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Capítulo 4

Azula se encontraba en su clase de fotografía.

—Cómo pueden observar, clase—dijo la profesora mientras mostraba dos imágenes en el proyector—Esta imagen es un barrido y esta otra es un barrido y esta otra es un contra barrido ¿Alguien puede decirme la diferencia?

En el momento en que iba a levantar la mano para responder, recibe un mensaje de su teléfono celular. Busca su bolso, saca su celular y lee el mensaje:

"Me gustaría verte en laboratorio

De Física de la segunda planta.

Ahora mismo.

Joy"

Azula miró ambos lados, para cerciorarse que nadie miraba lo roja que estaba.

<< ¿Cómo consiguió Joy mi número de teléfono?>> pensó. Aunque eso no era lo que importaba ahora mismo, el caso era que Joy quería verla << ¡Joy quiere verme! ¡Joy!>>

Reprimió su sonrisa al estilo crema dental y salió de la clase.

Ésta no tenía ni idea donde quedaba el laboratorio de física, lo único que sabía era que quedaba en la segunda planta y ella estaba en la tercera, así que bajó las escaleras.

Al caminar con tanta prisa, se tropieza con Lottie.

—¡Oye! —exclamó esta—¿A dónde vas con tanta prisa, Azul?

—¿Sabes dónde queda el laboratorio de física?

Lottie se echó a reír—¿Debería de saberlo?

—¿Sabes qué? Olvídalo—le dijo Azula mientras continuaba su camino

—¡Espera Azu!

Azula se detuvo—¿Qué quieres? Tengo prisa

—El laboratorio es por acá—le indicó esta

—Gracias— le dijo esta mientras se dirigía al pasillo de la izquierda

—¡Azula!

Azula se detuvo exasperada—Lottie es enserio. Tengo prisa ¿Qué quieres?

Lottie se cruzó de brazos—Te vas a ver con ese simplón ¿cierto?

Azula colocó cara de pocos amigos—Su nombre es Joy, Lottie. Y si así fuera ¿Qué? Soy libre de hacer lo que quiera

—Yo sé que eres libre de hacer lo que quieras, pero ¡Por Dios! ¿Acaso olvidaste quién eres? Eres Azula Derkins y él es un...

—Lo siento Lottie, tengo prisa. Hablamos después—le dijo esta mientras se dirigía al pasillo.

Lottie sonrió con malicia— Eso es, zorra. Vete tras tu simplón y deja a mi Larry en paz.

Azula llegó al laboratorio, abrió la puerta y la cerró con cuidado.

—Joy...—lo llamó mientras avanzaba por el laboratorio—Joy... Soy yo, Azula... Joy, estaba en clases ¿sabes?

De repente sintió una mano que le tapaba la boca. Azula comenzó a forcejar y aparecieron dos hombres con máscaras negras y comenzaron a quitarle los zapatos.

—¡NO! ¡NO! — exclamó Azula. El tercer hombre le tapó la boca y Azula decidió morderlo.

El chico emitió un grito de dolor—¡Puta! —exclamó este y le dio una bofetada, a continuación, el otro le subió el vestido y se lo pasó por los hombros dejándola en ropa interior. Azula comenzó a derramar lágrimas al escuchar las palabras obscenas de los tipos, y suprimió un grito cuando le arrebataron su ropa interior de encaje. Uno de ellos comenzó a chuparle los senos mientras que el otro comenzó a colocarle su pene en la boca de ella.

—Chúpala perra... es para lo único que sirves. —A continuación, Azula le mordió el miembro y este emitió un grito ahogado—¡sepárale las piernas! Yo la penetrare mientras te lo chupa.

Azula quedó en shock al ver a Eddie con una cámara de video, mientras le sonreía.

—Esto puede parar, Azula... claro si decides alejarte de Joy—le dijo este

Azula miró a Eddie y emitió un grito cuando sintió que le separaban las piernas y cerró los ojos. Un ruido increíblemente grotesco hizo que abriera los ojos.

Veía una luz, una luz azul.

