La Familia Wang-Wei llegaron dos días antes a Lanling, con la finalidad de tener tiempo para poder llevar a cabo un paseo. Así, los niños podrían incluso explorar las áreas y relacionarse con Jóvenes de su edad.

Wei SiZhui, el mayor de los cuatro, era quien estaba a cargo de los discípulos y sus hermanos ya que había obtenido el puesto de discípulo principal. Los gemelos estaban en entrenamiento, y cada vez que tienen una cacería que atender ellos van como espectadores siendo protegidos obviamente, para ganar más experiencia antes de lanzarse a la vida.

Wei WuXian y Wang YuLan, a pesar de ser unos padres sobreprotectores. Con los años aprendieron a dejar que sus retoños abrieran las alas y no reprimirlos. De lo contrario, desarrollarían la rebeldía que su padre tuvo en su niñez y adolescencia.

—Quiero que tengan la confianza de pedir nuestra autorización para salir, en lugar de escaparse y causar que entremos en pánico por sus desapariciones —razonó RiLiang-Zun con sus hijos, cuando tuvieron su charla sobre los permisos para ir a cacerías.

—La idea, es que incluso cuando sea algo no planeado, se den el tiempo de enviarnos al menos un mensaje para que sepamos en donde están. —dijo Madam Wei junto a su esposo— No es con la finalidad de controlarlos y seguirlos. Es por precaución. En caso de que algo se les salga de control y pidan nuestra ayuda, no nos tomará mucho tiempo en dar con su paradero.

Wei WuXian le sonrió y tomó su mano, antes de añadir. —Su madre y yo sabemos lo que se siente querer salir pero estar restringidos por las edades y la sobreprotección de un adulto. No deseamos que se sientan de la misma manera pero a la vez, que sepan que nos preocupamos de todos modos de ustedes. Esta es la única regla que pondremos en estas situaciones, ¿me darán su palabra de que harán lo que les pedimos?

Con los años, la paternidad y el amor de familia ayudaron bastante para que Wei WuXian madurara. Incluso cuando aún mantiene esa chispa de revoltoso, su sabiduría creció al igual que él como persona; lo que ayudó también, fue la comunicación con la estimulación viniendo de Wang YuLan. Su esposa siempre fue una buena oyente y consejera. Ella le ayudó a romper ese caparazón que ocultaba sus sufrimiento, y aprendió a compartir sus penas con su compañera de vida.

Ahora, no existen secretos en familia.

A su vez, esto sirvió para que se reflejara en la crianza de sus hijos; a pesar de ser unos completos inexpertos, el trabajo en equipo entre ellos y el apoyo de su familia los guio por el buen camino formando a unos buenos muchachos.

Los cuatro son tan educados, que muchas veces recibieron elogios de personas ante la cortesía y buenos modales de sus hijos; al igual que han aplaudido su gran ingenio en todo, por lo cual Wang YuLan estaba tan orgullosa. ¡Ellos sacaron lo brillante de su padre!

Tienen muy buen juicio. Para ellos es fácil saber las intenciones de las personas, por lo cual no se relacionan con cualquiera; obviamente mantienen la cortesía, que es algo que jamás fallará. Sin embargo, no pasará más allá. Si para ellos, alguien se les hace extraño o les causa incomodidad, se alejarán de ese alguien no queriendo involucrarse con este mismo.

Tienen un corazón grande. Ayudarán a quien sea que lo necesite, y como su amado A-die, no pedirán nada a cambio. ¡Ellos desean ir y ofrecer su alegría al mundo completo! Su agradecimiento es más que suficiente, y saber que a quienes le ofrecen su mano estarán bien.

Son muy unidos y cariñosos. Wei WuXian siempre fue un hombre de piel, por lo cuál jamás ocultó su afecto por los demás. Wang YuLan perteneciente a una familia que de por sí era afectiva, se complementó bastante bien con su marido llevando esto mismo a sus hijos; por lo tanto, a ninguno le avergüenza ser tratado con tanto cariño o devolver el afecto. Bueno, aunque también se debe a que ellos adquirieron la chispa desvergonzada de su padre, algo con lo cual su madre estaba satisfecha.

