Academia Fabre (Parte 1)
Pasaron varias semanas después de eso. Si bien ahora los insectos no tenían que ocultarse tanto, aún nos seguían jodiendo la vida por culpa de Jin y su amenaza, aunque nos libramos de eso la semana pasada cuando fuimos a la academia marina.
—Mike tienes... algo en el cabello —me dijo Romina.
Mientras me sentaba en mi lugar logré quitarme un par de telarañas que me habían lanzado, Eso era algo común últimamente, de hecho sentía que los insectos se habían ensañado conmigo porque al parecer creían que tenía relación alguna con Jin.
—¿No creen que deberíamos avisarle al Director Amano? —sugirió Romina.
—Pues sería lo correcto, pero recuerda que tampoco hizo mucho cuando se putearon a King —respondí.
—¡No podemos quedarnos así Mike! —gruño Leyi—, yo digo que los expulsemos de nuestro territorio.
¡Oh sí, eso también era una novedad! Digamos que gracias a que Leyi había estado entrenando con la manada de Ferril se había vuelto un poco más agresivo, de hecho eso nos lo dejó muy en claro luego de que Lena nos dijera lo que había hecho al salvar a una loba ártica de unos dingos y toda su terrible actuación, obviamente nos habíamos reído de él pero eso le molestó bastante y nos atacó una vez.
—¿Y creen que eso resulté?
—Al menos dejarían de molestarnos a nosotros y tampoco pondrían en peligro a Ranka —siguió Leyi—. Le prometí a Ferril que la protegería y a su vez demostraría que la merezco más que Jin.
—¡Ese es un verdadero hombre! —dijo Romina.
—¿Qué pasó con tu lema personal de: Abrazos no Balazos? — se preguntó Lena.
—¡Aun creo en eso pero es mi oportunidad de ligar a Ranka! —gruñó.
—¡Chicos del club de biología! —gritó Tosako-sensei—, dejen de interrumpir mi clase.
La sensei entonces sacó un pequeño papel que leyó torpemente mientras nos gritaba.
—¡O si no haré que se extingan!
Dejamos de hablar y vimos como Tosako-sensei levantaba el pulgar mientras miraba en dirección a la puerta, ahí estaba Terano-sensei y era más que obvio que él le había dado ese papel para que ella pudiera poner algo de orden en la clase.
Y funcionó porque a pesar de todo Tosako-sensei seguía siendo una dinosaurio que nos podría hacer añicos con su fuerza, inmediatamente guardamos silencio y pusimos atención. Los únicos que no fueron regañados eran Aby quien estaba jugando con Nanafushi y Cal que usaba un libro para que lo vieran como dormía.
*Al final de las clases*
Habíamos decidido no hacer ninguna actividad hoy porque los insectos solían venir a interrumpirnos, en especial las hormigas que nos mordían y picaban, no es que nos doliera mucho pero era bastante incómodo. Así que me encontraba en mi habitación perdiendo el tiempo hasta que recibí una llamada de Anne.
—Moshi moshi —dije—. Ay wey que soy de México, quise decir "¿Bueno?"
—Mike-kun necesito que me hagas un enorme favor —dijo ella.
Para ser Anne la inexpresiva Neanderthal sonaba un poco preocupada. Ella seguía hablándome y terminó diciéndome que estaría afuera de la academia en un par de minutos, que necesitaba que yo estuviera listo para ir con ella a la Academia Darwin.
—¿Pero por qué? —pregunté.
—Te lo explicaré cuando te vea —respondió—. Sólo prepárate para verme en la entrada.
—¡Bien, bien —dije—, ahí estaré.
Como acordé con Anne llegué a la entrada de la academia y ella no tardó mucho en aparecer, venía en su bicicleta como de costumbre, pero ni siquiera se bajó, en su lugar tan solo me miró en silencio un par de segundos.
—¡Vamos Mike-kun! ¡Sube! —me ordenó.
—V-vale.
Subí en la parte posterior de la bicicleta y con gran fuerza Anne comenzó a pedalear.
—¿Y entonces te importaría decirme qué pedo? —pregunté.
—Como te dije, iremos a la Academia Darwin —me dijo ella—. Algo atacó a Wajima y necesito que me ayudes. Está muy malherido.
Wajima, aquella vaca marina que conocimos en el festival y de la que nos habíamos hecho compas, había sido atacado y estaba malherido aquello me hizo pensar en los insectos ¿También estarían detrás de la Academia Darwin?
—¡Ah! —suspiré—, ¿Por qué todos piensan que soy un veterinario al que pueden llamar cuando a un animal le pasa algo?
—No te quejes Mike-kun —oí que Anne reía un poco—. Si logras tratar sus heridas te daré uno de los mejores trozos de carne que tengo.
—Me tientas, me tientas —dije— ¡Hagámoslo!
—Y Mike-kun...
—¿Sí?
—¿Te importaría dejar de abrazarme? —preguntó Anne.
