- ¿están listos? –pregunta Namjoon por el teléfono—

Todos los chicos iban en sus propios autos, cada uno iba con sus clanes mientras organizaban miles de ideas en su cabeza.

- ¿saben que es una trampa no? –pregunta Yoongi—

- la sorpresa se la llevara él –dice Jungkook mientras aprieta más el acelerador—

- no quiero que nadie actúe impulsivamente ¿entendieron? –ordeno Namjoon— te hablo a ti, Jungkook.

Jungkook sonrió y tomo el volante con una mano mientras que con la otra tomo la palanca de cambio.

- me conoces. –dice Jungkook mientras aceleraba el auto y pasaba justo al lado de Namjoon—

Ambos se observaron por el cristal mientras conducían a toda velocidad.

- gracias por cuidarme siempre.

- eres mi hermano, son mis hermanos –corrigió—lo hare toda la vida.

Los tres aceleraron.

Todos iban con el mismo objetivo, pero al mismo tiempo iban con las mismas intenciones de volver, así que no debían fallar, no podían fallar.

Todos iban con miedo en su corazón, era inevitable sentirlo, pero aun así iban por un propósito, el propósito que todos compartían, que era salvar a la gente que amaban, así que debían seguir adelante.

En cuanto llegaron al lugar, Jungkook fue el primero en bajar de su auto.

- señor Jeon –dice uno de sus guardaespaldas mientras al mismo tiempo le mostraba respeto— me informaron que la casa esta muy adentrada en el bosque, debemos llegar a pie.

- bien.

- ¿Cuántos hombres tiene? –pregunta Namjoon mientras llega con Yoongi—

El hombre les ofreció respeto a ambos.

- bastantes, pero al mismo tiempo sabemos que tiene más adentrados en el bosque.

- es obvio que es una trampa, así le gusta jugar –dice Jungkook sacando su arma—

- no te confíes –dice el padre de Taehyung— me duele admitirlo, pero, tú padre es listo, y sabe cómo jugar.

Jungkook vio de reojo al padre de Taehyung.

- si veo que hace algo que no esta acordado, no dudare en dispararle.

El señor Kim lo vio solo un segundo.

- no eres un asesino.

- ¿se olvida de quien soy hijo? No me subestime.

El padre de Taehyung sonrió un segundo y luego todos comenzaron a adentrarse en el bosque. Era obvio que haría algo así, ocultarse en una casa en el bosque, alejada de la ciudad, un sitio perfecto para que una masacre ocurriera.

El señor Jeon conocía a su hijo, pero Jungkook también a él.

- ustedes vayan por el lado norte –le ordeno Namjoon a sus hombres— Jungkook –dice mientras se acerca a él— ¿Qué crees que planea exactamente?

- son mil cosas que tengo en la cabeza –dice mientras ambos caminan despacio con sus armas en la mano— pero si debo adivinar alguna, él ya sabe que estamos aquí, y solo esta esperando el momento perfecto.

- aun puedes irte Jungkook –dijo de forma directa— aun puedes irte y escapar con Tae.

Jungkook se detuvo un momento, cerro los ojos y tomo aire.

- hemos escapado de la realidad por muchos años, si no la enfrento ahora jamás se ira.

Namjoon sonrió orgulloso.

- bien.

- tengan –dice Min Yoongi mientras les da unos cuchillos—

- eres un psicópata. –dice Namjoon con una risa—

- todos somos buenos en algo –dice mientras siguen caminando despacio—

A pesar de que nunca se habían visto así, los tres estaban orgullosos de verse así de fuertes unos a otros. Ya habían crecido, ya no eran niños, eran adultos que luchaban por un propósito importante.

Y no planeaban perder.

El dolor llenaba el corazón de Jungkook, se sentía culpable, y tan, pero tan impotente.

Tenía caminando a su lado al hombre que asesino a su madre, lo tenia justo al lado, y la tenía, un arma en la mano. Hace meses el hubiera simplemente disparado con total satisfacción a su cabeza, pero las cosas cambiaron. Cambiaron cuando llego a su vida el hijo de el demonio que tenia al lado, ese chico, el cual llego a abrir su corazón de maneras que jamás imagino.

Así que no.

No podía matarlo. Pero tampoco planeaba salvarlo.

Si estaba en una situación de riesgo, el no planeaba hacer nada para salvarle su miserable vida, porque cualquier cosa que le pasara, la tenia bien merecida. Solo en eso podía pensar Jungkook.

Todos avanzaban con mucho cuidado, mientras las gotas de sudor corrían por su frente, no dejaban que el miedo diera su presencia en ellos.

- espere. –dice Min Yoongi mientras alza su mano como seña—

Todos lo quedaron observando unos segundos. Hasta que Yoongi de la nada le abalanzó sobre Namjoon. Inmediatamente todo le agacharon cuando una cuchilla llego directamente al árbol detrás de Nam.

Todos se quedaron sorprendidos, pero de inmediato se resguardaron y quitaron el seguro de sus armas.

- sabe que estamos aquí –dice Jungkook—

La agonía era desesperante lo estaba matando, ¡¿Por qué mierda tuvo que hacer eso?! ¡¿Por qué no lo dejo ir con él?! Se preguntaba así mismo Taehyung mientras se sujetaba el pecho con fuerza, solo rezándole a quien se a que lo escuchara, que el hombre que amaba siguiera vivo.

No lo podía perder. No podía.

Taehyung no podía con el enojo y la frustración de solo pensar que su propio padre había estado involucrado en que lo drogaran, no. Que su propio padre, era el responsable de todo lo que estaba pasando. Y era ese mismo hombre quien ahora estaba con la persona que amaba arriesgando su vida.

