06: Colegas
Si Wattpad te trajo antes a este capítulo, sal de la aplicación y vuelva a entrar que tiene otro antes que este. Espero disfruten de la lectura, un besoo
Capítulo 06
El resto del fin de semana lo pase consolando a Emma, verla destruida hacía que mi corazón se estrujara, y cada vez que recordaba que había sido Nicolás el causante de todo, dolía incluso el doble. Cada vez que tenía algún contacto con mi hermano o yo me iba, o simplemente el bajaba la mirada y se retiraba. Lo qué si tenía bastante claro era que quería estar lo más lejos posible de él.
Ya es lunes.
El despertador suena por toda la habitación, haciendome girar y caer al frío suelo.
-Ay!!! -chillo molesta.
Refunfuñando como un gato, entro al baño, cuando siento algo ser aplastado por mi pie. Cierro los ojos maldiciendo a los dioses y levanto el pie para observar como el popo de Rufus se ha vuelto una torta. Hago una mueca de asco tapandome la nariz, ¡bendita mierda!. Agarro un trozo de papel limpiando la caca y la tiro al cesto del baño. Mojo mi rostro con la intención de eliminar todo rastro de sueño, cepillo mis dientes y entro a la ducha intentando relajar la tensión en mi cuerpo. Ya en la planta baja de la casa, agarro una manzana del frutero y salgo cuando soy detenida por mi madre.
-¿Cariño por qué no esperas a tú hermano? -pregunta. Tenso mis hombros ante la mención de Nicolás. No me apetece tener que ir con él, así que me preparo mebtalmente para fingir que nada sucede.
-No mamá, iré caminando -sonrío de boca cerrada.
-De ninguna manera te irás sola -mamá habla autoritaria y ya me preparo para la orden que saldrá de sus labios -Nico, apresúrate.
Observo a mi hermano bajar la mirada. No es capaz de mirarme a los ojos y eso es lo qué más me molesta. No somos perfectos y todos cometemos errores, más a menudo de lo que creemos, pero no tener valor de alzar la mirada y enfrentar todo como una persona madura, solo demuestra qué eres un maldito cobarde.
-Nova, podemos hablar un segundo -Nico agarra mi antebrazo. Nuestros ojos hacen contacto y como si sus dedos me quemaran me safo de su agarre.
-No. No me toques -gruño.
Diganme odiosa, inmadura y todo lo qué pase por sus mentes pero no daré mi brazo a torcer. Así que observando a mi hermano una última vez, comienzo a caminar con un gran nudo en la garganta.
Me siento tan mal que incluso mi estómago lo sabe. Siento una opresión tan fuerte en el pecho que quema, como una llama ardiente. Nunca he estado tan distante de él, hemos sido muy unidos desde siempre y al estar separados es tan extraño y desconsolador.
"-Nova, mira -un pequeño Nicolás toma en sus pequeñas manitas una tortuga.
-Qué bonita -mi pequeña yo sonríe.
-La vamos a cuidar, así como yo siempre te cuidaré a tí -besa mi mejilla."
Y ese simple recuerdo, hace que comience a llorar. Las lágrimas nublan mi vista y no me doy cuenta que hay alguien delante de mí.
-¿Nova, que sucede? -la voz de Andrés pregunta preocupada.
-An...Andrés -susurro y no puedo evitar las ganas de abrazar a alguien.
Me sorprende, estar abarzada a él. No es mi persona favorita pero ultimamente me ha abrazado cuando más lo he necesitado y ya para mí eso cuenta mucho. No soy una persona de lo qué se puede decir cariñosa, solo muestro mi lado más afectivo con mis amigos y familia y aún así ellos me dicen que soy bastante fría. Así que estar sencible delante de Andrés Sander's me hace sentir débil y no me gusta sentirme así.
-Te abrazaría más tiempo, pero tenemos que ir a clases -susurra sobre mi cabeza.
