Geno limpiaba su cuerpo en la regadera de una simple y algo triste habitación de un motel, acababa de terminar de atender a un cliente y debía estar listo para el próximo, no tenía tiempo de descansar, su tiempo se agotaba y debía dedicar sus últimos días a ahorrar suficiente dinero para dejárselo a sus hermanos, antes de su inevitable final.

Los resultados acerca de su enfermedad no eran nada alentadores, su nuevo médico le informo que su cáncer ya estaba en la etapa tres, estaba muy avanzado y no había nada que se pudiera hacer por él, le quedaba como máximo 2 años de vida, pero si seguía el tratamiento podrían extender su vida un año más, eso claro si no moría por el propio tratamiento, algo que no era para nada alentador.

Pero algo lo tranquilizo de cierta manera, si lograba resistir hasta que Error cumpliera la mayoría de edad Fresh no quedaría solo y a merced de los servicios sociales, ahora solo debía dedicar su tiempo a ahorrar suficiente dinero para que puedan mantenerse cuando él ya no este. La universidad ya no era una opción, ni tampoco el costoso tratamiento.

De día trabajaba como guardia de seguridad y de noche en un almacen embalando cajas, atrás quedaron los días que soñaba formar su propia empresa y darles a sus hermanos una vida cómoda y sin necesidades, atrás quedaron sus sueños, atrás quedaron todas sus esperanzas.

Más pronto que tarde se percató que no podría cumplir con ambos trabajos, su cuerpo se debilitada cada vez más y más, al final fue despedido de ambos trabajos por sus faltas y bajo desempeño, las cosas en su casa tampoco no marchaban bien, sus hermanos no eran nada colaboradores, tal vez las cosas hubieran sido distintas si hubieran sabido la delicada situación en la que se encontraba Geno, pero este decidió callar, no quería que sus hermanos pasaran por la angustia de saber que moriría, no quería preocuparlos, sabía que tarde o temprano tendría que decírselos, pero no tenía el valor.

Un amigo suyo de la universidad se puso en contacto con él, le sorprendía que alguien tan dedicado hubiera dejado los estudios, pero Geno no quería que nadie se enterara de su situación, no quería que otro ser cargara con ese pesar, así que simplemente le dijo que necesitaba mucho dinero para buscar a su madre, que por lo que pudo averiguar estaba atrapada en una sexta religiosa que la obligaba a trabajar en el campo y solo podía comer soya, un verdadero infierno.

Aquello no era mentira, su madre estaba en verdaderos aprietos, pero Geno podía hacer algo por ella, sus hermanos eran su prioridad ahora. Aquel amigo, al ver su situación le hizo una propuesta, él sabía cómo podría obtener mucho dinero en poco tiempo y no requería demasiado esfuerzo, la propuesta de inmediato llamo la atención de Geno.

A los pocos días fue contactado por un tipo extremadamente “simpático” que le explico en qué consistía el trabajo, al principio Geno se asustó, pero no veía otra solución, era lo único que podía hacer para asegurar el futuro de sus hermanos.

Debido a ese “Trabajo” ahora tenía que mudarse al siguiente pueblo, además igual pronto tendrían que mudarse ya que no tenían dinero para pagar el alquiler. Error era como cualquier otro adolescente de 16 años, egoísta y egocentrista, algo de lo más natural a esa edad, mientras que Fresh con tan solo 8 años solo se dejaba llevar, en realidad no le importaba mucho tener que mudarse, pero sí que su nuevo hogar fuera un lugar de una sola habitación.

Geno tenía que viajar dos horas todos los días de su nueva casa hasta el siguiente pueblo, no quería que sus hermanos se enteraran de lo que haría a partir de ahora para mantenerlos, todo debía ser un secreto, un secreto que moriría con él.

Y ahí estaba Geno ahora, sentado sobre la cama de ese cuartucho, esperando a su próximo cliente al que complacería con su cuerpo por unas cuantas monedas de oro, afortunadamente siempre lograba llegar a su cuota.

El siguiente era un cliente regular, un hombre de negocios con gran influencia en ese pueblito, pero totalmente cruel a la hora de la intimidad, lo único bueno es que siempre pagaba un extra por satisfacer sus caprichos y fantasías SM.

Geno: Bienvenido Sr. Fell.

Edge: Hola cariño~ ¿Me extrañaste?

Geno: Claro que sí. Usted sabe que es mi cliente favorito.

Edge: Hoy he traído a un amigo.

Geno: Por mi está bien, pero sabe que es algo adicional~

Edge: ¿No me harás un descuento? Soy tu cliente favorito.

Geno: Me encantaría, pero sabe que no es posible…

Edge: No te preocupes, yo solo vine a traerlo para presentarlos. Venga hombre, acércate para que lo mires bien ¿No es tal como te dije?

Geno miro aterrado a aquel hombre, sabía muy bien quien era, era el mismo que en el pasado no dejaba de acosarlo y al que le entrego su primera vez… había sido descubierto…

Geno: ¿S-señor?

Reaper: Solo llámame Reaper “cariño~”.