Taehyung solo pensaba en Jungkook, no podía pasarle nada, no lo resistiría, no podría.

- Tae. –dijo Jimin mientras sostenía su hombro— no te alteres o no dejare que bajes de este auto.

- sabes que no podrás detenerme.

- tu corazón esta débil Taehyung.

- esta lo suficientemente fuerte para pelear, y ganar –aclaro Taehyung—estaré bien –toma la mano de Jimin—no me perderás, y yo a ti tampoco.

Jimin asintió.

Seokjin solo los miraba desde su asiento, se sentía muy orgulloso de ver como eran todos unos adultos.

Pero algo más llenaba su mente.

- por favor, mantente vivo Namjoon, tú y yo aun debemos hablar –se susurró para sí mismo—

Todos estaban bajo mucha presión, tanto que se olvidaron del primer objetivo, el cual era el padre de Jungkook. Por ahora, solo era ir a salvar a los chicos, solo rogaban que pudieran lograr llegar a tiempo.

Hoseok conducía a toda velocidad, saltándose todas las señales de transito que veía, hasta que por fin llego a la carretera y ahí nadie lo detuvo ni un segundo, presiono el acelerador hasta el fondo.

- ¿Qué tan lejos Jin? –pregunto Hobi mirándolo por el retrovisor—

- unos kilómetros –voltea a ver a los chicos—¿están listos?

Ambos asintieron.

Seokjin de verdad tenía mucho miedo, estaba aterrado del solo hecho de pensar que podría perder a alguien hoy, y a esa idea solo la lograba tapar su fuerza mental de querer proteger a sus seres queridos contra todo.

Todos los que estaban en ese vehículo tenían historias para contar, historias horribles y pasados muy fuertes. Pero ahora ya no importaban, solo importaban ellos y las personas a quienes querían salvar. No importaba nada más, lo que paso en el pasado se quedo ahí, ahora iban camino a luchar por su futuro.

- chicos –dijo Hobi de la nada— en el caso de que algo suceda, solo quisiera decirles que –toma una pausa y luego continua— Jimin yo fui quien rompió tu teléfono.

- ¿Qué?

- hace dos meses cuando le echaste la culpa a Taehyung y lo perseguiste por toda la universidad, mientras yo solo me reía, yo fui el verdadero culpable.

Jimin solo se rio.

- idiota –dice con una sonrisa y luego volteo a ver a Tae— lo siento.

Todos comenzaron a reír, de alguna manera a pesar de ser un momento agradable, todos notaban el nerviosismo que se hacia presente en ese momento, todos tenían miedo, pero aun así Hoseok quiso sacarles una sonrisa, le encantaba verlos reír.

Además, quizás sea la ultima vez que los vea sonreír así que no lo dejaría pasar.

- da vuelta a la derecha –avisa Jin a Hoseok para luego voltear hacia los chicos— por favor, se los ruego, manténganse con vida. O juro que yo mismo los matare si mueren.

Ambos le sonrieron a Jin, mientras que él les devolvía la sonrisa.

A pesar de que todos se intentaban transmitir confianza, era obvio que todos estaban muertos de miedo en su interior. Cada uno pensaba en una persona en particular por la cual rogaban que estuviera vivía aún.

Aún tenían muchas cosas que decir.

Aún tenían mucho de qué hablar.

No podían aceptar separarse. No así.

- llegamos, ahí esta el auto de Namjoon –aviso Hoseok—

En cuanto Hobi dio ese aviso, Seokjin sin pensarlo ni un segundo se bajo del auto corriendo en dirección al auto de Namjoon, con una esperanza vacía de que el estuviera ahí. A pesar de los gritos de los chicos a su espalda, el corrió hacia el auto, para llevarse la gran decepción que de alguna manera ya esperaba. Namjoon no estaba ahí.

- ninguno está aquí –dice Jimin después de revisar todos los autos—

- no pudieron haber ido lejos –dice Seokjin—

- señor Kim –dice uno de los hombres de Taehyung— encontramos esto.

A Taehyung se le paro el corazón cuando le entregaron parte de la camiseta de su novio, la cual estaba llena de sangre.

- Tae...

- ¡vamos! ¡¿Qué hacen ahí parados?! ¡vayan a buscarlos! –ordena Taehyung mientras los hombres con miedo lo obedecen— vamos chicos rápido.

Dijo Taehyung para que todos lo siguieran, realmente estaba aterrado, tenía el corazón muy acelerado, Jungkook tal vez no estaba muerto, pero estaba herido.

- por favor Espérame –susurra Taehyung para sí mismo—

Taehyung estaba muerto de miedo, pero los chicos no eran la excepción. No podían negar que traían el corazón a mil por hora por el solo hecho de pensar en como estaban los chicos, al ver esa sangre solo pudieron imaginar lo peor.

- por favor Yoongi, por favor mantente a salvo –susurra Jimin para sí mismo mientras se agachaba—

- esperen –dice Taehyung mientras prende el auricular de su oreja— ¿los puedes ver? –pregunta por el auricular—

- no señor, no hay señal de ellos.

Taehyung suspiro y volvió a levantarse mientras veía con gran miedo una cuchilla clavada en un árbol, fue por ella y solo la guardo en su bolsillo.

- no saben dónde pueden estar.

- maldición –dice Jin— ¿ahora a dónde?

- no lo sé yo...

Todos se quedaron en shock un momento y en seguida corrieron hacia Jimin cuando escucharon un disparo.

Disparo el cual, le llego directamente en el pecho.