Una leve sonrisa adorna mis labios y poco a poco me voy separando de su pecho, limpiando mis mejillas aunque sé que será en vano porque debo tener los ojos horriblemente hinchados.
-Tienes razón peliazul -choco su hombro juguetona.
-Awww, un apodo -imita un ridículo puchero.
-Ya no te ilusiones -río -Vamos que se nos hace tarde -hablo caminando.
La caminata me resulta demaciado graciosa. Andrés no deja de hablar tonterías y me hace olvidar toda la situación con Nico por un momento.
-Bueno, fue un placer acompañarla hoy -Andrés hace una reverencia.
-Gracias por...acompañarme y abrazarme -beso su mejilla.
-Wow -se toca donde lo acabo de besar -Ya no tienes ese humor tan característico -ríe y yo lo imito.
Entro al salón y tomo asiento en mi respectivo puesto. No han pasado cinco minutos cuando Emma arrastra la silla a mi lado, retiro los auriculares de mis orejas y la observo abrir un cuaderno y comenzar a dibujar.
-Anda ya, habla -pido quitandome los cascos por segunda vez.
-No tengo nada de qué hablar -responde aún dibujando. Se le olvida que son más años de amistad, que los que tiene Rufus.
-Si claro -hablo irónica -Tú no tienes nada de que hablar y yo detesto a Eminem -él sarcasmo fluye en mi voz.
-¿Viniste con Andrés? -pregunta de repente.
-Sí y antes de que preguntes no me gusta, ni siquiera somos amigos y además quiero mucho a Rod -hablo seria.
-Nov, sobre Rodrigo -arrasca su nuca nerviosa -No sabía si decirte o no pero ya no puedo más -Emma habla y yo solo la puedo observar confundida.
-¿De qué hablas Em? -pregunto un poco nerviosa.
Emma suspira y saca su teléfono celular, entra al Instagranm y lo primero que sale es un post de Rodrigo...pero no está solo. Siento cómo mi corazón se hunde en mi pecho y parpadeo rápidamente para alejar las lágrimas.
Mierda.
Se siente tan mal, qué coño es todo esto, pienso y ahora comienzo a procesarlo todo, por eso no me había llamado, no quería que entrará al Instagranm y estaba tan cortante conmigo, porque simplemente el ya era feliz con otra.
-Nov, no le des mucha importancia....-Emma aprieta mi mano y el profesor interrumpe para comenzar la clase. Logrando que el tema de Rodrigo se cierre por un momento.
A la salida del segundo cambió, voy camino a mi casillero y bufo al ver a Nicolás esperandome.
-¿Qué quieres? -pregunto seca.
-Hablar como hermanos -dice.
-Hablar como hermanos Nico -repito sus palabras -Te estás escuchando, si vale, hablaré contigo cuando regrese mi verdadero hermano. Ese qué me hace reír y observa películas de la Marvel conmigo, el hermano que me defendía cuando se burlaban de mí, el hermano qué me abrazaba cuando había una tormenta, el hermano... -mi voz se rompe -qué prometió cuidarme para siempre -digo y paso por su lado dejándolo con los ojos cristalizados.
Necesitaba decirle todo eso, para que se diera cuenta del daño que me había causado su actitud. Silenciosa y distraída me siento con las rodillas pegdas al pecho, a pensar, a llorar por todo. Por la mierda de actitud de Nico, por el engaño de Rodrigo, por simplemente ser tan estúpida. Dejo qué la voz de Adele se adentre a mi mente, desconectandome de absolutamente todo.
N/A
Hola corazoncitos:)
Lamento la demora con el capítulo pero es que está haciendo un calor en Cuba de puta madre y me daba pereza levantarme de la cama, lo sé soy una floja.
Pero bueno
Ya estoy aquí otra vez. Juro que lloré con este capítulo, dios. Espero que les haya gustado. No olviden votar y comentar.
Abrazitos.
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