Tres semanas después.

Camus cómo todos los días iba al punto de encuentro dónde siempre encontraba a Milo, le tenía una sorpresa cuándo llegó lo vió sentado en una de las ramas más altas del árbol con su vista perdida en el cielo. Así que subió despacio con intenciones de asustarlo un poco, sé acercó lenta y silenciosamente hasta el otro que parecía estar perdido en sus pensamientos y cuando iba a asustarlo lo escucho decir.

Milo: ni siquiera lo intentes - le dijo aún dándole la espalda.

Camus: a... Me gustaba más cuando te agarraba desprevenido - reprochó mientras se sentaba a su lado - ¿Cómo haz estado? - pregunto.

Milo: muy bien gracias ¿Y que tal tú? - pregunto.

Camus: e... No me quejo - aclaró - oye tengo algo que quiero mostrarte - dijo feliz pero antes que siguiera Milo lo detuvo.

Milo: ¿Camus te molestaría dejarlo para mañana? - pregunto mientras él otro lo vió confundido y sorprendido, Milo no era de quedarse con la duda.

Camus: ¿Qué pasá? - pregunto.

Milo: lo siento mucho pero hoy no voy a poder pasar él día contigo, tengo un evento muy importante que no puedo desatender - le explicó.

Camus: ¿Un evento importante? - pregunto a lo que él otro asintió - ¿Puedo saber de qué se trata? - pregunto mientras Milo lo veía.

Milo: aunque quisiera no puedo decírtelo, es algo muy delicado - afirmó con algo de pena.

Camus: entiendo. Sólo permíteme darte algo - pidió mientras Milo lo vio con curiosidad.

Milo: ¿De que se trata? - pregunto mientras vió cómo Camus acercó su rostro al suyo para después verse a los ojos por breves momentos, estaba confundido hasta que lo vió sonreír para después darle un beso en la mejilla haciendolo sonrojarse, cuando él otro se separó sonriendo le dijo.

Camus: se que sonará raro escuchar ésto viniendo de alguien cómo yo, pero quiero que sepas que contarás conmigo siempre sin importar lo que pueda pasarme, juro que voy a defenderte de cualquiera que intenté dañarte. Es una promesa - fue lo que le dijo.

Milo: ¿y éso?, ¿Camus no tienes fiebre? - pregunto mientras tocaba la frente del contrario él cuál río para después tomar sus manos y dejar un beso casto en cada una de ellas para después sonreír e irse dejando a Milo con una gran sonrisa con la cuál se fue.

Camus por su parte al ver que su pequeño amigo se había ido y tener curiosidad por lo que esté tenía que hacer sacó de entre sus cosas un frasco con un líquido de color rosa el cuál bebió.

Horas después.

Con Milo.

Se encontraba viendo a los ojos a su prometido, mientras él también hacia lo mismo delante de ellos se encontraba Aspros, quien recitaba algunos versos de prosperidad y abundante fertilidad para la nueva pareja.

Aspros: Saga es hora de recitar tus votos por favor - pidió él mayor mientras ambos jóvenes continuaban con sus manos agarradas firmemente, él otro exalo él aire que tenía retenido y vio fijamente a los ojos a su compañero.

Saga: Milo, Yo. Me entrego a ti en este día para compartir mí vida contigo. Puedes confiar en mí amor porque es real. Prometo ser un esposo fiel, compartir y apoyarte en tus esperanzas, sueños y metas. Mí voto estará contigo para siempre. Cuando caigas te levantaré, cuando llores te confortaré, cuando rías compartiré contigo tu gozo. Todo lo que soy y todo lo que tengo es tuyo desde este momento hasta la eternidad y prometo siempre luchar a tú lado con mucho amor - fue lo que salió de sus labios, en ese momento Milo sé quedó sorprendido.

Aspros: Milo ahora es tú turno - pidió él mayor mientras sé dirigía al más pequeño que nervioso veía a los ojos a Saga, estaba nervioso y no estaba seguro de que lo estaban haciendo, pero recibió un leve apretón en sus manos para después ver a Saga que sonriendo le susurro.

Saga: tranquilo tú puedes - le animaba él.

