que en realidad fuera a ser necesaria, porque la verdad lo único que yo quería era escribir todo este fluff, ¿qué les pareció? creo que es la primera vez que escribo algo tan cutecito aquí, lo cual es una pena :(
saben que noté que este ff tiene un año ya desde la fecha de su publicación y estaba como wow, tanto tiempo y aún no lo he acabado?? pero luego recuerdo que lo borré y lo resubí, que hubo tiempo que tuve una gran depresión que duró unos cuantos meses y no quería escribir nada y que también tuve bloqueo de escritor y se me pasa :'v de todas formas!! gracias a todas las que leen esta cosita desde hace tanto tiempo, a las que me han apoyado a que siga escribiendo y también a todas las que acaban de descubrir el ff <333
oookay, fuera de eso, les tengo cuatro preguntas:
con relación al ff, ¿qué les parece la relación de jiae y baekhyun? ¿y baekhyun y jiae como personajes?
sin relación al ff omgggg, ¿qué tal les pareció el comeback? ¿y ahora, cuál es su canción favorita del repackaged?
honestamente pensé (igual que todas GFGH) que el comeback iba a ser super serio y oscuro, pero la vdd me gustó y lo disfruté más que un comeback serio 🤷🏻♀️ 💕 y quiero recordarles que Sweet Lies es la canción, no puedo creer que EXO haya destituido a The Eve tan pronto 🤔
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