30. Solo (2/2).  

— Ay, Somi, ¿Sabes? Estás siendo muy lenta. Jiae no está en el camino y tú aún no has reclamado lo que es tuyo, — Mijoo movió su cabello a un lado y miró a su mejor amiga encarnando una ceja — Te estoy ayudando, pero tienes que poner de tu parte.

— No estoy segura, Mijoo — Somi hizo una mueca y desvió la mirada, evitando encontrarse con la posible mirada acusadora de Mijoo.

— No bromees así, estúpida, — y en vez de encontrarse a una Mijoo molesta, se encontró con una que había tomado su comentario como un chiste mientras soltaba una carcajada y aplaudía — No juegues de esa forma conmigo.

Somi se volteó a verla, fingiendo una sonrisa: — Lo siento. Te prometo que esta tarde le volveré a decir cómo me siento.

— Sabes que tienes todo mi apoyo, — la chica puso su mano en el hombro de Somi y lo masajeó suavemente — Y sé que ahora que ella no está en el camino, quizás se de cuenta de que tú eres la indicada para él.

La de los ojos ámbar la contempló por unos momentos, y mordió su labio inferior con nerviosismo, girándose a ver por la ventana del edificio. Se sentía muy angustiada de saber que quizás Baekhyun volvería a dejarla, como lo ha hecho tantas veces. A él no le importaba mucho Somi, y esa era exactamente la razón por la que ella se sentía tan atraída a él. Ya habían pasado dos años, desde la primera vez que lo vio y jura que sigue sintiéndose igual.

A ella nunca le había gustado alguien, nunca.
Toda su adolescencia había sido monótona y aburrida, sin ningún tipo de emoción. Observaba a sus amigas sufrir por amor y enamorarse constantemente cuando ella no podía encontrar a alguien que siquiera le agradara por más de dos horas. Había estado pensando en que quizás el amor no era para ella, hasta que Byun Baekhyun apareció. El día que lo vio cruzar por la puerta del salón de clases, decir que le había robado el aliento era poco. Era muy hermoso, si es que podía usar esas palabras, para nada convencional.

Enamorarse de un profesor estaba mal y la inmoralidad que convenía con ello era grande, por lo que decidió tratar de olvidarse de todos esos sentimientos y pensamientos, porque no importaba por dónde lo mirase, no era correcto. Pero bueno, si uno pudiese elegir de quién se enamora, se ahorraría tener el corazón roto o cometer muchos errores; al final de la jornada, esos sentimientos seguían ahí.

Un día normal de clases, a Somi se le había olvidado su botella de agua en el salón, así que devuelta al lugar, vio algo que la dejó boquiabierta, a Hyeran, una de sus compañeras de mente superdotada besar el cuello de su profesor. No sabía cómo reaccionar, y no se movió un centímetro; nunca se imaginó que él pudiese mandar el profesionalismo al carajo de esa forma y mucho menos que Hyeran fuese capaz de acostarse con profesores.

Tarde o temprano, su profesor de literatura y su tímida compañera de clases la descubrieron sin palabras en la puerta del salón de clases. No hubo una explicación, nadie trató de justificar su acción. La pobre Hyeran salió del salón de clases sin decir nada con toda la pena del planeta encima de sus hombros, y Somi quiso decir algo, y aunque una que otra palabra salió de su boca, ninguna tuvo sentido.

Probablemente nunca iba a olvidar ese día, cuando su corazón latió con tanta fuerza que pensaba que se le iba a explotar en el pecho, y la forma en la que Baekhyun se acercó a ella, cerró la puerta del salón nuevamente y unió sus labios a los de ella. No se arrepentía de nada. Absolutamente nada.

Él sabía que ella estaba enamorada de él, es decir, para él era obvio, la excesiva atención, las miradas prolongadas, los sonrojos repentinos, el nerviosismo inexplicable; y de esa forma, supo que ella no iba a decir nada. Ella había caído en una trampa. Pero, ¿A quién diablos le importaba si era una trampa? Se tiraría a su profesor una y otra vez sin pensárselo dos veces y no se arrepentiría, aún sabiendo que ella era un juguete para él y no existían sentimientos suyos de por medio, aunque los de ella sí.

