– ¿ESTO ES OFICIAL? –

Los merodeadores fácilmente consiguieron las hojas de mandragoras y se las dieron al trio mientras ellos se encargaban de preparar todo, total ellos ya lo habían hecho una vez y salió perfecto. El mes de enero concluyó y le abrió paso a febrero con su ambiente sumamente asfixiante, la gente solía volverse loca por la festividad de este mes.

Los alumnos de séptimo año parecía que esperaban que está fecha pasará, para así comenzar a estudiar y prepararse para sus E.X.T.A.S.I.S. Lo que ninguno sabía era que cierta pelirroja ya había programado horas de estudio para todos, incluyendo los entrenamientos de James, Kiara y Marlene.

Los merodeadores, el trío junto a Lily y Marlene parecían haberse unido y hecho un gran grupo.

Dumbledore parecía que le encantaban las fechas de San Valentín y dónde se demostraban abiertamente sus sentimientos ya que cancelo las clases de ese día y también les concedió salida a Hogsmeade, así que el local de te de Madame pudipie estaba totalmente lleno y se podía ver afuera a parejas esperando por entrar.

Hogsmeade se encontraba totalmente sin nieve pero ahora parecía inundado de corazones o cualquier decoración que tuviera que ver con la festividad.

Kiara y Sirius decidieron ir a Hogsmeade cómo si fuera cualquier otro día. Solo ir a Honeydukes, Zonko y terminar bebiendo una cerveza de mantequilla en las tres escobas.

– Me asfixia este tipo de ambiente – Kiara le susurró a Sirius cuando pasaron frente a Madame pudipie.

– ¿No te gustaría tomar un café en el gran y rosado local de ahí? – Sirius señaló en salón del té y la chica hizo una mueca.

Sirius sonrió mientras ponía su brazo sobre los hombros de ella y se alejaban mientras iban a Zonko.

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En el otro lado de Hogsmeade se encontraban Remus, Cassandra, Peter, Aleixander y Marlene con una caja de fuegos artificiales.

– No entiendo porque Sirius quiere darles espectáculo a los alumnos. – Dijo Cassandra.

– Es Sirius, quiere hacer oficial su relación con Ara de está manera para que todos se den cuenta – Marlene dijo, ella siempre considerará a Sirius su mejor amigo. Le tiene demasiado cariño y aparte, le ayudo demasiado durante su comienzo en Hogwarts.

Ya casi estaba totalmente oscuro cuando los alumnos comenzaron a regresar al castillo, pero apenas Kiara y Sirius salían de las tres escobas. Sirius estaba nervioso pero el que Kiara comenzará a hablar sobre las competencias de baile a las que asistió hizo que no notara la actitud de Black.

– Ahí van – susurró Peter mientras señalaba a la pareja. Remus asintió y con su varita prendió los fuegos artificiales. Primero salieron disparados tres al cielo: para llamar la atención. Luego dos más: para mantener el espectáculo. Salieron los siguientes los cuales formaron las palabras:

" Kiara Moncier, ¿me permites ser tu novio?"

Todos los alumnos veían fascinados el cielo, Sirius sonreía mientras mantenía su mirada en Kiara y ella solo miraba el cielo y las palabras en el. Sonrió y miro a Sirius, simplemente lo beso.

No necesitaron más palabras para expresar lo que ambos sentían, todo lo transmitieron en ese beso.

Sus cinco amigos aplaudían y la demás gente del pueblo comenzó a hacerlo.

– ¿Esto es oficial? – Preguntó Sirius mientras rodeaba a Kiara por la cintura.

– ¿Tu qué crees? – Kiara sonrió y volvió a besarlo nuevamente.

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Dumbledore les ofreció un banquete la noche de San Valentín después de haber regresado de la salida a Hogsmeade. El director sonreía mientras veía como los alumnos convivían, apesar que no todos se encontraban ahí.

Había ciertos Slytherin caminando por los pasillos de el castillo cuando cierta leona tomo a su hermana del brazo.

– ¿Que te sucede? – preguntó totalmente nerviosa Keira cuando su hermana se aferraba a la manga de su playera.

– Debo saberlo, Keira – dijo ella.

Los amigos y la pareja de Keira al ver lo que Kiara trataba de hacer rápidamente pensaron como solucionarlo. Severus al ver qué Kiara estaba alzando la manga empujo a la chica sin darse cuenta que ciertos Gryffindor observaban la escena.

– ¿Que has hecho, quejicus? – exclamó Sirius mientras se aproximaba con su novia.

– Dile a tu novia que no se meta en lo que no debe – respondió el Slytherin mientras Keira desaparecía del lugar.

– Es su hermana.

– No lo es – sin decir más, Severus iba a dar media vuelta cuando un golpe de Sirius lo mando al suelo. – ¡Estás loco, Black!

James se apresuró a tomar a su mejor amigo para que no se lanzará hacia el Slytherin. Kiara se mantuvo estática cuando vio que Keira se marchaba vio como hacia una mueca al tocar el antebrazo de su brazo izquierdo y fue ahí cuando lo confirmo. Ya no podía salvarla y menos cuando ella no quería ser salvada.

Sirius se zafo del agarre de James y sin mirar a Snape tomo la mano de Kiara y emprendió camino hacia la torre de Gryffindor mientras depositaba un beso en el dorso de la mano de su novia.