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Final


Azul

Tocaba visita de Elizabeth, "Eli" como la llamaba Jungkook, estaba en la sala moviendo mi pierna de manera ansiosa mordiéndome las uñas, Jungkook tomaba una taza de café en el patio mientras fumaba, no lo hacia dentro de la casa por obvias razones, mire que saludo hacia enfrente el auto de Elizabeth se estacionaba.

Ella se acercó y saludo a Jungkook con un abrazo, ¿Qué le pasa?, y todavía el maldito le correspondía el abrazo, me pare furiosa camine hacia el cuarto, pero antes de llegar a la puerta me maree, iba a dar al piso cuando el brazo de Jungkook me detuvo.

—Llévala a la cama.

Me cargo, Elizabeth saco un estetoscopio, junto con una especie de bombilla y brazalete, lo rodeo en mi brazo y coloco el estetoscopio mientras miraba su reloj.

—Tienes la presión algo alta, ¿has estado haciendo algo fuera de la rutina normal? 

—No— respondo, ella parpadea y me mira algo feliz.

—Es un placer escuchar tu voz, voy a pedir que te compren un Baumanómetro para que te puedan estar checando la presión, será dos veces al día, de ser constante la elevación de la presión tendremos que darte medicamento para ello, esperemos que solo sea algo de un rato.

—Ella ya no duerme tanto como antes.

—Puede que tenga que ver, pero muy poco, ¿Cómo vas con tus pesadillas? 

—Ya no he tenido.

—Muy bien, bueno revisemos al pequeño.

Vi de nuevo a lo que ya tenia una forma de bebe ahora si, 22 semanas mostraba la pantalla, después me midió el vientre además de pesarme, curiosamente no había aumentado nada de peso, el bebe crecía bien, pero seguía con mi peso inicial.

—Es raro que no aumentes de peso, revisare como esta tu anemia, permíteme tu brazo—Tomo unas muestras de sangre.

—Las tendré listas mañana, vendré temprano.

—No creo que sean tan urgentes, igual puede llamar y decirlos —Dije mientras me sentaba de para pararme —si es todo, me iré al patio.

— ¿Tu mareo? 

—Estoy bien, vamos Max.

Sali con Max caminando al lado mío, en el pequeño muelle que estaba en el lago me sentaba a meter los pies, el agua estaba helada, pero era relajante.

—No deberías de meter los pies, te vas a refriar, y tendré que llamar a Eli más seguido.

Lo fulmine con la mirada.

—Fuiste grosera con ella.

—Tu muy amable.

—Tu no eres así pequeña.

—Tu tampoco.

Suspiro y se sentó a mi lado.

—Es muy bonita— le dije —además de que veo que te llevas bien con ella.

—Jimin es bonito y me llevo bien con él—gire los ojos — ella no me gusta.

—Pero tu si le gustas a ella.

Se levanto sin decir nada para después cargarme hasta el cuarto y dejarme en la cama, se coloca arriba de mi aprisionándome con sus brazos al lado de mi cabeza.

—No me interesa gustarle a nadie más.

Mis manos lo atraen para besarlo, a pesar de que las cosas habían avanzado bien aún no intentábamos nada mas allá de besarnos, o las masturbaciones que le regalaba, nos giramos para quedar encima de él, quite su camisa, me detuvo las manos

—¿Segura? —Moví mis caderas contra su bulto en los pantalones.

—Creo que si.

Me ayudo a quitarme el vestido que traía, solo llevaba ropa interior debajo, me molestaba el sostén, quite el cinturón de su pantalón de manera lenta, levanto su caderas y sin bajarme de él arrojo sus bóxer y pantalones al suelo, se sentó para besar mi cuello, yo acariciaba su espalda, me frotaba mas contra su creciente erección, cuando cerré los ojos para disfrutar mas los besos en mi cuello, una imagen vino a mi cabeza, las manos de Jungkook ya no eran las de él, si no las de Taehyung, abrí los ojos de golpe deteniendo los movimientos de cadera, el lo noto me tomo del mentón

—Mírame azul, podemos parar.

—Es que yo te deseo.

—Yo también mi niña, y mucho, pero si no estas lista para esto lo entiendo, estoy aquí para ti de la manera que sea necesaria, solo necesitas mirarme con eso es mas que suficiente.

Mis ojos no se apartaban de la mirada excitada de Jungkook, se acomodó quitándome los pantys, para alinear su miembro en mi entrada, baje con cuidado, mi frente se apoyo en el mentón de Jungkook, me apoye en sus hombros para comenzar a subir y bajar, el me tomo de las caderas para hacer los movimientos más continuos, el placer invadía mi cuerpo.

—Jungkook.

Se abalanzo a mis labios sin dejar de movernos, cambiamos de posición, el levanto mi pierna en su hombro para entrar con mas profundidad mientras acariciaba mi clítoris con su dedo, me aferre a las sabanas arqueando mi espalda para sentir un orgasmo que me atravesó todo el cuerpo con una corriente eléctrica potente.

Sonrió al sentir como su miembro era aprisionado dentro de mí, no dejaba de mirarme a los ojos mientras seguía embistiendo, me excitaba sobre manera escucharlo casi gruñir al terminar dentro de mí, se recostó a mi lado.

