🌙Aullidos de Amor🌙

Capitulo 26

Naruto no se movió de su lado.

Ni siquiera cuando más lobos llegaron, ni cuando sus machos empezaron a moverse para limpiar el desastre que habían hecho con los renegados. Él podía sentir a Neji cerca, en su forma de lobo aún.

Una vez que el último lobo había expirado su último aliento, él se había transformado para acercarse a Hinata. Él observó, con impotencia, como el cambio había empezado. Esos bastardos la habían mordido, mezclando su sangre con la de ella. Él no podía detener el cambio, no podía revertirlo, no podía salvarla...

Sólo quedaba esperar. Los segundos se transformaron en minutos, los minutos en horas y las horas pasaron tan lentamente.

Escuchó voces no muy lejos, pero no apartó la mirada de Hinata, sentado sobre sus talones, desnudo, y sólo observando su rostro retorcerse de dolor. Sus puños se mantenían apretados sobre sus rodillas mientras notaba como sus facciones se arrugaban con muecas de intenso sufrimiento. Podía escuchar a su lobo gemir por ella en su interior.

Naruto fue consciente de como calor brillante llegó a ellos, la fogata que habían armado sus machos cerca de Hinata sólo le hacía sentir peor. Así podía observar más detenidamente sus facciones. Él alargó un brazo cuando todo el cuerpo femenino se tensó y tomó su pequeña mano caliente. La fiebre sólo crecía, sin importar que estuvieran en la interperie y aún siguiera cayendo esa agua nieve.

Él escuchaba la conversación que estaban teniendo sus machos no muy lejos de allí, pero no se alejaría de Hinata sin importar qué.

— Aguanta..— le pidió en un susurro profundo—. Pelea..— le exigió.

El cambio se había prohibido hacia mucho tiempo, no era algo seguro. La supervivencia del mordido dependía mucho de sus ganas de sobrevivir. El ADN del lobo pelearía con el ADN humano, sólo había dos posibilidades...

Si el ADN humano era débil, el lobo destruiría todo a su paso. No dejaría nada humano en su camino, matando a la persona. Si el ADN lobo no podía vencer al humano, allí ocurría el cambio, pero sólo sería el inicio de un largo camino. Pero Naruto aún no quería pensar en lo que seguía, estaba más preocupado que Hinata ganará la pelea con el ADN lobo.

Desgraciadamente ella había sido mordida por un Alfa, eso lo ponia peor. El ADN Alfa era más fuerte que los demás, pelearía con desesperación por comer todas las células humanas. El temor por la hembra tenía fundamento. Ya para un macho completamente humano sería difícil pelear con ese ADN, pero para una hembra... Las posibilidades de vivir eran tan bajas que Naruto temía lo peor...

Pero había conocido a Hinata, ella no era una hembra débil...

Ella debía pelear...

Hacia frío..

Estaba tan oscuro...

Hinata peleó por abrir los ojos, pero sólo la oscuridad profunda era lo único que le rodeaba. El dolor no existía, pero tampoco sentía su cuerpo. Era consciente, podía pensar y preguntarse adónde estaba, pero no podía hacer nada más. Ella se sentía como un ente, una fuerza de consciencia sin cuerpo.

—¿Dónde estoy?— murmuró bajo, pero su voz sonó más fuerte de lo que había esperado, con un leve eco que le respondía—. ¿Hola?— volvió a hablar.

Extrañamente, no tenía miedo, ningún sentimiento le llegó y se preguntó si ya estaba muerta. ¿Esa no era la creencia? Una paz que no la perturbaba... Sólo tenía frío, ella se habría estremecido si hubiera podido.

Un sonido llegó desde algún lugar de la oscuridad, un especie de gruñido. Hinata buscó, pero sólo había oscuridad, hasta que lo vió. No muy lejos vislumbró brillantes ojos mirarla directamente.

—¿Hola?— llamó.

— Humana..— gruñó

Naruto se puso la camiseta sobre la cabeza justo cuando Hinata se agitó. Su cuerpo se arqueó hacia arriba, sus dedos se clavaron en la tierra, sus talones empujaron el suelo, mientras su columna se arqueaba hacia arriba. Su cabeza golpeó contra el suelo varias veces mientras gritaba del dolor, su alarido perforaba la silenciosa noche.

Él se lanzó sobre ella.

Colocó su brazo bajo su cabeza, rodeando su pecho con el otro, uso sus piernas para tomar sus agitadas extremidades inferiores, peleando contra la convulsión. Gruñó mientras ella peleaba contra él, tuvo que usar mucha más fuerza de la que había pensado, para evitar que se lastimara más contra el suelo. Sus ojos se quedaron clavados en su rostro pálido, un profundo y aterrador gruñido se escapó de sus dientes apretados cuando vió líquido caliente y oscuro bajar por su nariz.

— Pelea mí Luna, no dejes que gane—, gruñó cerca de su oído mientras ella seguía tensa en esa extraña posición.

— Deberíamos moverla, Naruto.

Él no necesitaba levantar la mirada para saber que Kakashi había hablado.

— Es demasiado peligroso—, contestó sin apartar sus ojos de la expresión adolorida de la hembra.

— Debemos llevarla a un ambiente controlado, Naruto. Corre más peligro si su olor llega a algún renegado más.

La convulsión pareció haber pasado, ya que su cuerpo empezó poco a poco a bajar de esa extraña posición, hasta que terminó plana en el suelo de nuevo. Naruto uso el brazo que tenía sobre su cuerpo para levantar sus dedos para limpiar la sangre fresca de su nariz. Llevó el dedo a su lengua y lo probó.

Gruñó, levantó la cabeza para ver a Kakashi.

— Su sabor está cambiando.

Kakashi frunció el ceño y se movió para ir hacia los pies de Hinata, se agachó y Naruto sacó una de las piernas con que la había sostenido. Él tomó su pierna lastimada y rajó la endeble tela, observando la herida. Gruñó mientras levantaba la mirada hacia el rubio.

— La mordida ya está cerrada. Él cambio está empezando.

Naruto sonrió, no pudo evitarlo. Pero no duro mucho tiempo, ella se volvió a agitar, está vez tan fuerte que casi lo vuelca hacia un lado. Tuvo que ponerse sobre Hinata para evitar que se golpeara cuando subía y bajaba. Puso sus brazos como almohadas bajo la cabeza de la hembra, abrazándola contra su pecho. Esa convulsión no duro mucho, pronto ella quedó inerte en el suelo, sólo respirando.

Naruto sacó su rostro del cuello de Hinata y levantó la cabeza para ver su expresión.

Bien, su ADN humano había ganado, el cambio había iniciado...

Pero ahora tendría otra pelea...

¿Quién ganaría el control de su mente? ¿Hinata o el Lobo?

Continuará...