Eddie no podía dar crédito a lo que veían sus ojos.

Joy se encontraba en el laboratorio con un mechero bunsen, Eddie de inmediato bajó la cámara y los tres tipos se detuvieron.

—Joy... puedo explicatre...—comenzó a decir Eddie y Joy lo interrumpió extendiéndole la mano. Eddie miró la mano de Joy y luego lo miró a los ojos. Aunque aparentemente estaba sereno, sus ojos emitían chispas de fuego. Eddie sabía a qué se refería Joy y le entregó la cámara. A continuación, Joy quemó la cámara y la dejó caer en el suelo.

—¡Joy ¿Qué haces?! ¡Estamos es un laboratorio de gases! —exclamó Eddie

—¡¿Quién es este loco?!—exclamó uno de los tipos—¡va a quemar el laboratorio!

—¡Mejor salgamos de aquí! —exclamó otros y los tres salieron

Se encendieron los sensores de humo y dejaron caer agua a toda el aula.

Eddie temblaba de miedo, luego miró a Azula y esta se encontraba turada en el suelo, como si estuviese muerta. Su cuerpo desnudo temblaba en algunas zonas.

—Te doy dos días—Eddie miró a Joy al instante en que escuchó su voz. Este estaba tan empapado como él—para retirarte de la universidad por tus propios medios. No te prometo que no habrá cargos en tu contra, al fin al cabo la decisión la toma ella.

A Eddie se le llenaron los ojos de lágrimas. —Joy yo...

—No quiero volver a verte. Y no te acerques a ella. Por favor.

—Joy... Joy... — Eddie comenzó a llorar—¡ella es la culpable! Esa bruja... ¡te ha alejado de mí! — Joy solo se limitó a mirar a Eddie con su habitual mirada. Como si mirara una cucaracha—ella fue...

—Adiós Edward— le dijo Joy de manera cortante y Eddie se fue llorando como la viuda de un ahorcado.

***

Azula se levantó desorientada.

Abrió lentamente los ojos y se encontró en su habitación. Azula poseía una extensa cama, dos juegos de muebles antiguos, una pequeña habitación dentro de su habitación para sus zapatos, otra para su ropa y otra donde tenía su propia galería de arte, el baño quedaba en la segunda planta de este.

—Mi princesa...—le susurró su padre. Azula lo vio, su padre era un hombre extremadamente guapo. Una vez ella le había dicho que un hombre no puede ser guapo e inteligente a la vez.

— Los hombres que tienen esas dos cualidades son gays, Derkins—le dijo esta

—Existe mi caso—le había dicho este arrogantemente

Azula miró a su padre—hola...

—¿Cómo te sientes, princesa? —ella asintió—¿tienes hambre? —ella negó con la cabeza—tienes que comer, así sea algo—ella volvió a asentir—mandaré a que te preparen algo

—Papá...—rara vez lo llamaba así. Él se detuvo a medio camino y se acercó a ella.

—Dime princesa

—¿Me quieres?

El frunció el ceño–más de lo que te imaginas

—Yo también...

Ray le dio un beso en la frente—¿Quieres explicarme cómo es que te quedaste encerrada en un laboratorio de física? ¿Tú, mi cielo?

Azula comenzó a tener vivas imágenes, cuando esos chicos estaban a punto de violarla y peor aún, Eddie grabando todo.

Azula comenzó a llorar desconsoladamente. —Princesa... ¿Qué...? No quise ofenderte, yo...

Azula comenzó a jalarse el cabello como si estuviese loca.

—¡NO! ¡NO! — exclamaba

—Pi cielo cálmate—le decía Ray mientras la abrasaba

—No... no.—Azula fue relajándose

—Tranquila princesa, estoy aquí

—No...

Ésta cerró los ojos. Tenía borrosos recuerdos después de la partida de Edward.

Joy se acercó a ella después de haber recogido su ropa interior y su vestido blanco.

—Azula...—la había llamado—te colocaré el vestido... ¿De acuerdo? —Azula lo miró, pero no le dijo nada.