Es el encanto de su amado, después de todo; y esto les sirvió para que no se les dificultara entablar amistad con los demás. De hecho, en Medialuna, los herederos de MengxiangWang son amigos de todos. ¡Incluso de los habitantes de la ciudad! Ellos les tienen demasiado cariño a los niños ante su bondad. Y gracias a esto, los lazos entre la Secta y los ciudadanos son lo suficientemente estrechos para que los Líderes se tomen el tiempo de sentarse a charlar con ellos.

En resumen, Mengxiang en realidad es la Tierra de los Sueños.

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Mientras sus padres se instalaban en una posada para pasar los dos días antes de la celebración. Los herederos de MengxiangWang paseaban por las calles de Lanling visitando el mercado.

Wei MingXia tenía mucha curiosidad por encontrar un abanico de buena calidad que según su Fan-shushu, serían más fáciles de hallar en un lugar como Lanling. Después de todo, los Jin son asquerosamente ricos y su Líder de Secta ha administrado bien la economía de su gente como para saber que sus productos son de alta gama.

—¿Por qué quieres otro abanico si ya tienes muchos, A-Xia? —preguntó Wei MingHua con confusión. Si bien él y su gemela tienen los mismos gustos en su mayoría, la verdad es que los abanicos no entran en su lista. Además, MingXia prácticamente tiene una colección que obtuvo gracias a los mimos de su tío HuaiSang.

—No lo entenderías, Er-ge. Tu gusto por el arte está un poco atrofiado. —se defendió la gemela menor, provocando que su hermano farfullara con fingida indignación.

Wei SiZhui agitó su cabeza divertido. —Está bien, A-Yun. A-Xia solo está disfrutando de sus intereses. —se dirigió a la susodicha— ¿por qué no mejor compras los que están en blanco y los pintas tú misma, A-Xia? Sang-shushu ha pintado literalmente el noventa porciento de sus abanicos.

Wei MingXia parpadeó pensativa. —¡Es una excelente idea, Da-ge! Ah, además, ¡Podré pintar lo que desee! ¡¿Por qué nunca pensé en eso?! ¡Me has salvado, estoy agradecida! —canturreó alegremente, revoloteando de un puesto a otro.

Wei MeiXiu carcajeó. —A-Jie es tan bipolar.

—Eso lo heredó de A-die —comentó Wei MingHua con un resoplido— a veces hasta da miedo sus repentinos cambios de humor.

Antes de que Wei SiZhui dijera algo, las voces de unos muchachos que sonaban como adolescentes de sus edades se oyeron acercándose a los hermanos. Eran tres en total, vistiendo distintas túnicas evidenciando que pertenecían a diferentes Sectas.

—¡Si sabías que se escaparía para qué la trajiste! —se quejó el Joven Maestro de blanco que, el cerebro de SiZhui procesó ha de ser miembro de GusuLan. Después de todo, su padre les enseñó sobre cada una de las grandes Sectas y costumbres. Además, los Lan son los más reconocidos resaltando con sus blancas e inmaculadas túnicas.

El Joven de amarillo, que no se necesitaba ser un cultivador para saber que pertenecía a la Secta Jin respondió con indignación. —¡Cómo iba a saber que aparecería un gato de la nada! Además, hada nunca se ha portado mal. ¡No puedes culparla por seguir sus instintos!

El tercero, que vestía túnicas verdes azuladas. A comparación con los dos anteriores, lucía más tranquilo pero un poco tímido. —Está bien chicos. No deberían seguir discutiendo, mejor continuemos buscando a hada.

Ambos enrojecieron, y decidieron ignorarse. Justo en ese instante llegaron hasta quedar de frente a los hermanos Wei, deteniéndose de golpe. Los tres, parpadearon en dirección a ellos entre curiosos y sorprendidos.

Y bueno, es algo de esperarse en vista de las prendas que llevaban puestas.

Se trataban de unas ostentosas túnicas color verde esmeralda, compuesta por tres capaz de las cuales una eran blancas. Los bordados en hilos dorados, no eran ni más ni menos que flores de magnolias. La faja en la cintura era del mismo color pero a un tono mucho más oscuro. Y mientras los dos varones llevaban encima una especie de capa, la única dama en vez de ocupar faja era una banda de ceda verde atada con un adorno de la misma flor chapada en oro.

Era obvio que no solo se trataban de Jóvenes pertenecientes a la nobleza, sino que los dos niños eran además cultivadores. Sus espadas yacían envainadas en sus caderas, y el guan característico de un heredero en sus coletas.

