Era un nuevo día en Italia.
Dentro de la mansión Varia, el líder del equipo estaba despertándose para un nuevo día de trabajo.
Acomodó sus cabellos de la forma en que siempre usaba, con esas plumas y cola de animal colgando.
Nadie sabía el por qué usaba eso en su cabello, bueno, excepto el viejo pero le hizo prometer que no diría nada.
Luego de terminar de vestirse salió rumbo al comedor donde le esperaba un banquete para él solo, ya que los demás integrantes del equipo estaban en misiones.
Al sentarse, notó que en las sillas que correspondían a esas basuras tenían cada uno un paquete.
Luego de comer decidió revisarlos todos.
Desde Squalo hasta Belphegor le habían regalado algo.
Incluso había dos extras, uno de Mammon y otro del niño llamado Fran.
Eso último le sorprendió mas no lo demostró.
Un vago recuerdo de su qniñes apareció.
En este se mostraba a los tres tontos que tuvo de hermanos, regalándole cada uno los accesorios que él llevaba en su cabello.

-Esas Basuras… - dice suspirando y con una pequeña, pero muy pequeña sonrisa.
Luego de pedirle a una mucama que llevara todo eso a su habitación.
Fue rumbo a su oficina donde se encontró con un presente del viejo y otro más.
Uno envuelto en un simple papel rojo.
Con una pequeña carta, esta decía:

"Tal vez la quemes, pero feliz cumpleaños Xanxus.

Atten: Sawada Tsunayoshi"

-Incluso esa basurita-dice dejando de lado el papel y luego procede a realizar su trabajo.
Ya más tarde tendría tiempo para "agradecerles" a esas basuras el que se allan tomado la molestia de felicitarlo.

Después de todo…

A pesar de que no lo diga.

Estaba agradecido.