Había sido así, siempre supo que no era la única en ningún sentido, y ella era un adulto, ¡Por Dios! Se supone que esas cosas no le afectaban tanto... Pero sí lo hacían, especialmente porque él fue su primer amor y aún lo seguía siendo. Cuando se enteraba de que había estado con otra, su corazón se le rompía en pequeños pedacitos; pero cuando la besaba y la hacía sentir tan especial con sus manos, parecía como si volviese a recoger cada uno de los pedazos y ponerlos en su lugar.

Todo hasta el día donde se enteró que Yoo Jiae le tenía ganas también. Jiae, la mejor amiga de su hermana y ella nunca se habían llevado bien, pero en su adultez, prefirió ignorar todos los gestos que Jiae hacía para demostrarle su desagrado.

El instante en el que Baekhyun decidió dejar de acostarse con ella y empezar a ignorarla, le había dolido tanto que en su amargura se había comportado de una forma hostil con Jiae. La verdad es que ella no quería ser tan tonta y hacerla sentir mal, pero sabe que la única razón por lo que lo era, era por los celos, cuando en serio creía que en algún sus sentimientos serían recíprocos; entonces es como si nunca hubiese sido nada y hubiese sido reemplazada por Jiae, lo cual consideraba tonto.

Bebió de su botella de agua y trató de ahogar la pena, porque estaba segura de que Baekhyun no la quería, pero si Mijoo intentaba hacer que las cosas funcionasen, entonces no iba a defraudar a su mejor amiga.

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— Eres aburrido, — Mijoo le confesó a Kyungsoo desde el otro lado de la mesa, jugando con un mechón de su cabello entre sus dedos — ¿Por qué decidiste ser mi tutor?

— Esta tutoría se ha acabado, — él le respondió fingiendo una sonrisa, en una voz pasiva y cerrando su libro de inglés con fuerza — ¿Cómo diablos eres tan lenta? ¿Cuál es la maldita lógica de no entender los homónimos?

Si hubiese sido otra persona, seguro Mijoo hubiese reaccionado de otra forma, pero ya que era Kyungsoo, su viejo "amigo" de la preparatoria, no podía hacer otra cosa que no fuese sonreír: — Tú eres horrible explicando, idiota.

— Tengo una vida, y esa vida me llama — Kyungsoo se levantó y tomó el libro entre sus manos — Ojalá tengas que repetir inglés otra vez.

Mijoo se rió otra vez y asintió: — Me gustaría, el profesor está tan bueno que me gustaría reprobar.

Él rodeó sus ojos como respuesta y acomodó la silla para salir de la biblioteca, Mijoo lo persiguió con la mirada, hasta que lo observó saludar a una chica golpeándola con el libro hasta verla sorprenderse y reírse para salir de ahí.

Era Jiae, excelente, justo a quien ella buscaba. Puso su lápiz a un lado y la contempló moverse por la biblioteca, al parecer buscando un libro. Sin esperarla mucho, ella decidió dar el primer paso y acercársele.

— Hola, — la más alta saludó con una sonrisa, apoyándose contra el estante de libros. Jiae se asombró de verla ahí, y la saludó con un ademán, volviendo a enfocarse en sus libros — Te vuelvo a encontrar, Jiae. ¿Cómo estás?

La aludida echó su cabello a un lado y miró a Mijoo a los ojos por unos segundos, recordándola con una expresión molesta: — Disculpa si soy grosera pero, ¿Puedo ayudarte en algo?

Ella sabía quién era Jiae gracias a Junghee, descubrió que parte de su fama en el lugar se la debía a que era bonita y la otra a que su abuela era la fundadora del lugar, al mismo tiempo, Baekhyun era su primo y Somi era su mejor amiga. En definitiva, no le caía muy bien.

Mijoo se rió y luego le sonrió, tildando su cabeza: — Sí, quiero que salgas de la vida de Baekhyun definitivamente.

Jiae suspiró y se quedó en silencio por unos momentos: — Tienes como, tres semanas de atraso, ya pasó. Ahora, si querías decir sólo eso, yo tengo que irme.

La mayor negó con la cabeza: — Quiero que te cambies de clase también.

Ella frunció el ceño y se rió con ironía: — No, claro que no. ¿Por qué tengo que hacer eso? ¿Porque tú lo dices?

