Capítulo 9
Entonces, ¿a dónde quieres ir?-. Daniel me miró de reojo mientras conducía sin rumbo alguno al parecer. Pensé en muchos lugares a dónde podríamos ir que fuesen lo menos incómodo posible, pero parecía que no había ninguno apropiado.
Yo no lo sé-. Lamí mi labio.-. ¿Por qué no escoges tú?-. Alenté para librarme de ese peso, no me gustaba que me diera a elegir, más cuando estaba seguro que la cuenta correría por él.
Podríamos ir a Caneli-. Ofreció y su tono de voz era muy obvio, le delataba, estaba muy nervioso por esta cita.
Caneli era una lugar de comida italiana bastante conocido por aquí y aunque no fuese especialmente fanático de la comida italiana no puse objeción-. ¿Qué te parece?-. Preguntó y yo parpadeé rápidamente dándome cuenta que no le había respondido todavía.
¡Oh! Si claro, perfecto-. Asentí una última vez mientras le daba una pequeña sonrisa.- Oye, no sabía que estarías hoy en la casa de Sara-. Medité por unos momentos y es que ¡hubiese sido genial que alguien me comentara que estaba allí! No hubiera cambiado nada, pero tal vez me hubiese preparado mejor mentalmente y esto no estuviese sucediendo.
Ella no me había invitado-. Paró de hablar un momento mientras se concentraba en la carretera-. Pero Natalia le dijo que por qué no invitaba a todo el Etip y pues luego llegaste tú con Colin-. Se encogió de hombros-. De hecho es un gran alivio verte-. Me sonrió dulcemente y yo me quede sorprendido. Reí nerviosamente por lo que dijo sin saber que contestar. Diablos.
Es bueno verlos a todos de vez en cuando ¿uh?-. Hablé después de pensar por un largo momento que decir. El asintió enérgicamente mientras reía, lo que me preocupó un poco porque cuando el reía sus ojos se cerraban casi en su totalidad haciendo que no mirase y estábamos en una carretera así que no era exactamente algo favorable para mi.
Cuidado con cerrar los ojos mientras conduces-. Bromeé con un poco de sarcasmo.
Oh vamos, no me arriesgaría a eso, mucho menos contigo aquí-. ¡Oh Dios! Era tan dulce que a veces, solo a veces, lograba que me sintiera un poco halagado. Lo peor de todo es que era tan sincero con sus sentimientos que me resultaba difícil alejarlo por completo-. De todas formas, ya estamos aquí-. Me sacó la lengua infantilmente haciendo que suspirara divertido.
En cuanto se aparcó salí del auto junto con él y él se acercó a mi al caminar hacia el restaurante. Miró mi mano por un momento e hizo el amague de mover la suya hacia ella. ¡Quería tomar mi mano! En un ataque de nerviosismo levanté la mano hacia mi cabello fingiendo que arreglaba uno de mis rizos mientras disimulaba que no había visto nada. Bufó algo desalentado pero siguió caminando hasta llegar una mesa. Para mi fortuna nos sentamos uno frente a otro y no uno al lado de otro. Porque sería totalmente incómodo. La encargada nos dejó unos menús antes de irse y tomar pedido de lo que queríamos beber.
¿sabes que quieres ordenar?-. Preguntó mientras cerraba el menú y me miraba con una mano en su barbilla-. Todo se ve delicioso-. Reí incómodamente al ver su atención en mi y asentí.
Creo que quiero un pizza-. Decidí irme por lo seguro. Se muy bien lo quisquilloso que puedo llegar a ser. En cuanto llegó la encargada de nuestra mesa otra vez, ordenamos nuestra comida y ella se fue.
Y bueno...¿qué has hecho?-. Habló después de un pequeño silencio y yo comencé a repasar cada cosa insignificante que había hecho durante las vacaciones. No es que hubiese mucho por lo que no sabía exactamente que decir.
Estuve trabajando en Baked como siempre, junto con Han-. Aclaré-. ¡Oh! Y hay una nuevas galletas de canela que son deliciosas y me encanta hacer. Son nuevas, así que no creo que las hayas probado. Diría que las inventé pero en realidad-. Rasqué la parte de atrás de mi cabeza-. Fue un accidente, boté mucha canela sobre una de las masas y ya que no podía salvarla decidí hornearla.-me encogí de hombros y reí.
