Sus ojos eran gigantes y vidriosos por las lágrimas, mientras que de su boca salían quejidos y se apretaba la herida con dolor, la cual empezaba a sangrar.

¿Cómo es que habíamos llegado a esto?

Ah, sí.

[...] FlashBack [...]

- ¿Entonces, usted cree que puede tratarse de una profecía? -mire al profesor desesperada por una respuesta

-No sería la primera vez que alguien predice algo como esto, Ava -me mira como si supiera algo que yo no-. Aunque yo me preocuparía más por el bienestar del señor Potter, puede llegar a meterse en problemas a menudo -

Y tantos problemas, era como un imán.

Pobre niño.

-Eso es lo que temo, tal vez esta noche lo vigile de que no salga de su sala común -me levanté de mi asiento con la intención de irme

-Profesora Williams, si sale del castillo... intente ser discreta, hoy es el día en el que se realizará la ejecución del Hipogrifo de Hagrid y el ministro estará presente -me guiño un ojo con complicidad y volvió a su asiento

Ese viejo siempre parecía saber todo.

-Lo tendré en cuenta, profesor Dumbledore -

[...]

Camino a la sala común de Gryffindor me encontré a uno de los alumnos sentado en el solitario pasillo.

-Neville... eres Neville Longbottom, ¿no? -lo veo levantarse como un resorte y mirarme asustado-. ¿Qué haces aquí solo en el pasillo? dentro de poco los profesores estarán patrullando el colegio, ya deberías estar en la cama -

-Me... Me he olvidado de la contraseña -señaló el retrato con timidez y miro el suelo, su nerviosismo era tanto que casi me hacía tambalear

-La contraseña es Mimbulus Mimbletonia -le sonreí intentando que se relaje un poco y al parecer funcionó porque se veía menos tenso y hasta había un color rosado en sus mejillas.

Era adorable.

-Gracias, profesora Williams -antes de que entrara a su sala común lo volví a llamar

- ¿Sabes si tu compañero Potter entró a la sala común? -realmente esperaba que Harry haya seguido mis consejos

-Lo he visto salir hace unos momentos con Ron y Hermione, dijeron algo de ir a ver a Hagrid. ¿No están en problemas o sí? -pregunto un poco asustado de haber metido la pata

-No, no te preocupes -

Tendrían un problema si yo los encontraba.

[...]

-Remus, tenemos un proble...ma, y no estas, como siempre -mire el salón vacío en busca de mi lobuno amigo

Me senté en la silla de mi escritorio resoplando por lo bajo, abrí uno de los cajones y saqué el mapa del merodeador, en este momento tenía la urgencia de usarlo.

-Juro solemnemente que mis intenciones no son buenas -admiré unos segundos, fascinada, como la tinta llenaba el mapa y luego me puse a ver los terrenos en busca de la cabaña de Hagrid

-Los tengo -deje olvidado el mapa y me dirigí a la misma dirección que ellos

Tenía que llegar antes que ellos.

[...]

En el tiempo que me demore corriendo, los tres llegaron a la cabaña de Hagrid y hablaron con él antes de que se vieran interrumpidos por la llegada del Ministro y el Verdugo.

Agachada entre las calabazas gigantes me escondí y en silencio me arrastré hasta donde estaba descansando el majestuoso Hipogrifo.

En el momento en el que hicimos contacto visual percibí que mis ojos cambiaron su color verde normal por unos dorados impresionantes, los ojos naranjas del animal me siguieron intensamente en todo momento.

Luego de inclinarme y darme su permiso de acariciarlo, me dejó acercarme y tomar la cadena que lo ataba a la valla del huerto.

-Vamos, Buckbeak -le hable suavemente intentando no alterarlo y delatarme-. Ven, vamos a sacarte de aquí, sin hacer ruido -tire de la cadena y sorprendentemente el Hipogrifo se movió conmigo

Nos internamos más en lo profundo del bosque y a lo lejos pude escuchar gritos.

Apresurada por el miedo de que pueda ser uno de los niños el que esté gritando, até la cadena de Buckbeak en la rama de un árbol y lo deje con la promesa de que volvería a buscarlo.

Eche a correr esquivando ágilmente las distintas ramas y árboles que se me cruzaban en el camino, siguiendo el lugar de donde habían venido los gritos.

Cuando pude salir del bosque prohibido me vi enfrente del sauce boxeador agitando sus ramas frenéticamente, luego vi que la fuente de los gritos eran Harry y Hermione que se agarraban con fuerza de una de las ramas.

Inmovilizando el árbol les di tiempo de saltar, usando la distracción del árbol me escabullí por el hueco y luego corrí subiendo las escaleras con la intención de alertar a Sirius, vaya sorpresa.

Ron estaba tirado en un costado de la habitación gimoteando de dolor por una herida en la pierna.

-Profesora Williams, tiene que ayudarme. Él está loco -señalo detrás de mí con miedo

[...] Fin FlashBack [...]

Y así era como nos encontrábamos ahora.

-Sirius... ¿qué te dije de morder a las personas? –

Empecé a reírme de los nervios haciendo que los dos me miraran, Sirius divertido y Ron con miedo.

Nuestra atención se volvió a los pasos y gritos de Harry y Hermione, que se escuchaban por toda la casa, parece que habían logrado pasar el sauce.

- ¡Harry, es toda una trampa! -

Sirius entre los gritos agarró mi muñeca y me arrastró con él, intentando escondernos tras la puerta.

- Pero, ¡¡¿qué has hecho?! -le susurré medio grité

-Confía en mi -me sonrió poniendo sus manos en mis hombros y acariciando mi piel con sus pulgares

Con un estremecimiento de satisfacción me di cuenta de lo cerca que estaban nuestros rostros; tanto que podía admirar los diferentes matices de grises y plateados que contenían sus atrayentes ojos, y de lo fácil que sería inclinarse un poco y besarlo.

No, no, no.

¡Ava, este no es el momento de pensar en eso!

-Él es el perro. Es un animago y ella... -

Ya no había manera de escaparnos de esto.

Falta poco para el final y todavía no se besaron :'v

¿Quieren beso? yo sé que quieren 7w7 hasta yo quiero beso, solo esperen por el próximo capítulo.

L.P <3