Milo: uuf... Muy bien aquí voy - susurro con los ojos cerrados para esta vez con más determinación ver a los ojos a Saga - Saga, Yo. Prometo amarte, honrarte y apreciarte siempre. Prometo permanecer junto a ti en lo bueno y en lo malo. Prometo ser un esposo fiel y amante. Prometo ser él más comprensivo en la enfermedad y la tristeza. Prometo entregarte mi alma, ser tu compañero y tu mejor amigo. Y prometo amarte con toda mí alma y mí corazón por toda la eternidad - fue lo que dijo.

Aspros: muy bien. Ambos lo an hecho excelente chicos, él día de su boda promete ser él más bello de todos - dijo el sonriendo - bueno continuemos con él ensayo. Entonces con esto dicho Saga, ¿Aceptas a Milo cómo tú legítimo esposo? - pregunto.

Saga: Si - afirmó de inmediato.

Aspros: Milo, ¿Aceptas a Saga cómo tú legítimo esposo? - pregunto.

Milo: aceptó - dijo nervioso.

Aspros: bueno, ahora la siguiente pregunta... No la haré porque no sirve de nada. Pero bueno entonces con él poder que se me concede. Yo los declaró casados y fin del ensayó por hoy - dijo para después sólo irse.

Saga y Milo sé soltaron lentamente para después ver a los demás que les ayudaban con él ensayó, quienes eran: Écarlate, él padre de Milo, Asmita la madre de Saga, su gemelo, Shaka, Mu, Seiya, Shion y él tío de Saga Deuteros que se acercó a felicitar al antes mencionado, Milo por su parte fue llamado por su futuro suegro quien lo separó del resto del grupo...

Con Asmita y Milo.

Asmita: ¿Cómo te sientes? - pregunto mientras se sentaba en un tronco secó.

Milo: pues estoy bien, pero creo que no me fue bien en él ensayó de hoy, él tema de la boda me tiene muy estresado por... - Asmita interrumpió.

Asmita: ¿Porque los demonios pueden atacar en ese día? - pregunto mientras Milo lo veía sorprendido.

Milo: Si - respondió.

Asmita: tranquilo es normal estar angustiado, cuando me case con Aspros también estuve nervioso - le dijo riendo.

Milo: ¿Usted nervioso? - pregunto confundido en lo que él otro asentía - pero ¿cómo es eso posible?, Si Usted es un ángel de la muerte - fue lo que pregunto él más pequeño.

Asmita: - rio - escucha Milo. No tienes porque preocuparte por algo, todo saldrá bien te lo prometo - aclaró él.

Milo: ¿Así cómo la boda de Shaka? - pregunto recordando él desastre que fue la boda de su hermano y cuñado.

Asmita: por eso te lo digo, Shaka sé está encargando muy bien de toda la seguridad Milo. Por cierto quería darte algo - le dijo mientras se desprendía un pequeño collar del cuello para después pedirle al más pequeño que se acercará.

Él lo hizo y él mayor puso él collar en su cuello, mientras Milo veía aquello facinado al ver cómo brillaba.

Milo: ¿Que es ésto? - pregunto mientras lo sostenía.

Asmita: es un collar del cielo, esté collar a pasado de generación y generación en mí familia - le dijo sonriendo.

Milo: ¡¿De su familia?! - pregunto sorprendido mientras él otro asentía - ¡No!, Yo no puedo quedarme con él, apenas y mantengo a salvó él de mí madre no puedo señor, es muy bonito gesto de su parte pero... Mejor deselo a Mu el lo cuidará mejor - dijo él.

Asmita: No Milo es tuyo ahora, se que tú lo cuidaras bien, además es tú derecho. Tú eres él que se va a casar con mí hijo mayor así que según la tradición. Tú eres el quien debe llevarlo para después dárselo a la futura pareja de tú hijo mayor - hablo él, mientras Milo suspiró derrotado y dijo.

Milo: está bien, prometo cuidarlo con mí vida - afirmó mientras se iba a sentar al lado del mayor quien lo veía sonriendo, Milo fue sacado de sus pensamientos al escuchar a Asmita decir.

Asmita: a.... Hola. ¿Quién eres tú? - pregunto curioso, Milo dirigió su vista al recién llegado y juraría que se le saldría él corazón al ver a quien tenía enfrente.

Milo: (¡¿Pero que demonios?!) - era lo que se pasaba por la mente del menor que no creía ver aquien tenía enfrente él cuál lo veía sonriendo.

Continuará...