—Si no te agarro me voy a caer de la bicicleta —me excusé—. Pero por favor no le digas a Miki.
Anne tan solo dejó salir un suspiro y siguió pedaleando mientras el Sol se ocultaba a nuestras espaldas. Este debería ser el momento en el que el ending se escuchase de fondo mientras que el final feliz con la ruta de la neandertal me llevara a la flor de mi juventud, pero eso sería mucho pedir.
—Además creo que pasar las tardes con Aby viendo anime me empiezan a afectar —murmuré.
—¿Qué? —preguntó Anne.
—Nada, solo yo me entiendo.
Pasados unos minutos por fin llegamos a la Academia Darwin. Recorrimos los pasillos, no tuve mucho tiempo de apreciar las diferencias entre ambas escuelas, pero sí podía notar que la mayoría de los estudiantes ahí parecían ser especies que en teoría deberían estar extintas. Llegamos a la enfermería y encontramos a todo el Equipo Ex alrededor de la cama de Wajima.
Anne no había exagerado al decir que realmente lo habían golpeado. Lo que hacía preocuparme más, los insectos eran demasiado numerosos y si eran capaces de lastimar a un animal tan grande como Wajima no quería pensar en lo que podrían hacernos a nosotros, unos simples enclenques.
—¿Están seguros que quieren que haga esto? —pregunté— ¿No tienen una enfermera o algo por el estilo?
—No está disponible por el momento, pensamos que quizá tú...
Unas fuertes pisadas hicieron que Anne guardara silencio por el momento. Man, la pequeña mamut se acercaba a mí a paso lento y con una expresión de preocupación en su rostro.
—¡Por favor Mike-san! ¡Ayuda a Wajima-kun! —me pidió—, prometo que no trataré de destruir a las especies modernas si haces algo por él.
YangYang, Babari y Andou también me venían con ojos de súplica. Y no pude negarme.
—Bien, necesitaré que me traigan su botiquín.
Y así fue cuando después de un largo ¡Y de verdad largo! Rato por fin pude terminar con Wajima, lo curioso es que ninguno del Equipo Ex parecía tener conocimiento de los insectos pues habían estado comentando que no sabían quién o porqué lo habían atacado. Y como buen amigo que soy les tuve que decir toda la verdad.
Sin embargo, como si fuera por arte de magia entonces varios ruidos comenzaron a escucharse fuera de la enfermería y la puerta se abrió dejando ver a varias docenas de hormigas que de inmediato nos rodearon y comenzaron a inmovilizarnos ¡Malditos insectos con fuerza descomunal!
Las hormigas pueden cargar de 20 a 50 veces su peso corporal.
Entonces del techo cayó una araña y otra hormiga entró por la puerta, era una hembra porque se veía más humana que toda la demás, típico en este mundo todo raro. Y bueno, también debía asumir que era su reina.
—¿Otra vez tú? —me preguntó la araña cansada—, ¿No puedo estar en algún lugar sin que te vea?
—Qué puedo decir, me gusta joder a animales como tú —me burlé. Pero una telaraña me cubrió la boca en ese momento.
La reina de las hormigas caminó hasta quedar frente a mí.
—Así que tú eres ese dichoso humano que nos declaró la guerra.
¡Eh, no mamen! Ese fue Jin. Pero no podía explicar nada, y aquella reina seguía hablando.
—Bueno, fue una coincidencia encontrarte aquí —rió un poco—. Pero Tsuki-san me dijo que no te hiciera daño. Solo debo enfocarme en causar un revuelo en esta academia mientras mis demás compañeros atacan a la Academia Seton. Ya que nos descubrieron no tenemos que ocultarnos más y pasaremos a un ataque más directo.
Recordaba que esa tal Tsuki-san era una mariposa emperador, se me hacía algo raro que fuera uno de los líderes de los insectos pues en teoría su especie no es nada agresiva a comparación de estas hormigas que por su color parecían se Hormigas de la carne.
(Iridomyrmex purpureus) son una especie agresiva, fuerzan a otras especies de hormigas a buscar alimento de noche. Como otras especies de Iridomyrmex, realizan una relación simbiótica con larvas de ciertas especies de mariposas que producen secreciones que ellas comen.
La otra araña removió su telaraña (A: traficando rimas xD)
—Chale pero nosotros no les hicimos nada —dije.
—¡Nadie toma enserio a los artrópodos y mucho menos a los insectos! Esto es para demostrar que no somos pequeños e insignificantes —dijo la araña—. Y tú vendrás con nosotros para ver nuestra victoria.
—Híjole yo creo que no se va a poder —me reí.
Desde que ellos no dejaban de joderme no tenía más remedio que actuar como Jin y tener algo conmigo para defenderme.