— ¡Shhhh! — la señora que atendía la biblioteca pasó por el lado de ellas, haciendo que Jiae se molestara aún más, se diera la vuelta y saliera de la biblioteca. Mijoo cerró sus ojos e inhaló aire por unos segundos para calmarse, yendo detrás de la chica.

— ¡Yoo Jiae! — gritó corriendo hacia ella.

— ¡¿Qué quieres?! — la chica se detuvo a mirarla, el sol golpeando sus ojos — Este no es tu asunto. No me interesa él ya — mentira.

— No es eso, — Mijoo hizo una pausa, y se detuvo enfrente a Jiae, recobrando aire — Puede... meterse en problemas... por tu culpa — respondió entre jadeos.

— ¿Qué? Pero si ya se acabó. No entiend–

— Es mi culpa, — interrumpió — Yo dije algo que no debí haber dicho hace unos días, y van a investigar a toda la clase, las van a interrogar a todas, fue una estupidez de mi parte pero–

— ¿Qué? — volvió a preguntar — ¿Es en serio?

Asintió: — Le dije a Junmyeon sobre ti y Baekhyun–

— ¡¿Por qué diablos hiciste eso?!

— ¿Puedes dejar de gritar? — Mijoo bajó la voz y golpeó el brazo de Jiae — ¿Quieres que te escuchen? Joder, qué mala educación.

— ¿Por qué hiciste eso? ¿Baekhyun no es tu primo? ¿No te preocupa lo que pueda pasarle? ¿Qué tipo de p–

— Escucha, — interrumpió nuevamente — Yo también animé a Somi para que le dijera a Jiyoon sobre su relación y–

— ¡¿Que tú qué?!

— ¡Mierda, Jiae! — exasperó Mijoo fastidiada por los gritos de Jiae — ¡Cállate la boca! ¡Fue una estupidez, ¿No ves que quiero arreglarlo?!

Ella se quedó incrédula negando con la cabeza: — De verdad eres una persona egoísta.

— Voy a arreglarlo, ¿Está bien?

— ¿Baekhyun sabe?

— ¿Por qué piensas que te dejó?

La menor no respondió, se había quedado sin palabras. ¿Esa era la razón por la que le había propuesto terminarlo? Y ella que estaba pensando en cosas superficiales, como que él se había encontrado otra o se había aburrido (que no descartaba ninguna de las dos de todas formas).

— Sabes que no siento nada de lo que pasó, ¿Cierto? — Mijoo volvió a hablar — Yo sigo pensando que no estás a la altura de Baekhyun de todas formas. Yo voy a solucionar este problema por él, no por ti.

— No tienes ni idea lo que me ha costado llegar aquí para que me traigan problemas sólo por los celos tuyos y de Somi — Jiae le respondió colérica, tratando de aguantarse las lágrimas de la impotencia.

— Tienes razón, son celos. Estoy celosa, — admitió con superioridad — Jiae, tú no lo conoces, tú ni siquiera sabes todo lo que ha pasado, lo estoy protegiendo.

— ¿Lo estás protegiendo de quién? ¿De mí? — cuestionó, haciendo que ella asintiera — Debes estar bromeando, ¿Qué daño podría hacerle yo a Baekhyun? Era él quien me estaba utilizando.

— Tú no lo entiendes porque sólo te estás preocupando en ti misma. Si te cuento algo, ¿Prometes callarte la bocota?

Así fue como Mijoo le contó la origen de sus celos fuertes.

Cuando era más pequeña, su madre había muerto por una sobredosis de sustancias controladas, su padre decidió llevarla a vivir con su abuela porque no sabía qué debía hacer con una pequeña Mijoo de dos años.

Toda su infancia, había vivido bajo el techo de su abuela, una señora estricta y poco afectiva, atraída al dinero, era aburrido volver de la escuela a una casa prácticamente vacía para sentarse a ver televisión todo el día.

Básicamente, lo único bueno era que a veces sus primos venían a jugar, Baekbeom y Baekhyun. La llevaban a salir, peleaban con ella, compartían la comida y muy pronto los sintió como fuesen sus hermanos. Aún más cuando su abuela se enfermó y la madre de ellos pensó que era buena idea traerla a casa, y lo fue. Los días eran más cortos, pero eran doblemente divertidos, y Baekbeom solía ser la víctima de las bromas de Baekhyun y suyas, recordando específicamente la vez que estropearon la boda del primero e hicieron a su esposa llorar.

