Hyunjin palmeo un poco la cama en busca de Jeongin sin embargo ya no se encontraba allí, ya no era sorpresa suspiró agotado y decidió levantarse de la cama.

Más tarde ese día se dirigió a la universidad para mostrarle el borrador de la entrevista a su profesor a cargo. Al llegar se sentó y observó a su profesor, mientras que el mayor hablaba Hyunjin no podía dejar de pensar en jeongin y en lo que había ocurrido la noche anterior, ¿Quizás algún día despertaría y encontraría a jeongin a su lado? La respuesta era simple, no.

Ya que después de esa excitante noche anterior quizás ya no volverían a mezclarse y estaba bien con eso, todo había acabado, jeongin había Sido algo pasajero y aquellos extraños sentimientos que había despertado hacia el, se esfumaron junto al Omega.

—¿Hwang?

—Perdon, ¿Hay algo mal?

—Estas bastante ido, pero te volveré a repetir, está increíble pero por ningún lado habla sobre si es alf-

—Lo siento, pero el señor Yang dijo que no quería responder ese tipo de preguntas, ¿Algo más?

—No, gracias por todo, lo enviaré al editor.

—Ok, muchas gracias... Con respecto a mi-

—Te llamaré para que envíes tu manuscrito, buenas tardes señor Hwang —Hyunjin salió del lugar y por su lado pasó un rostro muy conocido llamó su atención, haciendo que voltee, observando como aquel chico de gorra mostrando algunos mechones rosa de cabello se adentraba en la oficina de su profesor.

—¿Dónde lo he visto...? —Suspiró. Al llegar a la cafetería observó a Jisung y sonrió —Buenos días ji...

—Buenos días Hyung, comencemos a trabajar tenemos mucho hoy —Hyunjin asintió y observó su teléfono una vez más a ver si tenía algún mensaje de jeongin sin embargo sus notificaciones estaban completamente vacías.

Su día de trabajo fue bastante tranquilo de vez en cuando observaba con atención hacia la puerta para intentar visualizar si el mayor aparecia sin embargo nunca entró. Al terminar el día Jisung y Hyunjin se encontraba en los vestidores del café, ambos estaban en completo silencio hasta que fue el castaño quien habló.

—Hyung...

—dime, ji.

—Queria decirle algo —Habló entre tartamudeos —primero quiero saber si sales con alguien... ¡Ah no! Espere, eso sonó muy mal... ¿Usted está cortejando algún Omega en este momento?¿Ya se encuentra en una relación?

—Mmm no, la verdad-

—Escuche entonces, usted me gusta desde hace mucho... ¿Aceptaría salir conmigo? —indagó algo nervioso.

—¿Eh?¿Yo? —Las palabras de jeongin hace unos días habían hecho eco en su cabeza —Jisung, lo siento no puedo...

—pero-

—Escucha, eres un lindo Omega, pero no te veo como algo más, lo siento además quiero resolver un enredo con cierto Omega, así que no puedo aceptar tus sentimientos —Explicó y Jisung sonrió tristemente.

—Esta bien, no se preocupe.

★★★

Hyunjin suspiró antes de llevar su mano al pomo de la puerta sin embargo está ya se encontraba abierta como si hubieran forcejeado para abrirla así que gruño, se adentro en silencio observando el lugar lo cual estaba todo exactamente igual. De la misma forma se adentró en su habitación y aquella escena lo había dejado bastante atónito.

Era jeongin.

Se encontraba durmiendo en medio de su cama con un montón de ropa del pelirrojo bajo el. Hyunjin alzo una ceja e intentó contener la risa para acercarse al Omega y sonreír, ¿Cómo podía verse tan tierno? Sus mejillas estaban algo ruborizadas y su cabello alborotado. Mientras abrazaba con fuerza una almohada. Sin decir nada se dejó caer a un lado del Omega sintiendo como las feromonas de ambos inundaban la habitación y el calor se hacía presente.

Quería abrazarlo, tocarlo, besarlo. ¿Que había hecho jeongin con el?¿Cómo podía sentirse así hacia el? Tan narcisista, tan imbécil, tan bestia, pero aún así observándolo mientras dormía y sus labios estaban entreabiertos, sus ojos cerrados y su ceño fruncido no podía evitar sentirse así, incluso ahora. La esperanza aún tenía una chispa en su interior al verlo así entre su ropa.

—Mmm —Jeongin abrió los ojos y se encontró con los del alfa. Rápidamente se sentó y relamió sus labios —Yo-

—Que bueno que tengas dinero, así reparas mi puerta —bromeo...

