Tres chicos estaban frente al rey del lugar.

O bueno, eso es lo que veía un bebé de tres añitos sentado en medio de ellos.

Tres de ellos estaban sentados de cuclillas y levantando los brazos en modo de castigo por haber metido a un bebé con un teléfono y con los labios sellados a una lavadora.

— ¡SE PUDO HABER ASFIXIADO!— Grito el castaño caminando de un lado a otro frente a los tres reos.

— No, lo iba a hacer, dejamos la tapa de la lavadora abierta— Contesto Hoseok, el mayor giro el rostro notablemente molesto.

— Me sorprende que sean así de inconscientes. ¡ES UN BEBÉ!

— Cariño, creo que deberías...—Hablo el moreno quien ya estaba haciendo gestos de molestia al tener por bastante rato los brazos levantados.

— ¡NO ME CALLES KIM O JURO QUE TE LAS CORTO AQUÍ MISMO!— El moreno guardó silencio en el momento. Los tres sabían que Kim SeokJin era alguien de temer, la última vez que alguien había hecho algo en su contra terminó con una mujer de veinte años arrodillándose ante él pidiendo perdón.

Y ninguno de los presentes quería que eso sucediera.

— No, es inconsciencia. Queriamos evitarnos un enorme problema— Contestó el pelirrojo de nuevo.

— ¿Problema?

— Tu enojandote con nosotros, como ahora— Contesto Yoongi. Jungkook miraba con atención la escena con una paleta en su boquita.

— ¡ESO NO ES UN PROBLEMA CHICOS! Hablo de que pusieron en riesgo la vida de un bebé, pudo ahogarse.

— Estábamos cuidando nuestras vidas de ti— Contestó Yoongi.

— Estoy tan molesto en este momento, en especial contigo Yoongi. Me voy apenas una semana y ustedes ya tienen a un bebé. ¿Que más falta?

— ¿Debemos decirle que casi lo pierdes en el centro comercial Yoongi?— Habló NamJoon

— ¡¿QUE?!—Grito Jin, los otros dos miraron mal al moreno.

— Por eso es que no te decimos nada— Dijo exasperado Hoseok.

Los cuatro ya estaban más calmados, aunque Jin no se aguanto demasiado y les pegó con un periódico a los tres.

— ¿Lo abandonaron?— Preguntó el castaño, quien los miraba con duda.

— Si, ha estado con nosotros ya unas cuantas semanas— Contestó Yoongi.

— ¿En cuanto leyeron la carta se acercaron a las autoridades?—Pregunto Jin, los tres se miraron y le dieron una sonrisa.

— ¿No les pasó por la cabeza que pudo ser secuestrado?— Los tres negaron y Jin se dio un facepalm.

— Lo único que pensé es que era un bebé mágico— Contestó Nam, Jin observó a su novio y suspiro acariciando sus cabellos.

— No debieron quedarse con él asi, nada mas. Debieron revisar que el bebé en sus manos no era ilegal— Los tres asintieron.

— ¿Ya lo llevaron al médico?— Los tres negaron

— ¿Ya buscaron un preescolar?— Los tres negaron

— ¿Saben si es alérgico a algo?— Los tres negaron

— ¿Saben algo además de las notas?—Los tres negaron

— ¿Tienen leche y pañales medidos para la semana?— Los tres negaron.

— Chicos, puede que esto suene mal, pero ese bebé no puede quedarse. Ustedes han sido unidos desde que los conozco hace más de seis años, pero en definitiva no pueden cuidarlo.

— ¡HEMOS HECHO UN BUEN TRABAJO!— Gritaron, los tres.

— Lo siento, pero no. Espero que lo lleven a la estacion de policia— Jin estaba por levantarse. Yoongi quien estaba cerca de Jungkook le hizo una mueca al bebé señalando a Jin. Jungkook corrió al castaño e hizo un berrinchito lindo mostrando un lindo brillito en sus ojos.

¿Adivinen quien se quedo en casa comiendo una dulce paleta?