Wei SiZhui, viendo que los otros jóvenes no iban a hablar. Decidió ser quien dijera la primera palabra. —Saludos, Jóvenes Maestros. Este se llama Wei Yuan, de cortesía SiZhui. Él es mi hermano menor Wei Yun, de cortesía MingHua. Y la más pequeña, Wei MeiXiu.

—Un placer, honorables Maestro —saludaron los menores presentados, provocando que los recién llegados reaccionaran de inmediato para saludarse.

—Mi nombre es Jin Ling, Jin RuLan heredero de LanlingJin.

—Soy Lan JingYi, discípulo de GusuLan.

—Ouyang ZiZhen, heredero de BalingOuyang.

—Un gusto —SiZhui asintió en reconocimiento, sorprendido de encontrarse antes de tiempo con el cumpleañero del cual su padre les habló— verán, somos nuevos en este lugar; no pude evitar escuchar su enérgica charla. ¿Estaban en busca de algo? podríamos ayudarlos mientras exploramos el área.

Jin Ling farfulló avergonzado. —¡No estábamos hablando enérgicamente!

Lan JingYi resopló divertido. —Si estás hablando de tus gritos de Joven Ama, el Joven Maestro Wei está en lo correcto.

—¡Lan JingYi!

—Está bien, está bien. No quisiera provocar que discutan —intervino el heredero Wang con exasperación, viendo que nuevamente iban a pelear.

Wei MingHua y Wei MeiXiu se mantuvieron en silencio, tratando de contener la risa. Ouyang ZiZhen pareciera que quisiera estar en cualquier lugar menos ese, ante lo escandalosos que pueden llegar a ser sus amigos.

—Bueno, de todos modos... uhm...solo estábamos buscando a mi perro. Su nombre es hada. ¿La han visto? —dijo el Jin, intentando desviar el tema.

—En realidad no —MingHua respondió— sin embargo, ¿no deberíamos preguntarle a A-Xia? Ella es buena buscando cosas, y de alguna manera siempre encuentra lo que sea. ¡Sobre todo los problemas!

Al ver la confusión de los otros, Wei MeiXiu explicó. —Está hablando de nuestra hermana. A-Jie es la gemela de Yun-gege.

Lan JingYi estaba encantado. —¡¿Gemelos?! ¡Woah! ¡Nunca he visto gemelos!

—Sólo esperen a que venga. Es igual que yo, sólo que más femenina. —Wei MingHua se encogió de hombros. Dicho esto, Wei SiZhui decidió iniciar la caminata en busca del perro de Jin Ling.

—Por cierto, ¿de qué Secta son? —preguntó de pronto ZiZhen, dándose cuenta de que en ningún momento SiZhui la había mencionado.

—Ah, creo que olvidé decirlo —Wei SiZhui se disculpó— somos de la Secta MengxiangWang.

Los tres jadearon. —¡¿MengxiangWang?!

—¡¿Eso quiere decir que ustedes conocen a RiLiang-Zun en persona?!

Wei MingHua parpadeó desconcertado. —Es nuestro padre.

Lan JingYi los miró con incredulidad. —¡Ustedes son los herederos de MengxiangWang! ¡SiZhui, cómo no lo dijiste antes!

Sorprendido ante la confianza del adolescente para llamarlo por su nombre de cortesía, Wei SiZhui boqueó un poco perdido. Mas no se sintió insultado o algo parecido, de hecho, fue gratificante que JingYi se halla tomado ese libertinaje. —¿Lo lamento, supongo que lo olvidé?

—Está bien, está bien —le restó importancia, acercándose más al chico— tienes que contarnos todo de tu padre. ¡Él es nuestro modelo a seguir!

Wei SiZhui abrió la boca para hablar, pero fue interrumpido por una voz femenina que se acercaba a toda prisa. —¡Da-ge, Er-ge, A-Xiu! ¡Miren con la preciosura que me encontré! ¡Haha! ¡A-die de seguro se muere si se entera que estuve cerca de un perro!

No era nadie más ni menos que Wei MingXia, quien regresaba alegremente acompañada del perro fugitivo. La niña lucía totalmente encantada, sin dejar de sonreír a tal grado que sus ojos esmeralda brillaban con la luz del sol.