Joy le colocó el vestido mojado con muchísimo cuidado, apenas le rozó la piel. Intento en vano colocarla de pie y no le quedó de otra de cargarla. Por fortuna la enfermería estaba en ese mismo piso, pero al llegar ahí no había nadie y Joy acostó a Azula en una de las camillas.

Joy se sentía incómodo porque jamás había visto la ropa interior femenina y era frustrante.

—¿Quieres...? —Joy dejó la pregunta en el aire mientras le mostraba la ropa interior

Azula miró sus calzones y luego lo miró a él, pero no dijo nada.

Joy los colocó en una bolsa que encontró en el escritorio de la enfermera, junto con las zapatillas de quince centímetros de esta; Joy se sentó junto a Azula y esperó a que viniese la enfermera.

—¿Cómo es que...? —comenzó a decir Azula, pero no pudo continuar

—Estaba en el laboratorio continuó viendo una partícula de materia que producía fotones

—¿Qué es... eso?

—Un fotón es una diminuta mota de luz—Joy se quedó callado un momento—y ¿Qué harás? — Azula lo miro y él le devolvió la mirada—es tu decisión después de todo

—No le digas a nadie... llévame a mi casa... vivo en Derkins House...—y allí perdió el conocimiento.

Su padre la abrasó muy fuerte y Azula se relajó— ¿hace... cuanto estoy aquí?

—Como hace tres horas, princesa

En ese instante entró una criada con una bandeja de alimentos—con permiso—dijo al dejar la bandeja en la mesa de noche—Oh casi lo olvido. Señor, el muchacho que trajo a la señorita aún está en la sala.

Azula traspasó a la criada—¿Joy? ¿Joy está aquí?

—Lo siento, princesa. Al ver así en ese estado, olvidé por completo el chico

—¡Papa! —exclamó Azula furiosa— dile que pase Ross—dijo dirigiéndose a la criada—tráele una merienda

—Ya me ocupé de que merendara, señorita—le dijo esta

—¿Discúlpame? —dijo Ray—¿el? ¿A tú habitación? No lo consentiré

—Derkins...—comenzó a decir Azula en un tono de "¿quieres pelea?"

—Vuelvo en un momento—dijo este y se fue

***

Joy se encontraba sentado en el sofá de la gran mansión, comiendo lo que sería su última galleta. Lo primero que pensó al ver la mansión era que parecía un museo de arte. Había esculturas de Miguel Ángel, cuadros de Botticelli, Bernini y Da Vinci.

Joy respiró hondo y suspiró. Era la primera vez sentía asco y fue una experiencia desagradable. Era increíble como la mente humana pudiera hacer tal cosa. Joy nunca esperaba más de los demás para ahorrarse disgustos, pero sin duda nunca se hubiera esperado que Eddie fuera a cometer semejante atrocidad.

<<Que asco>>

Joy rara vez salía de su mundo y cuando lo hacía siempre le pasaba algo desagradable. Aunque se dio cuenta de algo muy importante. << Bajo este caos... hay un orden>> al ver el cuerpo desnudo de Azula, pudo calcular que la simetría era perfecta. <<Leonardo Da Vinci>> "el cuerpo humano era una simetría perfecta" así lo comprobó Leonardo Da Vinci cuando exhumaba cadáveres y Azula podía ser una prueba valiosa de esa teoría. <<1,618>>

—Por los clavos de Cristo ¿Eres sordo? —escuchó una voz cercana

Joy levantó la vista. Allí estaba el hombre que lo había recibido.

Joy se colocó de pie, pero no dijo nada.

—¿Eres sordo? Hace aproximadamente quince minutos te he estado hablando—Joy lo miró, pero no le dijo nada. El hombre le extendió la mano— Soy Ray Derkins, el papá de Azula

Joy la recibió—Joy McFly

—Siéntate hijo—le dijo Ray—Primero que todo quiero darte las gracias por...

