Erick

Veo como Joel presta atención a clase por lo cuál trato de no mirarlo, aunque sé que cada tanto me observa.

Nos mantenemos callados, hasta que el profesor dice que debemos hacer un trabajo en equipo, por lo cual ninguno de los dos se niega.

Me dice que sabe hacer el ejercicio, a lo cual yo también le digo lo mismo, solo que hay una parte que no entiendo. No demora en ponerse a explicarme cómo se hace, y luego de cuatro verificaciones decido entregárselo al profesor.

Su celular que está encima de la mesa vibra, y la pantalla se enciende, logro divisar el rostro de Yoyo, por lo cual mi corazón se acelera.

—Es mi novio —Escucho que dice, asiento abriendo la boca sorprendido, tratando de ocultar lo que verdaderamente pasa por mi mente.

—Y es mi amigo —Agrego, él asiente y se genera un ambiente un tanto incómodo entre ambos, o al menos eso noto yo.

A Joel le gustan los chicos, y es novio de mi amigo. No entiendo el por qué tengo ganas de salir llorando de aquel salón, no sé por qué todo me termina recordando a Nick.

Quisiera que él estuviera aquí.

Le doy una última sonrisa antes de intentar salir del salón al tocar el timbre, pero me frena tocando mi mano, aunque se retracta en segundos.

—Oye, espera —Es lo que oigo que dice mientras hace lo anterior.

—¿Sí? —Pregunto sonriéndole un poco, pero solamente quiero salir de allí lo más rápido posible.

—No m-e dijiste tu nombre —Tartamudea un poco, puedo notar que se encuentra un tanto nervioso, lo noto por el tono de su voz.

—Erick —Digo, y pregunto lo siguiente aunque ya lo sé por el hecho de que escuché cuando el profesor lo había llamado por su nombre—. ¿Y tú?

—Joel... Joel Pimentel —Dice, asiento con la cabeza y le dedico una última sonrisa antes de agregar y salir de allí.

—Joel, me gusta, lindo nombre.

Camino velozmente por el pasillo del instituto sintiendo pequeñas lágrimas salir por mis ojos. No entiendo por qué esto me duele tanto.

Siento un dolor en mi cabeza y puedo notar que todo comienza a dar vueltas, pero decido ignorarlo y me meto lo más rápido posible al baño de hombres.

Al entrar, puedo notar que no hay nadie más, y las ganas de vomitar se adueñan de mí.

Corro hacia el inodoro y hago lo que quería hacer, sigo llorando silenciosamente.

Es como tenerlo a él, pero al mismo tiempo no.

Escucho que la puerta del baño se abre y cierro la del cubículo, esperando a que la persona haya entrado se vaya.

Oculto mi rostro con la palma de mis manos sintiendo aún las lágrimas caer por mis mejillas, y en comienzo a sentir el aire faltar.

Todo sigue girando, e intento mantener la calma, pero no lo logro.

Estoy teniendo un ataque de pánico.

Siento como todo sigue girando, y mis manos transpiran, mi corazón late velozmente y aunque intento calmarme no lo logro.

Comienzo a toser intentando recuperar el aire, pero se me vuelve un tanto imposible.

Alguien golpea la puerta del cubículo, e intento decir algo pero no lo logro, lo único que se escucha de mí es mi respiración acelerada.

Muevo un poco la perilla de la puerta del cubículo, y la misma se abre, dejando ver a Joel, quien se encuentra confundido por la escena.

No demora en intentar ayudarme, pero sigo respirando con dificultad

—Erick, trata de respirar —Dice, aunque su voz se encuentra lejana.

—Tengo miedo a morir —Susurro entre lágrimas.

—Erick, no vas a morir —Dice haciendo que lo mire—. Intenta respirar.

Me cuesta pero intento hacerlo, en cuestión de segundos veo que alguien más entra al baño y Chris —quien ya sabía de estos ataques—. Intenta ayudarme.

Demora aproximadamente tres minutos en regresar todo a la normalidad.

Mi corazón aún sigue un poco acelerado, pero las lágrimas parecen haber cesado. Joel se mantiene parado mientras Chris se mantiene sentado a mi lado esperando a que le diga que ya me encuentro mejor para ayudarme a levantarme.

Los ataques de pánico comenzaron hace dos años, al mismo tiempo que tuve que tratarme por depresión.

El hecho de que Nick haya muerto en mis brazos me llevó al vacío, tuve que tomar miles de medicamentos para calmarme. Hubo muchas noches en las cuales me despertaba con la sensación de estar a punto de morir, y que el oxígeno me hacía falta.

Hacía ya tiempo que no tenía uno, unos meses atrás, y pensé que acabarían, pero ahora parece que estan volviendo otra vez.

Mi mente va hacia todos los medicamentos que debía de tomar, antidepresivos, y otras cosas más. Recuerdo también todas las charlas con el psicólogo a cerca del tema de Nick, pero nunca logró sacarme la suficiente información.

No quiero hablar a cerca del tema con nadie.

—Fue un ataque de pánico —Escucho que dice Chris, asiento sintiendo una última lágrima—. Será mejor que vayamos a la enfermería.

Me ayuda a levantarme y cuando vamos a pasar por al lado de Joel el chico intenta decir algo, pero las palabras no salen de su boca. Sé que lo confundiré con lo que le diré, pero simplemente se lo digo.

—¿Por qué te pareces tanto a él? —Susurro, Joel abre los ojos sorprendido y Chris me ayuda a irme de aquel baño dejándolo completamente solo.

Una sensación de miedo comienza a crecer en mí, miedo a acercarme a él y que vuelva a tener otro ataque similar.

Miedo a estar cerca de Joel.

Estuve un buen momento buscando información a cerca de los ataques de pánico, los trastornos, y esas cosas.

Si encuentran que algo no tiene sentido, es porque soy nuevo en esto de usar enfermedades y me gusta usarlas a mi antojo ¿?

Espero que les haya gustado ♡