Amor en la cocina KTH
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-Pasta de la casa chef- otra maldita pasta de la casa, solo eso sabe pedir la maldita, con su sonrisita idiota, se cree que no se que lo hace porque fue él quien creó la receta, perra idiota.
Amo cocinar, si así no fuera no habría estudiado artes culinarias, lo que odio es que lleguen clientes media hora antes del cierre y más aún si ese cliente es la amiguita encaprichada con tu novio.
Y ahí estaba el imbecil, porque hoy, precisamente hoy tenía que faltar Sara al restaurante así que como es tan multifacético el idiota está de camarero, la maldita tendrá barra libre para coquetearle mientras a mí se me fríe el cerebro en esta cocina.
Primero nos hace discutir, y ahora se aparece aquí a comer, sola, es que tiene que ser adrede, porque coincidencia lo dudo.
Apuesto los huevos de mi cocina a que le pedirá que la lleve a su casa luego de cerrar, porque para que sino se apareció aquí media hora antes del cierre.
..
La estufa fue apagada y las ultimas ollas limpias colocadas sobre la mesa, ¿mi idea de arreglar las cosas con el?, por el caño.
Que se valla con su amiguita.
-Hablemos Mi So- este se encontraba detrás del la puerta de servicio al parecer en mi espera ya que no quedaba nadie más dentro.
-¿Sobre?
-Sabes bien sobre qué, no puedes ser infantil- idiota, no lo soy, es que la maldita anda rondándole como mosca muerta.
-Estoy cansada Taehyung, hoy tuvimos más comensales que de costumbre, faltaron varios compañeros y no estoy de ánimos.
-Vamos juntos a tu casa entonces, llevamos una semana peleados- era cierto, pero mi culpa no era.
-Oppa- perra -Te esperaba, Ohh hola Mi
-Hola- me contenía para no golpearla, apenas llegó y ya está anclada al brazo de mi novio.
-Siempre hueles a comida, tan trabajadora, me encanta- zorra
-Los dejo, debo ir a descansar
-Pero no te vallas, Oppa puede dejarte antes de llevarme a mi, ¿verdad?- encima me ofrece a mi novio para que me lleve
-De hecho, no vine en mi auto, y dormiré en casa de Mi So- su mirada está puesta en mi, ¿como si eso arreglara todo lo pasado?
-Ohh, ¿como me iré entonces?- llama un taxi para perras regaladas
-Te llamaré un taxi- dijo este para luego alejarse y realizar la acción.
-Tienes mucha suerte, es tan buen novio, por eso aún estoy soltera no aceptaré menos que alguien perfecto, te envidio, pero es de la buena- comenzó a reír como una idiota. -¿Siguen peleados?, no deberían, solo somos amigos Mi, no deberías ser tan celosa- Son solo amigos porque el así lo quiere, - Le dije que debíamos alejarnos para que tengas más confianza, -hizo una pausa, -para que veas que no te guardo rencor.
-Buenas noches Tara- di media vuelta y me dirigí al estacionamiento, ni siquiera se porque aguanto todo esto.
Estoy demasiado harta de esto.
-Te pedí esperarme Mi So- Taehyung llegó a mi lado cuando estaba por subirme a mi coche.
-Trajiste el tuyo Taehyung, lo vi en su lugar
-Pero iremos en el tuyo, hablaremos y arreglaremos las cosas y dormiré allá.
-¿No deberías esperar a saber si tu amiga llegó bien a casa?
-Ya se fue y dije que hablaríamos, ambos
-Pensé que era de tres la relación- tomó las lleves de mis manos y antes de poder protestar se subió tras el volante.
El camino fue silencioso y abrumador, me sentía mal por tratarlo así, pero el culpable de todo esto es el, bebió ponerle un alto hace años.
Primero fueron esas bromitas sobre mi físico, luego consejos que nadie le pidió, salidas de tres porque según ella estaba triste porque su cita la plantaba, y cuando vine a darme cuenta la encontré en el departamento de mi novio esperándolo para ver películas porque estaba aburrida en el suyo, para mí mala suerte son vecinos.