—Espero esto no le afecte al pequeño.

—Hay muchos beneficios del sexo durante el embarazo, me ayudara incluso a un parto menos doloroso.

—Haberlo dicho antes.

Un par de semanas después

Estaba dando vueltas en la habitación, me movía tan rápido como mi enorme vientre me permitía, me asomaba por la ventana cada dos minutos.

—Cariño siéntate, me estas mareando, te va hacer daño.

—Dijiste que llegarían a las dos de la tarde y son las dos quince.

—Estoy pensando que fue mala idea decírtelo.

Sonó el timbre de la puerta y camine rápido a abrir.

—Hola—saludo sonriendo ampliamente.

—Kai—Lo abrace apretándolo contra mí, lo revise de arriba abajo.

—No se te quitara esa costumbre ¿verdad? —frunció el ceño regañándome.

—Ya trate de cambiarla, pero me es imposible.

—Estas enorme—me mira la barriga con ojos bien abiertos.

—Debo estarlo, llevo un bebe dentro.

—Hola mocoso.

—Hola JK.

—¿Podemos entrar? Esta lloviendo horrible —Hobi venia cargando una maleta.

Por fin entraron y todos nos encaminamos a la sala.

—Tu hermana ya estaba histérica.

—Me imagino, es que la verdad tarde en reconocer a Hobi en el aeropuerto iba demasiado cubierto.

—Debía tener cuidado, por algo me mandaron a mi.

— ¿Cómo te va? — solté mientras le agarraba las manos.

—Bien, voy bien en mis clases, y sigo limpio incluso de alcohol.

Es cierto se veía muy bien, sus mejillas estaban más redondas incluso las ojeras que siempre tenia no existían, no podía creer que ese era mi hermanito, me daba mucho gusto tenerlo de nuevo conmigo.

—Por cierto, ¿saben si es sobrino o sobrina? 

—No aun no, queremos que sea sorpresa, pero no falta mucho en dos meses más estará aquí.

Pasamos toda la tarde de manera tranquila, jugando y comiendo, Kai se quedaría unos días con nosotros antes de regresar a la escuela.

Cuando todos nos fuimos a recostar, no lograba conciliar el sueño, me sentía incomoda, me sentí en la orilla de la cama sosteniendo un poco mi vientre.

—¿Pasa algo? —Jungkook se levanta y empieza a sobar mi vientre.


—No lo sé, esta algo inquieto—una punzada me invadió la columna haciendo que gritara un poco.

—¿Azul? 

—No, no aun falta tiempo— otra punzada más, parecía que las contracciones habían comenzado.

—Llamare a Elizabeth.

Sonó el timbre algunas veces hasta que contesto, la puso en altavoz.

— ¿Qué pasa grandote? 

—¡DEJA DE LLAMARLO ASI! 

—Wow, ¿todo bien? 

—No, no se lo que le pasa, le están dando dolores.

—Azul nena, ¿Dónde así son esos dolores? 

—En la cadera, llegan de manera intermitente.

— ¿Cada cuánto? 

— ¿QUE PUTAS VOY A SABER? —lo admito el dolor no me dejaba ser amable.

—Son como cada cinco minutos—Jungkook contesto por mi.

—Parece que en el nene no va a esperar a los nueve meses, voy para allá.

—Pero aún es muy pronto.

—Tranquilo en esta semana el bebe puede sobrevivir sin problemas, iré con todo lo necesario no tardo.

Colgó mientras yo seguía con el dolor, pasaron unos diez minutos, Kai ayudaba a Jungkook a checar mi presión y monitorear los latidos del bebe, por el mal clima se retrasaría seguro la llegada de Elizabeth.

—¡Diablos! — vi que Jungkook tomaba su chaqueta —quédate con ella, a Elizabeth se le poncho un neumático iré a asistirla, no tardo .

—Tranquilo, aquí la vigilo.

Las contracciones eran cada vez mas fuertes, pero me mantenía tranquila con las respiraciones que había aprendido, Kai me tenia sostenida de la mano; escuchamos el ruido de la puerta y pasos apresurados hasta la habitación entro una Elizabeth empapada con un maletín mas grande que el de costumbre.

—Ya llegué, empecemos esto ¿Cómo van? 

—Cada minuto, presión normal y latidos constantes.

— ¿Y tú eres? 

—Su hermano.

—Espera, ¿y jungkook? 

Elizabeth me mira confundida.

—Creí que estaba aquí.

—No él salió a buscarte, le llego un mensaje que estabas mal de un neumático—mi hermano contesto por mi.

—Yo no envié nada.

Entre en pánico.

—Llámalo— dije entre contracciones.

Mi hermano se movilizo, pero parece que se iba a buzón, llamo a Yoongi y Hobi, yo seguía las indicaciones de Elizabeth que, aunque estaba preocupada por la situación, su prioridad era traer a mi bebe sano y salvo al mundo.

—Es momento de pujar nena.

Una

Dos

Tres veces fueron las que me esforcé hasta que escuché un pequeño llanto algo apagado.

