Nuevamente regresaba de un largo vuelo. Pensaba en cómo es que el segundo año había pasado tan rápido, era como si no hubiéramos hecho nada a comparación del primer año, sin embargo sabía que eso no era del todo cierto.

A diferencia de la vez anterior, había llegado un par de días antes para poder descansar y estar fresco como elefante para la primera clase. El Director Amano nos había hecho una excepción para poder quedarnos en los dormitorios antes de tiempo.

—No pensé que fueras capaz de destruir la pecera del director y dejar que se ahogase lentamente para que cediera y nos dejara quedarnos aquí unos días antes. —dijo una voz.

¡Ah! Sí, quizás eso era lo que había pasado en realidad, pero bah esos eran pequeños detalles que omití porque por alguna extraña razón me hacían quedar como el malo de la historia.

—¡Mike, dile a Cal que es mi turno de jugar! —decía otra voz.

Mis furros estaban en mi habitación, jugando con mis videojuegos ¡¿Acaso no tenían nada mejor que hacer?!

—No me molestes loli, esto es lo único que me divierte ahora —respondió Cal.

—¡Qué no me digas loli! —se quejó Aby—. Ya soy mayor, ya tengo 17 años ¡Soy adulta!

—¡Dímelo cuando tu apariencia deje de ser la misma que la de un bebé!

Aby y Cal comenzaron a "pelear" aunque después de un par de minutos la ajolote jalaba de la manga de mi camisa.

—¡Eso no es justo Mike!

—Ya les dije que no soy la madre de ninguno —respondí—. No pueden venir a mí para quejarse cuando el otro haga algo que no les guste.

Aby tan solo hizo un puchero y se sentó de brazos cruzados. Pero no le duró mucho cuando Leyi le dio un manga para leer.

—Además, ¿no se supone que Aby estuvo jugando con tus videojuegos durante todas las vacaciones? —me preguntó Leyi.

—Sí, ya se le hizo costumbre vivir en mi casa —dije—. Mis padres ya la consideran parte de la familia y es raro.

—¿Por qué ella vive contigo, que hay de su familia? —me preguntó Romina.

—Pues... Creo que sus padres aplican las mismas y viven con otros humanos.

Los ajolotes están en un estado de peligro crítico en estado salvaje. La mayoría de los especímenes viven en hábitats controlados por los humanos para su conservación y eventual recuperación.

Mientras pensaba en eso oía como Romina rechinaba los dientes mientras mordía mi sábana.

—¡Aby puede vivir en tu casa y yo no! ¡Qué injusto! —murmuraba.

—¡Oye, oye! —le dije— Estás rompiendo mi sábana, le vas a hacer un agujero.

Y mientras eso pasaba, Cal seguía jugando agresivamente mientras que Lena no dejaba de mirarlo.

—¿Qué tanto me ves, enana? —preguntó.

—¡No pienses mal! —se sonrojó ella—. Tan solo sigo pensando en que te vio tu novia.

—¿Celosa? —se burló Leyi.

La ocelote se puso rápido de pie y con la cara totalmente roja comenzó a agitar los brazos.

—¡Desde luego que no! ¿Por qué lo estaría? No me importa en lo absoluto que este idiota de aquí tenga pareja, ¡No son celos! Solo quería saber qué es lo que tiene ese idiota de especial.

Pasó los siguientes 10 minutos, literalmente 10 minutos sin parar, expresando lo que decidimos llamar "Las 401 razones de Lena de porqué solo era curiosidad"

—401: Es un baka —decía ella—. ¿Oíste Caly? Baka, baka ¡Baka!

Pero finalmente se detuvo y desvió la mirada mientras hacia un puchero.

—¿Terminaste? —preguntamos todos al unísono.

—Sí ya —respondió un poco más calmada—. Tan solo necesito ir al baño ahora.

Una vez que Lena se fue de mi habitación no tardaron nada en soltar sus comentarios.

—Eran celos —decía Aby.

—Celos, completamente —decía Leyi—. Ya ni Romina se comporta así con Mike.

—¡Exacto! —afirmó la coneja— Digo, digo ¿qué?

—¿Algún día le darás oportunidad a Lena? —le pregunté a Cal ignorando como Romina me miraba sonrojada.

—Realmente no sé de dónde sacan esas ideas —dijo él—. Se nota que no la conocen bien, su existencia tan solo se basa en arruinar la mía, como si de verdad sintiera otra cosa por mí que no fuera hostilidad.

A veces me preguntaba si Cal realmente se creía lo que decía o era tan tonto como para no ver las claras señales que Lena se esforzaba por "ocultar". Pero decidí no decir nada al final era su problema y no quería meterme en ello, tan solo dejé salir un suspiro.

—¿Y tú Leyi? —le pregunté— ¿Cómo van las cosas con Ranka y Ferril?

—Pues el entrenamiento va bien —dijo con confianza—. Ya me acostumbre a ser "miembro de la manada de Ferril" y eso me permitió pasar una semana vigilando a Ranka cuando recién comenzaron las vacaciones por lo que me volví un poco más cercano a ella ¿Es un progreso, no?

—Supongo que sí —le dije—. Supongo que si sigues como hasta ahora por fin podrás hacer que sea tu compañera para cuando sea tu época de celo.

—¡Oye sí! —dijo Leyi mientras movía su cola de un lado a otro.

A los pocos minutos Lena regresó.

—¿Ya todo bien? —la seguimos molestando—... ¿Oye y por qué Mizhara-sensei está contigo?