—Qui buini qui tingis diniri —mofó —Obvio que te la voy a repa-

—Crei que ayer sería la última vez —Habló y jeongin asintió.

—Lo se, solo no me siento bien, quizás el por el celo-

—Por eso hiciste un nido-

—Esto no es un nido, ¿Crees que eres mi destinado y esas por querías de la diosa luna? —mofo y Hyunjin suspiró —Pues no, soy ateo no creo en esas cosas, ni en los destinados y-

—Dios enserio ya cállate —Pidió para luego plantar sus labios sobre los del Omega haciendo que este suelte un pequeño gemido. Tal vez era por el celo lo hacía más dócil.

Los labios de hyunjin se sentían tan bien mientras hacían esos pequeños y cálidos movimientos, Jeongin aferraba sus manos a su jean y mientras intentaba mover sus labios al ritmo de los del mayor, mientras lo único que se repetía en su mente era.

Quiero más

Hyunjin comenzo a realizar pequeñas succiones al labio inferior del menor, estaban a otro nivel. El menor intento alejarse de Jeongin pero este rápido llevó sus manos su cuello y atrapando sus labios de nuevo.

—Uno más —Susurro entre el beso y hyunjin solo rio para luego seguir besándole, Jeongin decidió abrir un poco más la boca dandole chance para que hyunjin introduzca su lengua, adueñándose de todo a su paso.

—Me dirás que si te gusto o seguirás haciéndote el-

—No Hyunjin, justo ahora es dónde digo que ya es todo... No creo que debamos volver a vernos —Explicó el Omega.

—¿Y ahora por qué?

—Me iré al extranjero y tú te olvidarás de mi, esto no va a pasar, no me gustas solo es algo pasajero por el celo, conviví mucho tiempo contigo así que, es todo.

—Cobarde

—¿Disculpa?

—Eres un cobarde Yang, no quieres aceptar lo que sientes y por eso huyes como si alguien fuera a juzgarte

—Dios enserio estás jodido de la cabeza, ¿Enserio crees que siento algo por ti? Y luego yo soy el narcisista, oye Hyunjin reacciona, no me gusta solo eres otro alfa con el que estuve y que se siete importante por qué me vio en un momento de vulnerabilidad, ¿Crees que estaría con alguien como tú? Sin metas, alguien que al ser alfa ni siquiera parece uno, incluso soy más alfa que tú, una persona que depende de alguien más pará-

—Ok largo, si vas a irte hazlo de una vez —Se quejó —Si tanto te molesta mi persona, mi manera de ser entonces largo, tienes razón en una cosa si eres un narcisista y el que está jodido de la cabeza eres tú, así que largo de mi casa —Jeongin sin decir alguna otra palabra se levantó, se vistió y luego salió del departamento dejando a Hyunjin algo frustrado y triste.

Desde muy pequeño a jeongin le habían enseñado que llorar representa debilidad, así que aunque quisiera llorar con todas sus fuerzas siempre terminaba conteniendo.

Al llegar a su edificio jeongin sonrió a la mujer —Buenas noches.

—Oh, veo que ya encontraste tu llave...

—Ah, ¿Si?

Estando dentro de su apartamento observó que la luz de la cocina estaba encendida y rápidamente se acercó sabiendo de quién se trataba.

—¿Qué haces aquí?

—¿Y esa carita innie?

—No me llames así...

—¿No? Ahora no te gusta, ese apodo era lindo cuando éramos niños, como sea respondiendo a tu pregunta yo-

—Ya se lo que hiciste, ¿Qué quieres?

—Muchas cosas, pero- ahora ¿Que sucede jeongin? Te ves decaído —bromeo —Acaso te dió miedo que me acercara a tu alfa.

—¿Miedo? —Indagó —¿Crees que yo le tengo miedo a alguien como tú?

—Si, ¿Sabes por qué? —Sonrió —Por que soy exactamente igual a ti y tu te tienes miedo, pero tranquilo yo no haré nada, por ahora tu solo serás tú propia destrucción innie y luego tomaré el crédito.

—Solo quieres torturarme, ¿no es cierto?

—¿De que hablas? Tu solito destruyes todo lo que tocas yo solo pongo algo de sabor —Bromeo —Ah y ojalá y te vaya lindo en el extranjero, sin duda eres un cobarde.

—Eres un hijo de puta...

—Gracias, recuerda que somos hijos de la misma puta —Carcajeo —Ya me voy.

Jeongin observó como el pelirosa salía del departamento y soltó un suspiro, se sentía devastado y aquel chico no ayudaba, quizás el tenía razón y para jeongin el mismo sería su misma destrucción.

—Tienes razón, hermano.

🥟.