—¿Derkins? —lo interrumpió Joy una vez que Ray se sentó—¿Ray Derkins? ¿El ganador del nobel de química?

Ray sonrió—el mismo

—¿Cuándo piensa terminar "El caso Derkins"?

Ray abrió los ojos como platos—¿leíste "La Química según Derkins"? —Joy asintió—¿Lo entendiste? —Joy volvió a asentir—¿Cuántos años tienes, jovencito?

—Dieciocho

—Y ¿Qué estudias?

—Soy matemático, pero ahora estoy estudiando física

—Se dijiste que tenías dieciocho años, acaso ¿te graduaste a los doce años? —Joy asintió—Igual que yo

—¿Cómo van sus investigaciones de la Cal Viva? —le pregunto Joy

—Fui a Australia recientemente. El óxido de calcio se obtiene de las caleras, son hornos cilíndricos en donde se calienta el carbonato de calcio—Joy lo escuchaba atentamente—es un tema bastante interesante y amplio. Aún estoy trabajando en ello

—Dicen que piensa formar una sucursal en Colombia de ácido cítrico ¿Es cierto?

—Los campos azucareros del Valle del Cauca en Colombia son muy fructíferos y el ácido cítrico al igual que le etanol, se vende mucho y es un negocio rentable.

Joy asintió procesando toda la información.

Ray sonrió—¿Te gusta la ciencia? — Joy asintió—puedes venir cuando quieras y hacer partícipe de mis investigaciones, puedo enviarte una invitación a las congregaciones científicas.

A Joy se le iluminaron los ojos—Gracias señor Derkins. Me pregunto ¿Por qué Azula no se inclinó por la ciencia?

Ray se echó a reír—Su odio es directamente proporcional a la ciencia. Sabes, me parece increíble que mi hija tenga un amigo como tú—Joy lo miró, pero no dijo nada

—Derkins...—Azula se encontraba al pie de la escalera en camisón

—¡Azula, ve y colócate algo más largo! —le dijo su padre furioso

Azula comenzó a descender las escaleras, ignorando la orden de su padre—Estoy en mi casa—dijo. Al llegar donde estaban ellos miró a Joy—¿puedo hablar contigo un momento? —A continuación, miró a su padre—A solas

Siempre se abstenía a hablar cuando había dos o más personas con él, porque aparte de no entender nada, siempre decía algo que no tenía nada que ver con el tema.

—¿Y bien? —preguntó Ray

—El jamás contestará, Derkins—le dijo Azula—Déjanos solo, por favor

Ray Derkins se quitó el saco y se lo colocó a su hija.

—Me agrada—le susurró y a continuación se fue.

Joy miró a Azula. Esta se encontraba mirando la dirección donde se había ido su padre y luego lo miró. <<Verde fundido en oro>> pensó Joy al ver los ojos de ella.

—NH3: amoniaco—susurró Joy para sí. Siempre repetía formulas químicas cuando estaba nervioso—HNO3: ácido nítrico, H3PO4: ácido fosfórico, H2SO4: ácido sulfúrico...

—¿Qué dices? —le preguntó ella exaspera y el no dijo nada—¿tienes idea del porque Edward quiso hacerme eso? —Joy la miró—¿Joy?

—Cándido Jacuzzi, inventó el Jacuzzi para su hijo que tenía artritis reumatoide—le dijo el

—¿Qué? — Joy la miró peono dijo nada

—¿Por qué siempre que te pregunto algo, me respondes con algo que no tiene nada que ver? —le preguntó—estamos hablando de violación. Si tú...—ella tragó saliva y se sentó en el sillón, Joy hizo lo mismo.

—"Que hemos de morir es algo que sabemos desde que nacemos. Por eso, en cierto modo es como si ya hubiéramos nacido muertos"

Azula lo miró como si este hubiese caído de la luna— no pienso poner denuncia porque no soportaría el escándalo. Dile que se vaya de la universidad y que no se me acerque, o si no lo meteré preso. —Joy asintió y se puso de pie—y... gracias—el volvió a asentir y se fue.

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