Lena no había regresado sola, sino que Mizuhara-sensei que de por sí ya tenía un aspecto algo deplorable, aunque bueno ella tampoco es como si pudiera verse realmente.

—Estaba buscando la salida de la academia —dijo Mizuhara-sensei—. Quiero disfrutar de las vacaciones pero no encuentro la puerta principal ¿Pueden llevarme?

—Eh... —dudé en responder un poco—. Mizuhara-sensei... Esto no es fácil de decirlo pero bueno las vacaciones se terminan hoy.

La pobre sensei cayó al suelo luego de escuchar eso. Podía jurar que su alma salía de su boca.

—Nunca la olvidaremos sensei —dijimos casi todos.

—¡No! —dijo Aby—. Sensei. No, no, no. No se muera Mizuhara-sensei por favor.

—¡Ey no estoy muerta idiotas! —respondió aun desde el suelo— Aún así es una lástima que haya pasado más de un mes tratando de salir de aquí. ¡Ah pobre de mí! Si tan solo tuviera la oportunidad de divertirme.

Me pasé las manos por el rostro ante la pésima actuación de nuestra sensei. Supongo que no solo tenía que tratar de quedar bien con Tosako-sensei.

—Muy bien sensei... —dije— ¿Qué le parece si vamos a comer algo y luego hacemos lo que quiera para divertirse?

—García-kun —dijo con voz quebrada—. Eres un buen estudiante.

Detrás de Mizuhara-sensei estaban todos haciéndome señas pero los tuve que mandar alv, debíamos ser buenos de vez en cuando. Así que primero llevamos a Mizuhara-sensei nuevamente a la parte subterránea de la escuela para que se cambiara de ropa, ya que seguía usando el traje de siempre para dar clases.

Luego de eso y de tener que convencer a los furros de que no sería tan malo, porque seamos honestos es un poco incómodo como estudiantes tener que convivir con tus maestros fuera de la escuela, abandonamos el lugar y comenzamos a caminar sin un rumbo "fijo".

Después de todo, habíamos estado aquí ya tres años pero nunca habíamos salido tantas veces a explorar la ciudad y bueno Mizuhara-sensei tampoco tenía un gran sentido de la ubicación, cosa que nos había dejado muy en claro luego de perdernos en la montaña durante nuestra visita al templo. De no haber sido por Tosako-sensei estuve a nada de haber asesinado a Cal y Leyi para quedarme con su pelaje.

—¡Muy bien! —dijo Mizuhara-sensei—. ¿En qué distrito estamos?

—Ah... —dudamos todos— ¿En el norte?

¿Cómo esperaba que leyéramos los letreros de las calles? Están en Kanji, con problemas y sabemos leer Hiragana y Katakana.

—Qué bromistas chicos —dijo la sensei—. No podemos estar en el distrito norte. Eso queda muy lejos de aquí... ¿Qué ven cerca?

—Hay un restaurante —dijo Aby— ¡Es de ramen!

Sí... creo que era lo único que necesitábamos aprender, donde comprar comida, como llegar al aeropuerto y a los dormitorios y los números de nuestras habitaciones... Eso es lo único esencial que necesita un estudiante de intercambio. Mizuhara-sensei puso las manos sobre sus mejillas y con una expresión de felicidad dijo.

—Suena delicioso ¡Entremos! Yo invito.

Y todos los furros se acercaron a ella.

—¡Como era de esperarse de nuestra sensei favorita! —dijeron casi todos.

Y pensar que hace un par de minutos me estaban diciendo que la dejáramos aquí ¿Cómo podían ser tan cínicos y desgraciados? En fin, suspiré y entramos al lugar.

*Dos horas después*

—¿Y ahora qué hacemos? —me preguntó Romina— No pensamos que la situación terminaría así.

En ese restaurante de ramen Mizuhara-sensei pidió sake y terminó embriagándose, para luego buscar una pelea en la que Cal y Leyi terminaron inconscientes al tratar de defenderla, yo fui más inteligente y me escondí en la multitud para evitar cualquier otro conflicto.

—Bueno al menos podremos salir de esta —me dijo Aby—. ¿Ya se dieron cuenta de quienes están entrando?

Ella señaló, eran Toako-sensei y Terano-sensei quienes parecían estar en una ¿cita? Los ojos de Tosako-sensei se iluminaban aunque Terano-sensei parecía no estar entendiendo la situación.

—¡Es hora de arruinarles el ambiente! —dije.

Les dijimos toda la situación y terminaron sermoneando a Mizuhara-sensei, aunque ella estaba tan ebria que ni siquiera le importaba. Viendo como ella hacía muchos comentarios que hacían avergonzar a Terano-sensei nosotros recogimos a los malheridos perros y nos fuimos del lugar, ahora ya no era nuestro problema. 

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Bueno, hasta aquí el nuevo capítulo. Gracias por leer como siempre.

Ya saben que si les gustó o no pueden hacérmelo saber por los comentarios.

¿Qué avisos tengo para esta semana? Hace meses que no ponía ningún aviso importante xD

 Pues... supongo que solamente avisar que los capítulos que he escrito serán un poco más serios xD No mucho, creo. Pero es para que los personajes no sean tan planos y vacíos, y tengan un pequeño desarrollo aunque no sé si los hayan considerado así alguna vez.

En fin tengo ya unos cuantos capítulos escritos al menos 1 por cada miembro del club :v y Alerta de Spoiler xd ya hasta escribí el capítulo final alv xd En fin.

Sin más por decir: Nos vemos en otro capítulo :)