¿Enserio? Genial, tal vez deba pasar por una de esas-. Me sonrió y yo le devolví la sonrisa. Era lindo que alguien me pusiera atención de esa manera algunas veces-. No me sorprende que haya sido por tu torpeza-. Bromeó. Apreté mis labios sintiéndome algo decepcionado, odiaba que se burlaran de mi, aunque fuese en broma. Creo que debió de ver mi mueca porque su expresión de burla cambió.- no me mal entiendas, he sido torpe también algunas veces. Una vez estaba en actuación y mi vestuario era muy apretado así que cuando fue mi turno de inclinarme mi pantalón se rompió-. Rió y yo lo hice también aunque no tan divertido como debía.
Daniel era actor, bueno estaba comenzando a serlo en unas cuantas obra locales y no era malo en ello, todo lo contrario ,era muy bueno. Algunas personas se habían contactado con él debido a ello y tenía contratos que firmar. Era genial. Lo había ido a observar un par de veces pero creo que ir al teatro no era lo mío y menos cuando en su monólogo de romántico se había parado en la esquina del escenario y me había buscado entre la multitud. Lindo pero incómodo porque todas las personas me habían observado y yo solo quería que la tierra me tragase.
La comida llegó junto con las bebidas haciendo que se me hiciera agua la boca y comenzara a comer la deliciosa pizza. Mientras comíamos ninguno habló pero pude observar sus rasgos, él era de piel morena, ojos oscuros, cabello negro, musculoso, rostro perfilado. Atractivo pero no especialmente mi tipo.
Su plato era enorme pero aún así terminó la comida bastante rápido, incluso más que yo, que no alcancé a terminar al menos dos trozos de pizza restantes. ¡Sentía que explotaba!
De verdad eres de estómago chico-.rió y yo sonreí medianamente.
Incluso así tengo un poco de grasa en mi estómago-. Reí sabiendo que había engordado un par de kilos durante las vacaciones.
Yo te miro lindo así-. Me guiñó el ojo y yo le miré sorprendido más aún cuando puso su mano encima de la mía sobre la mesa. Mi mano comenzó a sudar excesivamente ante eso y abrí la boca para hablar. ¡Necesitaba romper este momento!-. Se qué tal vez estes un poco incómodo en este momento pero escúchame-. Pasó su pulgar en mi piel y no pude evitar halar mi mano sin éxito. ¡Ya basta Daniel!-.
Alguien nos verá, sabes que no todos están cómodos con ver a dos chicos así y...-. Intenté de nuevo él me detuvo.
Nadie nos mira-. Comprobé lo que decía. ¡Maldición! Tenía razón.- yo tenía un enamoramiento contigo desde hace bastante tiempo-. Comenzó y yo negué tratando de que parara-. El punto es que luego salí con Alejandra y aunque estuve con ella, aún quedo algo de sentimientos por ti. No te diré que sigo enamorado de ti pero si tengo una atracción-. Levantó una ceja-. Así que por qué no nos dedicamos a tener buenos momentos y si nos enamoramos puede ser después. Como algo sin compromisos-. Terminó haciendo que mi mandíbula casi se desencajara. ¡Pero quién demonios se creía que era!
¿Estas escuchando lo que dices?-. Alenté y él pareció mirarme nervioso pero se compuso.
¡Vamos! Solo hay que disfrutar, podemos comenzar con un beso por ahora y luego veremos a dónde nos lleva-. Le miré aún más indignado. ¡Pero que imbécil era! Yo no era ese tipo de chico y si no había estado con él era porque no me gustaba demasiado y si lo hacía podía olvidarse de eso ahora.
Eres un idiota-. Bufé molestó y quité mi mano de la suya con suma fuerza-. Ni siquiera te das cuenta de la idiotez que dijiste. Quiero irme ahora-. Me levanté de la mesa y me dirigí hacia la caja principal del restaurante sin esperar que él me respondiera. Pagué rápidamente sin siquiera notar bien el precio de lo que habíamos comido y justo cuando terminaba Daniel se apareció a mi lado.
Vinny yo te invite a comer-. Alegó y le ignoré. Tomé mi recibo y salí del restaurante con él siguiéndome mientras intentaba detenerme ¡estaba tan molesto!-.
Llévame a casa de Sara-. Le corté su balbuceo y en crucé de brazos.