Ese día me arruinó mi polvo de cumpleaños y tuve que acostarme sola en la fría cama del idiota hasta que esta se fue, ahora el imbecil dice que soy infantil por haberle pedido que nos alejáramos unas semanas, por querer tiempo para pensar y permitirle pensar a él sobre sus prioridades.
-Me daré un baño- dije para luego adentrarme a este y cerrar la puerta, quité mi ropa y dejé que el agua se llevara todos mis problemas, ¡como si eso fuera posible!
Me lavé el cabello y salí envuelta en mi bata de baño para colocarme el pijama, Taehyung se encontraba sentado en la cama hablando por teléfono, ¿a estas horas?, solo podría ser la zorra esa.
Bufé y blanqueé mis ojos para que notara el descontento que me generaba para luego pasar por su lado hacia mi cajón de ropa interior.
-No es necesario YeonTan está bien la señora de limpieza lo alimentó, además iré mañana temprano a mi casa con mi novia no es necesario que lo cuides- respiré, es que si no la cacheteo no podré seguir con mi vida. Este al parecer notó mi descontento y me haló hasta hacerme caer sentada sobre su regazo.
-No puedo, pretendo pasar el día con Mimi mañana hasta irnos a trabajar- hablaba calmado y apuesto que al otro lado de la línea no se sabía que mientras hablaba me tocaba las tetas descaradamente.
Olió mi cuello, abrió mis piernas con las suyas y comenzó a moverse debajo de mi, restregando su entrepierna con mi trasero.
Estaba tan sumida en las sensaciones que con tan poco me generaba que no noté cuando colgó el teléfono.
-Le pondré un alto, ya no pasará más, pero responde mis mensajes, -besó mi cuello - no me ignores en el trabajo, -besó mi hombro luego de deslizar mi bata -acepta mis invitaciones otra vez.- mientras sus palabras salían como roncos susurros en mi oreja sus manos viajaban desde mis pechos hasta mis caderas de forma tan sutil que cualquier pensaría que no era intencional lo que hacía.
Estoy sensible y él lo sabe.
Sabe lo débil que soy cuando estoy en esos días, sabe que soy capaz de llegar al orgasmo con solo él frotarse un poco mas.
Por eso se encuentra mordiendo el lóbulo de mi oreja y apretando aún más la carne de mi cadera, por eso sabe que creeré y aceptaré cualquier cosa que me diga con tal de que me tome aquí mismo.
Sabe que mi cordura se encuentra nublada por la exitacion que me genera.
Sus labios tomaron los míos dándole cabida inmediatamente a su lengua, sus manos yacían en mi rostro y cuello y giré para acomodarme a hornadas sobre el despojándome de lo poco que me cubría la bata de baño.
Su teléfono vibraba sobre la cama
Llamaban a su celular nuevamente, lo tomé sin siquiera ver quien era y lo lancé a la alfombra para quitarlo de mi camino.
Mis manos se apresuraron a su cinturón y adentré una de ellas para comprobar que tan listo estaba, jadeó sobre mis labios con fuerza, apreté y gemí cuando este mordió mi hombro con fuerza.
Lo deseaba tanto
-¿Que tanto de mi quieres dentro tuyo preciosa?- me hará llegar al orgasmo con solo hablar -Responde
-Todo
-¿Ahora?,- asentí -entonces creo que me perdonas- asentí y movió mi cuerpo hacia arriba para luego hacerme bajar sobre su ereccion.
Se sentía tan bien que solo con eso me encontraba gimiendo a más no poder, su camisa alcanzó el suelo mientras me encontraba saltando sobre el, y verlo morder con fuerza su labios mientras se encontraba bajo mi cuerpo desnudo me hizo llegar tan estrepitosamente al orgasmo que enterré mis uñas en sus hombros.
Prov Taehyung
-Si mamá, si ya te dije, iré en un rato, bien- cerré la llamada y seguí en lo mío, estaba en la cocina preparando su desayuno y planeaba pasar la mañana y parte de la tarde con ella, pero mi madre necesitaba hablar con migo.