—Sus pulmones funcionan, es un niño muy guapo.

Un niño, vi cuando lo limpio, le puso una sonda y lo envolvió en una manta térmica.

—Su respiración es adecuada, tiene buenos signos vitales, en esta semana corre poco riesgo, pero si tendrá que tener algunos cuidados adicionales, es muy pequeño, ¿cansada? 

—Un poco.

Mi hermano había salido de la habitación. Ya mi bebe en brazos Elizabeth inicio con las curaciones habituales, escuche un disparo, Elizabeth y yo volteamos hacia la puerta de la habitación, entro mi hermano sosteniendo una escopeta.

—Necesito que te encierres y atranques la puerta.

—¿Kai? 

—Tranquila, es mi turno de protegerte hermanita, cuídala.

Elizabeth asintió, tomo a mi bebe y lo puso en un moisés que adapto como una incubadora, después de asegurarse que estaba estable y caliente lo metió con el moisés al armario cerrando las puertas.

—Ven te ayudare a levantarte, debemos de salir del campo de visión, de lo que sea que esté pasando.

Me moví despacio levantándome de la cama, nos acercamos al buro de la habitación, ella lo movió para atrancar la puerta, abrí el cajón de este sacando un arma, estaba demasiado nerviosa, no podía dejar de ver el armario.

—¡AZUL, ¿DONDE ESTAS CARIÑO? —esa voz.

Elizabeth me hizo señas para que no dijera nada.

— ¡Vamos solo es cuestión de abrir las puertas de la casa y sacarte de aquí, con mi bebe! 

Los disparos fuera de la casa se escuchaban con más intensidad, escuchamos también como rompieron la puerta del cuarto de invitados, estaba temblando con el arma en las manos, una de las ventanas del exterior se rompió, entro por esta el dueño de la voz.

—Te encontré mi niña.

El ruido hizo sonar el pequeño llanto de mi bebe en el armario, Elizabeth trato de correr hacia el armario antes de que Namjoon fuera por él, pero le dio un cachazo con el arma dejándola inconsciente en el piso, yo seguía temblando.

—Tranquila mi amor, te sacare de aquí ya termino todo.

Siguió caminando hacia el armario, cuando un disparo se escuchó, lo vi caer de rodillas soltando el arma que tenía, con el temblor aun presente pero la adrenalina de haber disparado por primera vez, me acerqué, apuntándole a la cabeza.

—¡NO ES TU BEBE!

Le dispare mas de una vez.

—¡Y YO NO SOY TUYA!

Le vacié la pistola, sentí unas manos detenerme de jalar el gatillo.

—Tranquila, tranquila ya paso todo nena.

Jimin me abrazo, entro Yoongi por la ventana también y comenzó a quitar el atranque de la puerta, entrando Jungkook cubierto de sangre corriendo a abrazarme.

Jk

Escuchaba en las noticas como la familia Kim había sido encontrada sin vida en un tiroteo, la policía tuvo la decencia de no poner cargos en contra de ninguno de nosotros, de nuestra parte solo hubo alguno que otro raspón, nada grave incluso el mocoso supo defender el lugar en lo que llegábamos, Taehyung me esperaba en emboscada con el mensaje que me envió fingiendo ser Elizabeth, mientras el asqueroso de su padre iba a la cabaña por Azul, no se esperaban que el mocoso estuviera ahí incluso Max participo en la defensa de mi familia.

Mi bebe estaba estable en la unidad neonatal del hospital de Elizabeth, mientras que mi pequeña descansaba en una camilla a mi lado, por fin toda esta mierda había acabado.



Dos años después...

—Bájate de ahí Minho.

Azul siempre estaba al pendiente de nuestro pequeño travieso, el cual estaba agarrado de las rejas de la casa.

—Ven para acá pequeño demonio— lo cargue mientras lo atacaba con cosquillas.

—Necesitas reprenderlo, no atacarlo con cosquillas por eso siempre se trepa en todos lados.

—No pasa nada solo tiene mucha energía como su padre.

— ¿Qué sucede aquí? 

— ¡Tito yogui! —aun no hablaba del todo bien

—Hola tito yogui.

—Cállate al enano se lo permito, tu no puedes decirme así tarado.

Jimin venia atrás cargando en brazos a una pequeña de un año que habían adoptado hace poco, Azul se acerco y la tomo en brazos llenándola de besos.

—Mi preciosa momo.

—Ya deberías de buscar la niña, Azul.

—Claro que no, suficiente tengo con esos dos, no paran en todo el día.

—Si por mi fuera tendríamos unos quince ya, con lo mucho que fo...

No me dejo terminar Azul sentí un zapato pequeño en mi rostro.

—Cállate imbécil.

—Tu imbécil.

La promesa de salirme de ese mundo y empezar de cero fue cumplida, abrí un restaurante junto con Yoongi, aunque debes den cuando nos escapábamos con viejos conocidos de los bajos mundos, nadie se metía con nosotros después de deshacernos de la familia Kim, no estaba en mis planes hacerlo es solo que se fijaron en la persona equivocada para tocarle los huevos.

*Baile sexy* Llegamos al final. LES AMO 

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