-A pesar de todo, no me arrepiento de ayudarlo -susurró el pelirrojo sin apartar la vista de un punto muerto.

- ¿Qué sucede? no me gusta verte así. -dijo la chica de cabello bicolor muy preocupada.

-Ayudar al prójimo es lo que importa ¿no? -dijo antes de explicar el por qué de su tristeza.

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Antes de conocerte, en mi vida nunca había sentido tanto dolor después de ayudar a quien lo necesitaba, desde ese día tengo cicatrices.

No negaré que al principio no fueron los mejores momentos de mi vida, aunque no lo notaste tus palabras me herían.

A pesar de que nuestra relación nunca fue muy buena, siempre terminábamos juntos, incluso si tú no lo querías.

Me enamoraba de ti entre más te conocía, a pesar de tu mal humor siempre me sorprendías.

Te gusta mucho el rock, eso lo descubrí cuando estabas dando una presentación en una de las fiestas a la que nos invitaron y yo no pensé dos veces en unirme en la banda improvisaba que tenías.

Nos vimos muy a menudo después de eso, me dijiste que la canción era para alguien especial, pude sentir el dolor y la alegría de que estuvieras enamorado, incluso si se trataba de ella.

A veces te escuchaba halagando su belleza y virtudes, cómo me dolía escuchar eso, pero yo estaba ahí para ayudarte, aunque no lo quisieras.

Pero un día llegaste buscando mi ayuda, recuerdo que estabas resignado al pedírmela, y cómo negarme, siempre te ayudaré a pesar de todo.

Hice todo para que tu cita fuera perfecta, te di concejos para hacer conversación, una que otra palabra para hacerle saber que le importas y hasta te busqué el mejor lugar para el encuentro. Después de ser el mesero, cocinero y músico para la ambientación, me fui dejándolos solos para que no se sintieran incómodos con mi presencia.

Pasó un día cuando me llegó una llamada tuya...

¡Todo había salido perfecto! aceptó ser tu pareja y te confesó que ella sentía lo mismo, podía escuchar tus palabras de felicidad y ególatra tras el teléfono.

-Gracias.

Esa simple palabra siempre ha sido causa de felicidad para mí y a pesar de la situación lo sigue siendo.

-...De nada.

Fue lo último que dije antes de que cortaras la llamada, liberando mi dolor y tristeza.

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Hola, esto es parte de un reto, mi hermana pidió un Skeleton Dance y se lo escribí. Los escribí mientras escuchaba la versión es español de 'Stitches' de Shawn Mendes.

Espero que hayan disfrutado la corta lectura.