Jungkook miraba la caricatura con el teléfono golpeado de Yoongi. Escuchaba la canción de Baby Shark, pero aburrido de ella empezó a buscar algo que le interesara mucho más en aquellos videos. Extrañaba a su tío Jin, pues el lo hacía reír cuando estaba aburrido o jugaba con él.

Con su manita busco el traste donde Yoongi le llevó zanahorias que el mayor les decía bebés. O era algo como feto de Zanahoria. Comió un poco mirando ahora un video de unos chicos bailando una canción que le gustaba.

Iba a seguir viendo los videos, cuando escuchó la voz de su tío Hoseok.

—¡Lo cuidare bien no te preocupes!— Salió asomándose de la puerta viendo a su tío entrar con una extraña caja café con una puerta plateada. Su tío parecía contento y risueño, Jungkook se acercó a él con curiosidad por ver que había traído.

—¡Oh Kookie traje a alguien para que...!— Su tío se detuvo cuando Yoongi carraspeo detrás de él.

—¿Qué hiciste esta vez?—Preguntó el mayor. Hoseok tragó con fuerza intentando buscar su salvación pero no había nada que pudiera hacer, Yoongi lo miraba con los ojos medio cerrados casi juzgándolo. No pudo retenerse más y saco al perro de la jaula.

Una pequeña bola de pelos negra con motes cafés y muy pequeño salió de ella.

Yoongi abrió la boca.

—¡JISOO SALDRÁ DE VIAJE UNOS DÍAS Y ME PIDIO CUIDAR AL PERRO DE SU PEQUEÑO SOLO POR EL FIN DE SEMANA!—Gritó el pelirrojo con fuerza y cerrando los ojos. Yeontan se sacudió un poco y con una pose elegante se acercó al mayor, sacudiendo su colita y mirándolo con ojos brillantes lo observó. Yoongi medio sonrió.

Levantó al perro y lo acarició.

Jungkook miró todo con la boca abierta. Ese perro no le gustaba.

"Ongi e mio"

Caminó a donde estaba el mayor y tiró de su camiseta. El pálido miro al menor que alzó sus bracitos pidiendo ser abrazado también, Yoongi frunció el ceño y miró al menor.

—¿Te comiste esos fetos de zanahoria?— El menor negó y Yoongi suspiro.

—No te abrazaré hasta que los comas Jungkook, ahora ve y termínatelas— Jungkook frunció el ceño cuando el perro parecía sonreír  y fue al cuarto a encerrarse, ese perro no le gustaba.

Escuchó a su tío Nam entrar gritando. —¡Traje bebidas!— Escucho como se fueron a la cocina y caminó a la sala para encontrarse al perro feo en un sillón acostado cómodamente. Se paró frente a él y lo miró con ojos acusadores.

—Ongi mio— El perro lo miró y lo ignoró. Jungkook se molesto con el perro y tiró de su oreja con un jalón.

—¡Guau!— (Traducción: ¡Duele!)

—¡Ongi mio!

—Guar, Guau, Guau!— (Traducción: Tu tonto humano que cae por mi será mío mocoso)—Jungkook apretó los labios y tomó un cojín dándole un golpe al perro.

—¡Ongi mio!

—¡Guau Guau Guau!—(Traducción: ¡Solo obedezco a mi humano!)

Jungkook estaba por darle un golpe nuevo al perro, cuando su tío Hoseok lo detuvo rápidamente.

—¡No Jungkook no le pegues!—Jungkook apretó los labios al ser detenido, el perro sonrió y movió su cola siendo abrazado por el pelirrojo. 

—¡Guau, Guau!—(Traducción: ¡Todos caen mocoso!

Jungkook vio a Yoongi y sonrió teniendo una idea.

—¿Podemos dejar al perro fuera de su jaula Hoseok?— Preguntó el pálido.

—Jisoo me dijo que es bastante tranquilo y amigable y que se podía quedar por la noche con que le dejemos comida y un lugar para comer— Yoongi asintió cómodo por que el perro no daría problemas.

Namjoon recogió al perro y sonrió. Pero Hoseok se lo arrebato.

—¡Oye!

—¡No Nam, si desmadras niños ahora imagínate un perro!

Yoongi se río, Yeontan sintió una mirada fuerte detrás suyo, Jungkook estaba sonriendo tiernamente mientras se acercó a acariciarlo.

El pequeño can, sintió un estremecimiento. Eso era...¿Miedo?

Las luces se apagaron después de una hora. Dejaron a Yeontan acostarse y con un lugar de agua y comida, el pequeño no iba al baño hasta la mañana por lo que no había problema. Mientras que los demás se fueron a sus habitaciones para descansar.

La mañana llegó y todos se levantaron temprano arreglandose para el trabajo. A excepción de Hoseok quien tenía el turno de la tarde en el Hospital.

Yoongi se levantó y fue directo a la sala, lo que vio lo dejó con la boca abierta, viendo el desastre. Tuvo que parpadear dos veces antes de gritar.

—¡HOOOOSEOK!— Hoseok corrió y hasta tropezó un par de veces para llegar a los gritos del mayor.

—¡Que....— Cuando el pelirrojo vio el desastre tragó con fuerza.

Yeontan estaba sobre uno de los sillones dormido tranquilamente, los sillones estaban sucios de salsa de soya que estaba tirada junto con el alimento del perro, el piso estaba sucio con la basura del cesto y ropa sucia que iban a lavar.

¿ESE PERRITO HIZO TODO ESO?

Jungkook llegó con Yoongi pidiendo ser abrazado, el pálido lo miró y sonrió cargandolo para ir a bañarse.

Yeontan se despertó y vio a su alrededor. Vio al pequeño y ladró con molestia.

—Lo quiero en su jaula hasta que ese perro aprenda a comportarse Hoseok—Yoongi estaba sumamente molesto y Jungkook sonrió mirando al perro.

Los días pasaron. Yeontan se quedó en su jaula pues el mayor no confiaba en el perro y ya no lo convencían sus ojitos de cachorro.

—Te juro Hoseok que Yeontan es muy tranquilo, no creo que el sea capaz de eso—Jisoo comentó. Hoseok suspiró.

—Pero el fue el único que se quedó en la sala. Además lo encontramos sucio. Yoongi ya no confía en que el este fuera así que lamento mucho esto—. Jisoo suspiro.

—Tranquilo entiendo. Espero que no cause mas problemas— Hoseok miro hacia la jaula, Jungkook estaba frente a ella.

—Guau, Guau—(Traducción: Tu ganas)

Jungkook sonrió.

—Ongi e mio peo feo— Yeontan asintió, Jungkook abrió la jaula y lo dejó salir. Hoseok miró la escena y abrió la boca.

Jungkook de verdad era un demonio.