—Podrías haber intentado hacerlo menos obvio— Después de años, estaba en la sala donde tantos problemas me habían discutido.

Realmente aquello me dejaba de importar, así como la poca mala imagen que me había generado. —Bueno, al menos le viene bien a tu regreso— Estaban prácticamente peleando otras personas por mi.

—Hablamos con BoYoung, no le importó realmente que dijeran que ellos dos salían— Indicó el encargado de relaciones de la empresa.

—Es solo un rumor, si no decimos nada y ellos tampoco no debería escalar, no se acercaron en ese evento— Veía como seguían discutiendo.

— ¿Ustedes dos si salen? — Preguntó susurrando una chica nueva, de la que no sabía siquiera su puesto. —Mas o menos— Le susurré en respuesta.

En medio de aquel ajetreo, entró alguien nuevo, llevando una hoja de papel, dándosela al líder de todo el departamento.

Todo se calmó mientras la leía. —Quieren que te presentes en las premiaciones de actores donde estás nominado por popularidad con BoYoung— Dijo en voz alta una vez que leyó bien todo.

—Y ustedes se quejaban— Me levanté, siempre mis primeras y prácticamente últimas palabras en la reunión.

Sin más, salí de allí, yendo a desayunar algo en la cafetería.

Debido al anterior estrés de la junta, simplemente me coloqué un par de los tantos auriculares de presentaciones que hacía, empezando a escuchar música mientras comía.

Debido a la buena supresión de sonido, a duras penas sentía algún paso fuerte de alguien, si es que de por si podía, sorprendiendome y haciendome casi saltar del susto cuando sentí unas manos en mis hombros.

Una vez volteé solo podía ver a una Nayeon muriendo de la risa. —Te intenté saludar, pero no me escuchabas— Dijo una vez me quité los auriculares. — ¿Te regañaron? — Preguntó, sentándome conmigo. Hice un gesto de más o menos.

—No había suficientes razones para regañarme y al final me dieron una presentación en las premiaciones de actores— Expliqué, dando otro bocado a lo que tenía delante.

—Podría haber jurado que saldrías con alguna otra Idol, pero no que saldrías con alguien tan mayor— Reveló su opinión.

— ¿Cuánto piensas que es lo ideal para mí? — Pregunté. — ¿Tu edad como máximo? — Cuestioné, haciéndola pensar un poco.

—Si es un chico masculino con tu edad, si que podría salir con él— Pasó a ponerse en la situación. — ¿Un hombre varonil español de mi edad? — Se lo puse mejor, recordando aquellas series que se había visto, asíntiendo casi inmediatamente.

—Pero trece años... — Empezó a cuestionar la edad entre BoYoung y yo. —Algo le habrá gustado, he visto algunos de sus dramas y ha estado con hombres muy lindos— Ahora había pasado a casi desprestigiarme.

—Te tomas muy personal lo de la edad... — Seguí comiendo, con un poco de molestia por lo de antes. —Refleja la madurez— Respondió a aquello, riéndome yo.

— ¿Qué ves en un espejo normal? — Pregunté, bajando la cuchara. — ¿A mí misma? — Respondió sin entender.

— ¿Y en un espejo polarizado? — Seguí. — ¿Por qué lado? — Cuestionó, a lo que señalé que esa era la cuestión.

— ¿Y en un espejo tintado? — Añadí. — ¿A mí misma más oscura? — Siguió sin entender tanto. — ¿Y en un caleidoscopio? — Volví a preguntar. — ¿Cosas confusas? — Nuevamente, seguía sin entenderlo.

—Tomalo como que todos somos diferentes espejos, lo que he vivido reflaja lo que soy, si solo te vas a simple vista, puedes tomarte con un espejo polarizado que te muestra una cosa y es otra— Finalmente empecé con la analogía mal lograda que estaba pensando.

—Si solo te gustan los espejos de colores no vas a ver bien la realidad— Señalé. —Y si solo vas por los caleidoscopios, suerte caminando mientras ves uno— Volví a tomar la cuchara.

—Si le gusto a BoYoung tendré algo que le guste, tampoco será fácil para ella salir con un chico que tiene trece años menos que ella— Volví a comer finalmente.