Capítulo dedicado a la Señora Moon: dos peticiones seguidas, me tienes a tus pies preciosa, disfruta 🥰

-Hyung- llamó por tercera vez Taehyung, más su mayor no se inmutó, continuaba enfrascado en los turbios pensamientos que le generaba la delicada chica que desde hace dos meses formaba parte del staff.

Les prohiben tener cualquier tipo de relación con las personas que los asisten pero contratan bellezas como ella, pensaba con recelo el mayor.

Se supone que no debía mirarla de la madera que lo hacía, pero también se supone que esta debía colocarse un protector si iba a usar falda.

O que no debía prácticamente sentarse en su regazo para maquillarlo, él lo disfrutaba, eso era seguro, pero ese jueguito que la menor había iniciado lo tenía fuera de sí, a tal punto de que se había quedado mirando al vacío mientras pensaba en esas regordetas piernas por las que deseaba ser rodeado, cuando debía prestar atención a la junta de planeación en la que estaba.

-SeokJin- llamó Yoongi y este dirigió su mirada de la nada hacia el.

-¿Si?- ni siquiera sabía de que hablaban.

-Que la junta terminó, si quieres ir a cenar con nosotros- habló el segundo más joven.

-Ó a un bar con nosotros- habló el segundo mayor.

-Bar- este no tenía hambre pero se marcharía luego de unos tragos si se le abría el apetito, aunque tampoco le apetecía tomar.

Fueron directamente al lugar, no tenían ánimos de ir a cambiarse, además de que si Yoongi se veía en su cuarto era capaz de dormirse y dejarlos esperando en la sala, ya había pasado, más de una vez de hecho.

SeokJin quien se había ido en su auto dijo que los vería allá, odiaba que le pidieran que dejara su bebé en un estacionamiento cualquiera  si él no estaba cerca, además de que pasaban de las 9 y tenía planes de no beber más de una cerveza.

Condujo hasta el lugar establecido, un nada prestigioso lugar pero era discreto y servían buenos tragos.

Se sorprendió al ver a la joven que lo tenía en las nubes desde que la vio enfrascada en una minifalda.

Esta apenas ida a entrar, sola.

El mayor detuvo el auto frente a ella y esta se detuvo para mirar el vehículo, sin duda esa máquina era un deleite, cuando este  bajó el cristal la joven sonrió, tampoco era que alguien más que Kim Seokjin fuera poseedor de dicha belleza.

La joven iba enfrascada en una pequeña vestido rosa de tirantes, era una tela semejante al satin y tacones estilo gladiador casi hasta las rodillas.

La recorrió entera.

-Hola- su mirada se había detenido en la parte superior de su cuerpo, no traía sostén.

-Hola, no sabía que frecuentara estos lugares- el mayor asintió y mordió su labio cuando la joven le dedicó una coqueta mirada.

-Seguro no está muy entretenido dentro, ahora se me apetece hacer algo más. ¿Me acompañas o ya habías quedado?- negó -¿Lo primero o lo segundo?- rio divertido.

-Voy con usted

El mayor ensanchó aún más su sonrisa y la vio subir al coche, sus piernas se veían aún más apetecibles esa noche.

El camino fue silencioso, una pensando en cómo su salida con una amiga se había convertido en la posible mejor noche de su vida y el otro deseando llegar ya para así evitar  estacionar en cualquier lugar para sentar esas maravillosas piernas sobre el.

La joven estaba excitada y eso lo rojo de su rostro lo dejaba en evidencia, otra cosa que no notaba aún era que sus pezones estaban erectos, el mayor si lo notó.

-¿Tienes frio?- inquirió, pero sabía que no era así, solo deseaba ver si era tan osada como creía, de ser así se divertiría mucho domándola y poniéndola como cachorrita por un orgasmo.

Pocos sabían que detrás de ese bello y angelical rostro y esa actitud relajada se hallaba todo un macho alfa que disfrutaba de ver suplicar por placer.

La menor negó y este sonrió cuando le preguntó porqué, señaló sus pechos y esta llevó su mirada a lo que había indicado.

No logró siquiera inventar alguna excusa ya que la mano traviesa del mayor se posicionó en su pierna.

La deslizaba de arriba a abajo fingiendo ignorancia de la penetrante mirada que le regalaba la más joven, adentró esta un poco más y la pálida chica abrió más las piernas.