Y dicho esto pude sacar mi más poderosa arma contra las hormigas ¡un pequeño frasco de vinagre con agua! Que apreté lo más fuerte que pude para que se rompiera. Las hormigas que estaban cerca de mí comenzaron a tambalearse hasta que cayeron al suelo. Aproveché la confusión causada para librar a los del Equipo Ex y finalmente llegar a mi mochila y sacar una botella más grande de vinagre.
El vinagre difunde un fuerte olor que repelerá las hormigas inmediatamente ya que estos insectos odian el olor. Además este líquido elimina los rastros que utilizan para moverse.
Su reina dio la orden de escapar de ahí todas las hormigas se habían ido y esa araña tampoco había vuelto a aparecer. Cuando todo se calmó Man dijo que yo debía regresar a Seton, tenía sentido, al fin y al cabo dijeron que también atacarían mi academia. Anne se ofreció a llevarme nuevamente mientras que el resto de su equipo dijo que se quedarían por si un nuevo "ataque" volvía a pasar. A mitad del camino recibí una llamada.
—¡Mike-san! —era la voz de Jin—. Los insectos mierdosos aparecieron de la nada y...
Un fuerte ruido se escuchó, como si el teléfono de Jin se hubiera caído al suelo, también escuché a Ranka gritando que Miyubi se había muerto. Y luego de eso un completo silencio. No soy experto... pero creo que estaban en problemas.
Llegamos a la academia y rápidamente corrimos al club de cocina solo para encontrarlo en malas condiciones, como si hubiera habido una pelea y no había señales de Jin ni de su grupo. No tenía más remedio que reunir a mis furros para ir a rescatarlos, todos menos Cal habían accedido, incluso Nanafushi estaba con nosotros, él sería de mucha ayuda.
—Por favor Nanafushi —le dijo Aby—, dinos dónde está tu academia.
Nanafushi saltó hacia la cabeza de Aby.
—Está bien, realmente no esperaba que todo terminara así.
—Una vez que lleguemos allí tendremos que pelear probablemente, Anne tú eres la más fuerte así que contamos contigo y... Creo que por fin alguien decide aparecerse —dije— ¿Qué estuviste haciendo?
Cal venía caminando hacia nosotros con las manos en sus bolsillos.
—Pensando... Pensando en que... Renuncio.
—¿Renunciar a qué? —preguntó Romina.
—Al club, a todos ustedes —dijo seriamente, tanto que incluso parecía harto—. Renuncio, no pienso ir, me voy a quedar aquí.
Realmente se produjo un silencio bastante incómodo, creo que erra correcto asumir que nadie se lo esperaba.
—¡¿Qué?! No puedes renunciar, esto no está permitido —dijo Leyi.
—Claro que puedo. No quiero pertenecer más a esta manada. Debí haber renunciado incluso desde el año anterior.
—P-pero —Aby decía con tristeza— ¿Qué... qué hay de nuestros amigos?
—Vamos Aby —suspiró Cal—, El club de cocina siempre nos arrastra en cualquier tontería sin sentido. En la excursión a la montaña, cuando Ranka se perdió en el laberinto, cuando Anne y su equipo nos querían extinguir. Gracias a Jin los insectos nos están jodiendo y aunque no esté tan relacionado con ellos no quiero hablar de todo el estrés que me hicieron pasar en la academia marina.
—Cal, siempre has sido egoísta —dijo Romina—, pero no puedes estar hablando en serio.
Cal la miró durante un par de segundos.
—No me agradas —dijo—... Ninguno de ustedes me agrada. Ya me harté.
Cal dio media vuelta y comenzó a caminar para volver a entrar a la academia. Vi a cada uno de los demás miembros y todos parecían estar desconcertados, incluso Leyi tenía los ojos humedecidos.
—É-él —tartamudeaba Aby—, no... No p-puede hacer algo así ¡Qué alguien haga algo!
Lena caminó hasta quedar a mi lado.
—¡Eso es idiota! —le gritó Lena— ¡Huye como siempre lo haces! ¡Siempre supe que eras un cobarde! ¡Estamos mejor sin ti!
Sin embargo Cal no se detenía, ni siquiera nos volteaba a ver. Por el rabillo del ojo pude ver como Lena solamente bajó un poco la mirada.
—En serio Caly, da la vuelta por favor—murmuró con tristeza. De no haber sido porque estaba muy cerca de ella nadie la habría escuchado.
—No es momento para preocuparnos por eso ahora —dije rápidamente—. Debemos ayudar a nuestros compas a como dé lugar. Nanafushi, espero que esta vez nos ayudes.
—Desde luego Mike-san, quiero terminar con todo este asunto.
Nosotros comenzamos a caminar alejándonos de la academia. Por fin iríamos a Fabre.
*****
Resumen del capitulo:
Bueno hasta aquí la primera parte del final del "arco" Muchas gracias por leer
Ya saben que si les gustó o no pueden hacérmelo saber por medio de sus comentarios.
Hoy no hay anuncios importantes, creo xd.
Así que sin más por decir: Nos vemos en otro capítulo :)
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