—A-Xia ¿Dónde has estado? —preguntó su gemelo, sin dejar de mirar al perro que se detuvo frente a ellos— supongo que no habrá necesidad de ir a buscar al hada del Joven Maestro Jin. ¿Verdad?

Wei MingXia frunció el ceño. —¿Joven Maestro Jin?

Sólo recién se dio cuenta que contaban con la presencia de más personas. Sin embargo, MingXia se recuperó lo suficientemente rápido para acercarse a ellos, y saludar enérgicamente. —¡Hola Geges! ¡Soy Wei MingXia!

Mas ellos yacían petrificados, mirando a la Joven doncella que acababa de llegar. ¿Cómo no? Si se estaban enfrentando a la muchacha más bella que han visto sus ojos. MingXia, que vestía las mismas prendas que MeiXiu, a comparación de su hermana por edades ella era más alta y delgada. Incluso cuando mantiene aquella ligera grasa de bebé en sus mejillas, todavía así deja en evidencia su belleza.

Viendo la reacción de sus nuevos posibles amigos, Wei SiZhui suspiró internamente ya preparado para lo que se vendría a futuro. Ciertamente a A-die, Waigong y los tíos no les va a gustar. Gimió para sus adentros.

El resto del día se lo tomaron para conocerse aún más; dejando de lado el enamoramiento de los tres muchachos por Wei MingXia, lograron entablar rápidamente una amistad. Por lo tanto, una vez que terminó su exploración regresaron a la posada con la promesa de volver a encontrarse. Esta vez, quizás para participar en alguna cacería nocturna si se daba la posibilidad.

Lo curioso fue que, nunca le preguntaron el nombre de sus padres a los herederos de MengxiangWang. Únicamente tenían el hecho de que RiLiang-Zun era su padre.

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Cuando llegó el día de la celebración, para ese momento los chicos quedaron de acuerdo en verse en Torre Koi. Así que, no se reunieron antes.

Wei WuXian hizo el trato con sus suegros de que se adelantaran, debido a que Wang YuLan había tenido síntomas matutinos severos en la mañana. Por lo tanto, preocupado en el bienestar de su esposa la dejó descansar más tiempo.

—No te preocupes, A-Ying; estoy segura de que el Líder de Secta Jin y su esposa comprenderán. —aseguró Wang Yawen.

—Muchas gracias, Yuèmǔ¹. Tan pronto los síntomas de A-Yu mejoren, iremos a Torre Koi.

—No hay necesidad, A-Xian. Tú y A-Yu pueden tomarse el tiempo que necesiten. Nosotros nos encargaremos de los niños —Wang ZhongYi le dio palmaditas— ahora vuelve con tu esposa, antes de que se levante innecesariamente.

Wei WuXian sonrió. —Está bien, nos veremos pronto.

Luego de ello, se encargó de despedirse de sus niños dándole ciertas instrucciones. Como por ejemplo, incluso si sus suegros lo saben, les recordó que sería mejor que no mencionaran el nombre de Wei WuXian hasta que él llegara con YuLan. En caso de que sean objeto de atención de los demás, lo que menos desea es exponer a sus hijos de esa manera; ni menos que sus padres políticos sean chantajeados por haber mantenido su existencia en secreto.

Aunque también se queda tranquilo que Wei Qing, Wei Ning y Nie HuaiSang estarán ahí antes que él; por lo cual, sabrá que ellos cuidarán de sus retoños tal y como lo haría el mismo Wei WuXian.

En Torre Koi, las demás Sectas ya estaban llegando instalándose en sus lugares, sin sospechar quién se presentaría aquel día.

★★★★★★

¹Yuèmǔ = Suegra: madre de la esposa. 

Nota: 

Aquí imágenes de cómo más o menos lucen los hermanos Wei:

Ignorando el hecho de que es Shen Qingqiu, más o menos así me imaginé a Wei SiZhui 【17 años】

Así se vería Wei MingHua: (no me pregunten si sé quién es el personaje porque no tengo la menor idea xD solo vi la imagen y dije . ¡We! Este es MingHua xd) 【12 años】

Vamos con Wei MingXia, y como se han dado cuenta es una versión femenina de Wei WuXian 💞🤭 【12 años】

Y por último, tenemos a la pequeña Wei MeiXiu 【6 años】