Creía que sería peligroso hacer eso mientras este conducía pero le exitaba  la idea. El mayor tocó su ropa interior, esa que se había colocado con la intención de tener sexo para calmar las ganas que le tenía al Idol, jamás pensó que quien la vería sería precisamente el.

Jugueteó un poco con el elástico y esta solo se abría más de piernas pidiendo así ser tocada, -¿Me las regalas?- pidió rosando peligrosamente su mano por sobre la tela, justo en su hendidura.

El mayor retiró su mano para cambiar las velocidades y la chica aprovechó para levantar un poco el trasero y deslizar tan fina prenda por sus piernas.

El mayor tendió su mano y las guardó en su bolsillo, la idea de ser tocada hasta el orgasmo mientras esté conducía quedó en el olvido cuando este se adentró en un subterráneo, había llegado a su edificio.

-Todo es más discreto aquí- dijo este sabiendo que la menor pensó irían a un hotel.

Se bajaron del coche y adentraron al ascensor, las veces que usaba su piso era para sus travesuras y esta vez tenía pensado pecar en grande contra las reglas de su empresa.

-Ponte cómoda preciosa- dijo apenas entraron
-No te quites esas- señalo sus zapatos y se adentró a su cuarto dejándola en la sala con un gran signo de interrogación en el rostro.

Esta pensaba que apenas entraran al lugar este se abalanzaría sobre ella, pero este se veía cada vez más calmado, lo que esta no sabía es que al mayor le gustaba jugar con su comida.

Se paseó por el recibidor y observó cada cosa, la cocina de este era una verdadera obra maestra, los tonos cálidos que decoraban el lugar podrían hacer creer que este pertenecía a una mujer, pero no era así. Sabía los delicados gustos que él mayor poseía.

Una fotografía llamó su atención y se inclinó para verla mejor, cuando el frío aire del lugar se hizo sentir justo en la descubierta piel de su trasero recordó que no llevaba nada aparte de ese pequeño vestido.

Corrigió su posición.

-Lastima, eran maravillosas las vistas- habló el mayor, habia salido de la ducha, llevaba una bata alrededor de su cuerpo dejando solo un pequeño troso de la piel de su pecho al descubierto.

El mayor notó la descarada mirada que le regaló la menor y tiró del lazo que lo cubría, quedando así con su pecho y hombría totalmente al descubierto.

La menor sintió su entrepierna palpitar de deseo más no se movió, los ojos severos del mayor le dejaron en claro la clase de hombre que era en el sexo.

Dominante, notaba  por todas partes, su porte, actitud totalmente diferente a la que acostumbra mostrar cuando está en otro tipo de compañía y ese actuar en el auto, cada una de sus actitudes fueron observadas por la más joven.

Señaló el suelo con su dedo y está se arrodilló.

Sonrió.

Disfrutaría esto.

Caminó hacia ella, se detuvo dejando su polla justo frente a su cara -Chúpala- la miraba desde arriba con soberbia.

La menor estaba tan exitada que podría jurar ella disfrutaría más que él lo que venía a continuación.

Lo metió a su boca con devoción, mientras miraba tremenda hombría, paseó su lengua por la punta y cuando intentó llevar sus manos al tronco para ayudarse con estas el mayor la hizo mirarla.

Negó

-Esa boquita puede sola, ¿a que si?- asintió como pudo y continuó con su labor.

No pudo resistirse al deseo que sentía y tocó ella misma sus senos, estaban duros y grandes por los deseosa que se encontraba.

Y tal era que el perdió la noción del tiempo que llevaba en su labor, el mayor se vertió en su boca dejando escapar un gruñido de placer.

Esta lo bebió

Tomó tanto de él que un poco alcanzó a derramar hasta su barbilla, el mayor se inclinó, acercó su dedo a la antes mencionada y adentró lo que se había escapado haciendo que bebiera todo.

Amarró su bata nuevamente y tomó asiento -Ven aquí pequeña- esta se acercó como solía hacerlo cuando maquillaba ese hermoso hombre. -Ábrelas- abrió las piernas y este adentró una de las suyas  para dejarla estratégicamente entre ellas.

Inmiscuyó una de sus manos y deslizó tres dedos por su mojada hendidura, estaba literalmente goteando, justo como le gustan.

Se preguntaba si era capaz de obtener un squis solo para el.

Adentró dos dedos en su interior mientras que su palma hacía presión en su exterior, la menor jadeó.