Esos años fueron divertidos, hasta que una mala broma trajo un horrible suceso. A ella se le ocurrió jugarle una broma a Baekbeom por teléfono, y Baekhyun la ayudó a fingir que ambos habían tenido un accidente. Al final, quien tuvo el accidente fue Baekbeom y en menos de un día... ya no estaba.

Ambos vivieron con ese remordimiento y culpabilidad, más Baekhyun que la propia Mijoo. Él se repetía varias veces que había matado a su propio hermano, y de esa forma, su vida cambió mucho.

Él se alejó de ella, de su familia. Fue a quedarse en casa de su padre (el cual luego de la muerte de su hermano, se había separado de su mamá), y empezó su vida en la universidad.

No sabía con exactitud qué había pasado en ese período de su vida, pero ella sabía que él había conocido a alguien que lo hizo enamorarse de verdad pero también... de la noche a la mañana, ella desapareció.

Mijoo sabía que era su culpa, pero era muy cobarde para admitirlo. Ella entendía que le había arrebatado la felicidad a su familia con su estúpida broma y había provocado un Baekhyun depresivo, una viuda, un divorcio y una muerte.

Para ella, la única forma de poder sentirse en paz, era tratando de arreglar la vida de Baekhyun. Era dándole la felicidad que le había quitado, era tratando de protegerlo, con miedo de perderlo como ella había perdido a Baekbeom.

Es por eso que ella estaba convencida de que Somi podría ayudarlo, porque sabía que ella lo amaba de verdad, porque pensaba que ella podría hacerlo feliz, conocía el tipo de persona que era Somi, y sabía que nunca lo iba a quitar de su lado.

Jiae palideció y sus labios se entreabrieron, estaba llorando, no sólo por Mijoo, o por Baekhyun, sino por ella misma, preguntándose qué era lo correcto, qué debía hacer: — Lo siento mucho.

— No soy una buena persona, lo arruino todo pensando que lo hago bien — ella le respondió con un nudo en la garganta — Todo lo que hecho por Baekhyun, nunca lo he hecho con una mala intención. Es por eso que necesito que te alejes de él.

Ella secó su mejilla con la palma de su mano y miró a otro lado: — ¿...Y qué va a cambiar la situación si Somi está en el medio? Ella también es una estudiante.

— Somi va a graduarse el mes siguiente en cuanto apruebe literatura, y cuando lo haga, ya no habrá ninguna barrera entre ellos, ya todo este embrollo no va a importar. Sin embargo, Jiae, a ti aún te falta, no sé si lo que sientes por Baekhyun es amor, pero lo que sí sé es que tus padres y Jiyoon pueden meterlo en un problema, y tú estás consciente de ello, — ella no respondió, más bien empezó a jugar con sus manos — Lo siento, ¿Sí? Sé que soy irritante, y que probablemente ahora me odias y que no deberías sentir compasión por mí, pero lo que hice, lo hice para protegerlo, y si tú lo quieres de verdad, aléjate.

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bueno, espero que ahora tengan sentido las actitudes de los personajes, como que mijoo tiene celos de hermana menor y somi también lo quiere mucho :( para que vean que ellas pues también son humanas 🤷🏻‍♀️

curiosidad #545678: ¿sabían que en realidad jiyoon iba a estar enamorada de baekhyun? pero quité eso, iba a ser mucho drama, ¿también sabían que originalmente no iban a estar en la academia? tenía pensada en una escena en la habitación de jiae, en casa de sus padres, con ambos ahí, haciendo lo que mejor saben hacer¿? pero honestamente lo sentí incorrectamente moral (a quién le importa) y modifiqué la historia.

otro dato muy interesante es que tuve un día muy ajetreado y de verdad tengo tanto estrés :( pero estaba leyendo comentarios y me sentí muy conmovida y pensé que me haría mejor sentarme a escribir un rato, dejar de pensar en todo y agradecerles con otro cap dramático su fidelidad a este ff 💕 las quiero muchísimo.

btw!!! vieron ese fancam de bbh de kokobop de hoy (bueno, ayer)? porque 😍😍😍

https://youtu.be/rfreKmaB12U