Está bien-. Abrió el auto y entre al asiento copiloto sin decir nada. Él entro de la misma forma y comenzó a conducir. Encendió la radio cambiando varias veces de estación hasta que la dejó una canción que era romántica. Evité rodar los ojos.
Comenzó cantar la canción mientras me veía de reojo por lo que sentí más molestia que ante.
¡Eres increíble!-. Hablé con sarcasmo.
Ni siquiera sé por qué te molestó tanto-. Habló con voz apenada. Y le creía, Daniel era un buen chico y estaba seguro que no lo había hecho a propósito pero simplemente me llenaba de furia lo que había hecho. ¿esa era la imagen que tenía de mi?
Bueno piénsalo, no soy como Alejandra ¿okay?-. Aclaré sabiendo que Alejandra era bastante de esa forma. La había visto con un centenar de chicos antes de conseguir una pareja formal, y yo no era así.
¿Estas celoso?-. Bromeó nerviosamente picándome uno los lados intentando hacerme reír. Lo miré con un gesto de incredulidad. ¿Qué le pasaba? Bufé con molestia.
Eres tan tonto-. Gruñí sin responder más.
En cuanto llegamos a la casa de Sara me bajé los más rápido que pude del auto y entré a la casa con un portazo. Quería irme a casa pero Colin me había llevado y por lo que veía -rodé los ojos- estaba con Jay todavía. Volteó a verme en cuanto llegué pero le ignoré y me senté en la parte del sillón dónde había estado.
Natalia me miró con las cejas alzadas y salió con, suponía, Daniel. Par de tontos. Bufé.
Para Han: Daniel es un imbécil.
De Han: ¿no habíamos aclarado eso? Saliste con él ¿no?
Para Han: Si, fuimos a comer. Pero me dijo lo más estúpido que pudo haberme dicho. Mañana te cuento.
De Han: ¿por qué mañana? :(
Rodé los ojos y decidí no contestarle en ese momento aunque si sentí como mi móvil se disparaba de notificaciones. Sentí un peso a mi lado y sintiéndome irritado volteé con media sonrisa fingida.
No entiendo por qué te molestaste con Daniel-. Natalia habló mirándome un poco decepcionada-. Él me contó lo que paso-. Le miré molestó y luego miré molestó a Daniel. Ugh, odiaba esto.
Escucha, creo que esto no es tu incumbencia-. Traté de ser lo más pacífico posible. Usualmente solo sería muy incómodo hablar de esto para mí pero estaba tan molesto y me sentía tan mal por esa cita. Le miré con una mala cara mientras ella simplemente se acomodaba un mechón detrás de la oreja-.
Solo digo que ya es tiempo que dejes de romperle el corazón-. Le miré muy molesto y me levanté de mi asiento mientras pasaba por todos los demás.
No hablaré de esto-. Me quejé y me dirigí hacia Colin.- ¿puedes llevarme a casa por favor?-. Le pregunté. Me miró sospechosamente aliviado mientras se disculpaba levemente con Jay y se levantaba. Suspiré aliviado.
Uy, alguien esta enojado-. Molestó Sara, quien estaba sentada al lado de Jay. ¡Al diablo con ella! Apreté mi mandíbula sin contestarle y jalé a Colin conmigo después de que él diera una pequeña despedida.
Pareció notar que estaba molesto porque en cuanto comenzó a caminar no me habló de forma inmediata.
¿Dónde queda tu casa?-. Preguntó en voz neutra. Le dí la dirección cortantemente haciendo que asintiese y me viera de reojo-. Así que... ¿cómo estuvo?-. Preguntó. Le miré en forma de obviedad.
Horrible-. Murmuré-. Es un idiota-. Alegué mirando hacia afuera.
Vaya, eso apesta-. Agregó sin decir mucho más-. Si quieres lo golpeo por ti-. Bromeó y no pude evitar reír un poco ante eso. Negué aún sonriendo.-
Nah-. Le miré y reí nuevamente. Suspiré-. Si tengo ganas de golpearlo, no creas-. Rodé los ojos y escuché su risa estruendosa aunque atractivamente masculina.- pero el idiota ni tiene idea-. Me quejé.
¿Entonces que harás con él?-. Buena pregunta Colin. No tenía idea de que hacer con él ahora. ¡Vamos! Sabía que él iba intentar arreglar esto de una manera u otra así que tenía que pensar como mantenerlo alejado.
¿qué haré contigo Daniel?
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro