El camarero entró por la puerta que supuestamente daba a la cocina. De pronto, empezaron a salir de allí un montón de hombres armados que empezaron a apuntar a todo el mundo. 

Mucha gente gritaba, otros lloraban y algunos se escondían bajo las mesas. Todo era un caos, pero antes de que nadie pudiera intentar escapar de allí, uno de los hombres armados gritó:

- ¡Quiero que todo el mundo se calle y se quede sentado en su silla! Y... por si a alguien le apetece llevarnos la contraria... ¡esto es lo que le espera! 

Entonces se puso a disparar al techo, y el resto lo imitó. 

Todos estaban aterrados. En especial Susan, que aún se encontraba de pie al lado de la silla de Gaby, estaba pálida completamente del miedo que sentía, además de no poder moverse.

El resto de personas del local obedeció y no se movió de sus sitios. Todos, a excepción de un hombre mayor que se levantó de su silla y se dirigió hacia el Joker:

- ¡Eh tú, payaso! ¿Venimos a cenar a este sitio para tener tranquilidad y vienes tú a apuntarnos con un arma? Ya hemos hecho todo lo que nos has pedido, dijiste que no gritáramos, ni llamásemos a la policía, ni intentáramos huir, que pareciéramos personas normales cenando tranquilamente o nos matarías a todos. ¡Hemos cumplido nuestra parte del trato!, ¡Ahora cumple tú con la tuya y déjanos marchar!

Sin previo aviso, uno de los matones a sueldo disparó al hombre en la cabeza cuando el Joker le dio la señal. Gritos y llantos era lo único que se escuchaba en el restaurante.

Todos se quedaron mirando al hombre primero, horrorizados por lo que acababa de ocurrir, después miraron al Joker. Este último, se justificó diciendo con una gran sonrisa en la cara:

- ¡Era aburrido! ¿Desde cuándo seguir las reglas del juego es algo divertido? Las normas son para romperlas, y este trato también.- Hizo una pausa para mirar al cadáver y añadió- Por cierto... camarero, limpie el pasillo 3. 

Y estalló a carcajadas.

- Cambiando de tema... Susan, siéntate por favor... no creo que quieras irte... al fin y al cabo somos familia... y he preparado una sorpresita para mi cuñada preferida...

Susan se mantuvo de pie, a pesar de los hombres con armas que la rodeaban. Le daba más miedo el Joker que cualquiera de ellos.

Entonces el Joker silbó y el camarero de antes apareció llevando en un carrito con ruedas lo que parecía ser...

¡No era posible! Los ojos de Susan, Gaby y Harley se quedaron atónitos.

¡El camarero estaba acercando a Josh, el marido de Susan, atado a una silla de pies y manos y con la boca tapada!

- ¡Sorpresa!- Gritó el Joker. - ¿A que no os lo esperabais?

Entonces giró la mirada hacia el resto de personas... todos le estaban mirando.

- Ah si... en cuanto a vosotros... Me he cansado de veros aquí, esto se ha convertido en una cena familiar privada, así que chicos...- Chasqueó los dedos y los matones comenzaron a llevarse a la gente a otra sala.- ¿Te apetece sentarte ahora Susan?

Esta vez, si que se sentó.

El camarero puso a Josh al lado del Joker y se retiró de la sala como el resto de personas.

Todos estaban shock, menos el Joker que una vez más había demostrado su locura ante ellos.

- Bueno... ¿Por qué no hablas un poco Josh?- dijo mientras le quitaba la cinta de la boca.

- ¡Su...su...eltame!- gritó este asustado- Y suelta a mi familia... maldito loco. ¿Quién eres?, ¿Quieres todo mi dinero? Te lo daré, pero por favor deja que nos vayamos...

- Josh... ¿de verdad crees que si quisiera todo tu dinero me habría tomado tantas molestias trayéndote aquí a Gotham? ¡He tenido que pagar el avión hasta aquí! Aunque me ha salido bastante barato porque ibas con el resto de maletas del avión...- se quedó pensativo un momento- Pero no, en resumen, yo lo que quería era conocer a la familia al completo.

Al escuchar eso Josh se quedó callado y se fijó en la mujer que estaba al lado del payaso y reconoció a Harleen, la hermana de Susan. 

- ¿Harleen, acaso tú estas saliendo con este...?- preguntó confuso.

- Sí, nos queremos con locura y él quería conocer a la familia... aunque creo que contigo no se ha presentado de forma muy correcta... lo siento Josh...

- ¿Tú crees Harley? Yo creo que lo he hecho perfecto, he juntado a la familia entera de forma sorpresa, supuse que les haría ilusión.

- ¡Tus matones me dieron un golpe en la cabeza y me trajeron inconsciente!- Se quejó Josh

- Daños colaterales... Tenían que traerte de alguna forma... Seguro que si no te habrías resistido a venir o habrías llamado a tu mujer o tu hija y hubieras estropeado la sorpresa...

Tras esto, llegó otro camarero y sirvió platos de comida para todos, el Joker les obligó a comer y a mantener conversaciones con él. Una de las conversaciones que destacó fue la última que mantuvieron el Joker y Gaby...

- Entonces... cuéntame Gaby, he visto que muchos de tus gustos se corresponden con mi Harley... se nota que sois familia...

- Sí, es una casualidad... 

- ¿Sabes lo que realmente es una casualidad? Que mientras os investigaba para conoceros un poco encontrara lo que parecen ser los papeles de  TÚ adopción.

Harley, Susan, Josh y Gaby se quedaron con la boca abierta.

- ¿QUÉ?- Gritó Gaby- ¿Es una broma, no? A ti te encantan las bromas, ¿porqué no te ríes?

Se giró a mirar a Susan y Josh.

- Mami, papi, decidle lo equivocado que está- Al ver que sus padres no reaccionaban y no desmentían la noticia se puso a llorar y a repetirse una y otra vez que eso era imposible, que no podía ser...

La primera en poder reaccionar fue Susan, le salían lágrimas en los ojos, se sentía culpable por no haber encontrado un momento de decírselo ella misma. 

- Gaby lo siento... estábamos esperando el mejor momento para decírtelo, pero no sabíamos como...- le dijo Susan intentando consolarla mientras le daba un abrazo.

Gaby aún llorando levantó la cabeza y miró a los presentes, todos tenían cara de preocupación y tristeza (también lloraban como Susan o estaban a punto de llorar) menos el Joker que simplemente estaba sonriendo y disfrutando como si de una función de circo se tratase.

- Entonces... ¿Quienes son mis auténticos padres?