No movía sus dedos

Movía su mano y eso hacía que rosara deliciosamente con su clitoris.

El teléfono sonó

El mayor lo había dejado en el recibidor antes de adentrarse al baño, estaba justo a su lado, la menor trató de alejarse cuando lo vio con intenciones de responder.

Este la miró severamente y se quedó en su sitió recibiendo placer.

-Si- adentró un tercer dedo y la miró con malicia.

-Ahh, ya veo- sonrió, y con su pulgar comenzó a trazar círculos contra su clitoris

-No iré- la menor tomó sus anchos y fuertes hombros para sostenerse de algo. Este continuó en lo suyo.

Y gimió

Gimió tan escandalosamente que hubo un silencio a través de la línea, Jimin quien llamaba y había sido plantado junto con Hoseok y Yoongi se quedó estático por lo escuchado. -Creo que notaste el porque Jiminssi- dijo burlonamente para luego cerrar.

La joven se encontraba a penas recuperando la respiración cuando este se puso de pie, la cargó cobre su hombro y golpeó su trasero.

La llevaría a su habitación, debía enseñarle modales.

Lanzó su cuerpo contra  la cama y se dirigió a sus gavetas, unas esposas rosas y felpudas sacó del lugar, le gustaban estas, no lastimarían sus muñecas y la mantendrían tan quieta que lloraría por placer.

Cuando se volvió hacia ella con intención de arrancar el vestido de su cuerpo la encontró ya desnuda sobre la cama, sonrió y quitó su bata.

Tomó las esposas y las colocó en las manos de la más joven, luego las sujeto con cadenas del cabezal, se alejó nueva vez.

Regresó con unas igual solo que para los pies, las colocó y de igual forma sujeto colocándolas lo más abiertas que le fue posible.

Sonrió

-¿Sabes?, quería ser bueno- se hincó frente a ella -Pero, pequeña ¿Porque terminaste sin mi permiso?- la menor tembló, no porque lo que dijo le generaba miedo, sino porque mientras hablaba este recorría su cuerpo con sus dedos. -¿Lo disfrutaste?- este se refería claramente al orgasmo antes vivido. La menor asintió- Espero que si, será el único que tendrás en toda la noche.

Hundió su cara en su húmedo y más que dispuesto coño, esta no tenía como reaccionar a lo que sentía.

El Idol era un dios con la lengua.

Los gruñidos de placer que este emitía la hacían palpitar aún más, estaba tan cerca.

Cerró los ojos y se relajó

El mayor se había alejado.

Cuando esta hubo recuperado la respiración volvió a lo suyo, chupó su clitoris con devoción y amasó sus tetas con posesión.

Los dedos de la joven se irguieron y este se separó, estaba frustrada y exitada a partes iguales.

Lo vio sonreír y lamer su labio recogiendo la humedad de la menor de su boca.

Este volvió a lo suyo, o al menos eso trató.

Apenas había acercado su rostro a su entrepierna y la joven había acabado estrepitosamente en su cara.

Lo había empapado.

Y esa acción merecía recompensa

Se levantó dejando a la mujer al punto de convulsionar por el aparatoso orgasmo obtenido, tomó un condon en sus manos y luego de colocárselo tomó unas pequeñas lleves.

Desató sus pies.

La joven maquillista flexionó sus rodillas buscando sosiego pero lo siguiente en sentir fue su cara ser embestida contra el colchón.

El Idol tomó su cadera y la levantó. Entró en ella apenas se acercó a ese hermoso trasero.

Golpeaba su pelvis contra el coño de la menor habiendo un obseso ruido al ambas pieles húmedas fundirse.

Su pecho fue plantada al colchón por una de las manos del mayor, dejándola así más expuesta de lo que ya estaba.

Llevó su mano al clitoris de la más joven cuando se sintió a punto y lo tocó, quería saber  lo bien que se sentía ser aprisionado por ella.

Y valla que lo hizo.

Esas fogosas eran las portadoras de los coños más adictivos para el, húmedos y apretados cuando lograban el orgasmo, así le gustaban.

Acabaron ambos a la vez con tal deseo que la piel tersa del cuello de la más joven fue mordida por el Idol con fervor.

Definitivamente una bastante noche cálida.

Coman salchicha y luego beban agüita
😮‍💨
No olviden pedir 😉
😌Sexy hombre de hombros anchos me tienes de rodillas 🥵

.