-Preciosa- la vi entrar a la cocina, pies descalzos, pelo enmarañado y pijama a medio colocar, eso me indica lo bien que lo pasó anoche.
Besé sus labios y volví a lo mío mientras me rodeaba con sus brazos.
-Tengo hambre
-¿Y como no?, no cenaste anoche
-Mi jefe es un idiota- reí -Un idiota que está muy bueno.- coloqué la tapa, bajé un poco el fuego y me giré para devolver su abrazo.
-Lamento todo esto, se que has tolerado más de lo que debías estos años, se que puede llegar a ser muy molesta y también agradezco que nunca me hayas pedido alejarme de ella, se que no quieres perjudicar mi amistad y eso deja en claro lo maravillosa que eres, pero ahora soy yo quien está harto del trato que te da, le pondré un alto y no volverá a pasar- debía aclarar todo de una vez y por todas.
-Lo amento
-No lo haces- reímos
-Bueno si, no lo hago, es una perra, no diré nada más.- se alejó y tomó asiento.
-Mi madre llamó, debo ir a ver de que quiere hablarme, regresaré en menos de una hora y pasaremos el rato juntos- asintió.
-Hice un postre ayer, llévale un poco a tu madre, seguro le gustará.
..
Luego de haber comido tomé el coche de Mi So y fui a casa de mi madre, a pesar de que me extrañó el haber recibido una llamada de ella tan temprano, esta me aseguró todo estaba bien.
Cuando llegué a la casa grande fue mi sorpresa al encontrar a Tara sentada frente a mi madre, besé a mi madre y me senté en el sillón restante.
-Taehyung, me contó Tara lo qué pasó anoche- se miraba furiosa
-Tara no deberías venir a casa de mi madre a hablar de tonterías, es muy infantil- mi voz era dura.
-¿Tonterías Taehyung?, descolgaste el teléfono mientras intimabas con tu novia
-¿Que?
-Entonces no fue el, le dije SeoYun él no haría algo así, seguro fue cosa de ella- maldición.
-¿Que escuchaste en la llamada Tara?- trataba fielmente de contenerme.
-Todo, todo mientras hacían sus cosas- miraba al suelo con fingida indignación y timidez.
-¿Y no te cruzó por la mente cerrar la llamada?,- suspiré cansado -he tratado de ser pariente, por nuestra amistad lo he hecho, por la amistad de nuestros padres, pero me harté, no permitiré que continúes humillándola frente a mis amigos y familiares, y no permitiré más intromisiones en mi relación, cambiaré el código de mi puerta mamá, no te lo daré a ti porque sé que se lo darás a ella- la señalé -Y no te quiero cerca de Mi So, agradecería si no regresas al restaurante hasta que madures.
-Nos conocemos desde niños Taehyung, ¿enserio harás esto por ella?- sus ojos se comenzaban a llenar de lágrimas y mordía su labio por ansiedad.
-Si, lo haré. No es la primera vez que hablamos de esto y continuas con tu actitud así que te quiero lejos de mi relación. Por cierto, -Está vez me dirigí a mi madre -este postre te lo envía tu nuera madre, espero, de verdad espero que no te dejes llenar la cabeza de Tara, conoces a Mi So, sabes que ella no sería capaz de hacer algo así, si pasó fue un accidente, y la única culpable aquí es quien se quedó escuchando como pervertida.
Salí de la casa y traté de mejorar mi humor antes de llegar, hacia dos años que comencé a salir con Mi So, en ese entonces la contraté como mi asistente de cocina y segunda al mando, hace 6 meses me dediqué solo a la administración dejando la cocina a su cargo y fue la mejor decisión que puede haber tomado, luego de haberle pedido salir conmigo claro está.
Luego de haber pasado por tanto, de esta haberme ayudado a reformar el restaurante, incluir nuevos platillos y recetas, su apoyo y dedicación no pretendo abandonarla, no luego de todo por lo que hemos pasado.
Sus pedidos aquí preciosxs 😊
Quienes deseen permanecer en el anonimato me escriben al privado 😘
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